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Mi estancia en la posada el rincon de doña urraca, no deja de sorprenderme, esa atención que te prestan Alfredo y Yolanda, hace q siempre quiera volver. Y por supuesto recomendar a mis amigos y a cualquiera de vosotros q leáis mi reseña. Simplemente fantástica estancia
"Mi estancia en El Rincón de Doña Urraca ha sido simplemente inolvidable. Alfredo y Yolanda, los anfitriones, han hecho todo lo posible para que nos sintiéramos como en casa. Su cariño y atención hacia los huéspedes es evidente en cada detalle. Desde la cálida bienvenida hasta las recomendaciones personalizadas sobre la zona, se nota que ponen su corazón en lo que hacen. ¡Gracias por una experiencia tan maravillosa! Sin duda, un lugar al que volveré y que recomendaré a amigos y familiares
De nuevo mil gracias por todo.vuestra atención, amabilidad, saber estar.etc.etc. Es nuestra cuarta visita y os superais cada vez.además mantenéis el rincón como siempre, no pierde encanto.me enamoré de él cuando por primera vez buscaba alojamiento en Cantabria.y sigue siendo el mejor, sin duda alguna. Un abrazo pareja, sois insuperables.
Desayuno maravilloso, bizcocho casero, sobaos, tosta diferente cada día, leche de avena que pedi Picoteo de quesos, tomates, deliciosos. Vino local, albariño. Tienen un Jardin tranquilo, con vistas a la montaña, para leer, tomar una cerveza o simplemente, estar.la luz de la tarde cae entre los árboles, un espectáculo. En la puerta, un peral enorme. Alfredo y Yolanda uson encantadores. Muy atentos a lo que puedas necesitar, te sientes muy a gusto. El rutometro hecho por el señor es fantástico, nos lo dejaron y dimos un paseo por la zona, vimos caballos, flores, fue precioso, y está justo saliendo del propio hotel. La casa es preciosa, madera, decoración rural, con muchos detalles de Cantabria. Habitaciones muy cómodas, con luz. A mi que me encantan los gatos, alrededor estan los Gatos del pueblo y son muy cariñosos, son otros anfitriones. Esperamos volver y pronto.
Es un entorno maravilloso y los propietarios del hotel encantadores Todo super limpio, los desayunos riquísimos, y lo mejor Alfredo q nos hacía las rutas q le decíamos q íbamos a hacer
Perfecto para desconectar. Muy bien atendidos. Habitación espaciosa, silenciosa y limpieza 10. El trato es encantador. Altamente recomendable para senderismo light y descanso de la vorágine vital actual.
Alfredo y Yolanda unos anfitriones magníficos, siempre atentos, la comida muy buena sobre todo los desayunos, muy ricos y muy al detalle, las habitaciones muy bonitas y espaciosas, todo de 10.
Alfredo y Yolanda se entregan por satisfacer a sus huéspedes. Muy buena gente. Limpieza extrema, habitaciones muy bien decoradas y acogedoras, zonas comunes muy muy acogedoras. Jardín amplio y cuidado. Para nosotros muy agradable. El olor del silencio. Me gustaría volver.
El lugar es precioso, limpio acogedor con un trato excelente Realmente es un remanso de paz. Sólo le faltaría una puerta entre la habitación y el baño sustituyendo a la cortina exsitente
Alfredo y Yolanda encantadores, lugar con encanto, mimado al detalle. Ideal si se quiere perder por sus múltiples caminos rodeados de naturaleza. Sin ninguna duda volveremos.
Lugar maravilloso, tranquilo, naturaleza viva y lo más importante, instalaciones perfectas con encanto, acogedoras y superlimpias. Y si hablamos de Yolanda y Alfredo, todo simpatía y profesionalidad. Sin duda deseando volver.
Entorno espectacular muy acogedor y hogareño. Limpieza un 10. Comida casera y muy buena. La atención, por parte de Alfredo y Yolanda, perfecta, son dos anfitriones ideales.
Hemos pasado cuatro días fantásticos e inolvidables gracias a Yolanda y Alfredo, Una casa preciosa con mucho encanto y cariño, limpieza total, la comida buenísima y los caseros sencillos, con un corazón muy grande hacen que te sientas mejor que en tú propia casa. No sé puede explicar lo que se siente es mágico, Para mí, todo excelente de diez casa, limpieza, desayuno, cenas, rutas en fin TODO. Mejor imposible.
Casa rural en un edificio rústico de esquisto diseño. Silencioso, cómodo, atención de sus propietarios Alfredo y Yolanda, personalizado con atención constante para hacerse sentir cómodo. Muy recomendable
Encantadora! Una casa rural fantástica! Lugar muy tranquilo, con unas habitaciones amplias, acogedoras y muy limpias. La cena que prepara Yolanda es deliciosa y hecha con productos locales. Muy recomendable!
Es la cuarta vez que encontramos una excusa para venir aquí. Mi sitio preferido de Cantabria y un lugar donde recuperarte de la vida urbana. Fredo y Yolanda son el alma de este pedacito de todas las cosas buenas de Cantabria. Hacedles caso en todo lo que os digan y reservad cena o comida con ellos. Contando los días para volver