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Después de varios años alojándonos para el puente de diciembre, sin duda seguiremos repitiendo. Trato excelente, habitaciones limpias y cálidas. Precioso lugar decorado con muchoo encanto y el trato con los propietarios Rosa y Javier no pueden ser más amables y cercanos.
Fin de semana en La Casona del Abuelo Parra, lo recomiendo 100%. El estilo de decoración de una casa típica manchega, está cuidado al detalle. Las habitaciones son grandes, acogedoras y limpias. Cada una es diferente a la otra, y todas tienen su encanto particular. Dispone de piscina climatizada, lo que le añade un plus. Y el desayuno tipo buffet libre es muy aceptable. Mencionar por último, la amabilidad de los propietarios
Un lugar muy bonito y acogedor. El ambiente y sus dueños te hacen sentirte como en casa. Decorado con piezas únicas de artesanía. Trato inmejorable, en un lugar tranquilo pero muy cerca del centro
Rosa y Javi siempre que vamos nos atienden estupendamente, están muy atentos, tienen un pisto exquisito típico manchego y suelen tener algún postre casero muy rico.
Nos encanta quedarnos en esta casa. Es la tercera vez que vamos.
Es algo más que una estancia en un hotel, es una experiencia genial y reconfortante, ideal para una escapada de relax.
A parte de una casa preciosa con unas zonas comunes decoradas y equipadas con muy buen gusto, es fantástico poder disfrutar también de su enorme jardín y la piscina.
Y no puedo terminar esta reseña sin destacar el magnífico trato de los propietarios Rosa y Javier.
Un lugar acogedor, que decir del trato amable y cariñoso de Rosa y Javier, unos amigos y el hotel no sólo lo recomiendo es que hay que ir si no es como un pecado. Gracias por el trato y un abrazo desde Mallorca.
La casa es muy grande y muy bonita, con jardín y piscina más grandes de las que aparecen en las fotos y muchos espacios comunes para leer o descansar. Deberían mejorar las duchas ya que están un poco viejas y no sale demasiada agua
Muy buena acogida, buena compañia y buen ambiente. Habitación agradable y espaciosa, piscina fantástica. Rosa y Javier anfitriones atentos y pendientes de nuestras sugerencias como huéspedes. El pueblo muy bonito y su recorrido histórico muy interesante.
He tenido el placer de pasar una semana (incluyendo el fin de año 2021) en un lugar muy especial. "la casona del abuelo Parra". Espectacular! Viajar sola, tiene sus ventajas e inconvenientes. En la casona, me encontré super bien acogida, pero sin agobios. Tienen la propuesta de coliving, fantástico. Las habitaciones son muy cómodas y la casa.una casa rural "fantástica". Yo soy de ciudad, pero reconozco que Villanueva de los Infantes es una población, con todo lo necesario. En la casona encontré lo que significa la hospitalidad i el buen rollo (los vermuts vecinales) Todo esto es gracias a los propietarios y anfitriones Rosa y Javier (mención especial a Coral.su apoyo en la distancia) Gracias por brindarme esa experiencia. He conocido gente maravillosa. Espero regresar.
Es un lugar muy rústico pero a la vez con mucho encanto, acogedor y confortable. Nuestra habitación era muy amplia y la cama muy cómoda. A menos de diez minutos del centro histórico y con aparcamiento en la misma puerta o en las inmediaciones. Hay un salón con una chimenea muy entrañable y el trato y la amabilidad de los dueños es inmejorable.
Caaa rural fantastica. Su decoracion plasma lo que es La Mancha y sus gentes. Javi y Rosa sus propietarios, personas, excelentes, entrañables y humanas
Impresionante, si de verdad te quieres relajar es el sitio ideal. La piscina, de lujo, pero para lujo el poder conocer a sus propietarios Rosa y Javier, son los perfectos anfitriones. Sin duda volveremos a repetir. La casa es una pasada.
Hotel rural excelente. La atención inmejorable. Rosa y Javier, unas personas inolvidables. Atentos, amables y sobre todo muy profesionales. Gran familia. Gracias y hasta pronto.
Hemos pasado un fin de semana magnífico. Rosa ha tenido una atención de diez a pesar de ser un grupo numeroso con lo que todo ello implica.es un hotel rural pero casi parece un museo, por ejemplo la bodega está reconvertida y exponen piezas antiguas de cuando la casa era de labranza.y en la casa por muchos sitios hay planchas antiguas y demás. Hay un salón con una chimenea que para la época viene estupendo. Nosotros además cenamos allí con un menú cerrado muy asequible y muy rico. El desayuno también lo hacen allí, ponen tostadas, magdalenas, crosissant y todo lo necesario para un estupendo desayuno. La habitación súper amplia. El colchón es duro, lo cual agradezco. El tema de la almohada es que yo soy muy delicada, es algo fina para mi gusto pero se duerme bien. Con el calorcito de la calefacción! A destacar que te dejan un par de sobres de toallitas desmaquillantes que a nosotras nos viene tan bien y nunca lo había encontrado en ningún alojamiento. Hemos quedado todos encantados. Calidad precio genial, el pueblo muy bonito y un fin de semana para recordar. Muchas gracias Rosa! Recomiendo!
No nos ha gustado. Unicamente se salva la decoración de las zonas comunes y la zona del desayuno por la chimenea. La habitación bastante deteriorada. Los espejos del armario estaban sucios. El desayuno muy escaso. No nos hemos sentido acogidos.
Lugar tranquilo, muy bonito, acogedor, la atención recibida muy buena, nos aconsejaron un lugar para cenar con mucho acierto, el trato de los dueños fue muy bueno, la recomiendo.volveremos
No solo han mostrado poco interés en que nos alojemos, sino que nos han dicho que solo aceptan perros pequeños a pesar que en las especificaciones del hotel ponen que aceptan perros. Están en su derecho pero creo que deberían especificarlo o directamente no poner la imagen de que aceptan mascotas cuando no es así. Una tomadura de pelo.