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Ayer estuvimos 7 personas comiendo en la bodega el mirador, recordando de cuando era pequeño e iba con mis padres y la experiencia fue muy agradable,el servicio muy bien, tanto en la barra como en el comedor. La comida típica de una bodega , estuvimos calentitos al lado de la chimenea,las vistas de afuera muy bonitas,en resumen, volveremos
Recomendable sin lugar a dudas. El matrimonio que lo lleva es encantador y están pendientes de que todo esté a gusto del comensal. La comida tanto calidad como precio, excelente. Comida tradicional de la zona cocinada al momento. No dudes en ir, no te arrepentirás.
Fuimos el domingo pasado a comer, intentado recordar lo que eran estás antiguas bodegas que tanto momentos buenos nos han dado, primero el nombre de la bodega no son los arcos es el mirador, osea en la parte de arriba, llegamos el camarero debia llevar como media hora contratado, servicio rápido de bebida y comanda, pero demora en el tiempo a la hora de servir, mucho pimiento en todo, de repente te pueden poner como dice costillas, como un bacalao que nadaba en aceite, langostinos congelados pasados en la plancha y poco más. Una auténtica pena con lo que fueron en su momento estos lugares.y encima preciosa caros.
Llegamos a la hora y sorpresa bodegas los arcos cerrado, me pongo en contacto con ellos y resulta que se han cambiado de sitio hasta hay correcto Servicio lento, camareros despistados, no hay menú destinado niñ@s, raciones escasas, y con la SAL (no escatiman) los postres la guinda del pastel tarta de hojaldre con cama de natillas (qué natillas no tenia) rectificaron y parecía eso una piscina y las tartas de queso nada buenas muy aguadas! Me lleve chasco después de estar hace años en bodega los arcos y muy bien! Soles guía Repsol un poco lejos aún!
Excelente lugar Teníamos el chorizo con sidra, morcilla y queso. Es muy bueno y las cantidades son generosas. Y el precio es muy razonable. No puedo esperar a las próximas vacaciones para disfrutar de esta hermosa dirección nuevamente.
Ambiente algo cargado, a sabiendas de que es una bodega podrían poner algo de ventilación forzada. Íbamos con la idea de comer carne a la parrilla, pero sólo es por encargo, así que nos tuvimos que conformar con lo que había en la carta que no estaba mal. Aunque faltaban algunos platos.
Estuvimos el día del padre, es decir, hoy. El trato estupendo, pendientes en todo momento de lo que se necesitaba en la mesa. La comida muy bien preparada y en buena cantidad. Los postres caseros estaban también de primera. Lo recomendamos por el trato recibido, el buen hacer del responsable de cocina, por la amabilidad al cliente y porque el entorno no puede ser más bonito. Echad un vistazo en su página web donde podéis ver el menú y los precios.
Buen sitio para ir a una bodega, sin pretensiones de recibir algo distinto, una bodega para degustar productos típicos de este tipo de local, como: tablas de embutidos, chuletillas de cordero, y recomiendo especialmente los escalopines de ciervo. Sus patatas fritas caseras son una agradable sorpresa, al igual que el precio de sus generosas raciones. Como postre recomiendo efusivamente las natillas de la casa, realmente impresionantes!
Fuimos a cenar. Cena en Vela. Sopas de ajo, croquetas de lechazo, tabla de Campos y postre. Incluido pan, bebida y chupito. Espectacular por 40€ el menú la pareja. Seguro que repetimos en la siguiente noche en velas.
La que está abierta es el Mirador, pero es de los mismos. Muy buenos precios, comida hecha en el momento, todo buenísimo y de calidad. Genial para ir con amigos, familia. Muy recomendable.
Para comida contundente, abajo, a Los Arcos.estupendo! Para un ligero picoteo o comida con niños y adolescentes, arriba, al Mirador. Raciones, bocatas, hamburguesas.todo muy, muy rico!
Hacia tiempo que no iba y sigue tan bien o incluso mejor que antes. Todo muy rico, casero y al precio esperado. Y el trato buenísimo. Fuimos con gente de fuera y quedaron encantados
Lugar espectacular a la hora de hacer una cena romántica con tu pareja o para ir a tomar algo con tus amigos, buen precio y servicio además de la calidad de los productos
Comimos en plan raciones y están bastante bien una ración de chorizo a la sidra, unas jijas de ciervo, setas con salsa de roquefort, postre arroz con leche y tarta de hojaldre con nata (muy rica) y un café solo con hielo. De beber agua y vino de la casa más 3 cervezas que nos tomamos antes de empezar a comer 41,80, éramos 3 personas. El sitio muy bonito y el trato bueno.
Un lugar muy pintoresco de Palencia. Donde la comida es típica y estupenda y allí puedes comer morcilla de Villada, embutidos: Jamón, chorizo. Y tiene unas vistas estupendas. Antes de entran ha cenar disfrutamos de una bonita puesta de sol.
Una mala esperiencia la cual no recomiendo más de 30 minutos para estar y una vez dentro pedimos y solo nos traen calamares y queso de las 5 cosas que habíamos pedido, rato después llamamos al camarero a ver qué pasaba con nuestra comida y nos cuando la trajeron estaba fría, lo único bueno A sido el chuletón es general mal servicio y mal la comida
Muy a mi pesar, no puedo decir nada bueno del sitio, acostumbrado a un servicio y calidad excepcionales, vuelvo después de un tiempo y tras un servicio muy lento, descubres la baja calidad en los productos, sin contar que ya llegó a la mesa frío y las raciones son la sombra de lo que fueron; lamentablemente no es un sitio al que volveremos.
La experiencia fue muy buena, tanto en lugar y en la comida como por los cocineros y camareros. Todo muy familiar y agradable, sin ningún tipo de queja.recomendable.
Me da mucha pena tener que puntuar así pero después de años acudiendo encantado a cenar las dos últimas veces han dejado mucho que desear. No se puede intentar abarcar más de lo que se puede. Ayer precisamente pedimos entre otras cosas unas jijas con roquefort las cuales siempre están buenísimas pero la cosa es que si pido jijas con roquefort me espero la ración de siempre y no un plato lleno de patatas y unas migas a parte de escasas de jijas por encima. El Precio ha sido la primera vez como bien he dicho después de muchísimos años que me ha parecido vergonzoso. Lo Siento pero 1 vez a todo el mundo le puede pasar tener un mal día, dos ya no gusta pero si vuelvo y me pasa una tercera es que soy tonto. Muy a mi pesar no volveremos.
Casi nos comen las moscas a tener que comer en el exterior. Ya que no pudimos entrar a comer en el interior con nuestra mascota, una perrita. Una pena. El servicio lento, la comida está bien.
Espectacular! El menu increible. A destacar la parrillada de carnes asadas, y el lugar, como salido de otro tiempo. Las vistas desde el cerro que domina la llanura de Tierra de Campos es de 10 estrellas! Hay que conocer el mirador
Hicimos reserva y tardaron en sentarnos media hora. Nos intentan meter en una especie de zulo. Pedimos después de más de 15 minutos sin ni siquiera preguntar si queríamos beber algo si nos podían cambiar a una mesa enfrente y nos dicen que está reservada. Parece ser que nuestra reserva era peor. Nos hemos ido sin comer el día de la madre. Un sitio para no volver por el trato y por la suciedad tanto de las copas como la barra.
Es un engaño, no es lechazo es borrego viejo, el churrasco incomible, la morcilka seca y quemada. El servicio desganado. En resumen no pierdan el tiempo ni el dinero
Muy bonito, un restaurante en una cueva, me encantó el sitio, la comida de calidad y exquisita, buena atención y Muy buen servicio. Totalmente recomendable.