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Comida bien pero mal orden al sacar los platos, tuve que pedir que me sacarán la ensalada porque si no salía el último plato cuando una ensalada debe salir al principio, no nos ofrecieron menú del día teniéndolo disponible y solo nos sacaron la carta
La vista para tomar un café o una copa esta bien pero el menú, que cuesta los días de diario 11€, es muuuuy básico y diría malo. Yo he tomado en otro sitio menú por 10 € infinitamente mejor. Lo peor.los postres. Incomibles
La Hostería de Boo, es un restaurante de lo mejor que tenemos en Cantabria, aparte del sus exquisitos platos y la calidad precio y la amabilidad de sus camareras, es un sitio para recomendar y para repetir
Hemos parado de casualidad de vuelta de un viaje. Hemos comido de 10. La comida de 10 y la atención de 10 también. La camarera y el camarero super atentos y agradables. La comida muy rica, cantidad y calidad. Un cocidito montañés y un arroz negro con alioli estupendos, un entrecot con un sabor y de textura suave y unos chipis en su tinta también con Ali olí tiernitos y con un sabor! Aunque las raciones eran generosas hemos hecho hueco para la leche frita y tarta de zanahoria! Insistimos en la atención. De ir muchas veces!
10.70e desayuno que se compone. Dos zumos de naranja 2 cafés con leche 2 pinchos de tortilla. Es una pasada. La tortilla se pinchaba y se desacia con el tenedor. El desayuno es lo normal tampoco quería más. Pero 10.70e?
Fui por una recomendación pero no me pareció nada del otro mundo. El menú era bastante cantidad, no voy a decir lo contrario, pero tenían poca variedad y no una alternativa sana. Por lo demás servicio correcto
Restaurante y hostería de obligada parada en tu visita en estas tierras. Menú diario económico, casero, de muy buena calidad y cantidad. Para cenas y comidas a la carta, muy recomendable sus rabas, espectaculares, cochinillo perfecto, ensaladas potentes, postres caseros muy buenos. Y además de todo ello, el personal muy amable y profesional.
Menú por 15€ en fin de semana estupendo. Cocido muy bueno. Fácil de aparcar. Servicio profesional y amable. Aunque hay que decir al camarero más joven que a los clientes que le duplican o triplican la edad se les debe de tratar de Ud.
Un buen lugar a mitad de camino entre Santander y Torrelavega para tomar un café, tapear o incluso comer. No lejos de ahí se puede divisar una preciosidad de la naturaleza que es el Abra del Pas. También una ruta de senderismo de los fuertes napoleonicos. Buen parcamiento.
Atención regular. Si quieres algo en terraza entras, lo pides y te lo sacas tu. Si quieres menú solo dentro del local, fuera solo carta. No lo entiendo.
Que voy a decir, como siempre un 10 en todo, buena comida, buen precio, sitio bonito, limpio, incluso una vez dormimos en la hospedería, buen trato de todos, pero mención especial a Sergio, vamos desde Bilbao exclusivamente a comer allí y bueno, dar un paseo y visitar las dunas de liencres. Felipe
Comida casera bien elaborada y un excelente servicio, muy amables y atentos, precios razonables. Las habitaciones equipadas igual q el baño limpias y equipadas, echo en falta enchufes para recargar telefonos
Es un sitio muy agradable. Al comensal nos tratan con mucho cariño y simpatía. El encargado del comedor muy buen profesional siempre haciendo muy agradable la estancia en el comedor.
He comido varias veces aquí y la atención muy muy bien los platos riquísimos, la última vez que cenamos ahí fue un machote que es un pez muy muy rico todo perfecto es un lugar muy familiar
Por desgracia no tuve ocasión de probar su cocina, aunque la carta de raciones era interesante. Me encantó desayunar en su amplia terraza (rosquillas caseras tan ricas como las de mi madre), al resguardo del aire, con vista al monte y buen aparcamiento al lado mismo del local. El trato del personal muy agradable y atento. De hecho, olvidé una camisa en mi primera visita y allí me la habían guardado al día siguiente.
Lo visitamos una mediodía para tomar el menú del día. Buen precio y la calidad y, sobre todo, la cantidad en excelente relación de precio. El servicio y la amabilidad fueron excepcionales. El sitio es acogedor y la cantidad de comensales asegura productos frescos.