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Estuve en este sitio en su restaurante para comer un domingo. Entre semana tienen menús para comer pero los fines de semana son raciones. La pega es que cerveza solo tienen ámbar. Algunas gambas al ajillo tenían tierrecita al masticarlas. La camarera muy simpática y servicial
Fuy a comer un día con unos familiares, pedimos de primero sopa de cocido con fideos buenísima y de segundo chuletas de cordero a la brasa. La comida bastante buena, pero no le doy 5estrellas porque en todo el salón solo teníamos a 4 señores al lado q estaban borrachos y tardaban mucho en servirnos los platos.
Emplazamiento a 3 min en coche de Las Mesas (y a 20 min aproximadamente de pueblos emblemáticos cómo Belmonte, Mota del Cuervo o El Toboso), muy agradable y tranquilo, donde se puede disfrutar de increíbles noches estrelladas gracias a la no contaminación lumínica de los alrededores ya que La Posada está rodeada de viñas y cereal. Nuestra habitación era sencilla y bonita con unas agradables vistas, una cama de matrimonio y otra individual ambas muy cómodas. Mis hijos y yo hemos dormido estupendamente! Kevin, dueño y gerente, es encantador y muy servicial y mis hijos han simpátizado enseguida con él y sobre todo con Vladimir, su hijo pequeño. Mis peques han disfrutado de bonitas veladas con ellos jugando al billar y a los dardos mientras yo leía y escuchaba música cómodamente. Es un lugar ideal para venir con niños, en pareja o incluso en solitario. Así que no sé cuándo pero estoy segura de que volveremos!