Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Nos encantó la experiencia en el café La Porticada, todo gracias a la camarera Mada. Trato inmejorable, rapidez y una atención por parte de ella excelente. Hizo que quisiéramos repetir al instante. Volveremos 100%.
La cafetería está súper céntrica y los precios bastante económicos! Lo mejor de todo fue el trato del personal, en concreto de la camarera Madalina, un encanto de niña, súper trabajadora, nos atendió al momento con muy buen trato y cercanía. Con profesionales así, sin duda repetiremos la experiencia!
Necesitabamos desayunar y paramos en este sitio. Todo un acierto. Atención profesional y afable por parte del camarero de la barra que nos preparó unas buenas tostadas a buen precio. Gracias
Sitio agradable para comer, en la plaza muy céntrico. Comida casera y rica, calidad, precio, perfecto. El personal súper amable, sin duda lo recomiendo.
La comida sin más. Pasable. Pedimos unas albóndigas del menú y aparte de carne picada, llevaban aire Lo que menos nos gustó fue que uno de los cocineros salió a comer y hablaba a gritos sobre como se hacia el pollo al ajillo. La camarera bien, pero le pedimos la cuenta y al ver que no nos cobraba tuve que ir dentro a decirlo. No está mal para llenar un poco la tripa, pero no volvería la verdad.
Comida pésima. Las rabas duras y más fritas que las croquetas. La ensalada de BOGAVANTE es la de cangrejo con piña de Mercadona.realmente no se merece la ubicación que tiene.
Hola! Hemos cenado en El Pórtico, estaba todo muy rico. Me gustaría destacar la amabilidad de Miguel y Dani, quienes como otros muchos camareros hacen jornadas maratonianas, especialmente ahora que es la Semana Grande de Santander. Gracias chicos!
La comida es de calidad. Está muy bien preparada, pero a la hora de pedir el postre, escatimaron un montón. Pedimos 2 trozos de tarta de la abuela y fue una tomadura de pelo. Los mas pequeňos q me han puesto en mi vida. Vergonzoso. Si llego a hacer foto de esos trozos la gente flipa.
Experiencia nefasta. Espera interminable para ser atendido, además, un día te cobran un precio y a la semana siguiente te cobran otro distinto. Comparto los comentarios anteriores, parece que te hacen un favor por servirte una consumición.
Buen sitio para comer.comida buena de lo que no me ha gustado el trato del camarero más mayor, nada simpático la verdad y no pidáis natillas que son sin galletas, nunca lo he visto en ningún sitio
Nos hemos sentado a las 12: 15h en la terraza. Como solo había un camarero, ha tardado en llegar (no pasa nada). Para nuestra sorpresa, nos informa que como está sola, solo se sirve café hasta las 12: 30h (desbloqueo delante de ella el telefono y son las 12: 31h).
Yo me he sentado a tiempo en la mesa, me parece VERGONZOSO que sin ser nuestra culpa, nos NIEGUE un café. Yo me habia sentado bien de tiempo (ella lo sabía, pues nos dijo que esperasemos a que limpiara unas mesas)
Muy mal, y desde luego, han perdido una clienta.
EDITO: Y por la ausencia de educación de quien responde, es otro motivo por el cual NUNCA VOLVERÉ NI RECOMENDARÉ.
Sie möchten so frühstücken, wie man das in einer spanischen Cafeteria erwartet? Dann sind Sie hier richtig. Hier werden Kaffee, Toasts und vieles mehr frisch gemacht und von sehr gutem und aufmerksamem Servicepersonal an die Tische gebracht. Und das Beste: schmecken tut es auch noch und ist dabei noch preiswert)
Es un bar bastante céntrico y la comida y bebida no están nada mal, nostros entramos para no morir ahogados por la tormenta, pero la verdad es que fue una experiencia agradable; el precio no era excesivo, los baños estaban limpios y el trato fue muy agradable.
El servicio muy mal, uno solo camarero para atender toda la terraza, un chaval con muy mal humor y despreparado. No hacen el protocolo del Covid 19 y la comida si ningún cuidado.
El local es agradable lastima que este en el centro pero apartado, la atencion adecuada, el precio del menu y variedad es correcto, quizas yo mejoraria la rapided del servicio, pero puede que simplemente fuera un hecho puntual
Escondido incómodo y el tiempo de cocinado mejorable. Las patatas estaban crudas y el escalope de calidad discutible. Por lo menos el vinagre era balsámico de modena. Precio desproporcionado para la calidad. Sin ser caro es más caro que otros sitios y peor de calidad.
De viaje por Santander entré de casualidad en esta cafetería. Me pedí un pincho de tortilla de bonito con un café a media mañana y me pareció delicioso, de los más ricos que he comido nunca y a un precio inmejorable. Totalmente recomendable.
Respecto a la carta, los platos combinados son todos prácticamente iguales y hay poca variedad (la mayoría es carne con patatas en diferentes versiones). En cuanto a los camareros, el que nos ha servido nos ha tirado las cosas en la mesa prácticamente y se ha quedado parado de pie mirándonos y sin decir nada, como esperando a que le dijéramos algo. Luego otro camarero se ha puesto a contarnos su vida desde la barra interrumpiendo incluso las conversaciones que estábamos teniendo. La conclusión sobre los camareros es: ni tanto ni tan poco.
Es una cafetería donde se pueden tomar también raciones muy variadas, ricas y a buen precio, para picar. Y tiene además una agradable terraza en la plaza Porticada.