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La terraza es agradable, pero la comida fue un auténtico desastre. Ensaladilla, croquetas y setas congeladas. El pulpo estaba durisimo y la ventresca de merluza era un bloque de pescado? Congelado. No volveremos
Trato muy cercano, local muy cómodo y acogedor. Unos pinchos muy ricos algo atípicos por eso me gustan y un ambiente tranquilo. Para mi un 10, es el tipo de bar que me gusta. El camarero es muy amable.
Establecimiento para tomar una copa, comer o cenar. Posibilidad de celebrar eventos privados. Terraza amplia y cubierta refrigerada por ventiladores dotados de vaporización de agua. No hay aparcamiento, por lo que es recomendable aparcar por las calles del pueblo.
Un sitio bueno y barato! Tiene una amplia variedad tanto de menús, puedes elegir entre 5 platos, como en la carta: tostas, carnes, raciones, postres. Comida casera muy rica y los platos son enormes. Si te gusta el cachopo, el que te sirven aquí no solo esta rico sino que es tan grande que vale para tres personas. En verano se está muy a gusto en la terraza con los ventiladores que pulverizan agua. Ademas el servicio muy bueno, siempre atentos.
Es verdad que llegamos tarde pero no tenían ni patatas ni tortilla de patatas. Nos pusieron un pincho que sabía fatal. Parecía como si estuviera malo. El bocadillo de lomo con queso también sabía raro. La hamburguesa estaba bien, claro no es difícil freír una hamburguesa de pollo congelada, pero el huevo estaba crudo. Las patatas fritas estaban bien, también serían congeladas así que no tiene mérito. El bar bastante sucio, al baño ni entré. Lo mismo para una cerveza vale. Pero no para ir a comer.