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Comimos muy bien. Carta variada y productos de calidad. Pulpo con arroz negro, el pulpo bien pero el arroz estaba insípido. El solomillo de ternera buenísimo y jugoso. Paletilla de cordero correcta. Postres muy buenos. El servicio muy atento. Recomendable.
Reservamos para comer. Al presentarnos e identificarnos a una camarera nos pone en una mesa y a los pocos minutos nos dice la misma camarera que nos levantemos que la mesa era para otras personas. Preguntamos como es posible y nos responde de malas maneras. Nos ponen en la barra y allí localizamos a la persona que nos tomo la reserva y nos pide perdón diciendo que la reserva se había duplicado… Al menos esta vez se disculpa de buenas maneras, pero un local en el que se espera (y se paga) por un buen servicio que no sean capaces de gestionar reservas y que tengan algunos empleados tratando de mala manera a los clientes tras cometer semejante fallos no es un local recomendable. No volveremos.
Todo estaba muy rico. Muy buen servicio y atención por el equipo de trabajo, en especial su camarera Judith. Excelente servicio, muy amable, educada y profesional. Gracias.
Uno de los nuevos imprescindibles de la ciudad. La buena cocina de Javi Albuger, un servicio amable y profesional y dos ambientes interiores entre la elegancia y el desenfado, se unen para ofrecer una experiencia de maridaje perfecto. Y además, no duele en exceso al bolsillo.
Restaurante con un salón muy agradable. Comida muy bue y el servicio también; en especial una camarera llamada Judith q nos atendió con profesionalidad, amabilidad y simpatía. Volveremos seguro!
La camarera de la terraza es una maleducada y no parece tener vergüenza alguna por comentarlo todo con su compañera. Después de tomarnos nota ni se preocupa de preguntarnos por los detalles de las carnes, y encima se va a la ventanilla a comentarle a su compañera sobre el "acento tan graciosillo" (por decirlo de forma educada) que tiene mi padre simplemente porque no puede pronunciar bien, delante de todos los clientes que estaban ahí. Encima nos pone un plato incompleto, sin comunicarnos antes que cierto ingrediente se les había acabado y preguntarnos por si queríamos otra cosa, por lo que sin más nos sirve y se va, nos damos cuenta de que no está y se vuelve adentro a preguntar, después de un largo rato, vuelve y nos dice que no les quedaba eso que lo acompañaba, que "ese adorno era un insignificante detallito" (con tono despreocupada y menospreciable) que no aporta nada al plato (nosotros ya cabreados y abochornados después del primer punto se vuelve adentro y le escuchamos otra vez criticandonos) y luego sale diciendo que como compensación nos regalaba el postre. Al mirar la cuenta nos dimos cuenta de que no cumplió con lo que decía y le preguntamos lo sucedido, dice segura de lo que comunica "sí sí os lo han puesto como invitación abajo del total" vimos de nuevo el papelito y ya sin decir mucho le pregunté que dónde, y se va a preguntar adentro sin prisas sin olvidarse de charlar por última vez con la compañera.
Toda una vergüenza de servicio y más aún por la actitud tan inmadura de la chica de la terraza.
No recomendamos a nadie que vaya si lo que quiere es un trato decente.
Llevamos 15 días comiendo en restaurantes de la playa sin que nos cobren el servicio de la terraza, pasamos por Albacete de camino a Madrid y nuestra sorpresa es que nos cobran 5,45 más iva de servicio por el cual no estamos de acuerdo aunque sean las normas de este establecimiento, y menos cuando la camarera de dicha terraza da la espalda a la clientela, actúa de forma pasiva, se demora en traernos el pedido y se preocupa más en hacerse fotos con los futbolistas de la zona que en atender a sus clientes. Una pérdida de tiempo.
Un restaurante excelente, tanto por la elaboración de cada uno de sus platos (especial mención al solomillo de ternera y tirsmisú) como por la profesionalidad y buen trato del personal. Disfrutamos de una comida espectacular en la celebración de bautizo. Sin duda repetiremos cuando volvamos por Albacete.
Espectacular, hoy quería probar sus patatas bravas y no me han defraudado. Ni el plato ni el local ni sus profesionales camareros. Me ha encantado. Local de un Gran nivel gastronomico. Lo recomiendo. Hoy también eran las jornadas de la tapa y su tapa me ha resultado una sorpresa para el paladar.
Hicimos una reserva para dos para comer de vuelta de viaje, y ha sido un acierto. El personal es muy educado y atento, están pendientes de ti en todo momento, te aconsejan sobre cantidades y sobre la comida con bastante acierto. La calidad de la comida es exquisita y el precio es razonable. Sin duda para tenerlo en cuenta.
De vergüenza tener una reserva hecha y llegar allí y decirnos que no hay ninguna reserva hecha a ese nombre. No dieron su brazo a torcer ni pidieron disculpas. En todo momento se defendían diciendo que el error había sido nuestro. Pues que sepáis que la conversación durante la llamada estaba grabada y los que estabais equivocados fuisteis vosotros. Habéis perdido cuatro clientes. Lo de no disculparse es el detalle más feo de todos.
Excelente sitio, la única pega es que si cambian una receta no cambian el nombre del plato, hacían unos baos de costillas muy ricos que ahora resulta son muy picantes, no están malos pero si lo llego a saber habría pedido otra cosa.
Primera vez en Martina y seguro que no la última. Instalaciones muy bonitas, tanto la zona de cafetería como en el salón, este último con decoración tropical. La carta es super extensa y ciertamente, todo lo que pedimos tenía un sabor espectacular. Sus famosas bravas (que están fuera de carta) son un espectáculo para el paladar. El lomo de orza es el mejor que he comido nunca, simplemente brutal. La tortita de camarones más normal pero casera. Merece la pena. No dejes de probar la alcachofa confitada. No me gustan practicamente y con esta forma se hacerlas me comería una detrás de otra. Espectácular. Pero sin duda el plato más sorprendente para mi gusto, de la gama oriental de la carta, las Shitakes a la llama con lascas de vaca y yogurt de cilantro. Eso es. ¡el cielo! De postres, probamos los suspiros de Ayna. Muy ricos. Y que mejor forma de acabar una cena en Albacete que con un par de mini miguelitos. De precio, medio-alto pero merece muy mucho la pena. La atención, por cierto, muy buena. Imprescindible reservar.
Todo muy rico y buen servicio. Tienen cartas diferentes en la parte del salón y en la parte de abajo. Y de precio son alrededor de 30€ por persona. Yo recomiendo las bravas, las gyozas y las setas shitake.
Pedimos gyozas de carne, nos aparecieron caras, 4 por 6,50. Luego bocatin de salmón y pastranni, que estaban mejor cantidad precio, por 3,50. De postre tarta de calabaza con helado de mango que también nos pareció escaso. Todo estaba bueno pero nos pareció poca cantidad por el precio que tiene. Es un tipo de restaurante que fusiona sabores.
Sitio exquisito para venir a comer, muy buen trato, los mejor los Camarer@s, súper atentos y serviciales…. Casi me había terminado la copa de vino, y ya me estaba preguntando si me apetecía otra. Por esto y por la comida tan buena, vuelvo siempre. Para mí, es un Sí!
Inmerso en la ruta de la tapa descubro MARTINA. Sí, con mayúsculas. Magnífica decoración, magnífica cocina, el servicio inmejorable. Y la tapa de éste año, "frigolin", por ahora es mi favorita. Minimalista, quizá, combinación de sabores y texturas sorprendente, y la presentación un claro ejemplo de creatividad. Tengo que volver y descubrir más de éste restaurante, creo que aún me puede sorprender más.
Habíamos estado en este lugar para algún aperitivo de caña y algo. Hoy ha sido la primera vez que vamos a comer. Hemos comenzado con una ensalada de brotes, perdiz y orejones. Muy abundante, bien montada, con un aliño justo y acertado. A continuación, una croqueta de langostino y curry, una alcachofa confitada excelente y una tortillita de camarones. Todo muy bueno. Como platos principales: 1. Bacalao a la roteña, 2. Paletilla de cordero lechal, y 3. Solomillo de ternera con mantequilla de anchoa y patatas (novedoso y fantástico). Los 3 platos abundantes, con cocina de mucho nivel y materia prima destacada. De postre, para compartir, un tiramisú con helado de café irlandés muy rico. Todo regado con cañas de cerveza, agua y una copa de vino tinto 'Vínculo' El servicio, 10/10: muy atento, profesional y discreto. Precio: 35€/persona Está muy cerca de las 5*, y no se las doy exclusivamente porque voy en silla de ruedas y las mesas son incómodas para mí. Por todo lo demás las merece. Quizás nuestra mejor comida en Albacete en mucho tiempo. Altamente recomendable.
Buen restaurante y buena presentación de los platos. Además, los platos no son pequeños y no te quedas con hambre Es un sitio que seguro sabes que vas a comer bien. Muy recomendable
Genial la comida, amplia carta de vinos y buenísima atención, me ha encantado. La relación calidad y precio muy bien. Seguiremos degustando el 2° premio nacional a las bravas
De los mejores sitios que he estado en mucho tiempo. Veníamos de viaje y buscando sitio para comer en Albacete encontramos éste y acertamos. El personal muy atento, muy amable, la comida espectacular, el salón del restaurante muy grande y muy separadas las mesas. Cuidan al detalle todas las medidas por el covid. Todo lo que pedimos está muy bueno, jamón, paté, oreja, lomo de orza y tortilla de setas. El precio acorde con el producto y servicio. Un 10! Espero volver algún día.
Situado frente al jardín principal de la ciudad. Por su tamaño, muy limpio y bien atendido no puede ofrecer más, pero está bien condimentado y apetitoso, aunque hay que darse cuenta que es comida y lugar de paso, no es ningún restaurante.
Muy buen restaurante, donde cuidan hasta el más mínimo detalle. Exquisita cocina, de cuya carta destaca el espectacular rodaballo y, como postre, el delicioso "suspiro de Ayna". Muy recomendable.
Ambiente tranquilo y decorado con gusto. Muy buena calidad tanto en el producto y la preparación de platos como en el servicio. Nos aconsejaron muy bien sobre las cantidades que ibamos a pedir para no desperdiciar comida y tener que pagar por algo que no nos comeríamos. También me gustó las medidas por el covid tanto en limpieza como distancia entre las mesas. En definitiva un sitio recomendable para disfrutar de una buena comida o como en nuestro caso de una magnifica cena.
Un sitio muy bonito y en mi buena ubicación. Comimos en el salón de dentro. La comida de 10, muy rápidos y muy simpáticos los dos camareros. Salimos a 50€ los dos, vale lo que se paga, todo riquísimo.
El local ha perdido todo el encanto que tenia su antecesor, la taberna, que también perdio parte del encanto en un desafortunado lavado de cara en sus ornacinas de obra. Además, a las magdalenas, les llaman muffin, que disparate. En fin, el progreso.
Excelente lugar, con platos originales y el sitio acogedor. El personal muy amable y nos recomendó algunos platos para probar y la cantidad. Lo único malo es que no reservan.
Siempre me ha gustado ir a Martina, la carta de tapas es estupenda y súper variada, la calidad de la comida es muy buena. La decoración del bar y comedor son muy acogedoras y bonitas, sin mencionar las vistas de la terraza a toda la avenida España y parque Abelardo. Me gusta mucho.
Cocina que pretende ser de vanguardia, creativa y moderna, pero que se queda en un quiero y no puedo. Camareros atentos y amables. Entorno bonito y acogedor.
Servicio de atención al cliente 100x100 Marisco de alta calidad. Plato favorito son las ostras, y jamón ibérico. Prevención al covid alto. Muy recomendable. VOLVEREMOS
Sin lugar a dudas de los mejores Restaurantes de Albacete. Cocina innovadora y local con 2 espacios en los que no disponen de la misma carta. Personal muy profesional. Precio medio, en torno a 25 o 30 euros por persona, con botella de vino. Sin lugar a dudas lo recomendaria.
Buenas noches mi experiencia en este restaurant fue horrible.pedí un solomillo con patatas a la martina, el plato con muy buena presentación, lo extraño fue que cocinaron el solomillo en menos de 5 minutos, por otro lado la carne no es fresca es congelada y al parecer cocinaron mi plato conjunto con un plato que llevaba marisco y la carne sabia a pescado, por otro lado mi mujer pidió pulpo con arroz negro, que el arroz al parecer lo cocinaron hace 3 días incomible. La tortilla de gamba creo que la cocinaron hace una semana por que estaba dura, no tenia un aspecto saludable.experiencia fatal.y el camarero que nos atendió la atención al cliente la tiene metida no se donde.mi visita fue el 09/09/2020, pueden preguntarle al camarero que le regale 50 euros para que mejorara en su atención al cliente. Pésima experiencia.muy caro para la calidad de comida que sirven.no me importa pagar mucho mas siempre y cuando la comida sea fresca y con buen sabor creo que se han fijado mas en lo lindo de colocar la comida en el plato y se han olvidado de la calidad o frescura y sabor de la misma.no lo recomiendo y espero que esta critica llegue al propietario y tome cartas en el asunto.un solomillo es imposible que se cocine en menos de 3 minutos.
La comida buenísima. No es un sitio barato, pero pagas la calidad de la comida, la decoración, el servicio.son alicientes para ir. Cenamos en pareja y fue fantástico. En nuestro caso comimos croquetas de gambas y curry, tataki de atún (buenísimo), pulpo (muy rico, y la salsa romesku estaba deliciosa), y pluma ibérica. De postre tarta de queso, (que a mí me encantó porque visualmente era muy simple pero tenía un sabor increíblemente bueno, y casi que lo prefiero a 1000 adornos, para tapar el sabor). Fueron sobre 70 euros. El camarero que nos atendió debo decir que era muy agradable y daba gusto.
Decepción absoluta! El tataki de atún venía sobre una sopa de soja lo cual lo dejaba súper salado además que venía pasado el punto del atún. El foie con el herlado de té matcha una combinación nefasta aparte que la cantidad de foie era ridícula y venía congelado, los panes de sabores del montón. Por ulimo los huevos camperos con panceta un desastre, sin yema (increíble) y las patatas zapateras y arenosas. De cena especial paso a decepcion absoluta. Una lástima.
Buenas noches, tomamos un pincho de tortilla que no se lo comerían ni las gallinas, era arenosa, seca, sosa, no sabia a nada, lo bueno que con los cacahuetes pudimos pasarla para adentro, buen servicio y muy limpio todo, y para lo que es la tortilla, barato no es, no la quiero ni gratis.
Excelente cocina, y excelente servicio, Sebastián nuestro camarero, muy atento, amable, simpático y muy profesional. Os recomiendo las cocochas, la tortilla de camarón y el tabo de toro. Recomendable 100%. Nosotros volveremos seguro.gracias.
El camarero q nos atendió Manu es impresentable, parecía q venía de fiesta de toda la noche en la feria, sin ganas de trabajar y quedándose con la gente, este chico no corresponde al estilo de los camareros q siempre ha tenido Martina, q son un encanto.
Un sitio genial, con un servicio a la altura, la comida esta muy Rica y la presentación es muy top, os dejo la foto del postre que nos a parecido único, el pastel de calabaza, que manjar!
No lo entiendo, reformado, buena música, ambiente interesante, buen café. Son las 8: 15, te pido un pincho de tortilla y me sirves una de ayer. ¿por qué? Tirarla por favor. Se falla en lo más sencillo. Lástima.