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Muy buen servicio. Gran amabilidad y profesional por parte de la familia, María José madre e hija y marido. Comida casera y de muy buena calidad. Recomendable hacer una parada y pasar a comer. Menús del día increíbles.
Muy buen servicio la comida riquísima , las habitaciones muy limpias y ordenadas los baños muy limpios ,las camas muy cómodas. Y lo mas importante que me trataron de maravilla. Yo al hotel le doy un 10 muy buen servicio
Las sabanas estaban rotas y sucias. El sitio aparentemente limpio. Le haría falta un lavado de cara, profundizar en la limpieza y poner sábanas en mejor estado y sin manchas. Si volvemos por campo de Criptana no dormiremos allí ni por asombro
Sólo estuvimos una noche. Habitación muy limpia, amplia y cómoda. Yo dormí genial pero mi pareja se quejó de la almohada y el colchón. Almohada única y bastante alta. Quizá ya en estos tiempos sea necesario renovar y tener almohadas individuales y de diferentes grosores. Pero es lo único negativo a reseñar, x lo demás genial para una corta estancia.
Recomendable 100%. La habitacion muy limpia y la comida casera! Muy majos y amables! En especial Maria Jose. Encantadora y muy atenta. Es muy trankilo y buena ubicacion. Perfecto para rutas en moto! me dejaron guardar la mia para mas trankilidad! Volvere pronto!
Muy amables simpáticos y sobre todo María José majisima Las habitaciones están muy bien todo muy limpio la habitación con aire acondicionado También quiero decir que comimos allí lo que yo me pedí muy rico lo recomiendo era menú de primero mojete una ensalada fresca muy rico y de segundo cinta de lomo adobado x ellos muy rico
Que gran descubrimiento, situado a 5 minutos del centro y a solo 15 de los molinos, es una parte muy tranquila de poblacion, facil aparcamiento. Las habitaciones muy correctas, pero hay que destacar a los propietarios, una familia que no te deja de dar atenciones, un trato sensacional, te orientan para visitas y excursiones, literalmente el desayuno es a la carta, en muchos aspectos es como estar en casa. El comedor es como un jardin, de verdad que lo recomiendo.
Espectacular sitio. Lo regenta una família muy maja y cercana. La madre hacer unos guisos de 10. Las habitacions super limpias. Genial sitio para dormir y sobretodo para comer. Muy recomandable.
Regentan este hostal, una familia que te hacen sentir como en casa. Se preocupan por ayudarte en lo que puedan, son amables, simpáticos, sociables e innumerables adjetivos que podría decir y todos buenos. La limpieza de diez. Comida casera. Hemos venido encantados. Gracias a “No Tengo Nombre ”, Nicanor, Juanjo y María José.
Buenísima experiencia y perfecto establecimiento. El dueño super simpático al igual que el resto de trabajadores. La comida muy buena y en general muy bien. Volveré seguro
Lugar muy acojedor y ambientado familiarmente manchego, nos atendieron muy bien, muy limpio, el gerente muy amable, nuestro viaje era en moto y al vernos nos dejó meter la moto dentro en un patio recibidor para que estuviera mas resguardada, 100% recomendable
El hostal está muy limpio y es coqueto. La comida es casera y muy rica. El personal muy atento y te acogen con mucho cariño. Gracias a Mari Carmen por esa simpatía que derrocha que te hace sentir en casa. Mis fecilitaciones. Relación calidad precio muy buena. Volvería sin dudarlo.
El hotel está muy bien ubicado, el servicio por parte del personal es excelente y la comida muy buena. En todo momento recibimos un trato excepcional.
Lo único negativo es que fuimos una pareja y nos alojaron en una habitación familiar (separada de la siguiente por una puerta) y no pudimos descansar apenas puesto que se escuchaban todos los ruidos de la habitación de al lado. Quizá en una habitación individual hubiera sido mejor.
Sólo hemos podido estar un día, pero si tenemos que volver a campo de criptana me volvería alojar, el trato ha sido inmejorable, es como estar en familia, la comida buenísima, la habitación muy limpia y siempre muy atentos con nosotros, totalmente recomendable.
Paramos un día (y noche) de camino al Sur: Comida espectacular y casera, habitación muy limpia, desayuno con tosta exquisita…y la Atención del matrimonio inmejorable. Gran recuerdo nos llevamos de Ego’s!
El próximo agosto hará dos años de la estancia. Habitaciones amplias, limpias y cómodas, con gran cuarto de baño completo en la habitación. Los detalles decorativos inundan, sin agobios, el espacio en los pasillos de acceso. El aroma, embriaga, por la delicadeza. La atención agrada, sin agobiar. Un sitio muy apropiado para poder visitar los molinos de viento. Para mí, el mejor amanecer que he visto.
Solo voy a decir, que no cuesta nada ser majos y este matrimonio son increíbles. Atención muy buena, las habitaciones muy limpias y la comida muy buena. De verdad 100% recomendable Gracias por todo
Alojados por una noche durante una ruta en bicicleta. Hotel familiar con muy buen trato por todos ellos, un encanto de pareja, muy próximos y encantadores; los hijos también son muy agradables. Las habitaciones son amplias y el baño era muy grande, sólo a mejorar la TV que es un poco pequeña para la distancia a la que está colgada de la pared, pero nada relevante. Zona de fácil aparcamiento. Pudimos dejar las bicis en la terraza interior. Lo recomiendo sin duda alguna.
En un lugar de la Mancha. Maravillosos días, fantástica familia, hemos pasado una estancia increíble, buena comida, las habitaciones muy limpias y camas muy cómodas. Nos hemos sentido cómo en casa, un lugar al que volveremos seguro nos han quedado muchas cosas por ver. Nos llevamos en nuestro corazón un cachito de Campo de Criptana y la familia del Hostal Ego's, un abrazo a todos María José, su marido y sus hijos encantadores Francisco, Rosa, Javi e Irene? Por cierto ya llevamos nuestros mantecados manchegos!
Rooms very clean in a cozy interior. The menu may be limited but the dishes are fresh and tasty. Perfect red wine. Moderate prices. Very nice, family service made us feel like at friends.
Nos emos sentido como en casa muchas gracias por el trato que nos habéis dado y por lo bien que nos habéis cuidado con esas comidas tan ricas y caseras volveremos pronto familia un abrazo
Lo mejor, la limpieza! Hostal decorado con agrado, muy curioso. Los dueños han sido atentos. Se aparca en la calle pero con facilidad y en la puerta del mismo hostal.
Dueños muy amables y todo muy limpio, ibamos de pasada y no nos queríamos perder los Molinos y visitar alguna bodega, así que nos quedamos una noche, el precio nos pareció genial, lo único que falla es que no tienen carta e improvisan mucho con las comidas y los precios, fue excesivo lo que nos cobraron por una cena improvisada y un desayuno. Con esto no quiero decir que no los visiten, estuvimos genial, pero insistan en ser informados de los precios antes de comer (nosotros preguntamos pero no nos lo dijeron y confiamos), es verdad que hay un menú, pero después no le dan utilidad y te dicen de boca las opciones, en resumen nos gastamos en la cena y el desayuno más del doble de lo que nos costó la estancia. A parte de eso, el sitio muy tranquilo, los dueños muy campechanos, todo muy limpio, pero con ese importante inciso.
El trato de los dueños es maravilloso, la limpieza, las habitaciones las instalaciones todo en general son muy buenas. Te sientes como en tu propia casa.
Hotel acogedor con muy buena comida. La familia dueña es muy atenta, la habitación cómoda y bien equipada y el lugar dentro del pueblo es correcto y muy cómodo para aparcar.
Sol puedo decir que el hostal esta muy bien, habitación muy limpia, y la comida es casera, y el trato del personal es familiar, muy recomendable para pasar unos días, ho unas vuenas vacaciones.
Ha sido una experiencia inolvidable, el sitio muy bonito y el trato de M. Jose madre e hija maravilloso. Me han tratado como en casa. Volveré seguro. Lo recomiendo 100%.
El trato es inmejorable, la comida es casera y está todo buenísimo. Son una familia encantadora que están siempre muy pendientes. Te sientes como en casa. Limpio y confortable. Volveremos seguro.
Hostal muy limpio, buen servicio y amabilidad. Comida casera auténtica. A quince minutos andando a la sierra de los molinos. Desde la puerta se pueden ver al fondo de la calle por encima de las casas. Sin problemas de aparcamiento en la misma calle.
Muchas gracias familia! Hemos estado como en casa. Gracias por vuestra amabilidad, cercanía y buen trato. Más que pensión es un hotel por todos los servicios que ofrecéis, cómo: colchónes y almohadas viscolatex, toallas cubiertas al vacío (muy higiénico respeto al covid) mascarillas ffp2 para cada persona, amenities: gel, champú, peines, vasos. Habitaciones muy conpletas, Baño individual completo en cada habitación. Y sobretodo nos ha gustado mucho la limpieza, el encanto, la calidez y humildad de esta familia. Muchas gracias por todo, familia ego's. Hasta pronto! Un abrazo muy fuerte. Cuidaros mucho. Sois unas personas de las que deberían haber más en la vida!
Todo muy correcto. Ningún problema con nada y muy limpio. Nos atendieron muy bien. La habitación con aire acondicionado y TV, el baño bien de tamaño, las camas cómodas. Un plus es que tienen restaurante con mesas en el interior y también en el exterior, en un patio. Pudimos tomar un café con magdalenas a las siete de la mañana, antes de irnos. No tuvimos tiempo de probar la comida del restaurante. Volvería a elegir este alojamiento.
Nos alojamos 3 dias en el hotel y la estancia fue inmejorable. Las habitaciones son comodas y todo muy limpio, te dejan todo embolsado y con buenas medidas higienicas. El personal es encantador una familia que te trata como uno mas. Volveremos sin dudarlo.
El hotel es bonito, la habitación estaba muy limpia. La comida fue normal, no hay menú solo te dicen lo qué hay disponible. Dejamos el auto sobre la calle sin cobro alguno. Es un poco lejos de los molinos si no tienes auto. Buena relación precio/calidad. María José fue muy atenta explicando cosas de la gastronomía y el pueblo. Pienso que la atención podría mejorar porque al hacer el check in y check out no recibimos el mejor trato. El anfitrión podría ser más cordial y/o amable. Si vas a campo de Criptana visita las musas restaurante.
Lo que más me gustó fue el trato de la señora María José y su familia. Destacar la limpieza en todo el alojamiento. Y un olor en la habitación y restaurante muy agradable y limpio. Y la comida casera manchega. Muchas gracias por sentirme cómo en casa. Un cordial saludo. Volveremos.
Las habitaciones son muy adecuadas, para un buen descanso y tranquilidad, con colchones de visco-látex, adecuados para el confort y el bienestar, y además, he de decir que la limpieza es muy adecuada y excelente. La terraza es muy adecuada para el desayuno, ya que es muy silenciosa y muy tranquila, con una decoración muy refrescante con las plantas que se encuentran en la terraza. La comida es excelente, ya que todo es casero y muy elaborado. Volveré pronto! Muchas gracias por vuestra cordialidad.
Hotel de pueblo con habitaciones pequeñas, barato y sencillo sin más pretensiones ideal si vas a trabajar. En el restaurante comida casera muy buena y muy buen menú. El desayuno igual muy bueno.
Un sitio muy acogedor con una entrada rodeada de naturaleza, te tratan como en casa y reina la tranquilidad, las habitaciones bastante amplias, cuentan con cama doble y baño privado, además de haber una pequeña terraza para pasar la noche.
La dueña nos estuvo esperando hasta que llegamos, pasadas ls 11 de la noche. Aun así nos recibió con una sonrisa y todo amabilidad. No tuvo problema en darnos algo de cena. Una persona encantadora como el establecimiento. La habitación superlimpia, muy agradable aunque corta nuestra estancia. Lo recomiendo al 100%. Gracias por todo!
La estancia ha sido muy agradable. El trato recibido es muy cercano, están muy atentos, muy limpio y la comida excelente, con productos caseros y de calidad. Está catalogado como pensión pero podría estarlo como de hotel, tiene baño privado en la habitación y en una pensión suele ser comunitario. Si vuelvo por la zona repetiría sin duda. 100% recomendable. La relación calidad/precio es muy buena.
Un lugar típico, donde puedes disfrutar de comida casera, muy buena, y tranquilidad. Los dueños son muy agradables y campechanos, como es natural en este pueblo. Muy buen servicio y muy amables en el trato. Y además sirven un menú casero, manchego y barato. En definitiva, tiene todos los ingredientes para visitar y probar sus exquisitos menús. Volveremos, lo recomiendo.
Muy bien trato de los profesionales Se come muy bien comidas caseras se duerme genial y es un sitio muy bonito y tranquilo Es Un sitio familiar se puede ir de negocios vacacional en amigos o sólo
Con respecto al Restaurante Hostal Egos decir que tanto el servicio como la gastronomía han sido excelentes. Teniendo en cuenta que toda la comida es casera, cocinada por los propios propietarios del hostal y con respecto a la limpieza estaba todo impecable. Además su situación te permite disfrutar del entorno manchego así como los Molinos de Viento de Don Quijote. Repetiríamos sin pensarlo.
Hostal 100% Recomendable. En la situación en la que estamos, se agradece ese cuidado y detalles de los propietarios. Una familia muy agradable, hij@s incluidos.
Precio calidad espectacular trato familiar de verdad muy limpio trato trato muy amable y cercano y en cuanto a la comida manchega de verdad puramente casera de verdad todo con entorno muy tranquilo sin ruidos lo recomiendo totalmente