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Estuvimos dos noche el lugar con mucho encanto, bien ubicado al lado de la carretera que te comunica con todos los pueblos, muy tranquilo para des, la habitación grande con su, cama de matrimonio, un sofá y mesa, su armario, dos balcones con unas vistas muy bonitas, el baño completo, las zonas comunes con mucho gusto y cómodas, el salón del desayuno precioso y el desayuno bastante bien, es un lugar confortable, acogedor y las dos señoras que nos atendieron muy amables y cariñosas. Si vuelvo por allí sin duda que repito.
Es una posada preciosa, con todos los interiores de madera, mobiliario de época y muy cómoda para dormir y estar tranquilamente en sus salones y habitaciones. Consuelo es una mujer mayor que se encarga de la recepción y en los desayunos se ocupa de que no te falte nada. En los alrededores hay muchas opciones de turismo para visitar.
Casona grande reformada para alojamiento en habitaciones. Todo esta nuevo, techo con bigas de madera, suelo parquet de madera y alfombras por todas las zonas comunes, incluido escaleras. Lo que desmerece algo es la gestion por persona mayor (+80a) va a su ritmo y hoy en dia el tiempo es oro. Habitaciones grandes completo cuarto de baño. Precio un poco excesivo 75€/noche.
Nos quedamos en el apartamento que tienen al lado de la posada. Es un apartamento amplio y estaba todo muy limpio. El desayuno estaba incluido en el precio, había bastante variedad y estaba todo riquísimo. Es una posada familiar todos me parecieron majísimos a cuál más. Lo recomiendo sin duda de hecho cuando pueda volveré.
Posada bien situada, para moverse a gusto. El trato es súper amable y cordial. La casona, bien mantenida e higienizada. El desayuno, abundante. Los felicito por haberme dejado llevar mi mascota. Eso es un plus. Muy recomendable.
Todo perfecto. Tranquilidad, amabilidad, higiene y el desayuno impresionante. Desayunamos fuera porque fuimos con nuestra mascota y las señoras divinas todas ellas. Volvemos.
Casa restaurada manteniendo toda su esencia; es muy bonita, con todo de madera como originalmente (salvo los suelos de habitaciones que son de tarima “mala” y hacen mucho ruido). La habitación que nos toco era de tamaño medio pero lo suficiente para ser cómoda; el baño era grande en comparación. Todo muy limpio y agradable.
Las camas eran un poco incómodas, de muelles, este es un punto a mejorar.
El desayuno, que se hace en un salón alrededor de una chimenea de piedra muy bonita, resulta un poco “justo” para lo que se espera de un sitio así: la bolleria, zumo, mermeladas eran industriales. Se puede considerar variado pues también tenían frutas. Como sugerencia podrían poner algún Sobao un poco más “local” en lugar de uno industrial y el pan y mermeladas podrían ser de panadería/caseras.
Tenía un parking muy amplio para aparcar el coche y la casa está bien situada pues se llega rápidamente a cualquier emblemático lugar, aunque en el pueblo (Virgen de La Peña) no hay mucho que ver.
Consuelo and her family are so generous, thoughtful and accomodating. My stay here was extremely comfortable. The whole hotel, grounds and views are beautiful and my bedroom was perfect. I could have slept for longer - the bed was so cosy. Clean and good size. Breakfast and coffee set me up well for my cycle ride. I look forward to staying again! Muchas gracias:)
Un alojamiento muy bonito, el sitio impresionante digno de visitar, un trato excelente y los desayunos que son caseros muy ricos y las dueñas encantadoras volveremos pronto.
El lugar, tanto el edificio como los alrededores, esta genial. Una posada antigua, bien conservada, me alojé en la habitación mas grande (3 camas) y la cama principal era comodisima, el trato muy familiar y cercano. Hasta aquí lo bueno. El desayuno deja muchísimo que desear, solo hay un tipo de desayuno y es muy gracioso porque la buena mujer que te atiende siempre te pregunta “café y tostadas, no? ” Como si hubiera otra opción! Todo lo que tienen es industrial, hasta el zumo, malísimo desayuno en definitiva. No dan apenas geles de baño, solo unos sobres que no valen ni para una ducha, llevar vuestro gel y champú. Una cosa muy importante a tener en cuenta: No hay servicio de recepción fijo, suelen estar por las mañanas pero si llegas después de comer suerte, yo tuve suerte pero vi varias personas que pasaron cerca de una hora esperando a que la mujer se dignara a hacer acto de presencia. En definitiva es un sitio con ninguna voluntad y experiencia en hospedería, es una casa familiar reconvertida en posada donde no ponen mucho interés en convertirse en un hospedaje de calidad, yo creo que es simplemente porque son mentalidades muy distintas y antiguas, lo cual no es malo, pero no esperes un servicio clásico de hotel. En general me gusto el sitio y repetiría, aun con todos los “peros” que he comentado
Nuestra estancia en Posada Santa Eulalia ha sido muy gratificante. El trato dispensado ha sido súper amable y la habitación ultra cómoda para movernos a nuestras anchas con nuestro pequeño de año y medio que no para quieto. Totalmente recomendable!
Estuvimos en Cantabria de vacaciones y alquilamos 1 habitacion mediante booking en la posada. Para empezar la señora que lo lleva (que vive en al apartamento de al lado en la misma posada) tardo un rato en venir a recibirnos a pesar de saber la hora de llegada, y luego tuvo que hacer la entrada escribiendo a mano todo, lo cual tardo bastante y nosotros estábamos deseando entrar en la habitación después del largo viaje desde Madrid. La habitación nos tocó en primera planta (tiene 2) y la verdad que fue una experiencia fatal. El suelo de madera suena tremendamente, IMPOSIBLE DESCANSAR. Si vas a pasar 1 noche lo aguantas, pero 1 semana como fuimos nosotros se hace imposible dormir. Por otro lado el DESAYUNO, que viene incluido, es un sin más, bollos industriales y te ofrecen Café, zumo u tostada. Todos los días lo mismo. Yo además soy intolerante a la lactosa y los primeros días no tomaba ni Café, hasta que fueron tam amables de comprarme leche sin lactosa solo para mi. Eso fue un detalle, aunque deberían tener esa opción porque hay mucha gente así Las señoras intentan ser amables pero muchas veces pecan de ello. Te tienen que hacer la habitación SI O SI. Un día después de una ruta larga nos quisimos quedar en la habitación por la mañana a descansar y a pesar de que dijimos que íbamos a estar dentro, nos abrieron la puerta. Inaceptable en mi opinión.
La posada está situada en un puesto que está céntrica para visitar todo Cantabria eso como punto a favor y tiene parking gratuito.
Conclusión: sitio perfecto para alojarte un par de noches para estar por la zona, pero por lo demás experiencia para no volver.
Correcto y limpio. Solo admiten metalico Tiene escaleras para acceder a las habitaciones. El desayuno pésimo, sólo tienen algo de dulce, no hay nada de salado, fruta escasa y no muy buena. No podías pedir nada aparte de la tostada y el dulce. Para no repetir
El trato de las propietarias y empleados fue excepcionalmente amable y servicial. Nos ayudaron en todo lo que necesitamos y nos hicieron sentir como en casa. Muy buena gente. Todo muy limpio.
El establecimiento muy bien, la situación también. El trato correcto. El desayuno mejor no hablar. Yo no sé quién habrá hablado con estas señoras de las medidas contra la covid. Por Dios dejen de poner el cola cao y el nesquik en botes grandes donde todo el mundo mete mano, y los bollos igual. Luego si os gusta el desayuno más o menos es otro cantar. A mí personalmente no me gustó nada.
Mejor imposible. Veníamos para 3 días y pudimos ampliar otros 3 la estancia. Trato exquisito, buenos desayunos, cerca de la autovía A8. El lugar es muy tranquilo. Además nos han rebajado el precio al ampliar la estancia. Recomendable para el que quiera visitar Cantabria desde un lugar céntrico. Desde allí se va a todos lados de manera fácil. Había más gente alojada allí y se han marchado contentísimos y con gana de repetir. La única pega es que sólo admiten efectivo, aunque hay cajeros a unos 200 metros. Repetiríamos sin dudarlo.
La posada muy bonita y cuidada, todo muy limpio y confortable. La señora que lo regenta muy amable y educada. El desayuno muy mejorable, el zumo es de brick y la bollería industrial. Caro para lo que ofrecen, no hay nada casero que es lo habitual en este tipo de establecimientos. No se puede pagar más que en efectivo y a la llegada. Se oye todo del piso de arriba.
Un lugar con encanto, bonito y limpio. Hemos pasado un fin de semana de relax total. Las dueñas muy amables, nos han recomendado lugares cercanos para visitar. Un lugar para recomendar sin dudarlo.
Personal muy amable y sitio acogedor. Cuidan mucho los detalles y te ayudan en todo lo que pueden. Los desayunos completos con zumo natural, tostadas o bolleria, Todo servido en la mesa directamente por el personal. Nos costó un poco encontrarlo pero nos dieron instrucciones desde el local y llegamos sin problema.
Hemos llegado el viernes, y nos vamos el domingo, la posada es un gusto exquisito, con una decoración magnífica de maderas nobles y tallas de gran valía, asimismo el trato recibido ha sido magnífico, nos han informado en todo momento, han sido muy amables y de gran humanidad, el desayuno magnífico, Y que vamos que más podemos decir a sido un fin de semana idílico un lugar muy recomendable sin duda. A destacar que el silencio se escucha
Una habitacion muy amplia y limpia, en un hotel con mucho encanto, nos atendió la dueña que fue una gran anfitriona, nos sentimos como invitados a su casa.
Fuimos con una caja regalo, no sabíamos de la diferencia de precios de las habitaciones ni lo que la caja había costado, el comentario de la dueña no creo que fuese el apropiado para mandarnos a una habitación, que suponemos, la más pequeña y en la planta baja, habitación con mucha humedad. El restaurate, al que te mandan a cenar, muy justo de menus y el desayuno pues normalito. Nosotros, la próxima, miraremos otro sitio.
Hemos estado muy a gusto, la casa es preciosa, la habitación muy coqueta y amplia y la cena y el desayuno, bien. Íbamos con una caja-regalo, y lo hemos disfrutado!
El lugar es precioso e ideal para quienes buscan tranquilidad. La señora que regenta la Posada es encantadora e hizo nuestra estancia muy fácil. Pasamos una noche tras canjear un regalo de Wanabox y si volvemos por esa zona, repetiremos lugar. Recomendable desayunar en la Posada, todo riquísimo. Ah, también hay parking gratuito.
Buen sitio para alojarse una o dos noches y ver la zona oeste de Cantabria pero no mucho más. Sólo ofrece desayunos aunque éstos son muy pobres, nada de salado y solo una tostada y/o croissant. Localización de la posada inmejorable cerca de la autovía, precio razonable y limpieza un poco mejorable.
La Posada Santa Eulalia, es un lugar tranquilo, para olvidarte de la rutina del trabajo. El trato excelente, y el desayuno es muy casero, (Zumito de Naranja Natural, tostadita y un buen cafe). Tuvieron un detalle en la habitación, dos botellitas de Champagne y Bombones.
Nos regalaron una caja Wonderbox y allí pone que admiten animales. Menos mal que se nos ocurrió llamar primero para preguntar. Porque nos llevamos la desagradable sorpresa de que no es así.
Así que un lugar que no visitaremos jamás. Y a todos los que tengáis mascota, ya sabéis, no sois bien recibidos.
Alojamiento rural similar, e incluso mejorando, hoteles de cuatro estrellas. El trato extraordinario. Un lugar perfecto para descansar y muy bien situado.
Un lugar muy bonito para conocer Cantabria, muy bien situado cerca de la autovía. Habitaciones amplias y muy limpias. Hemos recibido un trato muy agradable por parte de las dueñas de la Posada. Ideal para ir con niños. Muy recomendable!