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Muy buen hotel, incluida plaza de aparcamiento en el sótano. Un pequeño inconveniente fue la estrecha entrada al aparcamiento. Pero esto se puede ver en muchas ciudades españolas. Las habitaciones eran acogedoras y grandes. Excelente desayuno abundante. Y muy cerca del centro. ¡Gracias!
Siempre es una buena elección. Apenas a 5 minutos andando del centro, aporta un parking con ascensor pero cómodo. Zona tranquila. Personal majísimo y atento. Una gozada. Desayuno variado en buffet aunque el día que estuve se quedaron sin huevos. Increíble. Habitación amplia, con moqueta, y que necesita un remozado. Bañera en vez de ducha. Cama amplia y cómoda. Buen descanso nocturno. Precio competitivo en tramo igual un poco alto.
Somos clientes habituales de este hotel, en los últimos años lo hemos visitado en 5-6 ocasiones. No recomiendo contratar el desayuno, más si antes ha pasado por allí 3 autobuses de excursionistas: lo normal es que a las 9,00 no quede de nada: ni zumo, ni pan, ni mantequilla, ni nada de nada Y NO REPONEN que es lo grave. El día anterior, al menos había zumo de naranja aguado. En las habitaciones las camas tienen edredón sin sábana arriba por lo que te cueces de calor o duermes con la ventana abierta en octubre. También antes ponían una botella grande de agua como cortesía, ahora te ponen botellas pequeñas que te las cobran. Al oir la queja puesta en recepción ha salido el director a hablar con nosotros pero nada de nada. Mientras tanto, otros clientes se quejaban el el salón de desayunos a la única camarera que ponía cara de poker. No nos queda más remedio que cambiar de hotel para próximas visitas a Salamanca.