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Hemos comido genial, carta espectacular, producto de primera y presentación que entra por los ojos. Pero si duda lo mejor ha sido el personal (y ya es decir porque la comida es excelente y los vinos más de lo mismo). Nos atendieron Chule y Javi, grandes profesionales y con amplio conocimiento de la carta tanto de comida como de vinos. Volveremos sin lugar a dudas.
Comida muy buena y servicio inmejorable, los dos chicos de la planta de arriba (me dijeron el nombre, no recuerdo bien creo que uno se llamaba javier) muy profesionales y muy simpáticos. Pedimos el menú degustación y calidad y cantidad todo muy correcto.
El comienzo fue un P.desastre.nos perdimos.llamamos para avisar.no lo cogían.llegamos cono 45 mtos tarde.todo lleno 15.40 de la tarde.se lo explicamos a la gerente.nuestras caras era un poema.con dos adolescentes hambrientos.se vacío una mesa en la calle-terraza.muy bien porque hay unas vistas increíbles de Cuenca. La comida estupenda toda, nos encantó, el servicio inmejorable, se acercaron a preguntar que tal iba todo, después del susto.la gerente encantadora, volveremos seguro cuando vayamos a Cuenca, imprescindible reservar y si no eres de allí ir con antelación
Nos ha encantado! Hemos pedido el menú degustación y no sé qué plato me ha gustado más. Todo estaba increíble, la atención espectacular y la zona inmejorable! Lo recomiendo 100%
Repetimos porque nos encantó la primera vez que fuimos. Comida de calidad. Nos atendieron muy bien. Asesoramiento sobre la comida un diez. Comodidad del local un diez. Entorno un diez. Si vuelvo a Cuenca, ojalá este sitio siga atendido con tanto cariño. Recomiendo una especie de empanadilla rellena de carne. Expectaculares.
Lugar muy tranquilo para hacer una pausa ya sea durante un viaje o en tu día a día, un trato muy agradable y las vistas inmejorables, precios acorde al lugar
Estuve con mi pareja ayer por la noche. La mujer que nos atendió es un auténtico sol, así como los camareros que fueron sacando los platos. Las vistas desde el restaurante son increíbles. La carta muy original y con los alérgenos muy bien indicados, un plus! Sin duda volveremos… salimos muy contentos
Muy buena noche. El restaurante muy agradable. La comida exquisita. Probamos la comida típica que caracteriza la comarca pero con un twist que lo diferencia.
Me gustaría destacar en especial el servicio de Jesús. Nos ayudó mucho con sus recomendaciones sobre el menú. Fue muy atento y agradable. Gracias Jesús!
Fuimos recomendados por unos amigos de Cuenca y no pudo resultar mejor. Un restaurante con un ambiente muy cuidado y una carta muy bien ajustada, con variedad, y una calidad muy buena. El servicio es de lo mejor, te hacen sentir mejor que en casa, con un trato profesional exquisito. La jefa de sala, nos acogió estupendamente y Jesús, nuestro camarero, nos proporcionó sugerencias muy acertadas y estuvo pendiente de todo durante toda la comida (tenemos un hijo alérgico a frutos secos y su atención estuvo muy por encima de la media en este aspecto). La relación calidad/precio fue muy buena. Comida de dos adultos y tres niños (buenos comedores), con vinos y cafés, por 90€. Lo recomiendo para todos aquellos que visiten Cuenca, ya que ha superado con mucho las otras experiencias que tuvimos en la ciudad; las cuales, sin ser malas, quedaron a años luz
El menú degustación es una maravilla, cada plato equilibrado y con unos sabores magníficos, gracias por este momento y gracias al camarero venezolano que nos atendió estupendamente.
Un lugar estupendo con un equipo profesional. Nos atendieron Puri y Mario, excepcionales. Un trato inigualable. La comida exquisita! Volveré sin lugar a dudas
Hemos subido a comer a las 15,15h y nos han tratado como en casa! Platos riquísimos y nos gustaría destacar el trato y atención de Alfredo, maravilloso! Muy contentas, lo recomendaremos y volveremos!
Gracias por un servicio tan atento y carismático, Alfredo un gusto
Entré porque me llamó la atención el interior del local pero no fue una buena decisión. Comenzando por la mesa que nos pusieron que fue a la entrada (habiendo otras en el interior) y recibíamos la corriente del aire cuando se abría y los camareros pasaban por detrás topando mucho la silla. La comida que fueron unas croquetas, patatas bravas y nuggets (para el niño) deja mucho que desear. Relación calidad-precio muy mala. No volveremos.
Hemos probado tanto desayunos como comidas, todo lo que hemos probado estaba buenísimo, el trato y el servicio una maravilla. Fuimos en enero y tienen terraza con estufas en la que pudimos estar con nuestro perrito. Muy recomendable.
El lugar me ha gustado, dentro del restaurante no había sitio y hemos estado en la terraza de fuera que está aclimatada y acristalada y al solecito se está genial, los camareros súper majos y rapidez en el servicio, y todo esto con vistas al casco histórico de cuenca. La comida genial todo súper bueno, comimos para dos personas para compartir croquetas (suuuuper buenas) y torreznos (riquísimos) y luego pedimos costillas de jabalí acompañadas de unas tortitas de maiz con chumichurri salsa de yogurt y encurtidos y lomo de vaca madurado (exquisito) y de postre como a nosotros nos gusta mucho la tarta de queso la pedimos y súper blandita y cremosa (es de queso fuerte). Por qué no hay más estrellas si no más puntuación le daba. Y de beber agua y cocacola
No quiero mencionar los horarios que en general en Cuenca (Por no decir España) no sirven comida en una gran parte del día. La atención fue muy regular, a pesar de que los meseros eran amables nunca se esforzaron por de verdad atender, sino de tomar el pedido muy a la carrera. La comida fue buena, se sentía fresca, buena porción. Creo que si no hay otro sitio esta es una buena opción. Vayan tarde, abren cocina a las 8: 00pm.
Cómo restaurante será lo que sea, pero a los vecinos con el ruido de su chimenea nos tiene agotados, pedimos solución y todo son largas. Una vergüenza!
Ayer estuvimos ahí mis amigos y yo, y nos fumamos la mejores cachimbas de cuenca. A parte de ser un sitio súper bonito y la comida espectacular. El trato del personal muy bueno pero sobre todo del chico que nos hizo las cachimbas, se nota que tenía experiencia y conocimiento sobre ello. Sin duda volveremos!
Restaurante en el casco antiguo, lo han remodelado y ha quedado muy bien, tienen terraza exterior e interior con una decoración moderna. La atención ha sido buena. La comida ha estado bien, destacaría todos lo entrantes que pedimos, croquetas de vaca madurada (muy buenas) los dumplings de morteruelo y los puerros asados además de la tarta de queso que tiene buen sabor a queso manchego. Con respecto a la parrillada nos pareció que no fue buena elección, era pequeña y traía mucho hueso y grasa. De precio ha estado bien.
Cuidado con la cuenta, fui con mi familia a tomar unos cafés y primero nos trajeron mal la cuenta, cuando se lo decimos al camarero, nos trae una cuenta correcta, pero a la hora de traernos el cambio nos dan otra nota con un café más, nos hemos dado cuenta al volver a casa, una experiencia bastante mala. El servicio tampoco era el mejor hay muchos sitios mejores
Un lugar al que sin duda volvería! La atencion fue increíble, Alfredo nos atendió de una manera INCREÍBLE. Es un lugar que te hace sentir en casa. Las costillas de jabalí son una locura, al igual que casi todas las entradas. Tienen un menú de desgustacion de 30€ por persona y es BRUTAL. La carne también es deliciosa. 1000% recomendado️