Posada La Charola

Hemos estado una semana y ha sido magnifico, una paz, unos desayunos caseros geniales, lari encantadora, si tenéis que ir a sitios preguntarle qué lo sabe todo, volveré de nuevo.

Nos encantó nuestra estancia en La Charola, nos trataron con mucho cariño y cercanía. Desayunos muy ricos, todo muy limpio y ubicación excelente. Repetiremos seguro!

El sitio es precioso, y si buscas tranquilidad para descansar es ideal.
Los desayunos geniales y la anfitriona muy maja y atenta, nos aconsejó lugares que no conocíamos y pasamos tres días de desconexión total.

Un lugar increíble, si quieres encontrar tranquilidad y relajación.
Lari, muy buena persona, nos aconsejo de todo momento, estando muy pendientes de nosotros

Mal. La dueña nos dejó sin desayunar el primer día. Lo de menos es eso, lo peor las formas. Muy borde sin venir a cuento. Dimos los buenos días y nos dijo "hoy no desayunais" sin darnos ninguna opción. La razón según ella es que no la habíamos avisado el día anterior y eso que la habíamos dicho que íbamos a su casa principalmente por lo bien que ponían sus desayunos y que estábamos deseando probarlos. La preguntamos varias veces si teníamos que elegir el desayuno y nos dijo que lo pensáramos tranquilamente sin decirnos en ningún momento que teníamos que decírselo antes de las 21,00 horas. Eso sí nos insistió varias veces que la habitación había que dejarla antes de las 11.00 AM. Tras su mala educación decidimos no desayunar allí ningún día. La casa bien, el entorno bien, la dueña mal. Lo negativo también es que estuvimos 3 días con mucho calor. En la habitación si abrías la ventana los mosquitos te breaban, si cerrabas te cocías. Habitaciones no preparadas para días de calor.

Decepcionante! Reservamos el hotel por los comentarios que vimos del desayuno y así se lo hice saber.
Nos dijo q tenia 2 desayunos y le comentamos que si había que elegirlos y nos dijo que No que lo pensáramos y le dije que bajaríamos temprano.
Al día siguiente le damos los buenos días y lo primero que nos dice es “ pues hoy No vais a desayunar “ pensábamos que estaba de broma pero no.
Nos dijo que se lo teníamos que haber dicho antes de las 21: 00h pero en ningún momento se nos informó de este pequeño detalle…
Esto puede pasar, pero en cualquier caso las formas en las que nos recibió x la mañana y la forma en la que nos lo dijo sin ni siquiera ofrecernos un café o cualquier cosa no parece lo más educado con tus clientes en tu casa y con tus normas.
No volvimos a cruzar palabra en los 3 días que estuvimos.
Una Decepción! No volveremos
Y si queréis dormir imprescindible llevar algo para los mosquitos.

Ideal para sentirte como en casa. Lari es un encanto y te acoje con mucho cariño. Te deseamos los mejor (los sevillanos), hay sido un placer!

Sitio tranquilo y en un enclave precioso. Localización muy buena para distintas actividades. Trato extraordinario.

Un sitio bucólico, espectacular si te gusta la naturaleza. La señora que lo regenta como de la familia. Volveré sin dudas

Pasamos una noche 3 amigos. Habitación grande y MUY limpia. Trato amable y respetuoso. Te recomiendan lugares fantásticos que visitar. Ubicado en medio de la naturaleza. Sitio ideal para familias con niños pequeños. Desayuno buenísimo por 6€, con bizcochos y tortas caseras, todo ecológico. Buena relación calidad precio.

Espectacular en todos los sentidos. Muy recomendable para ver la zona. Los desayunos son de los que recuerdas una temporada, todo casero y hecho con cariño.
Habitaciones amplias y limpias. El trato de 10+1. Hemos estado mejor que en brazos.
Parking amplio y acceso fácil.

Decepcionante. Una casa vieja, llena de humedad, mal cuidada. Una tomadura de pelo el precio por estancia para lo que ofrece.

Esta casa labriega restaurada encanta en un primer momento por su tranquila ubicación, ausencia de televisión, amplia biblioteca y bucólico paisaje. Más tarde la ausencia de mosquiteras, el precio inflado, molestos pitidos nocturnos y desayunos para niños de dos años a 6 € le hacen bajar en su relación calidad/precio.

De todas las casas rurales q he visitado y son muchas, sin duda esta es la mejor, las habitaciones muy acogedoras, sitio super tranquilo, cerca de todo, San Vicente, Comillas, Santillana.
Y q decir del desayuno? Espectacular, casero, variado y lo mejor de todo, Lari, la dueña, encantadora y con las mejores ideas para excursiones espectaculares y recomendaciones de restaurantes impresionantes. Sin duda, volveré

Very nice staff and amazing organic breakfast.
Rooms are big and clean. Huge parking and very near (by car) to San Vicente & Comillas. About 10min. Totally recommendable!

Experiencia fenomenal, nos sentimos muy bien tratados, como en casa.
Mucha gente se queja de que no hay TV pero si vas para desconectar no la vas a necesitar, además hay una biblioteca amplia como para no aburrirte.
El desayuno casero es totalmente imprescindible.
Volveremos.

Ambiente muy familiar! La dueña, Lari, es muy simpática siempre tiene buenas ideas para hacer rutas

Excelente. La atención brindada por Lari en cada detalle, convierten a su posada en un lugar de esos a los que uno añora regresar

Muy buen trato en un lugar inmerso en la naturaleza y las ovejas. Un desayuno muy natural y completo.

Como en casa, la pena que sólo han sido dos días. Un sitio tranquilo y para desconectar, merece la pena, sólo un pero, sólo dan el desayuno que es excelente, es una pena que no den más comidas.

Lo mejor y más tranquillo para ir un fin de semana. No dan comidas, pero el desayuno está muy bueno. Los niños, encantados con las ovejas y el verde. A 5kms de la playa de oyambre. Muy recomendable

El sitio es un remanso de paz. Bien situado, cerca de la playa y del valle del Cabuerniga. La amabilidad y el trato de Lari y Jose son de sobresaliente y los desayunos caseros, ecológicos, abundantes y muy ricos. Recomendable no, lo siguiente!

El entorno es precioso, una casa dentro de un bosque, precioso. Habitaciones simples. Desayunos espectaculares. La dueña muy cantabra.jajaja

Es un lugar extraordinario, el entorno, sus propietarios y la calidad de lo que ofrecen no tiene precio.