Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Hemos pasado el puente de la Almudena en esta preciosa posada. Un lugar lleno de encanto, sosiego y todo impecable. Dirigido por Margarita, excelente anfitriona, atenta y cercana, además de tener una excelente ubicación para conocer Cantabria.
Nunca suelo escribir reseñas pero en este caso tenía que hacerlo. Yo y mi pareja solemos hacer escapadas a hoteles y este probablemente sea en el mejor que hemos estado. De primeras, al entrar flipamos con la habitación: enorme, preciosa, se ve que le ponen mimo a las cosas. Con una terraza cerrada, sólo para nosotros. El jacuzzi gigantesco también. Y por si fuera poco, detalle de bienvenida: bombones y champán. Al día siguiente, desayuno completito incluido, te lo traen directamente a la habitación. Pero lo mejor de todo, la atención y amabilidad de Margarita. Ha sido un placer venir a este hotel. Y más cuando hemos estado en otros por mucho más dinero que han dejado que desear.
Fuimos por primera vez hace 17 años. Hemos vuelto con esta la quinta vez y repetiremos cuando volvamos a esta maravilla que es Cantabria. Todo sigue igual que siempre: PERFECTO. Muchas gracias, Margarita y Gloria por vuestra amabilidad y por tener un rincón tan encantador.
Posada ESPECTACULAR en todo el centro de Cantabria, a 5 min de Santillana del Mar y 20 min de Santander. Estuvimos una semana mi mujer y yo y como en casa. El trato de todos (Gloria, Margarita……….), inmejorable. Parking gratuito. Por las mañanas te dan un desayuno, en nuestro caso café con leche, zumo natural, tostada (que se podía repetir) y un dulce de la provincia; sobaos, corbatas…… todo incluido en el precio. Da gusto encontrar lugares tan bonitos regentados por gente bonita. Estuvimos muy a gusto. Sin duda volveremos y lo recomendaremos
Lugar muy tranquilo, muy bien ubicado ya que prácticamente lo más lejos que tienes esta entorno a 25 minutos. Empleados muy agradables y para desayunar tostada y sobaos o magdalenas, con zumo de naranja y Colacao o café.
Increíble estancia, inolvidable! Gloria y Margarita son grandes anfitrionas, aman su tierra y lo irradian, Te dan buenos consejos de donde ir a comer, sitios que ver. Las habitaciones son amplias, bien decoradas, con sencillez y gusto cántabro. Limpieza de 10. Desayuno perfecto en la terraza, macetas bien cuidadas que hacen la delicia de los sentidos. Precio sin competencia. Ubicación perfecta.para ver todos lo pueblos de la zona: Comillas, Santillana, Barcenas, Cabezón de la Sal, San Vicente, Santander. Ya tenemos nuestra casa donde volver. Hasta pronto!
Sitio precioso y super acogedor. Estuve la semana pasada y nos encantó. Repetiremos fijo. Trato como si fuera tu propia familia desayuno super generoso. Habitaciones amplías y con buena cama. Simplemente perfecto.
Atencion, magnifica. La habitacion perfecta, el servicio ideal y la ubicacion, está cerca de todos los lugares de interés a la vez que permite descanso y relajacion en la naturaleza. Muy recomendable.
Estupenda anfitriona Margarita, encantadora. Hemos dejado a un amigo pero volveremos a hospedarnos alguna vez. Gracias por tu atención amable Margarita.
Una posada muy acogedora, el personal que trabaja aqui es encantadora, sobretodo la dueña, margarita. Sin duda repetiremos, muy buenas vistas y cerca de todo lo que tienes que visitar de santander. El sitio merece la pena, recomendable 100%.
Muy buen y espectacular sitio el personal muy amable recomendable al 100X100 a la chica de recepción un puntuación del 1 al 10 le damos un 11 por simpatía y amabilidad total muy profesional en otra ocasión que pasemos por Cantábrica pasaremos a saludarla dar las gracias por el buen y fabuloso a rendimiento de una pareja de Gran Canarias un fuerte abrazo para todo el equipo
Una posada de encanto, con un estilo medieval, envuelta en un paisaje precioso y con muy buena ubicación. Todo está muy bien cuidado, tanto el interior de la posada como su jardín, dejándose notar ese cariño y amor que le tienen a dicho lugar. El trato de las dueñas hacia nosotros ha sido excepcional, siendo muy cercanas y haciéndonos sentir como en casa. En definitiva, una posada más que recomendada, a la cual volveremos sin duda.
Lugar perfecto para hospedaje. Excelente trato y servicio. Muy cuidado el entorno y las instalaciones. Limpieza y tranquilidad. Nada que objetar. Visito muchos hoteles, y este lo recomiendo 100%.
Una gozada de lugar, muy tranquilo, limpio y acogedor, perfecto para escaparse un par de días y respirar paz. La dueña un encanto, ni un ruido por la noche y desayuno incluido, calidad precio inmejorable; un placer, volveremos.
Alojamiento muy recomendable. Inmejorable relación calidad precio. A destacar la amabilidad de todos, Margarita, Gloria, Queca y Quique. La sensación es que estabas con una familia que procuraban hacerte pasar unas buenas vacaciones, siempre atentos, con recomendaciones de rutas, lugares para comer, donde hacer compras. Una semana para repetir. Montse y Carlos
Lo esperado. Como salíamos más pronto de la hora en que servían el desayuno, nos prepararon una bolsa para llevar, todo un detalle que nos alegró. Recomendable.
Posada en la que respiras paz y tranquilidad. Ideal para desconectar, habitación aguardillada muy cuqui, super limpio, instalaciones muy cuidadas, buen desayuno con vistas a la montaña y trato familiar. Para repetir sin dudar.
Me gusta mucho esta posada, es un lugar maravilloso, tanto por el trato recibido, como por la limpieza y el encanto del lugar. Las habitaciones son amplias y las camas muy cómodas. Su ubicación es estupenda se encuentra muy cerca de playas (Suances) (Tagle) y también de zonas de interior (Santillana del Mar, Bárcena Mayor.) Muy bien comunicado. Recomiendo 100% Son muy amables. Es mi segundo año de vacaciones en este mismo hotel, sin duda repetiré cuando vuelva por Cantabria
Esta casona cántabra reconvertida a hotel es un establecimiento agradable. Su ubicación en la tranquila localidad de Queveda, el edificio (señorial), precios económicos y aparcamiento son lo mejor. Sin embargo hay detalles de mantenimiento que empañan la valoración como las alfombras algo raídas de las zonas comunes o unas ventanas Velux que dejan pasar la luz. El servicio parece simpático y bien dispuesto.
Hemos pasado cuatro noches en esta posada y la verdad es que nos ha encantado. En primer lugar, y como dicen muchos comentarios, la ubicación es buenísima y la posada en sí es preciosa. Por dentro la decoración sigue una línea vintage absolutamente coherente con el edificio y con el ambiente. En segundo lugar, Margarita y los trabajadores del hotel son muy agradables, pero queremos destacar lo atentos que son y cuánto se preocupan por la comodidad de los huéspedes. El desayuno nos ha gustado también mucho: tostadas jugosas y sabrosas, un buen café con leche, fruta si la pides, y un dulce para el final. También te dan a elegir entre mermelada y mantequilla o aceite y tomate, si bien lo traen en monodosis por motivos sanitarios. Además, la marca de la casa es un zumo de naranja NATURAL que, la verdad, nos sorprendió y que nosotros hemos valorado y apreciado mucho, pues es algo muy poco habitual en este tipo de alojamientos. Por último, y con respecto a Margarita, no dejéis de conversar con ella un rato, porque seguro que os aconsejará sitios que visitar y restaurantes donde comer opíparamente. Desde aquí le damos las gracias y le deseamos que todo le vaya estupendamente.
The accommodation is a typical Cantabrian house, with thick walls, high ceilings with wooden beams, solid construction, and a stone house. It is beautiful wherever you look, with personal touches in every place. The treatment of the hoteliers is very close, very familiar at the same time, professional. Very quiet, authentic and lovely environment. The state of the facilities is impeccable. It is an ideal place. Good breakfast as weel. Highly recommended accommodation.
El alojamiento es una casa típica de Cantabria, paredes muy gruesas, techos altos con vigas de madera, construcción solida, casa de piedra. Es una preciosidad mires donde mires, con toques personales en cada rincón. El trato de las hosteleras es muy cercano, muy familiar al mismo tiempo que profesional. El entorno muy tranquilo, auténtico y agradable. El estado de las instalaciones es impecable. Buen desayuno también. Es un lugar ideal, no quería irme de allí! Es un alojamiento altamente recomendable.
Bonita posada, excelente relación calidad precio y buen desayuno incluido. Tienen una suite espectacular con terraza y jardín exclusivamente para la habitación. Queda muy cerca en coche de Santillana del Mar. 100% recomendable.
Estupendo en todos los sentidos. Sin duda volveremos. Las dueñas más atentas no pueden ser y el servicio del desayuno igual. Lo recomiendo al 100 x 100
Genial de genial un sitio increíble, la señora de la recepción un encanto el desayuno muy rico la habitación grande y la cama muyyyyy cómoda, volveremos
Un lugar, tranquilo, confortable, buena atención, familiar, personal excelente, si hubiera un lugar donde poder ir a descansar y desconectar mejor sitio inmejorable
La casa, las habitaciones (amplias y muy limpias), y el entorno, son preciosos. El desayuno buenísimo. Margarita es un encanto, atenta, amable y con un trato muy familiar. Me llevaron, de sorpresa por mi cumpleaños, mi pareja y una pareja amiga, y nos preparò las habitaciones con globos, champán y bombones. Volveremos sin dudarlo, 100% recomendable
Estancia de lo más agradable y confortable. Estuvimos hospedados en el ático y nos encantó. Habitacion con baño amplio y buena limpieza. Tranquilidad absoluta. A resaltar el buen trato recibido por Margarita, que es una mujer de lo más detallista. Muy recomendable
Excelente lugar para descansar y visitar la cercana Santillana y sus alrededores. La casa ofrece unos rincones muy acogedores en un entorno natural admirable. Las habitaciones, amplias y limpias, permiten descansar en total silencio. Margarita, la responsable, siempre disponible para atender cualquier duda es un encanto de persona. Sin duda un lugar para repetir.
Fabulosa mansión exquisitamente restaurada. Margarita la dueña, super simpatica y un reservorio de historias de vida para disfrutar, que pone un broche de oro a un lugar encantador. Volveremos en cuanto podamos, a conocer los veranos de Cantabria.
Posada preciosa con jardin y aparcamiento. En un entorno muy bonito y tranquilo. Al lado de Santillana y de Altamira. Habitación muy espaciosa, limpia, acogedora, con muebles restaurados. Desayuno rico y abundante. Margarita, la persona que nos atendio, muy amable y cercana. Sin duda, repetiremos.
Estancia de 6 noches en la posada. Desayuno muy bueno con zumo natural, el entorno muy tranquilo y la atención de Margarita excelente tanto para la estancia como para indicar rutas para hacer junto con lugares donde comer. Repetiríamos de nuevo por la atención y el precio. Al haber ido en noviembre y las habitaciones ser de piedra/madera se pasaba algo de frío que se intentaba evitar con radiadores eléctricos.
Jose y Pili. 4 días inolvidables en Cantabria en ésta posada donde rebosa la amabilidad y disponibilidad de Margarita, siempre atenta y dispuesta ha facilitarnos la estancia. Habitación bonita y cómoda y con unas vistas preciosas. En definitiva cuándo vuelva a ver a la familia no dudaré y me volveré a alojar en esta posada.
Lugar maravilloso. Me encantan los lugares con ese toque antiguo, tan clásico. Precioso. Se lo he recomendado a un montón de amigos que seguramente vayan por allí. Yo desde luego repetiré.
Increíble casona típica de la zona, en un entorno maravilloso. El trato ha sido genial y muy cercano y personal, gracias a Margarita que estaba pendiente en todo momento de si necesitábamos algo. Sin duda para repetir!
Posada rural situada en Queveda, cerca de Santillana del mar. Magnífica ubicación para recorrer los parajes y pueblos de la zona. Cerca del Parque de la Naturaleza de Cabarcenos. Si buscan tranquilidad y un trato familiar este es el lugar. Por poner una nota negativa, el desayuno me pareció pobre en surtido. Hubiera preferido pagar un poco más y tener algo más de variedad. Nos faltó un toque más casero en ese sentido.
Un lugar con mucho encanto. La casa es preciosa lo mismo que las habitaciones. El desayuno estupendo y el trato de Margarita excelente. Muchas gracias. Volveremos
Un sitio estupendo para descansar, está cerca de todos los sitios. La casa amplia, hemos estado en una especie de suite dos niñas y dos adultos. Desayuno correcto y todo muy limpio. Volveremos.
Preciosa Posada, magnífica atención, tranquilidad absoluta, estas son las tres características más importantes que posee. Ideal para ir en junio por su entorno.
El trato es excelente. Todo facilidades y amabilidad. La casa es preciosa y su mobiliario más aún. Es antigua y en ello reside su encanto. No es apta para quien busque un hotel al uso, porque esto no es un hotel propiamente dicho, es una posada o una casa rural. Muy cerquita de Altamira. Hay mucho que ver en los alrededores.
Lugar agradable y acogedor, muy tranquilo, silencioso, cerca de muchos lugares interesantes. Buen trato y amabilidad, buen desayuno. Inmejorable relación calidad precio.
Cuarta o quinta vez que volvemos y no podemos decir más que no será la última porque siempre nos sentimos como en casa y en familia. La Posada es preciosa y está genial ubicada para poder hacer mil rutas distintas. Margarita es una magnífica anfitriona y te facilita toda la información y las rutas para pasar unos días increíbles. Más que recomendable!
Una casa Rural de 10, trato impecable, atentos siempre con la clientela, teníamos previsto esquiar y nos prepararon el desayuno a las 6: 30 impecable. Unas vistas maravillosas. Las habitaciones geniales muy cómodas. La limpieza 10. Muy muy recomendable. 100% seguro que volveré!
Me recomendaron este lugar y la verdad que nos sentimos como si fueramos de la familia. La habitación perfecta, la situación perfecta si no conoces cantabria esta en medio y para los desplazamientos fenomenal. Y las dueñas lo mejor. Y a todos los sitios que nos recomendaron ellas nos abrieron las puertas solo por ir en nombre de ellas.para mi un 10.por no haber mas notas. Gracias volveremos.
Una posada magnífica el personal estupendo y Margarita y Gloria te hacen sentir como en casa El encanto del lugar, la tranquilidad y la limpieza es inmejorable.sin duda volveremos.
Casa rural tranquila acogedora bien comunicada. Un negocio familiar donde Margarita y Gloria son unas trabajadoras incansables y con una atención fantástica. Sin duda un sitio para repetir
Soy de Valencia y no conocía Cantabria. Fuimos mi pareja y yo en julio y nos alojamos unos días allí para conocerla. Si queréis sentiros como en casa, no dudéis, este es el lugar adecuado. Tranquilidad, buenas vistas y, sobre todo, gran atención por parte de sus dueñas. Tanto Margarita como Gloria, son dos encantos. Os lo recomiendo!
Volveremos para poder disfrutar de la estancia aún más, ha sido maravillosa tanto por sus habitaciones, servicio y personal, en especial el de Margarita (siempre atenta a que no te falte nada). Lo recomiendo a todos y no logro entender en qué se basan para aquellos comentarios tan negativos
Sitio muy bonito, estuvimos en una habitación super grande, pero sucia, la ducha se salía el agua, y la base era de madera y los listones estaban sueltos, un desastre, un día tuvimos hormigas.
Habitaciones muy limpias. Colchón de cama cómodo. Ni un ruido exterior. Desayunos continentales y puedes repetir. Amabilidad de todo el personal. Edificio histórico.
La paz del lugar, las vistas, el poder pasear entre árboles frutales la gastronomía de calidad ha un precio más que justo y lo mejor de todo las personas que lo regentan dejaros aconsejar.