LA POSADA DEL TENOR

Habitación amplia y recientemente renovada de un caserón en una zona preciosa. Preciosa reforma arquitectónica y decoración excesiva.
Cama, pese a ser nueva, incómoda y corta.
Agua de ducha con temperatura irregular
Desayuno pobre en calidad y variedad
Propietaria impertinente y muy rollista

Fuimos de escapada a celebrar nuestro aniversario y nos quedamos encantados! El lugar es precioso y muy tranquilo, la posada está decorada con mimo y buen gusto (tanto las habitaciones como las zonas comunes) y el trato por parte de Eduardo fue estupendo, super amable y simpático. Especial mención al desayuno y la tortilla de patatas casera, está de vicio! Su perrito César también es majísimo. Recomendaremos el lugar y seguro que volveremos por ahí. Muchas gracias por todo

La posada es muy bonita, tiene un jardín espectacular y el desayuno muy bueno, estuvimos unos días de relax y nos sentaron fenomenal, Eduardo muy amable y servicial en cuanto podamos volveremos a ver a Eduardo y a César
Muchas gracias un fuerte abrazo

¡La Posada es simplemente espectacular! Su ubicación en plena naturaleza es maravillosa, permitiendo una relajación total y la posibilidad de disfrutar de la belleza natural. Las habitaciones y la decoración del edificio son de un gusto exquisito. Eduardo, el anfitrión, destaca por su encanto, excelente gusto y profundo aprecio por el arte y la cultura. Me sentí verdaderamente cómodo en este pequeño paraíso y sin duda regresaré. ¡Totalmente recomendado!

Lo único malo que se puede decir este maravilloso paraíso, es que yo solo estuve una noche y no veas que gran pena me dio irme! Los niños encantados y la atención es de muy sobresaliente! Espero repetir con más calma para poder disfrutar bien del paraje, muchas gracias por todo!

Hace unos días fuimos mi pareja y yo y ha sido una experiencia única:) La posada del Tenor es un sitio perfecto para desconectar y disfrutar de Cantabria. Eduardo y su perrito Cesar son dos anfitriones perfectos! Tiene mucho encanto el lugar
PD: la tortilla del desayuno, espectacular

Entorno e instalaciones genial, la tortilla de patatas del desayuno de 5 estrellas también!

Hemos pasado una noche con nuestro hijo y un 10. Eduardo super amable, la casa espectacular, reformada recientemente y las habitaciones cuidadas al detalle. Desayunos muy bien con la tortilla de Eduardo muy rica. Lo recomiendo al 100%.

Recomiendo la estancia, es un lugar con mucho encanto y acogedor. El trato era muy cercano y agradable.
El perrete es muy gracioso
Si queréis desconectar del estrés de la ciudad es un gran sitio para hacerlo.

Un lugar especial, Eduardo atento al más mínimo detalle, junto a César (su perro) unos anfitriones excelentes. Gracias por dejarnos compartir con vosotros este lugar tan mágico. Sitio recomendable en todos los sentidos, cada habitación y rincón decorado con mucha personalidad. El desayuno fantástico, la tortilla una de las mejores que hemos probado.
Sin duda volveremos.

Una casa fantástica y muy acogedora. Eduardo, el dueño, muy amable y su perrito César encantador. Muy buén desayuno. Tortilla y bizcchos buenísimos. Hay una vaquería enfrente de la posada, la cual visitamos gracias a Eduardo (muy buena experiencia). La recomendaremos.

Hemos tenido la suerte de estar en el puente de Diciembre disfrutando de esta magnífica casa, sin duda será una de las cosas que más recordaremos de nuestro viaje a Cantabria. La casa es preciosa y está cuidado cada detalle, es tan acogedora que te hace sentir como en casa desde el primer momento. A ello también contribuye Eduardo, magnífico anfitrión siempre atento a todo lo que necesitábamos, pendiente de que nuestras hijas y nuestra perrita disfrutasen. A mis hijas les ha encantado la habitación familiar, con un altillo dd dormían, con juegos y cojines de colores dd sentarse, el salón dónde andaba podido ver sus series favoritas y la biblioteca dd han podido leer y hasta estudiar. No me puedo olvidar del simpático Cesar, su simpático perrito, que siempre nos recibía con alegria.
Muchísimas gracias a los dos, sin duda volveremos.

Alojamiento precioso, una atención muy cuidada y un desayuno espectacular. La ubicación es inmejorable si lo que quieres es perderte en el corazón verde de Cantabria.

Es un sitio precioso, con mucho encanto, infinidad de detalles en fin un sitio maravilloso y el dueño un encanto, gracias por un sitio tan bonito

Nos alojamos en la suite, una habitación súper grande y cómoda, la bañera es la estrella de la habitación, donde te puedes dar un baño viendo el bonito paisaje. Cama grande, baño enorme con una ducha grande también, todo nuevo y sobre todo decorado con muy buen gusto al igual que el resto de la casa y sus departamentos, biblioteca y demás! Eduardo es encantador y Cesar, su perrito, muy entrañable, siempre pidiendo galletas. Estuvimos muy agusto, saboreamos su tortilla y su bizcocho que ya lo hemos hecho en casa. Volveremos!
@javit90rn

La grupeta del CD Los Correcaminos de Polán hemos estado alojados este finde con el objetivo de ascender en bici al Pico Jano, el sitio no puede estar más a mano para realizar dicha actividad, las facilidades para guardar el material, las bicis han sido todas, la casa rezuma gusto y detalle por los cuatro costados, con detalles en el mobiliario y decoración dignas de un museo, el desayuno es caseroy las estancias comunes también se disfrutan, salón y patio, sin duda merece la pena alojarse allí y disfrutar del entorno natural y deportivo

El sitio es inmejorable. La tranquilidad del lugar, los alrededores y lo mejor de todo el anfitrión que te hace sentir como en casa. Un sitio 100 por 100 recomendable.

Hemos pasado 3 noches en esta posada increíble! Lugar perfecto para desconectar y un lugar con mucho encanto! Gracias Eduardo por cuidarnos tan bien, y por tu amabilidad! Destacar los súper almuerzos, tortilla de patatas espectacular y bizcochos de 10! Gracias por todo! Sin duda que volveremos!
Marta i Lluís

Buen sitio para desconectar.jardín para desayunar con vistas
Cerca para todos y admite mascotas.

Si buscas no solo una habitación donde dormir, sino también una experiencia inolvidable, este es tu sitio. Vistas espectaculares, estancias de encanto, música mientras desayunas, un dueño encantador… todo un disfrute!

Una experiencia maravillosa en una casa preciosa y llena de carácter. Eduardo es un anfitrión amable y divertido y da mucha pena tener que marcharse.

Muy recomendable.

Tranquilidad, amabilidad y gran servicio. Inolvidable lugar para salir del estrés de la gran ciudad.

Un lugar idílico. La ubicación es inmejorable, con unas vistas espectaculares de la zona. La habitación superacogedora y muy bien decorada. Los desayunos son espectaculares, con una tortilla y unos bizcochos caseros deliciosos. Pero lo mejor de todo es Eduardo, que nos ha hecho sentir como si estuvieramos en nuestra casa. Ha estado atento en todo momento, nos ha dado indicaciones de qué ver en la zona, donde ir a comer. Más no se puede pedir. Y encima, es un lugar 100% pet friendly en el que las mascotas pueden disfrutar del lugar sin "peros". Recomendable 100% y más todavía si viajas con perros.

Fantástico alojamiento. Habitaciones preciosas y agradables. Desayuno de buena calidad entorno insuperable.

La verdad esq es una pasada tranquilidad, un trato familiar, las vistas espectaculares, la casa me ha encantado

Trato excelente. Casa preciosa en un entorno tranquilo y agradable. Buen desayuno incluido en el precio. Todo estupendo y el remate sería si darían cenas. Sin olvidarme de César, el 4 patas de la casa.

Casa rural situada en un paraje magnífico. Si buscas tranquilidad, un anfitrión de 10 (gracias por todo Eduardo!) y que acepten a tu peludo, este es tu sitio en cantabria.

Hemos pasado unos días de desconexión maravillosos. Eduardo es un anfitrión de 10 y hace que te sientas como en casa. Los desayunos que prepara caseros son riquísimos.
Hemos ido con nuestras dos galgas y han disfrutado muchísimo, es un gusto encontrar sitios donde los perretes son tan bien recibidos.
Volveremos sin ninguna duda.

Cuando dices que es el mejor dinero que ha gastado uno, pues aún mejor, así que, no te lo pienses y disfruta de esta Posada y fue entorno.

La posada del tenor ha sido un descubrimiento. Está situada en un sitio muy tranquilo, ideal para descansar y desconectar pero también muy cerca de todo, de un montón de sitios geniales para visitar. Eduardo, el propietario, se ha esmerado mucho en la decoración y el cuidado de todos los detalles. En general diría que es un sitio con mucha clase, desde el propio Eduardo, (siempre preocupado porque estés a gusto, y a quien es una gozada escuchar, un hombre de mundo, gran conversador y con cosas muy interesantes que contar), también la propia casa, llena de detalles que dicen mucho de la sensibilidad de su dueño, e incluso el adorable César, tan discreto y que tanto encanto da al hotel. Mención aparte merece su cocina, aunque solo fuera por probar la tortilla del desayuno merece la pena ir, y qué decir de los bizcochos, impresionantes. ¡Eduardo, tienes que escribir un libro de recetas! En resumen, totalmente recomendable. Muchas gracias, Eduardo, por todo. Volveremos sin duda.

Espectacular!
Todo fue espectacular.
Solo Faltó tiempo para disfrutar más.
Es una casa preciosa con todo lujo de detalles que la hacen única. La atención de Eduardo ronda la excelencia.
La casa es una galería de arte.
Los desayunos con productos de calidad y un bizcocho casero divino.
Los quesos estaban también buenísimos.
Ojalá tenga la ocasión de repetir.
Hay una zona de descanso con vistas preciosas y en la habitación para niños (un altillo en la hab) hasta cuentos para los más peques
Sin duda un acierto para recordar.
Mi hijo se encariño también con César, muy simpático.

Nos decantamos por esta posada para un escapada de desconexión y naturaleza por los comentarios positivos que habíamos leídos, pues se quedan todos cortos. Increíble la zona, las vistas, la posada y el trato del dueño. Super detallista y super atento en todos los sentidos, además todo lo que pone en el desayuno es artesano, y no puede tener mejor mano, los bizcochos y la tortilla de patata están espectaculares.
También decir que los bizcochos los hace aptos para celíacos o intolerantes al gluten, y son mejores que los que compras en supermercados.
También tiene cuna y trona de niños.
Muy recomendable el sitio, volveremos seguro.

Todo un descubrimiento, casa con un encanto especial y un jardin expectacular
Eduardo y César nos han hecho sentir muy muy agusto, todo lo que nos ha recomendado ha valido la pena! Gracias recomendable 100×100, volveremos seguro con el resto de la familia! Rio nuestro perro de aguas no queria irse y nosotros tampoco.

Hemos tenido una magnífica experiencia en este lugar. La atención de Eduardo es extraordinaria. El encanto de las habitaciones, el delicioso desayuno, la tranquilidad de la terraza, la comodidad de viajar con perro. Estamos deseando volver

Excelente trato, Eduardo muy amable y siempre dispuesto a ayudar y recomendar sitios donde visitar.
La habitación un 10 y el lugar muy tranquilo y acogedor.

El entorno es espectacular. La casa tiene una decoración muy bonita y muy bien cuidada con todo tipo de detalles que la hace especial. No le falta de nada, jardín, salón, biblioteca, comedor. La habitación nos pareció impresionante con vistas a la montaña.
Destaco el trato del anfitrión, Eduardo, inmejorable. Muy agradable y muy atento, preocupado por la comodidad de sus huéspedes. El desayuno preparado por él, tanto tortilla de patata como bizcochos, deliciosos. Una estancia de 10!

Por todo.
Eduardo el propietario un excelente anfitrión.
Las habitaciones y todas las instalaciones te hacen sentir como en casa.
El entorno muy tranquilo y agradable.
Una experiencia para repetir sin dudar.

Estuvimos pasando unos días en la Posada del Tenor. La casa preciosa, con una decoración muy cuidada y en un entorno igual de bonito. El desayuno de 10, todo casero, con mención especial a la tortilla. En cuanto a las cenas, todo buenísimo y con productos de la zona, nos guardamos alguna receta para nosotros. Lo recomiendo sin ninguna duda, volveremos seguro. Gracias por todo Eduardo!