Restaurante LA VIÑA

Un 10 en Todo, amabilidad, servicio y comida. Las croquetas caseras, la oreja espectacular y el cocido todos los jueves pudiendo repetir riquísimo. Hemos repetido 2 veces y si volvemos repetiremos!

Es un restaurante para no ir
El servicio pésimo la comida no lo sé por qué me tuve que marchar después de estar esperando el 1º plato más de 35 minutos
Yo no vuelvo

Íbamos de paso por esta ciudad,unos autóctonos que estaban en la esquina de esa calle,nos lo recomendaron,era la hora del desayuno, hacia frío y pasamos,Nos atendieron muy amables,y Angel tuvo lo que para mí fue un detallado,preocuparse primero de servir a los niños sus desayunos,y luego seguidamente a los mayores,
Luego muy amable me diólas indicaciones oportunas para hacer un tour por la ciudad!
Gracias por todo! Sitios así Dan gusto a día de hoy!
Ahh y todo exquisito.

La comida fría no estaba mala, los camareros la cocina discutiendo a gritos con insultos. Nos amargaron el día

Una atención exquisita y comida casera y muy buena. Aún sin reserva y estando a tope, nos dieron una atención de 10, haciendo todo lo posible por comer. Un plato salió poco hecho y nos trajeron uno nuevo entero y la atención de los camaeros impresionante, amables, cercanos, y todo rápido e impecable. Repetiría seguro!

Fatal el sitio, teníamos reserva a las 14;30, nos sirvieron la bebida y a las 15: 00 nos fuimos porque no nos habían traído la comida. Un desastre

Se ponen 5 estrellas por la atención, todos los camareros y Angel especialmente, fuimos a pasar el finde y paseando encontramos esta calle llena de mesones, un cervezas y la actitud nos convenció. Menú 17 euros un sábado, comida bien, local bien, buen pincho y la atención especial. Gracias.

En nuestro visita a Cuenca hemos estado cenando y desayunando en el Restaurante la Viña y he de decir que hemos quedado encantados tanto de la comida como de la relación calidad precio y mucho más del personal que allí trabaja. Atentos es poco decir. Sin duda volveremos. Recomendable 100%. Los camareros son un crack. Espero que se les remunere como merecen

La paella Valenciana deja mucho que desear.estaba pasada y untada en tomate. El segundo plato que nos pusieron bastante bien

Todo buenísimo! Recomendación? Huevos rotos con salmón, una combinación curiosa y que nos encantó!

Nos recomendaron esa calle para ir a tapear y este restaurante es el que mejor ambiente tenía. Estaban hasta arriba y aún así nos colocaron una mesa, los camareros eran agradables y la comida estaba bastante buena. Eramos 2 y pedimos una ración de chopitos, una de patatas mixtas y una tosta de solomillo y acabamos bastante llenos. La única queja es que no tenían postres para pedir fuera de menú.

Éramos un grupo grande que buscaba un sitio para cenar, y aquí fueron muy amables al prepararnos una mesa corrida para todos, más una suplementaria para un grupo de niños.
La atención fue buena, la comida estaba bien y no tardaban en servirla. Tuvieron el detalle de ir trayendo primero a los niños.
El precio, quizás un poco alto para algunos platos pero, la verdad, al ser un grupo tan grande perdí un poco la referencia de precios por plato.

Lugar normalmente muy concurrido con variedad aceptable de platos para pedir.
La atención de los camareros es muy buena y son muy simpáticos, aunque creo que necesitan más personal porque hay muchas mesas.

Hemos pedido menú, que al ser sábado costaba 17€ (muy caro para la calidad que ofrecen). Yo he pedido moje, carrillera y tiramisú. El moje bueno, sin más, muy normal y nada destacable. La carrillera estaba un poco sosa, le faltaba sabor al igual que a las patatas que le acompañan, y el tiramisú lo peor, es un trozo de bizcocho con una fina capa que le da algo de sabor.

La verdad no creo que vuelva, la comida no es para repetir. Por cierto, el baño muy sucio, por poco me quedo pegado en el suelo pegajoso.

Comida casera muy buena, buena calidad-precio. Los camareros muy simpáticos y serviciales. El local muy limpio y agradable

Menú buen precio, buenas cantidades y buen ambiente. El camarero Ángel un jefe, muy buena atención, buenas recomendaciones y muy simpático.
Sin duda volveremos, que hambre no hemos pasado.

Fuimos a comer un grupo numeroso, sin reserva. Comida muy buena y raciones abundantes. Lo mejor, la atención del camarero que nos atendió.

Cenamos los dos días que estuvimos en Cuenca, raciones muy generosas y toda lo que pedimos muy bueno.
Trato muy bueno de camareros, servicio muy rápido y eso que había mucha gente el Sábado. Si volvemos repetiremos.

Everything went wrong. The service is very bad, they are rude and we waited more than an hour for some fried potatoes that then brought wrong and frozen ones. Worst experience ever

Local bastante ruidoso (demasiadas mesas juntas) de raciones. Buenas cantidades y precios, sobre todo la fritura. Las patatas mixtas muy del montón (salsas aparte?) Y hamburguesa la Viña con mucha carne y poca lechuga, aguacate y todas esas cosas que tenía en la carta. Los camareros siempre con una sonrisa lo que se agradece

Producto de calidad (muchas de ellos caseros) y una atención genial por parte de los empleados a la hora de recomendarnos

No es barato.
Pedimos varios menús y platos de la carta.
Casi todo frío y/o pasado.

Sitio céntrico, con tapas. El comedor es amplio y las raciones generosas. El trato muy agradable. Por poner un pero, el precio de una cerveza 3'20€, o un refresco, 2'80€ me pareció excesivo. Aunque lo compensan con el tamaño de las tostas y las ensaladas.

Pongo una estrella porque no se pueden poner 0. Estábamos tomando una caña y un camarero ha enloquecido, perdiendo las formas de manera clamorosa. No sé cómo serán las tapas porque sospechosamente tampoco nos pusieron. Al final casi han protestado porque esperabamos para pagar y 'ocupábamos espacio'. La próxima vez habra que pedir caviar para la satisfacción del camarero de pelo blanco.

Trato exquisito. Muy buena oferta calidad/precio. Menús muy variados y abundantes. Yo he vuelto, volveré y lo recomiendo.

Estaba buscando un sitio para comer morteruelo y probé en este restaurante. La calidad del plato me pareció muy buena, con una mezcla de sabores y texturas que lo hacen verdaderamente único.

También pedimos otras raciones y una tosta de salmon.
Dichos platos me parecieron bastante normalitos, además de tener un precio un poco elevado, por lo que al final la visita a este restaurante puede resultar en una experiencia costosa.

Pudimos cenar 5 incluso sin reserva, los platos estaban ricos y buen tamaño.
Lo peor era un poco de descontrol en las comandas, en varias ocasiones nos traían platos que no eran para nosotros

Buen bar para tapear y buenos precios, variedad de bastantes tapas frías y calientes.servicio bueno y atentos

Sitio regulero y con personal muy maleducado. Básicamente nos echaron del sitio de muy malas formas.

Evitar a toda costa, intentan engañarte en todo momento. Sirven platos sin los ingredientes que se indican en la carta, no te avisan en ningún momento, y si te das cuenta y lo dices el camarero te vacila y no ofrece ninguna solución. Ni se te ocurra pedir algún plato con patatas, te van a poner las que sobraron del otro día.

PÉSIMO servicio y atención de los camareros. Muy mala atención, pasaban de los clientes, nada profesionales, nos dijeron que nos guardaban una mesa y nos tuvieron 1h esperando hasta que nos cansamos y nos fuimos, obviamente a las 16: 40 de la tarde y ya sin poder en comer en ningún sitio. Aseguro que no volveré NUNCA a a este sitio.

Hemos estado por el desayuno y por la comida! El personal muy amable y atentos y la comida muy buena! Además el desayuno exquisito, con muchas opiniones! Volveremos seguro!

Después de un fin de semana en el que no tuvimos mucha suerte con la elección de los sitios para comer por fin entramos aquí y comimos decentemente. Gran variedad de platos y tienes que pedir con moderación porque estos son abundantes. Respecto al servicio muy atentos y amables.

Después de un largo viaje, por fin llegamos a Cuenca y nos fuimos a celebrarlo, pero tomamos la nefasta decisión de ir a cenar a la Viña. La relación calidad precio no puede ser peor, las raciones son excusas, poca calidad y muy caro. El pisto manchego, ni era pisto ni manchego, era tomate ácido de bote con un poco de cebolla y pimiento, la oreja, muy escasa y una botella de vino, 37 €, casi nada.

Bien ubicado, comida de 10! Calidad precio inmejorable, y los camareros súper atentos en todo momento y un muy bien ambiente, te hacen sentir en casa, volveré sin duda. 10/10