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Comimos 2 menús con alubias para 2 , carrilleras ( a las que no le saqué foto ) y costilla de cerdo asada. Cada menú 22€ ( un sábado de puente ) , un local relativamente pequeño. En cuanto entras te das cuenta que vas a comer bien, antes de pasar al comedor ves la chimenea donde se hacen los asados. En el propio comedor cuentan con chimenea y estufas para la temporada de frío. Cómo se puede ver las raciones son buenas , no te quedas con hambre. El camarero que nos atendió majísimo y la comida estaba buenísima. No teníamos referencias del restaurante y acertamos de lejos , volvería a ir sin lugar a dudas . Tuvimos suerte que pudimos comer ya que no hicimos reserva y en poco tiempo el restaurante se llenó .
Qué lugar tan maravilloso encontramos después de una visita al mirador Pico del Cuerno. ¡Este restaurante ofrece excelente comida casera! El servicio es excelente y realmente Comprender cómo entregar productos de calidad. Comimos cocido montañés (plato de esta zona) y cerdo (cocido en horno de leña) … estuvo excelente. Este lugar se especializaba en postres y debes probarlo. Comí un flan y fue el mejor flan que he comido.
Un restaurante muy recomendable. La comida de optima calidad y los postres estaban de muerte. El menú que tienen.un cocido montañes escandaloso, un rabo estofado, el codillo.no puedes equivocarte. Está todo muy muy bien.
Increible tanto la comida como el servicio, camareros super amables. Pedimos cocido montañes y estaba tremendo. Sopa de pescado para las niñas buenisima tambièn. De segundo codillo increible. Y los postre deliciosos y se notaba que caseros (hasta el helado estaba de muerte). Muy muy recomendable
Probablemente uno de los mejores cocidos montañeses de la zona, hecho en olla ferroviaria como debe ser. Una excelente parrilla y muy bien servida en la mesa con una pequeña parrilla de carbón para darle el punto final en la mesa. Postres caseros de chuparse los dedos. Carlos y su familia te atienden como si estuvieses en tu casa. El aparcamiento es pequeño y sobre todo en verano se llena y hay que tener precaución al volver a la carretera por lo que recomiendo ir pronto a comer para encontrar plaza.
Hemos ido a comer y todo riquísimo! Cocido montañés en olla ferroviaria, lechazo, codillo, chuletón (buenísimo y tierno), los postres, si eres capaz de hacer hueco.merece la pena el esfuerzo. Precio más que razonable, y la atención muy buena.
Conocemos el lugar desde hace más de veinte años. En su día, la pensión estaba de cine. Ahora está más centrado el negocio en el restaurante. Hacía tres años que no íbamos y nos volvimos a meter unas alubias en olla ferroviaria y unos asados. Buenísimos. Los postres impresionantes. Muy recomendable. Mejor llamar y reservar. Dos menús con bebida 47€. La pareja. Razonable para un festivo.
No puedo valorar mas, solo tomamos un aperitivo (cecina) ya que teniamos reserva en otro restaurante, pero nos quedamos con ganas de volver a tomar cocido montañes y judiones.
Un servicio excelente. Y un menú con muy buen calidad precio para un día festivo como todos los santos Cocido montañés, rabo, o pescado estaba buenísimo Cocina casera y en puchera en el exterior del bar. E repetido y repetiré
Trato cordial y muy cercano. Carlos, supongo que el gerente y a la vez camarero nos ha tratado estupendamente, sacándonos algunas sonrisas. La comida tradicional/casera de la zona que con el menú que nos sirvió y algún detalle que se sacó, te quedas más que satisfecho. Y como no, los postres fueron el remate final. El próximo año que vuelva por Cantabria, repetiremos. "Los cordobeses".
El mejor horno y parrilla que encontrarás en la Cantabria Oriental; además, la repostería es extraordinaria - tienen para llevar. Si eres de cuchara, el cocido en olla ferroviaria te dejará epatado.
Excelentes guisos en olla ferroviaria y postres caseros. Cinco años después reedito y aumento a cinco estrellas, con el tiempo ha mejorado. De los sitios que hay que volver
Un restaurante en un sitio incomparable, la comida es impresionante, calidad, sabor, que decir de las raciones, son imposible de acabar, como ya no se ven, la atención del personal de 10, si mencionamos los postres ya no se pueden ni describir, desde luego un lugar donde se puede llevar a comer cualquier persona que quieras deslumbrar, seguir así equipo, lugares así ya no quedan, felicidades.
Un descubrimiento. He pasado casualmente por delante, después de visitar las cuevas que hay muy cerca, a ver si podía comer. Tienen comida típica cántabra (como el cocido montañés en olla ferroviaria), y rabo de toro (me ha sorprendido que estaba más bueno que en Córdoba, donde son especialistas). Tienen menú del día, menú especial, y carta. Todo de primera calidad; y un buen surtido de vinos. Y postres caseros. E incluso venden (para llevar), sobaos, magdalenas, quesadas.que son de fabricación propia (sin conservantes ni colorantes). Cocina de primera, a buen precio, con un trato familiar. Te hacen sentir como en casa. Volveré!
El cocido montañés en olla ferroviaria estaba de muerte. Mezcla de sabores perfecta, salsa gordita y para nada salado y de cantidad muy bien porque te sacan para que te sirvas. Comimos bastante bien. Muy rico.
Me he alojado recientemente aquí durante una semana y la experiencia ha sido estupenda. El sitio es bastante tranquilo, a pesar de estar junto a la carretera, ya que no hay mucho tráfico, ni siquiera en fin de semana. Las habitaciones tienen todo lo que se pueda necesitar, aunque hay algunas sin baño dentro (es una pensión), y la limpieza y comodidad son de primera clase. Por otra parte, también hay alguna habitación con balcón y saloncito que es una maravilla. Es fabuloso despertar viendo el Pico de San Vicente y escuchando el río Asón a tu lado. La atención por parte de los dueños es inmejorable, siempre dispuestos a atenderte en lo que necesites y ofreciéndote en los desayunos todas las especialidades que elaboran en su horno a diario.
Restaurante en la carretera, paramos de casualidad y acertamos de pleno. El cochinillo asado espectacular y el solomillo buenísimo. Postres caseros, la tarta de chocolate ríquisima. Precios super correctos.
Muy buen sitio para parar a comer. Paramos un poco por casualidad pero a todos nos sorprendió lo bien que se come y además por un precio muy correcto. Muy recomendable sin duda. El rabo de toro buenísimo y el solomillo muy tierno y jugoso y los postres caseros y ricos.
El tío de la barra fue muy borde. Paramos a comer unos pintxos o bocadillos y nos dijo de muy malas maneras que no hacian. Que solo menú o carta. El sitio a demás estaba muy sucio.
Un poco lento el servicio... Pero la comida muy muy bien, los primeros de cuchara muy bien cocinados y el cochinillo, el churrasco y el lechazo para chuparse los dedos. Para recomendar y para repetir sin duda. La repostería que venden para llevar tenia muy buena pinta también, sobaos, galletas de mantequilla y magdalenas casera que elaboran ellos mismos.
Restaurante asador con horno y parrilla, familiar, dónde se puede comer cordero, y cabrito, por encargo, chuletón y buen pescado, tiene habitaciones para pasar la noche, muy bien atendido directamente por el dueño, buena calidad precio.
Hemos vuelto y he de reconocer que se han superado, se Trata de un local en el que se reúnen buenas personas, buen ambiente, la Comida es para hartarse. Carlos el propietario es un gran profesional y tiene un equipo de primera todo riquísimo y precios obreros. Lo recomiendo a todo el mundo.
Una mano estupenda para las carnes, el codillo y el chuletón en su punto. Las alubias riquísimas y, si queda sitio para el postre, una tarta de chocolate y un flan de orujo riquísimos.
Sitio muy recomendable para degustar un buen cocido montañés y unas costillas de cordero a la parrilla. Las raciones son más que generosas, el personal agradable y el precio muy ajustado.
Es un lugar acogedor para comer como en casa. La comida muy rica y grandes cantidades, de precio esta bien y el trato excepcional. Para pasar un rato agradable.
Hice una reserva por teléfono para la pensión y cuando llegamos allí no había nadie. Vaya profesionales. Antes era el único sitio barato cerca de Ramales de la Victoria. Ahora para mí ya no. Sobre el restaurante en sí no he estado y no opino.
Ni fu ni fa.para lo que dan es bastante caro. El asado pelín pasado de cocción y Saladillo y el solomillo bastante seco. La ensalada de foie muy racana.