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Pésimo servicio. No le pongo menos estrellas porque no se puede. Nos sentamos en la terraza, la camarera salía y se nos quedaba mirando y nos atendió a los 20 min
Buen servicio, comida de muy buena calidad. Y ambiente inmejorable. Dispone de un pequeño saloncito para comer en la mayor intimidad posible con aforo para unos 20 comensales en el mismo. Repetiremos
Me gustó mucho éste sitio. En Ciudad Real Capital. Impresionante el chuletón. (Recomiendo pedirlo muy poco hecho, porque se sigue cocinando en la bandeja de barro donde lo sirven, y si se queda frío supongo que lo podrán calentar un poco, que no fue mi caso)
Nefasto. Tardaron muchísimo y eso que había 3 camareros para 3 mesas. Camareros despistados que se confundían y no te hacían caso. Verduras podridas, chipirones plancha fríos y carísimo
Buen ambiente. Terraza dentro y fuera. Tambien comedor. Está todo muy rico. Buena cocina y buen ambiente. Jóvenes menos. En la zona hay donde aparcar. Está céntrico pero apartado del murmullo.
Es la segunda vez que hacemos allí la comida de Navidad y fue espectacular tanto la comida como el trato y la atención. Por eso repetiremos las veces que haga falta.
Estuve desayunando aquí. El servicio fue excelente, y tanto la bollería como las tostadas con tomate y jamón fueron una maravilla. La mejor tostada que he probado
Me han tratado de lujo. Una ensalada de naranja con bacalao, que estaba fenomenal y un filete de atún inmenso, en su justo punto, con verduras. Sin prisas. Sin segundos turnos. Para volver
Las tapas que nos pusieron eran muy malas un revuelto frío, y una fritura aceitosa, la camarera no tenía ni idea de qué vinos tenían, lo siento pero las fotos que he visto en internet no eran de las tapas de la terraza eso seguro
Parecía como si solo pusiesen tapa a los asiduos.hemos tenido que pedirla todas las veces, cuando a otros se la llevaban directamente, aparte, no se si era ya su hora de cierre por que aún habia una mesa ocupada en la terraza, pero tenían prisa por q nos fuéramos.
La primera vez que fui, me senté en la terraza a las 9 de la mañana, ya habiendo 3 clientes tomando el café, estuve esperando 10 minutos a que viniera algún camarero a atenderme y finalmente me fui a otra cafetería ya que parecía no existir dicho servicio de mesas.
Después he ido en días posteriores una media hora antes o más tarde y el servicio ha sido inmejorable, pero una primera experiencia así suele dar como resultado la pérdida de clientes. Creo que es un punto a considerar, el estar más atentos a la terraza y no tanto al peloteo con clientes en la barra.
Lugar con alma, no comparable con ningun otro sitio. Cada rincon respira vida. Se viven situaciones especiales que dejan huella. A ello le añades una cocina que cubre tus expectativas y un servicio cercano. Una verdadera experiencia vital de clientes
El salón que tienen para celebrar eventos es ideal, muy acogedor. Tamaño perfecto para poder estar en familia y no agobiarse. La comida espectacular y el trato de los camareros increíble.
Sábado a mediodía Pedimos dos cervezas y un vermut Nos traen como tapa (Ciudad Real es famosa por sus tapas) unos trocitos de tomate. Y se quedan tan tranquilos. Alucino.
Un lugar agradable peeeeero, a precios no acordes con la calidad. Además opino que es carísimo para no tratarse de un lugar céntrico o rodeado de lugares visitables. Lo mejor es el trato del camarero que es muy agradable y profesional se nota que conoce bien el oficio. Es una pena porque me hubiera gustado volver pero a esos precios no me ven ni en pintura. Un saludo.
El precio de menú de lunes a viernes está bien (12 euros). La comida está buena y platos bien de cantidad. Para mi lo mejor fueron los postres. Lo peor es lo lentos que fueron en el servicio. Tampoco me gustó mucho cierta insistencia en ofrecernos las sugerencias. Pero merece la pena comer en este sitio
Comida muy buena. Recomiendo especialmente las chuletitas de cordero. Ambiente estupendo, con muy buena musica. Y las camareras un encanto. Muy recomendable
Bar-cafetería situado en una zona relativamente tranquila de Ciudad Real, el paseo de Carlos Eraña, a unos trescientos o cuatrocientos metros de la zona ya más bulliciosa del Torreón Dispone de una zona interior amplia con taburetes en la barra y mesas, y otra zona de terraza que, situada sobre la acera, en verano, da también, como el local, a dos calles. Es un lugar agradable para “tomar algo” tanto con amigos con la familia. Tienen una buena cocina tanto en calidad como en cantidad, ala cabeza de la cual está Irene, profesional de la materia desde hace ya muchos años. En definitiva un lugar agradable, con personal también muy agradable. Totalmente recomendable
Buena atención y muy bien ubicado en una zona de no mucha mas competencia. Cuando hay mucha gente sobre todo por el medio día puede ser que tengas la sensación de no encontrar a las camareras.
Un sitio más para poder tomar algo y pasar el rato, lo único que los clientes piensan que la calle es suya y ocupan sin problema ni preocupación toda la zona transitable de la acera.
Comimos un día, y otro de los días desayunamos. El servicio es algo lento, pero las camareras son agradables. La comida, comimos unas tostas, y no estaban mal. El lugar es un bar normal. Tiene una terraza, que se está bien.