Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Experiencia familiar muy divertida y agradable. La posada es muy tranquila en un entono natural muy bonito, decorada con muy buen gusto. La atención por parte de los anfitriones fue muy detallista. Celebrábamos cumpleaños de una persona de nuestra familia y pusieron globos y pancartas en su habitación. También nos aconsejaron sobre pueblos a visitar y restaurantes a probar. El desayuno perfecto con productos caseros y naturales. Volveremos seguro.
Un sitio encantador, una posada rural muy bonita, ideal para desconectar, habitación bonita, descansamos un montón, 3 noches con nuestra perrita, dormimos fenomenal, para volver, además, que Oscar y Jordi son encantadores y así da gusto, dar con gente tan buena. Se come fenomenal, la cena deliciosa y el postre también, lo disfrutamos un montón, un recuerdo maravilloso, el puente de Octubre. Lo mejor que aceptan perro y allí está jumping, un amigo perruno. Se nota cuando los propietarios aman los animales.
Los dueños Jordi y Óscar han conseguido crear un ambiente fantástico. Las habitaciones son muy bonitas y bien acondicionadas. Los desayunos y las cenas estupendas con mucha creatividad. Todo hace que te encuentres como en casa. El trato con Jordi, Óscar y Laura es como si les conocieras de toda la vida, como si estuvieras en familia. Recomendable sin dudarlo.
Mi pareja y yo tuvimos la suerte de encontrar este rincón de ensueño en Cantabria a finales de septiembre. Los dueños de la posada, Jordi y su equipo, nos brindaron una cálida bienvenida y atención excepcional durante nuestra estancia. Desde la gestión de las habitaciones hasta proporcionarnos valiosos consejos sobre qué explorar en la zona, su hospitalidad fue insuperable.
Oscar, el chef de la casa, nos sorprendió con deliciosos platos que llenaron nuestros días de sabor y afecto. La comida que disfrutamos allí permanecerá en nuestros corazones durante mucho tiempo.
Nuestra habitación era impecable y absolutamente encantadora, creando un ambiente acogedor que nos hizo sentir como en casa.
Los jardines de la posada nos invitaron a relajarnos y a conectarnos con la naturaleza, disfrutando del aire puro y el suave tintineo de los cencerros por la mañana, uniéndose al coro de los pájaros. Encontramos el refugio perfecto para nuestro anhelo de paz y tranquilidad.
Los alrededores de la posada nos deslumbraron con su exuberante vegetación, la belleza natural y la compañía de caballos y vacas increíblemente simpáticos. Incluso para los amantes de la vida en la ciudad, el espectáculo de los potros y las vacas corriendo por la hierba fresca en la mañana es algo digno de admiración.
En resumen, nuestra escapada en la posada fue una experiencia inolvidable y una promesa de regresar una y otra vez para recargar nuestros sentidos con la belleza de la naturaleza y la hospitalidad excepcional que nos brindaron. Gracias por convertir nuestro viaje en una memoria inolvidable.
Volveremos pero elegiremos habitación, hemos ido con un regalo de Smartbox y la verdad q elegir la Posada de Ibio fue un acierto, quitando la habitación 9 que nos tocó (no me gustan las habitaciones abuhardilladas) pero la habitación estaba bien, es manía personal. La ubicación perfecta para moverte x los alrededores, la posada muy acogedora y bonita, tiene un encanto especial y el trato muy agradable y simpático, te encuentras como en familia, los desayunos y las cenas de la posada merecen la pena probarlos, solo pondría una pega pequeña… alargaría un poco el horario de desayuno por lo demás una buena estancia, REPETIREMOS! Saludos
Lugar tranquilo, podemos estar con nuestras mascotas. Muy buena cocina. El trato recibido, son los dueños los que atienden, en todo momento ha sido excelente, cordial, cercano y familiar. Si nos animamos en subir a este paraje no dudaríamos en volver.
Fuimos una pareja con 2 perros y un gato y no pudimos haber sido mejor recibidos por Òscar y Jordi. La comida era excelente y estábamos ansiosos por que llegara la hora de cenar para completar un hermoso día. Un entorno encantador como para salir del mundo. Gracias Òscar y Jordi estamos muy agradecidos.
Muy contentos con el trato recibido una posada para repetir, comida insuperable, merece la pena ir a conocerlo porque repetirás, muchas gracias a Jordi y a Oscar en general a todo el equipo las chicas de cocina y limpieza nos volveremos a ver.
No se puede estar mejor. Jordi y Oscar te acogen en la Posada como si te conocieran de toda la vida. Hacen lo Imposible para que te sientas como en casa. Y lo consiguen. El entorno es un remanso de paz. Todos los detalles están cuidados al máximo.
Experiencia para vivirla, sin duda repetiremos. Trato espectacular y servicio super personalizado, la casa se encuentra en un lugar idílico y la atención de Jordi y Óscar es increíble. La comida es totalmente casera y apoyan la movilidad eléctrica con enchufes habilitados en la zona del parking.
Un Posada idílica, con el tamaño perfecto para sentirte mimado por unos fabulosos anfitriones y su equipo, juntos te hacen estar como en tu hogar, gracias Jordi, Óscar, Mayte y Laura por vuestro trato y profesionalidad. Merece una especial mención la comida preparada a diario por Óscar. Deseando volver
Pasamos dos noches estupendas. El desayuno buenísimo y las cenas aún mejor! Sin duda teneis que probar la tarta de queso! Gracias a Jordi por su amabilidad, y aconsejarnos sitios cercanos. Además es Petfriendly, si volvemos sin duda será con nuestra perra.
Todo muy bien el entorno JORDI Y OSCAR muy buena gente estan en todo gracias por habernos echo pasar un finde fenomenal desayuno y cena fenomenales y un abrazo tambien para la chica de la casa que no me acuerdo de su nombre siempre en todo tambien como los anfitriones
5 estrellas porque no hay la opción de 6 (o más). Jordi y Oscar son indiscutiblemente los mejores anfitriones que hemos conocido. Una CASA rural más que recomendable. Muchisimas gracias chicos por una experiencia inolvidable y como dicen por ahí; "Keep up the great work! ". P. D. La cocina es de estrella.
Un lugar precioso y en sueño para pasar un fin de semana rural. El hotel es precioso, el paraje es impresionante, la cena y desayunos riquísimos y los dueños Jordi y Oscar junto a su perrito jumping, encantadores y super profesionales. Da gusto cuando la gente quiere trabajar y te da unos servicios que están más que a la altura de lo que se busca. Además que aceptaran a nuestra perrita paqui en el hotel y que no la faltase de nada, incluido mimos y galletas, pues de super agradecer. Volveremos al 100% y se lo recomendaremos a todo el mundo.
La estancia ha sido de 10. Los dueños Jordi y Oscar desde la llegada al hotel ya te hacen sentir como en casa. El sitio es muy acogedor. Zona tranquila donde solo se escucha la naturaleza y está bien comunicado. Las habitaciones son de buen tamaño y tuvimos la suerte de que nos tocara con balcón así que estábamos encantados. El desayuno viene incluido en el precio. Es casero y cada día intentan variar los sabores pero siempre manteniendo la calidad (suele constar de mermeladas caseras, tostadas, quesada y un bizcocho del día, zumo natural y cafe o té). Hay veces que ofrecen cenas (se pagan a parte). Si tienes la oportunidad de probarlo, no lo dudes. Platos variados, caseros y de buen tamaño. La posada tiene aparcamiento propio para los huéspedes y para disfrutar en verano, un jardín con mesas. Si tenemos la oportunidad, volveremos. Gracias a los anfitriones por hacer nuestra estancia memorable:)
La estancia ha sido inigualable. La Posada es preciosa, con habitaciones amplias y muy limpias. Un lugar tranquilo donde desconectar. El desayuno riquísimo, todo casero y con variedad. Pudimos cenar también un día y todo muy rico. La ubicación de la Posada es estupenda para visitar muchos de los lugares de interés, tanto de playa como de montaña. Por último, Jordi y Óscar han sido muy acogedores y amables. Experiencia para repetir.
Mi pareja y yo nos alojamos durante tres noches, dos de la cuales a través de una caja de experiencias Smartbox. Añadir que ningún problema referente a la reserva mediante este medio, simplemente seguir las instrucciones y los pasos que te indican los dueños de la posada. La estancia inmejorable, habitaciones amplias, acogedoras, un entorno rural muy adecuado. Cerca de muchos sitios de interés. En todo momento los anfitriones te ayudan a cualquier petición, siendo amables, atentos, un servicio en general espectacular. Servicio de cenas increíble, todo casero, producto en su mayoría autóctono, incluso hortalizas que ellos mismos plantan. Quizás por poner alguna pequeña pega el precio en sí mismo de las cenas. Si que nos pareció algo excesivo. Una media de 50€ por cena para dos personas sin productos caros ni vinos. Parking sin problemas, descubierto pero con sitio en todo momento. Sin duda volveremos a hospedarnos.
Que decir de esta Posada.que llegamos como clientes y tras seis días estupendos, nos fuimos como amigos. Una atención educada, cercana y agradable desde el primer minuto. Unas habitaciones perfectas para el plan que tengas, romántico, familiar o con amigos. Unos exteriores muy bien cuidados. En definitiva, un sitio de lujo. Gracias Jordi por tu buen hacer. Laura, tu simpatía no tiene límites y tú Quesada no tiene precio. Lamentamos no haber podido conocer a Óscar, será la próxima vez. Hasta pronto amigos.
Nuestra estancia fue maravillosa! El pasado noviembre Igor nuestra perrita kona y yo nos alojamos un finde en la posada sierra de ibio. Nos acogieron con total amabilidad y durante todo el fin de semana estuvieron siempre disponibles para cualquier duda/recomendación. El alojamiento es precioso, y las habitaciones muy cómodas! Los alrededores invitan a perderse caminando y se respira muchísima paz. Está a un paso de múltiples rutas y zonas típicas de Cantabria. El desayuno, con productos de la zona, fue espectacular. Esperamos poder volver a visitarles pronto!
Buena elección para nuestra estancia en Cantabria. Instalaciones muy bonitas y cuidadas, todo con mucho detalle. Atendieron nuestras preferencias tal y como le dijimos. Comida riquísima y muy buen trato. Gracias por todo!
Es un lugar fantástico para relajarse y visitar lugares escondidos de Cantabria. El trato es increíble y cuidan con mimo cada detalle. Muy recomendable!
Un trato aceptable pero una atención decepcionante ya que la calefaccion funcionó un día solo y no cambian las toallas de ducha de un día para otro. Cabe destacar también los precios desorbitados de la cena ya que cobraron más de 120€ por 16 croquetas, 4 platos de sopa y 3 trozos de tarta de queso.
Estuvimos hace 15 días y nos chifló a los 3: a mi maridin, a servidora y a nuestro hijo peludo. Volveremos con nuestros hijos (no peludos) prontín. Muchísimas gracias / moltes gràcies a Jordi por su hospitalidad y a la cocinera por esa cena de chuparse los dedos.
La posada tiene cierto encanto, aunque la decoración de la habitación es demasiado extravagantes. Las instalaciones son algo antiguas ya, pero bien mantenidas. El restaurante nos gustó mucho, con variedad de platos muy ricos, tradicionales pero con un puntito de vanguardia. Lo más controvertido es el trato de la persona responsable. Siendo en ocasiones muy cercano, en otras en cambio te puede hacer sentir incómodo por exceso de control y exigencias por adelantado. Seguramente no apto para todos los públicos. Eso sí, usamos un cofre regalo y en ese aspecto el trato no fue aparentemente diferente, lo cual se agradece.
Actualización respuesta establecimiento: 1. Nuestra valoración ha sido, en conjunto buena y, sobretodo, educada. Tu respuesta en línea con una personalidad especial, como decíamos no apta para todos los públicos. 2. Antes de ir tuvimos COVID, negativizando 1 semana antes. Como te dijimos NO era covid puesto que ya lo habíamos pasado. Por desgracia sufrimos una afonía severa que el médico no dio ninguna importancia. Esa era nuestra enfermedad. (Es decir, fuimos con test negativo y consulta médica). 3. Cuando llegamos no era de noche, eran las 17h. Hubiera tenido narices que nos echaras al vernos afónicos, creo que tendría un amparo legal débil. Me parecen correctas las medidas, y además agradecemos la leche con miel. Únicamente hemos manifestado que en varios momentos nos hiciste sentir incómodos. 4. Tardó mucho en pasar la afonía, pero estamos mejor. Deseamos que te vaya muy bien. Cuidado con Jumping (un perrito) que muerde a los bebés cuando le tocan la pata (eso lo olvidamos mencionar los dos).
Es un lugar muy agradable con habitaciones limpias y comida rica con productos locales. Jordi es muy simpatico y tiene buenas ideas para descubrir Cantabria. Le recomandamos.
Hemos ido desde que la tienen Oscar Jordy y el mejor de los tres Jumping. De verdad te hacen sentir como en casa. Creo que ya son tres veces con ellos y volveremos siempre que podamos 100% recomendable
Es la tercera vez que vengo y me encuentro en familia. El sitio es estupendo y el descanso es lo que más valoro después del ajetreo de la gran ciudad. Se te pasan los días volando. Todo cerca, y el enclave genial. El trato de familia. Volveré. Óscar y Jordi junto con las chicas cántabras estupendos.
La posada sierra de Ibio nos pareció espectacular en todos los aspectos. Situación inmejorable para visitar Cantabria y desplazarse a todos los rincones de esa maravillosa tierra. Los dueños, Óscar y Jordi te hacen sentir como en casa. La posada es muy amplia con zonas verdes y varias casas independientes para el hospedaje. El desayuno y las cenas de 10! Productos de primera y elaborados de una magnífica forma. Todo muy limpio y decorado con mucho gusto. Repetiremos sin duda!
Una posada deliziosa e ben curata. Le stanze accoglienti dove non manca nulla. Il giardino carinissimo e ben mantenuto. Jordi e Oscar sono eccezionali. Accolgono gli ospiti con familiarità e simpatia. Professionali e nel contempo una straordinaria capacità di mettere le persone a propio agio. Consiglio vivamente una sosta in questo angolo incantato.
Buscando alojamientos en Cantabria para pasar unos días, no queríamos el típico hotel, más bien un lugar con encanto. Y vaya si lo conseguimos. La Posada es uno de esos sitios imprescindibles, maravillosos y con luz propia. Sus dueños Jordi y Óscar desprenden amabilidad y profesionalidad, pendientes de cada uno de sus huéspedes en todo momento. Tratan a los niños con mucho cariño y eso, como madre se agradece. Sus dos trabajadoras también son encantadoras, una de ellas es Laura, haciendo que nos sintiéramos como en casa. Algo muy a destacar es la situación, ya que está en el centro de Cantabria para poder visitar todo con facilidad. Jordi siempre da buenos consejos. Además, los desayunos y cenas de Óscar son dignos de la cocina cántabra. Si me preguntan si volvería: sin dudarlo! Gracias "hermosos".
Desde el momento de la llegada todo me ha parecido maravilloso, el sitio y el entorno es espectacular, el trato de Jordi es muy cercano u te ayuda en todo lo que puedas tener alguna duda, los desayunos de 10 y las cenas maravillosas, en general todo muy espectacular, volveremos si duda.
Hemos pasado unos días fantásticos en la posada. Los anfitriones Jordi y Oscar han sido geniales, así como el resto de personal. La ubicación era estupenda para visitar la zona. La casa era preciosa y muy cuidada. Además tenías la posibilidad de cenar, esto es un plus.
Solo entrar con el coche y ver el entorno, ya es un tarjeta de presentación de lo que te vas a encontrar estos días en la casa. Un lugar que transmite paz y buen gusto. La atención es inmejorable, sencillamente Jordi es una persona amable que disfruta de lo que hace y nos recibe con una sonrisa que lo hace todo fácil. La casa es impresionante, conservando todo su ambiente rural pero con todas las comodidades que hoy en día busca el turista. Cada rincón, cada estancia, cada objeto tiene una historia, no están ahí por que si. Lástima que hemos tenido que regresar a casa. Pero ya tenemos un nuevo lugar al que regresar.quedan tantas cosas por conocer allí!
Una posada con un encanto especial y una ubicación inmejorable, todo cuidado al detalle y con muy buen gusto. Lo mejor, los anfitriones, Oscar y Jordi (y Jumping) te hacen sentir como en casa. La habitación con jacuzzi es un lujo, los desayunos son buenísimos, y las cenas espectaculares, platos caseros típicos de Cantabria muy bien elaborados. Es un lugar para venir en pareja, en familia, con amigos, Y como no, con perrete, es un lugar pet friendly de verdad, con su zona en el comedor para que puedan estar con nosotros en todo momento. Muy recomendable, un alojamiento de 10!
Atención y amabilidad de 10 y un desayuno genial. Un sitio perfecto para pasar unos dias de tranquilidad cerca de todo. Jordi y Óscar son increíbles como anfitriones! Repetiremos
Extraordinario establecimiento, en un entorno maravilloso, en Cantabria. A la gran hospitalidad y simpatía de Jordi y Óscar, se le ha sumar el buen hacer culinario de la posada, basado en productos de la tierra, con un mesurado toque "gastro". En lo tocante a la repostería, lo auténtico se hace memoria, cuando te sirven, por ejemplo, un flan de huevo, y los sabores de la infancia del flan de la abuela, se hacen presentes, de nuevo, en la mesa de la posada. En lo tocante al vino, una muy buena representación de las D. O.españolas. Nos sentimos en todo momento como en nuestra casa: atención, simpatía, amabilidad, información de la zona (y más allá.). Altamente recomendable! Álexandrina Altirriba y José Luis Buron. Barcelona
Sitio muy recomendable con un entorno rural preciso. Óscar y Jordi encantadores. Cocina casera 100%. Perfecto para descontar pero muy bien ubicada para desplazarte por Cantabria. Seguro que volveremos. Un abrazo. Dani, Noe y Mateo.
Excelente localización con muchas actividades para poder realizar durante la estancia. Las habitaciones son grandes, limpias y súper acogedoras. Los anfitriones son absolutamente encantadores, y te hacen sentir en casa no sólo por su trato, también por la deliciosa comida que sirven. Definitivamente, un lugar para volver en varias ocasiones.
Hemos estado en Semana Santa y nos ha encantado! El trato de Jordi y Óscar es de 10! La posada es preciosa, nos ha gustado mucho el sitio, una de las noches cenamos allí mismo y todo genial! Recomiendo mucho este lugar, volveremos con nuestros hijos de nuevo para que lo conozcan, saludos de Emilio y Mari
La Posada es preciosa, está muy cuidada a todo detalle. Se nota que todo está hecho con mucho esfuerzo y amor. Oscar es un cocinero increíble, y tanto él como Jordi son maravillosos. Nos hemos ido con muchísima pena, pero muy muy agradecidas de este gran descubrimiento. ¡Volveremos seguro!
Desde que llegas a la posada te hacen sentir como en casa, como uno más de la familia. Habitación acogedora. Limpieza en cada rincón y cuidan el más mínimo detalle. El desayuno es muy rico y no dejan que te quedes con hambre! Óscar y Jordi son estupendos anfitriones. No faltan el buen humor y las ganas de agradar a sus huéspedes. Ofrecen junto con Laura un servicio de 10.
Estuvimos pasando, en esa maravillosa posada, un fin de semana. Solo tenemos palabras y sensaciones de agrado absoluto. Los anfitriones son increíbles, te invaden de alegría y cariño con cada detalle.desde el más mínimo cuidado de limpieza, gusto y confort en cada estancia de la casa, hasta el trato dicharachero y energizante desprendido por Jordi en cuanto llegas, sin olvidar todo el amor al cocinar que Óscar te regala en cada plato. Aunque tienen algo muy muy negativo (y todo hay que decirlo.) ¡¡No te dan ganas de irteeeeee! Chicos! Muchas gracias por todo, ha sido una estancia preciosa y esperamos volver a pasar por allí Juan Carlos y Verónica.
Me dedico al mundo del servicio. Trato a diario con todo tipo de personas, por lo que puedo decir que pocas veces he encontrado a gente tan excepcional como Jordi y Oscar, los dueños de la posada. Hasta Jumping, la mascota de la familia tiene una mención especial. La posada es preciosa y tiene mucho encanto. Está muy bien cuidada y Laura se encarga de que las habitaciones, aparte de ser acogedoras y confortables, tengan una limpieza impecable. La ubicación es perfecta a media hora máximo de todos los puntos importantes. Muy tranquila, a excepcion del gallo de los vecinos que no tiene claro cuando sale el sol. La comida es excepcional con productos de proximidad, pan de hogaza casero, mermeladas tambien caseras y variadas. Un placer para el paladar! Totalmente recomendable.
Estancia INMEJORABLE. La posada es muy acogedora y está decorada con muy buen gusto. La habitación está muy bien equipada. Jordi y Óscar son encantadores y muy cercanos. Están pendientes del más mínimo detalle y te hacen sentir como en casa. ¡Para repetir!
Ha sido un fin de semana fantástico. La Posada es una maravilla, el ambiente absolutamente encantador. Además hemos tenido un tiempo impresionante. Empezábamos con un desayuno muy rico y casero (no le falta ni un detalle), continúas con todo una serie de rutas y de restaurantes, que Jordi, uno de los anfitriones, se encargaba de asesorate, con la simpatía que le caracteriza. Para acabar el día una cena espectacular de Óscar, el otro anfitrión y gran Chef. Mención especial a Laura. Alegría pura. Gracias familia. Volveremos
IMPRESIONANTE el mejor sitio al que podriamos haber ido, el sitio espectacular, muy tranquilo, es precioso por dentro y por fuera, muy cómodo, el personal super simpático y familiar, la comida es casera y está deliciosa. Ubicación: Está muy centrado en cantabria, y te queda todo cerca. La verdad es que queremos volver con la niña, y estamos convencidos de que volveremos aquí. También aceptan mascotas.
No deis dinero por adelantado cuando tengais un cofre. El mismo te sirve de reserva. Nos paso que mientras verificaba el bono del cofre Jordi el dueño nos pidio un bizum. (dinero) tras verificar que su posada ya no estaba en el listado del cofre y decidimos no ir, porque por telefono nos dio un precio y por escrito otro.y por su puesto decidimos no ir. Pero para que nos devuelva el dinero fue una TORTURA, le llame varias veces no contestaba el telefono, me llegó a decir por whatssap que igual no le habiamos hecho el pago, habiendole enviado un pantallazo en el momento del pago y tambien confirmacion del banco, vamos de verguenza! No es mi culpa si estas en temporada baja.
Totalmente recomendable. La casa, habla por sí sola en las fotos. Coqueta, cercana, limpia, amplia, y las habitaciones genial. La decoración es muy bonita, rústica, pero totalmente equipada. Los dos chicos que la llevan encantadores. No sólo en el trato y en el restaurante, si no es disponibilidad inmediata para ayudarte con cualquier cosa. Muchas gracias.
Fuimos a pasar el puente de octubre y que los niños conocieran Cantabria.
Desde el momento de hacer la reserva ya nos trataron de maravilla. Nos enviaron información de la zona, con lo que la planificación del viaje fue mucho más fácil. Zonas para visitar, restaurantes, La localización es perfecta para moverse por la provincia.
Cuando entras por la puerta te reciben como si fueras uno más de la familia. La posada es preciosa. Muy bien cuidada y con mucho encanto. Las habitaciones acogedoras y la limpieza impecable. Ideal para ir con niños. La localización es perfecta para conocer la provincia.
Los desayunos, buenísimos. Zumo totalmente natural de distintas frutas. Mermeladas variadas caseras, bizcocho también casero, tostadas recién hechas de pan de hogaza (del de verdad, no del precocido que hay ahora en todas partes). Los niños se enamoraron de la quesada.
Sólo cenamos allí una noche por los planes que habíamos hecho, pero todo casero y muy bueno. Merece la pena.
Sólo puedo decir cosas buenas. Ni una sola pega. Antes de irnos, mi hijo mayor nos preguntaba cuándo íbamos a volver, y volveremos seguro.
Espectaculares los dueños; derrochan simpatía y amabilidad. La cocinera magnifica profesional de la cocina y todo un encanto. Nos preparó una cena de campeonato. El trato es totalmente familiar. La posada coqueta por la decoración y muy comoda la estancia en una localización de puro relax.
Fin de semana espectacular en la Posada, hemos pasado tres noches, Oscar y Jordi se han ocupado de que toda nuestra estancia fuera perfecta, junto con Laura, que también les ayuda. La cenas del chef Oscar han sido deliciosas, igual que los desayunos, todo casero y hecho con mucho cariño. La habitacion confortable, espaciosa y con todo lo necesario. Oscar, Jordi y Laura crean una atmósfera muy especial cuando interactuan con los huéspedes contagian el buen rollo a los huéspedes y acaba inundando la Posada… Hemos hecho unas rutas preciosas por Cantabria siguiendo los consejos de Jordi… Volveremos! Gracias a los tres por este desestresante fin de semana!
Un sitio increíble para descontar! La gente muy amable y cariñosa! El lugar transmite una sensación muy agradable, como volver a casa.supongo que es la atención al cliente tan acogedora la culpable.
Nos ayudaron en todo! Incluso nos marcaron en un mapa los puntos mas emblemáticos de Cantabria!
Excelente posada para descansar, acojedoras habitaciones, su ubicación permite planificar visitas a los diferentes pueblos y ciudades, excelente trato personal. Recomendada 100%.
Solamente comentar que sin tener hambre para cenar, decidimos ir para pasar un rato muy agradable en ese ambiente tan familiar y acogedor que crean Jordi y Óscar. Con esto está todo dicho. Volveremos a vernos.
Sin duda un lugar precioso, Jordi, Oscar, Estela y Javi son encantadores te hacen sentirte como en casa. Mi hija es celiaca y se preocuparon de que no la faltara de nada. Las habitaciones muy lindas y con vistas espectaculares. Sin duda repetiremos
El lugar era maravilloso y Oscar y Jordi son encantadores, maravillosos y te facilitan mucho el turismo por la Zona. El sitio está muy bien comunicado. Los desayunos riquísimos y las cenas espectaculares. Repetiremos.
Un sitio encantador, la acojida buenisima gente amable que te hacen sentir como en tu propia casa, entornos maravillosos buenos desayunos y cenas todo exquisito, muy recomendable
Hemos pasado unos días excepcionales, la posada es encantadora y el trato tanto de los nuevos propietarios Jordi y Óscar cómo de los antiguos Estela y Javi excelente, super familiar y acogedor, como en casa.
Trato amable y cercano, lo que uno busca para unos dias de relax. Instalaciones muy buenas, sin distonciones entre gente que va con cofres regalo y los que no
El trato recibido muy bueno, nos han salido a recibir y ayudado con las maletas. La zona y el entorno espectacular y la posada muy bonita, merece la pena pasar unos días en este lugar. La comida todo casero y de la zona, cenamos con la niña y cualquier cosa que necesitamos nos la facilitaron, había más niños asique se lo pasaron fenomenal! Nosotros sin duda, no sabemos cuando pero volveremos!
Posada espectacular donde te cuidan como si estuvieras en casa.las cenas de Estela después de un día de turismo activa te ponen las pilas para el día siguiente!
Desde el minuto uno te sientes como en casa. Sitio acogedor y bien ubicado. Cerca de la montaña, paseos y el mar a un paso. Qué más se puede pedir? Muy recomendable
Nos encantó el trato de Jordi y Oscar, todo el tiempo preocupados porque estuviéramos a gusto y no nos faltará de nada. La habitación amplia y muy limpia. El desayuno muy rico
Es un sitio fantástico para descansar. La posada es muy bonita. Adicionalmente tiene cerca rutas, senderos, playas. Además la atención de Jordi ha sido inmejorable. ¡Muchas gracias!
La cena y desayuno un 10, las habitaciones un 11 y el trato recibido y la atención un 12. Sin duda repetiremos, la mejor casa rural en la que hemos estado. Muchas gracias a los dueños de nuevo desde Segovia
Genial! <br/>Hemos vuelto encantados, nos han tratado como si estuviéramos en casa nuestros perros también y las comidas, cenas y desayunos. RIQUÍSIMOS <br/>Repetiremos seguro
Es una posada espectacular en un entorno precioso, ideal para conocer los alrededores y relajarse. El trato de los dueños de 10, una gente súper agradable. Repetiremos sin duda!