Hotel Rural Valle San Emiliano

Situación Fantástica, buena comida con precios razonables.
Su gran defecto es que el trato y la atención a los clientes es lamentable.
Los conozco desde hace años y el personal nuevo tiene el mismo comportamiento que el antiguo.
Es un problema de actitud.
El Señor no les ha llamado para el contacto con la gente.

Hemos comido en el restaurante. Uno de los peores tratos al cliente que he visto en mi vida. No comáis aquí

Es una vergüenza que te cobren 2'50€
de poco más de medio litro de agua no
embotellada y 1'35€ de pan vamos un canastillo con seis rebanadas de barra
es decir 8'10€ y de un tomate 6'90€ y no sigo con los solomillos ni los bistet ni las ensaladas etc.etc.vamos un atraco a mano armada en resumen que mis colegas y un servidor no volvemos ni esposado

Llevamos viniendo mi familia y yo más de 30 años y siempre repetimos. Trato inmejorable de todos los trabajadores. Habitaciones limpias, buena y abundante comida y precio muy ajustado. Entorno idílico para la práctica de montaña invernal y estival, así como de otro tipo de deportes al aire libre.

No lo recomendaria ni por el trato personal ni por el servicio de restaurante, es caro para la calidad que ofrecen pero lo peor es que te cobran 2,50€ por agua del grifo, segun ellos es agua filtrada pero aunque asi sea me parece excesivo.

Un lugar modernizado, acogedor en un enclave increíble.
El pueblo está muy bien equipado con súper, farmacia, centro de Salud y es ideal para conocer la zona
El restaurante y cafetería del hotel tienen muy buena selección tanto de carta como de bocadillos, tostas o platos combinados.

Moho en las habitaciones y mal servicio!

En la primera habitación había un fuerte olor a moho, había mucho moho negro en la ventana de la habitación y en el baño. La mujer de la recepción no se disculpó, pero cuando preguntamos pudimos conseguir otra habitación. Había menos moho en la ventana y en el baño (fotos de la segunda habitación con poco moho). Con la ventana abierta era soportable.

La calle es realmente muy ruidosa para ser una calle de pueblo.

El servicio es, como han escrito otros huéspedes, antipático, frío y desatento. Nos ignoraron en el restaurante.

El mobiliario de las habitaciones es sencillo pero cómodo y la ubicación en el pueblo de montaña es preciosa y apenas hay otras opciones de alojamiento en la zona. Por lo tanto, es particularmente desafortunado que los propietarios pongan tan poco esfuerzo en el estado de las habitaciones y el servicio. Las manchas de moho en realidad podrían repararse con poco esfuerzo.

El hotel es correcto y con precio razonable. El restaurante bastante bueno. La zona es preciosa, con muchas posibilidades de bici y montaña. Lo q le pierde es q no den desayunos hasta las 9, horario q no parece compatible con una actividad de montaña o naturaleza. Si mejorarán este tema, sería casi perfecto

Hemos estado alojados con el grupo de senderismo Tanos. Hotel de montaña en una tierra idílica. Comodo, limpio, muy buena comida. Muy recomendable

Trato excepcional, amplias y cómodas habitaciones,
Muy tranquilo
Buenos precios,
Todos muy limpio
Para recomendar

Ya había leído en alguna reseña que había problemas de ruido pero no me imaginé que fuese para tanto. En las habitaciones que dan a la carretera y terraza del bar no se puede dormir. La música de la cafetería es insufrible, el trato de los propietarios terrible. El desayuno caro y malo además de comenzar a las 8.30, tarde si vas a hacer rutas.una lastima, San Emiliano está en un lugar privilegiado pero recomiendo buscar otro lugar para dormir.

Un lugar muy bonito, con zonas geniales por alrededor.
Respecto a hotel, esta muy bien, una habitación acogedora un baño muy bien, más que de sobras, pero la atención.deja mucho que desear.
Los desayunos para un trabajador como yo, no deberían ser a las 9 y media de la mañana, pero respetable.
Comidas y ce as en orden y muy buenas, con horario y menú del día tanto como comida como cena.
Ahora ya toca dormir, así que buenas noches

Desayuno abundante, la cena cojonuda he estado varios días en agosto y genial, recomiendo este sitio. El hotel está muy bien y tranquilo, limpio y grande el baño.

Habitación muy pequeña, baño bien. Admiten perros que ladran a cualquier hora,
te despiertan y no puedes dormir. No volveré a este hotel mientras admitan perros. Los encuentras en la escalera, en fin, muy mal.

Ayer tuve la suerte de volver a comer allí. Tanto la comida como los postres son caseros y está todo buenísimo! Destacable especialmente la fabada!
Estuvimos en un comedor súper acogedor, precioso y una música ambiente ideal.
MUY recomendable

Hotel sencillo, limpio y barato. Tiene unas vistas muy bonitas a las montañas. Se come bastante bien.

Pueblo muy tranquilo, con supermercado, bares y restaurantes.
El hotel está muy limpio y son muy atentos. No hay aíre acondicionado, pero se duerme bien, es principio de septiembre.

San Emiliano is spectacular and quite rural. Hotel Rural San Emiliano complemented the scenery and vibe of this quiet, sleepy town with its traditional-looking exterior and interior. The comfort, however, was far from rural. The amenities are modern and clean. The food within the hotel compared in quality and flavor to the excellent and friendly service. We will go back if we have the chance and won’t hesitate to eat some cachopo and cocido!

Encantador hotel rural en una zona preciosa de Babia. Personal muy amable que consigue hacerte sentir como en casa. Repetiré sin duda, muchas gracias por vuestro trato tan cercano!

Excelente opción para alojamiento en Babia y poder disfrutar de la naturaleza del macizo de las Ubiñas. Habitaciones individuales, dobles y triples, renovadas en los últimos años y todas ellas con baño. Cocina local (caldereta de cordero, arroz con costilla, cocido, tarta babiana) abundante y sabrosa y una más que interesante opción de pensión completa para los huéspedes.

Un lugar para descansar y relajarse y desconectar rodeado de naturaleza. Comida buenísima. Recomendado y repetiría sin dudar!

Restaurante y alojamiento excepcionales! Muy buenas habitaciones, amplias y cómodas. Lugar muy tranquilo y agradable para pasar las vacaciones. La comida buenísima, muy abundante y de buena calidad y variada. Y el personal muy atento, te hacen sentir como en casa. Sin duda, lo recomiendo.

Habitaciones cómodas, limpias y funcionales. El restaurantes es recomendable y todo ello en un enclave de naturaleza que acompaña para una experiencia de fin de semana que nos sentó muy bien! Gracias a todo el equipo del hotel por su amabilidad.

Habitaciones muy limpias y con baño grande y nuevo. Personal muy atento y agradable; nos dieron grandes facilidades. Muy recomendable

Limpio, económico y la comida muy rica. El servicio es muy agradable. Hay muchas rutas por la zona y una oficina de turismo justo al lado. Disponen de una terraza con vistas estupendas y un salón comunitario muy acogedor.

Pasamos un grupo de senderismo por este hotel hace quince dias. Quería dar las gracias a todo el personal por el buen trato, comidas caseras exquisitas y abundantes, colchon de la habitación bueno, el alojamiento en un lugar ideal para ir a los lagos de Saliencia. Lo recomiendo 100%, sin dudarlo volveremos a este hotel cuando volvamos por esa zona. Gracias por todo.

Paramos a comer volviéndo de peña ubiña, menú sencillo pero todo muy bueno, buena atención y precio económico. Para volver a repetir.

Es la primera vez que venimos y estamos muy contentos. Las habitaciones son pequeñitas pero suficiente, el baño nuevo y la cama muy cómoda, no podemos pedir más para una estancia rural y con objetivo de patear campo. El servicio muy agradable, todas las personas que nos han atendido han sido atentas y profesionales. La ubicación es perfecta para hacer rutas. La comida muy rica, hemos probado los huevos rotos con jamón, las setas a la plancha, la hamburguesa de buey, la sopa de cocido y el cordero asado, además hemos probado la mousse de limón y la tarta babiana, todo riquísimo, se nota que lo preparan con cariño.
Muchas gracias por todo.

Las habitaciones limpísimas y nuevas. La comida de 10, todo productos locales y caseros. El lugar es ideal para iniciar rutas de senderismo. Cualquier reseña que indique lo contrario, a mi juicio, resulta engañosa y no hace justicia al hotel.

La pena es que el desayuno hasta las 9a.m no lo servían y para hacer rutas cuando calienta el sol, es una hora muy tarde para desayunar y luego empezar la ruta. Por lo demás muy bien!

Lo único bueno las habitaciones limpisimas.
Empezamos los camareros no te dicen ni un simple buenos días la cocina muy mala aparte de que pides algo para picar y da pena en mi caso pedi picadillo con patatas y huevos y da vergüenza que pongan eso de picadillo para no volver

El sitio espectacular, cuidado al detalle y la comida impresionante, el cocido estaba riquísimo y muy abundante. Te ofrecen segundo plato que rechazamos porque imposible comer más. El menú 10 €, sorprendente!

Excelente hotel, buena cama y buen trato, en la cafetería se puede, desayunar y comer bien de manera económica, fueron muy amables al dejarme guardar la moto en un patio cerrado. Muy recomendable

Hotel con calidad-precio para el alojamiento. No tiene ascensor ni parquing, pero es confortable. Y tiene servicio de bar y restaurante.

El sitio muy bonito con una vista espectacular, el dueño muy amable el alojamiento cumple con su requisito recomendadicimo 100%

Lugar aceptable para pasar la noche. El servicio algo escaso y la insonorizacion de la habitación nula, se escucha todo. Por lo demás todo bien.

Hotel muy cuco, instalaciones en perfectas condiciones y limpio.
La comida en la cafetería y restaurante estupenda.

Comida de calidad mediocre cobrada a precio de oro.
Hay una reseña que dice "el mejor cocido que comí en mi vida. ". Pues yo comí el peor, eso sí, cobrado como el mejor. Un timo.

Paramos a comer nos pillo de paso nos atendieron muy bien rapido y la comida muy rica recomendable

Esta reseña es solo sobre la cafetería. Empiezo por la parte positiva, cuenta con un buen local y buena terraza, lo que en estos tiempos es muy valorable.
La parte mejorable es respecto a la gestión y atención de la cafetería.
Esta cafetería está ubicada en un lugar estratégico para los amantes de los deportes de montaña y en los pueblos de alrededor no es que haya demasiada competencia. Dicho esto, no me ha gustado en mi última visita que pidas cerveza sin alcohol y no tengan, o que vea cómo otros clientes piden otro tipo de cervezas y también se les haya acabado. Pero lo que menos me gustó es que a los que estando de paso y toman café no se les aporte un detalle (galletita, trocito de bizcocho, etc.) cuando en anteriores visitas se hacía y en esta última ves que a los conocidos si se les sirve.

No repetiré.
Personal muy antipático, excepto la chica de los desayunos.
Hotel muy muy ruidoso, muy sucio, hasta había papeles y cartones en los armarios que no recogieron y las sabanas parecían de papel de fumar, se veía perfectamente el colchón, sin una funda, los muelles se clavan por todos lados.
Las almohadas sucias, mantas en la cama con muy mala pinta y una colcha sucia.
El desayuno muy pobre.
Mala experiencia.

El hotel normal aunque nos clavaron bien en el desayuno. Un triste café con unas tostadas pequeñas de barra y un zumo pequeñísimo 4 euros. Creo que se pasan cuatro pueblos.

Mala calidad en carne y mal echa no vuelvo más es la segunda vez que como en este sitio. Los manteles con manchas de suciedad aún estando lavados me imagino en fin una pena.

Cuando fuimos no habían guardado la reserva, cuando fuimos a las habitaciones los anteriores no la habían dejado todavía cuando se suponía que a las 12 se tenían que dejar estuvimos esperando hasta las 15.00 dela tarde y para comer otro tanto de lo mismo vamos que comimos a las 16.00 de la tarde. La comida bien de cantidad y de sabor muy rico, la camarera que nos atendió super maja. En el fondo no creo que vuelva lo siento

Si vas en fin de semana, no se puede dormir. La gente se sienta en las mesas del bar de abajo (aunque esté cerrado) y se quedan ahí hasta las 6 de la mañana.

El personal no es excesivamente agradable, excepto la chica negra.

Pedimos una cama doble y nos pusieron dos camas.

Sobre el desayuno, no puedo opinar porque ya leí malas críticas y no quise arriesgar.

Y con respeto a la limpieza, en plena crisis sanutaria, simplemente voy a añadir una foto de la silla de la habitación.

Sin comentarios.

Nos alojamos el fin de semana y no ha sido de nuestro agrado, reguetón en el desayuno, antipatía de parte del personal, habitación que necesita una renovación.

Habitaciones pequeñas pero acogedoras. NO HAY ASCENSOR, por si viajas con personas que lo necesiten. La Aldea de San Emiliano está muy bien ubicada para conocer el valle de Babia y este hotel ofrece una alternativa habitacional en un entorno dónde apenas las hay. Su carta es variada, con relación calidad precio adecuada. Recuerda que este hotel ofrece desayunos, comidas y cenas y no es fácil encontrar ese servicio por allí sin pasar un rato en el coche por carreteras estrechas.

Estuvimos con mi hija en la búsqueda de nuestras raíces. Hermoso hotel rural familiar atendido por sus dueños. Gracias Marisol!

PÉSIMA gestión de reservas. Si no les interesa tu reserva, aunque te la haya confirmado Booking, directamente te la cancelan.

Bastante bien, aunque la calefacción hacia un ruido permanente como de goteo. Los desayunos muy bien, y tienen opciones para celiacos

Esta muy bien. Tiene baños amplios. Habitaciones amplias también. Lo único malo es que estaban haciendo obras y a las ocho de la mañana mucho ruido. Y los huéspedes poco respetuosos y ruidosos al bajar. El desayuno un poco caro si, pero el precio de la habitación doble muy bueno y ajustado calidad precio.

El trato de los camareros mal y empezaron unas obras a las 8 de la mañana sin avisar que parecía que se iba a caer el edificio, y no te dan de desayunar hasta las 9 por lo que nos fuimos una hora a la calle a esperar. Nunca me había pasado algo así y duermo en un hostal diferente cada día. Incomprensible.

El hotel está bien ubicado tienes comercio banco y las habitaciones está bien nosotros sólo pasamos una noche y correcto el desayuno un zumo café y tres tostaditas de pan.
Para ir a los lagos de saliencia subiendo por el pueblo de de torrestio por una carretera sin asfaltar que la verdad ya podían arreglar la Junta de Castilla y leon

El hotel muy viejo, por lo menos la habitación que me tocó a mi, el desayuno escaso las cenas abundantes y el personal correcto

Entramos a tomar algo y vimos q tenían comida para llevar y decidimos pedir una hamburguesa de buey para cenar. Estaba muy buena y era muy grande (no fuimos capaces de acabarla) y t ponen patatas fritas para acompañar. La recomiendo

Ese plato de huevos (si hubieran sido caseros mucho mejor) con picadillo se sale. Y para comer esa hamburguesa hace falta tener buen saque

Hotel rural economico en el centro del Valle de San Emiliano, la Babia leonesa, rodeado de bonitas montañas calizas como el escarpado cordal de las Ubiñas.

Fatal, las camareras lentísimas, el servicio pésimo. Tardamos más de 30 minutos en que nos sirvieran (omitiendo el tiempo que tardaron en traernos la carta 15 minutos aproximadamente). Para poner la mesa lo hicieron con desgana por no decir que dejaron los platos en la mesa y se fueron. Ni siquiera pudimos tomar un café por lo que tardaban.
Nos costó pagar porque las camareras habían desaparecido y no había nadie en recepción, en conclusión. Pese a tener buena comida el servicio es deprimente.

Lugar que no te debes de perder en tú visita a Babia.
Restaurante con muy buena cocina, con productos típicos todos de primera calidad.

Buena comida y muy amables los camareros. La pega, la atención prestada. Atendieron primero a gente que llegó más tarde que nosotros y eso que teníamos reserva.

Estuvimos desayunando un grupo de amigos y el servicio fue lento, pero lo peor fue lo que nos cobraron por las consumiciones: 1 café 1'80, una tostada de jamón pequeña 5€ y un zumo 2'80€.

Un sitio para no volver, mala atención, el servicio lento, la comida regular, y encima te cobran un euro y medio el servicio de mesa por comensal, éramos cuatro y la ración de pan, que no pedimos, nos costó casi 6€.

La comida bien, pero para el precio del menú escasa, la atención deprimente, y desagradable desde todo punto no recomendable.

La limpieza deja mucho que desear, telas de arañas, la funda de la almohada con manchas que se veían según abrirás la cama.
El desayuno pedimos unas tostadas con tomate y el tomate venía echado de la cocina y otros clientes en la mesa de al lado tenían el tarrito de tomate.
No volveremos

Pequeño hotel, sencillo y limpio. Precio razonable. Lugar imprescindible para rutas de montaña en bicicleta o moto

Fuimos a Peña Ubiña y después por casualidad paramos a comer en San Emiliano. Pedimos hamburguesa de buey, sugerencia del restaurante, unos huevos con jamón y una tosta de solomillo.
Lo mejor la hamburguesa, para mi gusto muy gruesa la carne y una hamburguesa enorme, se hizo complicado comerla.
El servicio muy bien ya que, fuimos a comer casi a las 16: 00 horas y nos atendieron sin problemas.