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Experiencia muy recomendable para aprender idiomas. De hecho en mi caso he repetido durante varios años como alumna, tanto en cursos intensivos de verano, como en clases semanales durante el curso.
Los cursos son activos, dinámicos y con muchas actividades distintas, que van desde lecturas para comprender textos, gramaticales y ejercicios de oído y se fomentan mucho las conversaciones en la lengua que quieres aprender interactuando con tus compañeros. El profesor está continuamente supervisando la progresión de los alumnos, ya que las correcciones de los ejercicios se realizan en voz alta y en las actividades grupales está continuamente atendiendo que se logren los objetivos. Como la labor del alumno no solo se limita a las actividades realizadas en clase, sino también por su propia cuenta, tras las correcciones, el profesor le orienta en qué aspectos debe mejorar y está dispuesto a atender cualquier cuestión que le ayude a hacerlo.
Además, si quieres obtener un certificado oficial en una lengua, se realizan continuamente ejercicios orientados a la preparación del examen, por lo que a la hora de hacerlo el alumno se encuentra totalmente familiarizado con los ejercicios a realizar.