Cafe Bécquer

El lugar es muy acogedor y visualmente es muy bonito. Yo pedí un café merenguito y estaba delicioso. Son muy amables y además ponen buena música.

Gran selección de bebidas, incluyendo batidos y batidos. ¡El batido tenía un gran sabor! Podría haber sido más grueso.

Es un sitio muy acogedor, nos sentamos en la terraza y no pasamos nada de calor con la brisa de los árboles. Recomiendo los batidos que están buenísimos, yo me cogí el de Nutella y oreo.

Es un lugar de siempre y al que apetece acudir siempre.
Me recuerda mucho a todos los momentos vividos en mi juventud cuando íbamos con mis amigas.
Conserva el mismo aspecto de siempre, con sus mesas, con sus camillas y debajo de sus cristales escritos, papeles y notas de gente que ha pasado por aquí y ha dejado su huella. Con sus lámparas cubiertas por teka, su suelo antiguo, sus contraventanas de madera y su puerta simulando la de un portón de una casa de pueblo.
Tiene un encanto muy especial. El producto que ofrecen es muy variado y de primera calidad, hay café y cafés!
Tienen una amplia gama de café preparados de distintas maneras, batidos de frutas naturales, batidos de helado, batidos de mezcla de ambos. Muchos tes de diferentes sabores y aromas, tanto fríos como calientes, para cualquier época.
Es un sitio emblemático y al que apetece venir siempre por el buen servicio que ofrecen, la calidad, la atención y el precio.
Sin duda es muy muy muy recomendable.
Si aún no lo conoces estás tardando en venir.

Fantástico! Que corten la fruta fresca "in situ" para hacerte un mojito de mango, no tiene precio. Atmósfera especial y ambiente con estilo y personalidad. Lo recomiendo como parada imprescindible en Salamanca.excepcional!

Buenos precios.
Buenos tamaños, y buen sabor.
Local cómodo aunque no demasiado grande.
Baños de los años 30, muy muy viejos.

Se ha quedado un poco pasado.
Necesita renovación sobre todo los baños.
La terraza estupenda.

Lo conozco hace por lo menos treinta años y es el sitio ideal para conversar mientras tomas café, muy acogedor y agradable.
Soy salmantino y no conozco lugar más acogedor en toda la ciudad.

De los cafés con más encanto de Salamanca. Adoro ir a tomar uno en invierno en las faldillas, o un buen batido en verano en la tranquila terraza que tiene. Las tartas caseras son de otro nivel. Que no falte nunca.

Cafetería agradable y tranquila con gran variedad de cafés, infusiones, batidos y tartas. Ideal para merendar, me ha encantado. El personal muy simpático, trabajan muy bien

Cada vez que voy me siento como en casa, literal. Sitio tranquilo con los mejores batidos y tartas de toda Salamanca. Relación calidad-precio muy buena.

Me encanta este lugar y me recuerda a mi juventud pero creo que necesita una gran reforma de todo el local incluidos los baños, están fatal, muy viejos, la cisterna es de las que están colgadas en la pared.

Un lugar de los pocos que quedan genuinos en sí mismo.
Cualquier momento es bueno para tomar algo en Café Bécker. Cada consumición es una especialidad en sí misma.

Tradicional café en Salamanca. El Capuchino Especial Bécquer riquísimo, pero bueno los batidos y tartas también. Y si queréis hay infusiones de todo tipo. Y los camarer@s muy amables.

Lugar agradable y acogedor con personal atento. Carta amplia con batidos muy ricos a buen precio. Ese día íbamos a pedir tarta pero no tenían y nos trajeron unos pastas, un buen detalle. También pedí recomendación sobre dos batidos que no había probado y me ofreció la posibilidad de hacer una mezcla. Otro buen detalle, por cierto.

He venido decenas de veces y lo seguiré haciendo. El trato es inmejorable y la calidad de los productos espectacular.
Un 10, ojalá más sitios así.

Uno de mis lugares preferidos.
Con una decoración muy sencilla e intimista lo convierten en un sitio al que poder ir en familia, con amigos o en plan romántico de pareja.

La variedad de bebidas es abrumadora: todo tipo de infusiones, cafés variados, batidos (naturales de frutas o de sabores), zumos naturales, cócteles, copas.
Y unas tartas muy ricas.

Todo a muy buen precio.

Cafetería ideal para tomar cafés especiales, batidos, tartas naturales. Tiene un terraza bastante amplia y tranquila. La única pega que pongo son las sillas de mimbre bastante incómodas. Los batidos y tartas que hemos tomado muy ricos.

Sitio mítico, de los de siempre, para tomar un café especial, una infusión, un zumo o un batido, sentado en un cómodo sillón de mimbre. Recomendable

Vinimos en su día, recomendados por un amigo, puesto que servían unos batidos que pa'ké. La cosa no decepcionó. El ambiente es muy acogedor con sus mesitas camilla y faldilla. Tiene algo, y por eso cada vez que visitamos Salamanca, es visita obligada.

Buen sitio para compartir con amigos, familiares o bien, tener un rato romántico con la pareja. Decorado muy lindo, cómodo y con buen servicio al cliente. Cuenta con terraza.

Es una cafetería para tardes de invierno. Aunque ha perdido un poco de encanto, siguen atendiendo bien. No hay pinchos. Sólo café, té, batidos y alguna copa que otra. En verano ponen terraza en plaza San Marcos para estar tranquilo s. Sin ruidos, ni mucho jaleo.

El sitio está estupendo, tanto la decoración como los batidos/café/tartas.pero las dos últimas veces que he ido me han servido la tarta en platos goteando de agua, ¿no secáis los platos? , hoy incluso, la cucharilla estaba húmeda, da asco y parece antihigiénico. Da la sensación de que no lavan ni secan bien los platos y cubiertos, o que los remojan en una pila con agua, los sacan y te sirven allí directamente. Es la segunda vez que me pasa.

Lugar por excelencia para tomarse un batido, y tener una conversación agradable con tus amigos, sin necesidad de levantar la voz

Rico y barato, sin duda repetimos, ya que nos quedamos con ganas de probar muchas de las cosas que había, pero al ser tan grandes los batidos con uno te sacias sin dejarte un riñón.

Me ha encantado. Sitio muy acogedor, trato amable y con cafés muy ricos. En la foto, capuchino especial y Macciato. Experiencia muy buena y agradable

La atención buenísima y súper agradables y atentos, hacia años que no veniamos, han mejorado muchísimo en todos los aspectos, los superbatidos, las supertartas, encima todo natural y todo buenísimo y espectaculares.
Recomiendo al 100%. Me alegro muchísimo a ver vuelto.
Volveremos y repetiremos y con más gente.

Bar con ambiente súper acogedor, los chicos que atienden son súper simpáticos. Tienen mucha variedad en la carta, desde té hasta cócteles, para todos los gustos.

Cabe destacar que tartas están de muerte lenta de buenas! 20/10. Sin duda repetiría

Hacía mucho tiempo k no iba.pero está genial, tanto como para quedar con amigos como para ir sol@. Buen trato

La limpieza no es la adecuada para estos tiempos. Deberían lavar los cojines de los sillones. La impresión de poca limpieza fue común entre las personas que fuimos. Nos dio lástima que no cuiden el local. Es uno de nuestros sitios de siempre.

Desde hace años una referencia para tomar un buen café, quizás un poco lento el servicio, pero comprensible por su continua afluencia de público y situación COVID.

La terraza que tienen es bastante amplia, fui con una amiga, nos pedimos un batido de chocolate y plátano y un zumo de fresa, piña y plátano, en total fueron unos 8€

Una atención al cliente maravillosa así como la gran variedad de batidos, cafés, etc. Todo buenísimo y con una pinta estupenda.

Un lugar muy acogedor y tranquilo, donde se está agusto.
Los camareros son amables, simpáticos, atienden bien y rápido.
Los batidos están muy buenos y están muy bien de precio.
Tienen postres caseros que aún no he probado pero tienen buena pinta.

Buen sitio para tomarse una copa o un helado, son de calidad. Los camareros muy majos y profesionales.

Lugar muy agradable.
Los sillones de mimbre, la mesas tipo camilla, con mantel, el techo decorado co cañas, hacen del establecimiento un lugar muy agradable para degustar su magnifica carta de batidos, cafés, infusiones.

El entorno, próximo a la calle Zamora y a la iglesia de San Marcos (iglesia de planta redonda) es muy agradable.

Merece la pena hacer una visita y disfrutar de alguna de sus infusiones en este agradable lugar

Un sitio ideal para tomarse un batido estupendo.y un buen servicio.es lo ideal para estar relajado.

Buenísimos batidos en un sitio muy acogedor. Los sabores están muy logrados, y no son nada caros dado la fama del sitio y dónde está situado. El personal nos trató muy bien, muy amable y considerado.

Batidos espectaculares y el detalle de las notas en las mesas dan para ratos y ratos de entretenimiento leyéndolas. Sitio de 10 para pasar un rato de chill.

Batidos muy buenos, té s variados, ambiente tranquilo, ideal para ir con los amigos a tomar algo. El único problema es que los batidos a veces el helado no queda suficientemente triturado y atasca la pajita, por lo demás de 10

Los batidos y zumos están riquísimos y el personal es muy amable.
Además, un día llevé un recipiente de cristal de casa para preguntar si me podían poner un batido para llevar y sin problema, un encanto.

Sitio con encanto en Salamanca para tomar cafés, batidos, mojitos de varios sabores, una buena copa o una tarta casera.

Los batidos riquisimos y super rápidos. Tienen mucha clientela pero normal, son los mejores batidos de Salamanca.
El gran pero es que no tienen servilletas, cosa que es muy necesaria, y que los baños son un asco, huelen fatal, no están limpios, ni tienen papel. El sitio necesita una reforma urgente.

Un espacio muy original, con unas tartas ricas, batidos que tienen muy buena pinta (no he probado, pero solo verlos me dio la gana de volver), infusiones muy buenas y trato que no se merece menos que 5*. Muy recomendable!

Un bar con un con una decoración genial. Ambiente muy tranquilo y acogedor.
Es un muy buen sitio para ir a tomar un café o un batido y pasar un rato agradable.

Batidos enormes y ricos a buen precio. Ambiente agradable sin mucho jaleo. No le doy 3 estrellas por el camarero "latino" de la barra que acostumbra a ser bastante cortante a la hora de hablar con él.

Batidos buenísimos, el trato excelente. El local tiene todo para que te sientas como en casa, y el personal hace todo lo posible porque así sea. Repetiremos sin duda.

Muy bonito y tranquilo. Hay muchas opciones de bebidas con precio ok. Una óptima opción para huir un poco del turismo masivo. Atendimiento bueno.

Inalterable. Atemporal. Lleva así más de 30 años. Butacones grandes de mimbre. Paredes en piedras y camillas con faldillas. Acogedor. Mucha variedad en té, batidos grandes y sirven unas copas muy ricas. Es tranquilo. Esta situado en pleno centro de Salamanca. El personal es muy amable y servicial. Buen precio. Recomendable para pasar un rato tranquilo.

Es muy difícil llevar dos décadas vendiendo cafés, tés y batidos en el mismo local sin reformar, entre mesas con faldillas y sillones de mimbre pero seguir haciéndolo bien. Probablemente los mejores batidos naturales de la ciudad a precio asequible y en un local que sin ser moderno resulta acogedor y agradable. Muy recomendable para citas románticas y reuniones íntimas. Les faltaría ambientar con música selecta, pero es un buen lugar al que ir tanto en invierno como en verano. No olvides firmar en alguna de sus mesas o entretenerte leyendo las chorradas que escribe la gente, que siempre ilusiona como novedad.

Un sitio excelente para tomar cafés, batidos y copas sentado en un ambiente relajado sin música que te moleste.

He dudado al darle buena puntuación para tener asegurado sitio cuando vuelva.
Buen café y excelentes batidos.
Sin duda, y desde hace años, cinco estrellas.

Un sitio acogedor, tranquilo la primera vez que entraba una gran carta y variedad de batidos naturales, de fruta y de auténticas bombas, común precio asequible, me encantó el lugar

Cafetería muy acogedora, ideal para ir en invierno cuando sólo te apetece algo calentito. Hay cafés, batidos, zumos, chocolates y acompañamientos con muuuy buena pinta: tartas caseras, cada día tienen unas distintas.

El Becquer de toda la vida. Buen sitio para charlar tranquilamente y tomar un batido, un zumo o una buena copa.