Mi Pequeño Cid

Un lugar muy bonito, pero el dueño no hace ni caso, no te atienden fuera, y 40 min de reloj para que te traigan un trozo pan.
Ha tenido que ir mi amiga para que nos hicieran algo de caso porque no había servicio y ya tenido que hacer de camarera.
No lo recomiendo

Una terraza grande y amplia. Una carta variada y a muy buen precio y comida con productos de calidad. Además el servicio muy atento y pendiente de las necesidades alimentarias de cada cliente.

En Mora, el mejor lugar para tomar algo, comer o cenar. Buen ambiente. Buen género, perfectamente elaborado y, además, con los pluses de su equipo humano, amabilidad, atención, rapidez y buen servicio. Mención especial para Nuria, que con su constante simpatía, sonrisa, buen trato y trabajo, hizo de nuestra velada un momento fabuloso. Muchas gracias. Volveremos a vernos.

Buen ambiente, bar y terraza tranquila, son tod@s muy amables. La comida muy rica y el desayuno genial!

Estimado equipo del Bar Mi Pequeño Cid,

Me dirijo a ustedes para expresar mi más sincero agradecimiento por el servicio excepcional que brindan. Durante mi visita reciente, quedé impresionado con su gastronomía, que es de primera categoría y adecuada para todos los gustos. Los precios son sumamente asequibles, lo que lo convierte en un gran valor. ¡Realmente aprecio su atención personalizada y disposición para cumplir con solicitudes especiales!

Además, sus instalaciones son de primera calidad. Desde la decoración hasta la limpieza, todo parece estar en su lugar. Me alegré de ver que también ofrecen servicios adicionales que hacen que mi experiencia sea aún más agradable. En general, mi experiencia en el Bar Mi Pequeño Cid fue excelente y espero volver pronto.

Gracias a su equipo por hacer de mi visita una experiencia memorable. ¡Definitivamente recomendaré su bar a mis amigos y familiares!

¡Mantengan el buen trabajo!

Atentamente,
Francisco.

Fui con unos amigos que son de allí por qué dijeron que estaba bien pero después de esta vez hemos concluido que no vamos a volver. Al parecer han cambiado la carta, hay menos variedad y es todo más caro.
Una ración de morunos de pollo (9€) que resultaron ser unos 10 cachitos de pollo contados en una cazuelita del tamaño de un puño, el pollo no estaba seco pero de sabor no era nada espectacular, no tenía mucho sabor.
Pedimos también 3 bocapizzas de (3.70€/ud) de kebab, barbacoa y atún. El de atún lo trajeron de jamón y puesto que tardaron bastante en ponerlos no lo cambiamos, pero vamos que es un cacho de pan bastante pequeño con una cucharadita de tomate frito que ni si quiera está esparcido así que la mayoría del pan está seco, un pelín de queso y media loncha de jamón de York repartida por el pan, bastante lamentable. Los de kebab y barbacoa tenían algo más de sustancia pero igualmente no merece la pena, están mejor los del puesto de la feria.

Como ya he dicho, para lo que pedimos y como lo trajeron tardaron bastante en poner la comida, la camarera tampoco hacia mucho caso y el personal no era especialmente amable.
Dentro del local no se puede fumar y a pesar de que hay una terraza la gente se pone en la puerta a fumar, por lo que al pasar te tienes que tragar el humo y toda la entrada huele a tabaco lo cual no es muy agradable.

Muy bueno en la carta el venao, muy limpio y te atienden bien, no te tienes que levantar a pedir a la barra, luego cuando pagas te Dan Tíket especificado de cada cosa consumida

Impresentable, sin vergüenza y con cero "vista" comercial, así es el dueño del local que en función si eres cliente habitual o no te atiende, hasta el punto de no darnos de comer porque según él "a los que no vienen habitualmente, no les doy de comer porque no me da la gana". Increíble pero cierto.

Hemos estado en este local y la verdad que es penoso, los dueños mejor que se dediquen a otra cosa, ya que el trato con el cliente es muy lamentable.
Tardaron más de una hora en sacar la cena y mi hijo pequeño que fue hablar con el hijo del jefe para ver cuando iban a sacar la cena le dio un empujón solo porque había puesto un pie detrás de la barra cuando hablaba con el, unos amigos y yo se lo reprochemos pero esta persona no tiene educación por ningún sitio, habiendo más locales en mora a este ya no le dejo mi dinero.

El trato con el dueño en concreto con el hijo del jefe fue lamentable, con muy malos modos, se le pregunta en varias ocasiones y con mala cara y no contesta y ni caso, uno de los niño de un amigo (9 años) entro ligeramente en la barra, y sin mediar palabra le dio un empujón sacándole de la barra.
Por lo que inmediatamente se le recriminó, contestando de manera déspota y con desprecio. Que lamentablemente la educación de esta persona es pésima, asi que la última vez que vamos a este bar. Que en otras ocasiones hemos estado y lo único que hemos salido es con un olor a fritanga impresionante, pero es la gota que colma el vaso.

Nada recomendable para ir con niños, el trato a mi hijo por parte del camarero dejó mucho que desear, está claro que los niños no son de su agrado, aunque la educación y la amabilidad del camarero brillaron por su ausencia también con los adultos.
Estuvimos esperando la cena una hora. Lo único que merece la pena es la camarera, correcta y agradable.

Camarero de barra desagradable para estar cara al público tienes que saber estar y lo digo por experiencia fe muchos años

Si venis con niños os aconsejo no acudir a este local ya que al jefe le molesta la presencia de los niños por el bar y hay comentario que son desagradables

El jefe del local muy borde y antipático, tanto con los clientes como con la chica de barra.
La comida muy buena.

Es un lugar muy agradable fondo tomar un café o una tapa lejos del centro. Para los niños fenomenal pues tiene muchos juegos donde divertirse vigilados por sus padres

Cafetería bocateria con un trato exquisito. Mucha limpieza y agrado. Sitio ideal para familias, por su parque de bolas, para gente jóven y cualquier tipo de personas.

Que agradable lugar, la comida fresca exquisita. Buen lugar para los niños, una distracción total.
Pero lo mejor de todo es la atención tan agradable, siempre termino contenta al ir.

Buen sitio para ir con los niños, trato familiar muy bueno y hamburguesas muy ricas en especial la de ciervo.

Ideal para ir con niños. Mientras tomas algo tranquilamente los niños disfrutan del parque de bolas.

Lugar agradable, buena relación calidad precio, buen trato y sitio especial para ir con niños y que se entretengan y tu mientras disfrutes de la compañía, de una hamburguesa, de ungin tonic, o lo que quieras y además patio con mesas y buena musica

Un sitio muy bueno para tomarte algo su terraza está muy bien muy agradable, la comida buena calidad, y para niños ideal con parque infantil.

Ideal para pasar un rato con niños con su parque de diversión de bolas, castillo hinchable, toboganes, etc

Es un sitio muy acogedor. Zona infantil preciosa donde los niños pasan un buen rato y están bien controlados. Tiene La terraza estilo vintage muy chula, por no hablar del salón, súper grande, limpio y muy aseado todo. El trato al cliente no podria ser mejor! Buena Calidad y rapidez en servir los platos.
Repetiremos en cuanto volvamos por la zona!

Quedamos supercontentos, el local muy acogedor, la terraza decorada con muy buen gusto, la comida excelente, el dueño, Carlos, encantador y un trato familiar!
El espacio de bolas, para los pequeños, espacioso.
Cuando volvamos a visitar esta zona, no dudaremos en visitar otra vez este lugar.

El dueño que es el camarero a parte de ser antipático se agobia en cuanto tiene dos mesas no lo recomendaría nunca

Pésima experiencia. 6 personas, 2 horas esperando la comanda y mesas atendidas que habían entrado después que nosotros.

Una comida informal pero de mucha calidad. Sus hamburguesas de venado o de buey, pulgas sandwiches etc son de chapeau. Local interior muy ruidoso por los juegos de niños y terraza cubierta de parras deliciosa.
Muy buenos precios

Hasta hoy, las hamburguesa más ricas que he encontrado en Castilla-La Mancha.

Buen precio, sitio espacioso, refrescos grandes. Y cuando te las ponen en "pan pan" (que es cuando Carlos tiene el horno encendido), ya te mueres del gusto!).

Si no lo has probado aún, no sabes lo que te pierdes!