Gastrobar Sabores

Comida muy rica! Servicio amable y atento. El arroz señoret y la tarta de queso estan espectaculares.

Un servicio excepcional y una comida de bodas de plata de mi hijo inolvidable, repetiremos seguro. De 10

Perfecto todo, servicio exquisito, comida variada, cuidada y riquísima.
Sitio para recomendar

Maravilloso y amable servicio
Platos muy logrados: las croquetas y buñuelos de bacalao, el pulpo , también los
arroces merecen una oportunidad
Buenos caldos y resultones postres
Ambiente cálido y nada ruidoso

Nos encantó la experiencia, el arroz muy bueno y en ambiente fantástico
Por ser un día concurrido en el día de reyes tuvimos que pagar por adelantado la reserva a 20€ por persona pero fue un acierto

Muy guay el viernes. Cena + espectáculo con saxo y acrobacias.
Platos muy sabrosos y bien elaborados, nos sorprendió el bao castellano de torrezno,
Y flipante la costilla madurada de angus
Para repetir

Grata sorpresa, por recomendación de un amigo. Comida excelente, calidad y cantidad. Buen servicio, camareras muy atentas. Recomendación patatas bravas y tarta de queso. ¡Volveremos!

Muy buena atención por parte de Alejandro, con muy criterio sobretodo con los vinos.
100% recomendado

Estuvimos probando platos de la nueva carta, y la experiencia fue increíble, producto de calidad y buen sabor, servicio muy bueno, sin duda repetir seguro

Disfrutamos de una cena estupenda, probando distintos platos de la carta. Todos estaban buenísimos (el pad Thai un poco picante, pero muy rico!). Nos gustó mucho!

27 Diciembre 2022.
Gracias Iván por el servicio, así como al maître por sus recomendaciones. Arroz del señorito riquísimo, croquetas muy buenas. Servicio rápido para ser un tema de arroz. Lugar bien aclimatado. Verdejo joven muy acorde para ese tipo de arroz. Para repetir sin duda. 120€ entre 4 personas.

No se que pasa últimamente que las 3 últimas veces no salí nada contenta. Con lo que me gustaba ir y comer los arroces.
Los últimos, SALADOS, pasados.quitaron el de cangrejo azul que para mí, era el mejor.

Estoy embarazada y pregunté si los pescados eran congelados, al igual que las gambas y demás.
Para mi sorpresa, me dijeron que no. Que es todo fresco.
Fresco en Valladolid?
Por LEY, tiene que estar todo congelado.
Asique.me pedí el arroz de lechazo y no me gustó demasiado.
Al igual que la mahonesa de las patatas.es casera y no pasteurizada.
Otra cosa que por ley, tiene que serlo.

Al ir al baño.sube un cocinero o camarero por las escaleras con una caja de gambas congeladas y yo.como?
Mi cara era un cuadeo, xq me dijeron que era todo fresco.

En fin, que me pensaré mucho el volver. No sé para que engañan. Cuando es mejor hacer las cosas bien. Que el anisakis causa muchos males.

Amabilidad y atención inmejorable! A pesar de expresarles nuestra prisa en picar algo para comenzar el viaje a tiempo, fueron muy reactivos siendo el servicio impecable. El taco mexicano siempre es un acierto, lo completamos con unas alcachofas en flor y el “cocidito a bocados”. Sin duda alguna 100% recomendable!

Todo lo que comimos dejaba mucho que desear. La carne dura, el bacalao al pil-pil no está hecho como se debería, croquetas minis, y lo que llaman torrija que es un trozo de brioche seco. Para gente sin idea de comer y con dinero todo un acierto.

Fuimos a celebrar una comida, trato agradable, menú ya preconcertado, cantidades adecuadas, excelente relación calidad precio y un sabor que hace honor a su nombre. El arroz con alcachofas inmejorable!

Situado en el Campo Grande con vistas al paseo central de la Acera de Recoletos, en un pabellón totalmente acristalado.

El ambiente es acogedor, aunque algo ruidoso cuando está llena la sala. Mobiliario de diseño y una cuidada iluminación.

Encontrarás una carta con especialidades españolas, sabores de diferentes países y también variedad de arroces.

COMIMOS: Ensaladilla moga con carpaccio de gamba Santa Pola; Atún rojo premium de Tokyo a D. F. ; BURGER DE ANGUS (Carne de vaca Angus (180 g.) con pan brioche casero, queso cheddar, jeringuilla de salsa barbacoa y patatas fritas caseras) ; HUEVOS ROTOS DELUXE (Foie fresco, tartufata, patatas fritas y dos huevos de gallinas criadas en libertad; la torrija esponjosa de pan brioche con helado de vainilla y tarta de queso cremosa.

Buen producto y servicio. Sobre el ruido poco se puede hacer, pero el global es bueno.

Para no repetir. 50 euros por persona, pulpo viajero escaso, juego de la costilla durisima, no se podía ni cortar para hacerte las faljitas.

Muy buena cocina, camareros agradables y muy profesionales, la quinta estrella en verano, mejora mucho, al estar al lado del Campo Grande llegan los sonidos de las aves y el perfume de las plantas

Estuvimos en la feria del pincho y nos gusto el local y los pinchos, el servicio muy agradable. Volveremos para comer un día

A mi m defraudó bastante restaurante muy bonito y bien ubicado pero muy caro para la calidad, a 27€ el plato de arroz con carabineros una pasada para la ración, las croquetas normalitas en todos los sentidos, lo q si q m gusto fue la tarta de queso muy rica.

Muy agradable, se come estupendamente, pero barato no lo es. Si cedes precio por estar tranquila y comer bien, este es un posible sitio para estar. Hemos comido en terraza. Por dentro es muy chulo, o sea que también muy bien. Carta muy variada, los arroces son especialidad.

Vistas las valoraciones del restaurante decidimos ir esperando ser de los afortunados, pero desgraciadamente no ha sido así. Grupo de amigos, tres entrantes a compartir, croquetas, ensalada y mejillones, un segundo por persona, tarta y café 45€ cada uno. No resultaría elevado si hubiese merecido la pena…. Arroz malo malo, costillas grasientas, bacalao demasiado pasado…

Pongo la reseña aun sabiendo la respuesta: un gran equipo humano q se esfuerza y trabaja duro para ofrecer la mejor experiencia gastronómica y las críticas negativas lo echan por tierra … que con este tipo de valoraciones se desprestigia injustamente este gran trabajo y etc y etc

Señores, las reseñas negativas o positivas van en concordancia con la experiencia sufrida. Si es negativa, la reseña es negativa. No dudo en el gran equipo humano, pero quienes se sientan en sus mesas también es un gran equipo humano, al q hay q respetar. Como gran equipo q son, cuando un plato no cumple con el nivel requerido no se sirve, eso es de profesionales. No se espera a q el cliente se queje o simplemente se lo coma con desgana y lo pague. Un cliente satisfecho vuelve, un cliente disgustado no.

No volveremos una segunda vez esperando tener suerte, Valladolid, entre otras cosas, destaca por sus locales, hay muchos en los q seguir repitiendo

Había muchísimo ruido. Había varias mesas muy grandes. Y nos hemos ido sin postre ni café porque era un infierno.

La comida estaba bien.

El camarero del tablet estaba saturado y hacía lo que podía, e iba un poco lento.
Pedimos agua en los entrantes y vino en el segundo. Porque entró una mesa de 15 o más.

Espero que esta reseña les sirva para mejorar en algo.

Es superutil lo de poder pagar por el código QR. Porque no tienes que estar esperando, como en otros sitios llamando al camarero 100 veces para que te traiga la cuenta. Y nos pudimos ir pitando en cuanto acabamos el segundo plato.

Volveremos como otras veces y espero que puedan haber corregido esos detalles y tener otra vez una comida agradable.

Hemos comido bien, los camareros son muy amables, aunque el hecho de que cada uno se ocupe de una cosa diferente lo ralentiza un poco, de hecho han tardado bastante en servirnos los platos. Especialmente ricos los tacos, el rodaballo y el padthai.
De precio se va bastante, lo que pagar sobre todo es el sitio, al lado del campo grande, con suerte ves algún pavo real.

LA PEOR EXPERIENCIA EN VALLADOLID.
1 de la tarde, llamamos para reservar porque era de los pocos sitios que abrían el domingo. Llegamos, y nos dicen que solo tenían mesa en la terraza, pero el restaurante estaba vacío y no nos dejaban ponernos dentro, solo nos daban la opción de la terraza a 36 grados.
El camarero que nos tomó nota fue de lo poco “a mantener”.
En cuanto a la comida, pedimos croquetas, nada del otro mundo, bechamel muy grumosa con tropezones de jamón demasiado grandes y molestos, sabor sin más. El precio en la carta era de 12€, y después en la cuenta nos cobran 12,60€ (para mi, denunciable).
Quisimos cerrar con un arroz de mar y montaña para dos personas, cuyo precio en carta era de 26€ (sin especificar que era precio unitario por persona),
Cuando llega el arroz, la verdad es que la pinta es aparente, lo que deja muchísimo que desear es la falta de comunicación de la camarera, la cual la preguntamos si la lubina estaba hecha, ya que la vimos cruda y apenas medió palabra con nosotros. En efecto, la lubina estaba prácticamente viva, y nos confirman que ni si quieran la sellan en la plancha, va cruda.
Vemos cómo la camarera le mete un palizon increíble al arroz. Jamás he visto semejante manera de servir un producto delicado y caro. Se te quitan las ganas de comerlo. Era una masa aplastada, con un arroz que lejos de estar suelto, estaba duro. La mezcla de sabores del arroz tampoco nos convenció.
Mientras terminábamos, un camarero se da cuenta del desastre y nos pregunta en repetidas ocasiones qué tal todo. No sabíamos ni dónde meternos.
Para rematar, nos llega la cuenta, habiéndonos comido un tercio de arroz. Un total de 73,20€. Resulta que el precio del arroz en carta es precio por persona, cosa que en ningún momento se indica ni se nos avisa. Supongo que buscando la pillería. Por lo tanto, el precio inicial de 26€ que teníamos en mente, sube a 52,50€. Encima te cobran más de lo que pone en carta.
Salimos por patas de aquel espantoso lugar. Parece una película de miedo, pero es GASTROBAR SABORES VALLADOLID.

PD: con la oferta gastronómica que hay en la ciudad, tienen dos opciones: cambiar radicalmente, o cerrar YA.

El lugar esta muy bien en cuanto a decoración, la atencion muy buena, pero un poco escaso en las cantidades y un poco pasado en los precios.

El local por dentro es muy bonito. La calidad y la comida riquisima, el personal agradable. Les pongo 4 estrellas en vez de 5 porque pides 100 gr de jamón 5 jotas y te traen en su mayoría grasa para llegar al peso ahorrando en jamón. Pero todo riquísimo.

Es un Restaurante muy acojedor, tiene una terraza estupenda y los arroces buenísimos, el servicio muy profesional y agradable buenos postres, sitio muy recomendable.

No ha sido la primera vez que visito el lugar, y como siempre ha sido la mejor experiencia. La atención de jhasmin y carlos ha sido inmejorable, Y mas aun al llevar a mi familia que venian de vacaciones, volveran a Valladolid solo por comer aqui. Recomedado 100%

Buen vino, el sumillier Alejandro me recomendó este vino de maceración carbónica, que es una maravilla.

Caro e insípido, hemos ido a tomar el aperitivo un domingo, las consumiciones, algo subidas de precio, hemos pedido una de oreja "a la plancha", ración escasa e insípida, la acompañan de unas patatas cocidas para que parezca que viene algo más, y la plancha debía estar apagada porque la oreja estaba cocida. Para gustos los colores pero desde luego yo, no vuelvo.

Lugar precioso, la atención por parte de los camareros exquisita y la comida perfecta un 10 para el cocinero! Ha sido una experiencia magnífica, todos los platos deliciosos muy bien elaborados y con mucho sabor, como tienen tanta variedad y te cuesta decidir, pedimos varios entrantes a compartir y un primero, los entrantes fueron brioche de lechazo es tamaño pincho pero con un sabor estupendo (8€/uni), luego dumplings de gambas al ajillo buenísimas (14€) y tiras de sepia a la plancha con alioli de su tinta espectacular (13€) y de primero pad thai súper jugoso, un sabor potente, el mejor que he probado hasta el momento (14,5€) y de postre para finalizar la maravillosa tarta de queso casi obligatoria se podría decir (7,5€). Lugar de 10, repetiré seguro.

En el mejor sitio de Valladolid. Profesionalidad, calidad, servicio muy bueno. Un lugar para sentirse bien.

Atención estupenda, comida excelente y local en inmejorable situación. Gran terraza y al lado de pistas de basket, para que jueguen los niños. El baño ofrece un extra, ya que Leo Harlem ameniza cada visita. Recomiendo 100%

No dejo de sorprenderme, llevo ya más de 159 años llendo a comer o cenar y aún no he repetido plato, su carta es muuuuy extensa, todo lo que he probado hasta ahora muy rico,

La comida ahora está buena, pero el servicio pésimo. En pleno invierno y en terraza sólo cuentan con una estufa al lado de un par de mesas, el resto no tiene nada, pedimos que nos pongan en una mesa que está libre al lado de la estufa, no nos hacen caso. Entre plato y plato pasa muchísimo tiempo hasta que nos sirven. Y para colmo pedimos pan y nos traen un pan que está ya mordido. Ha dejado mucho que desear.

Buena calidad y variedad de arroces. Amplia carta con platos muy variados y de todo tipo. Estaba todo buenísimo. Eso si si reservas por Internet te puede tocar comer en la terraza y en invierno hace un poco de frío.

Croquetas, paella de pato y tarta de queso MUY bueno todo. La tarta de queso en especial espectacular
El trato y localización inmejorables

Ha sido una mala experiencia, hemos pasado muchísimo frío xq la terraza no está acondicionada para dar comidas ya q sólo tienen una calefacción para todo el mundo con lo cual el q está cerca muy bien pero los demás q nos den y luego el servicio entre plato y plato muy lento, a siq no lo recomiendo

La carta de delicatessen es impresionante. El problema es elegir. La atención de Pablo y Ruth impecable.
Un Tomás Postigo con huevos con patatas y foie, caprice de dieux. El local, en el Campo Grande, encantador. Enhorabuena!

Estaba todo muy bueno, croquetas de sepia y de jamón para compartir y "arroz de señorito" de segundo. Los camareros muy atentos y amables y el sitio muy acogedor. Volveremos

No había probado nunca el arroz con bogavante y nos recomendaron el sitio.
Un acierto, el trato genial, el ambiente, la comida, todo. Fue una velada perfecta. El arroz es para 2, te le sirven en mesa ellos. Nosotros nos pedimos unos entrantes mientras esperábamos el arroz.
Relación calidad-precio, bien. Nosotros con los entrantes, el arroz, postre, café y botella de vino. 100€.
Tenemos clarísimo que vamos a volver en breve.

Excelente trato, excelente entorno y genial comida, un sitio para tener en cuenta para cualquier celebracion

El tomahawok (más o menos) sensacional. Las raciones que compartimos eran buenas pero un poco escasas. Ambiente bueno

Hemos ido muchas veces, pero van a peor, el pulpo a la brasa con mucho aceite frío x algunos sitios y calenté por otros, el bacalao salado y el atún escaso, las cocretas que las hacen my buenas llegaron tirando a frías, la cuenta cobraron una ración de pan de más, en fin es una pena

Local muy amplio con terraza y nuy bonita toda la decoración. La comida riquísima, lo único malo es que en la terraza hay mucha moscas. Nos cobraron el pan cuando le dijimos antes de ponerlo que no queríamos.

Trato muy agradable, ambiente perfecto y dejaros recomendar para qué os sorprendan. Volveré. Por cierto ubicado en la mejor zona para dar un buen paseo.

Excelente gastrobar-arrocería en Valladolid. Trato exquisito de los camareros (especialmente de Esteban) y comida riquísima y muy bien elaborada. La tarta de queso hace honor al nombre: la mejor de Valladolid. 100% recomendable

Buena terraza y ricos arroces. Los precios no son bajos pero la calidad es buena
La ubicación excelente

Es el peor sitio y mas informal, carisimo y asquerso que he comprado comida para llevar de todo Valladolid, la paella mas salada que los perros el arroz duro y frio tardaron 1 hora mas de lo acordado y 4 gambas peladas que ni se veian, encima una clavada de más 120 euros para tirarlo todo a la basura, el caldo del arroz se derramo por fuera del envase un timo de pelicula es para denunciarlos unos simverguenzas.

No pidáis nunca las croquetas de sepia, es solo TINTA DE CALAMAR.y las venden a precio de caviar.por lo demás la comida tirando a normalita, pero tirando a cara.calidad-precio no acaban de darse la mano.

Estuvimos ayer a las 19: 30, una persona nos dijo donde sentarnos (a otra pareja y a nosotros). Después de esperar 10 minutos para que nos tomaran nota (los otros pidieron unas cañas), nos sirvieron a todos 10 minutos más tarde, ya eran las 19: 50. A las 20: 00 es el horario de cierre por las restricciones. Y como es natural nos dijeron que cerraban.
Tomamos 2 copas, una era de Cacique 500 que por ella nos cobraron 9,45 €.
Un precio abusivo que ni en la mejor terraza de Valladolid te cobran (en la plaza Coca: 7,50€)
Ese precio incluye un % por tomarlo en terraza, que dado los tiempos que corren ya me diréis dónde te sirven la consumición.
El domingo pasado pagamos 13€ por el Cacique 500 y un
Gordons Rosa preparado en la misma terraza.
Varian los precios a su antojo y sin ninguna explicación convincente.
Estamos totalmente sensibilizados con el apoyo que requiere la hostelería, pero aquí no volvemos.

No llevo mucho tiempo viviendo en Valladolid, y era la primera ver que iba. La verdad es que ha sido una muy buena experiencia. El local está fenomenal, y el personal del servicio muy amable. Íbamos con una sillita de bebé y nos han colocado en un lugar muy cómodo.
En cuanto a la comida, pedimos arroz meloso y muy bueno, además pudimos repetir y sobró, por lo que nos lo prepararon para llevar. No es que sea barato, pero el precio está bien.
Recomendable.

The only reason this is getting 3 stars is because yesterday's experience was WAY different. The spicy sauce that comes with the croquettes; is to die for! The sangria is pretty good. The location is perfect. The service on a Tuesday is questionable in the evening though. Had the Mexican tacos, so yummy! Tonight is nachos and tacos again. I'd recommend for am afternoon delight by the park. But not for dinner.

Cocina excelente en un local acogedor y muy céntrico. Ya sea para tomarte una caña y un pincho (recomiendo el taco japonés) o para sentarte a cenar merece la pena visitarlo.

Al lado del Campo Grande en un entorno ideal. Hemos comido fenomenal, no habíamos reservado y dentro estaba todo completo, pero sí había sitio en la terraza y la carta de fuera con bastantes platos. Nos han atendido y servido muy rápido, muy amable en especial el que parecía ser el dueño o encargado. Espectacular la tarta de queso de postre!

Los postres espectaculares pero lo demas (rabas, mejillones, arroz y wok) grasiento y de poca calidad. Las croquetas ok. Carisimo por lo que es.

Platos elaborados y muy sabrosos. Servicio muy rápido y eficiente. La única pega: te sirven pan sin preguntar y después te lo cobran.

Comida nefasta, caro para lo que te ponen, los tallarines sabían raro y el cachopo no era cachopo era filete empanado y punto

El sitio está bien, acogedor. Zona de niños con pizarras y juguetes varios donde se entretienen. Precios tipo "La Criolla". La comida está buena, comible pero no te deja la sensación, de "qué bien he comido, volvería" Tardan en tomarte nota, en traer los entrantes y la comida de los niños, los camareros parecían estar descoordinados, despistados. Lo peor de todo, ir al servicio y que te acompañen los monólogos de Leo Harlem a todo volumen.

El lugar es precioso, el servicio muy bueno. Sala de juegos para los peques, lo que ayuda a la espera de los platos. Por Internet decía "si quieres comer bien y barato en Valladolid. ". Se come bien, pero no es nada barato, por lo menos para mi. Algunas raciones son algo escasas, el pan buenísimo, al igual que rabas, mejillones y la maceta ya, ni te cuento. Un rato agradable pero caro. Luego te puedes pasear por el campo grande.