La Fábrica del Canal

Es la tercera vez que vamos a cenar y es un lugar exquisito. Esta vez tomamos un menú desgustación muy completo. En anteriores ocasiones la carta entre los amigos que íbamos la probamos practicamente en su totalidad.

Los platos son elaborados por Roxana Sevinger, gran chef de Venta de Baños, muy bien elaborados.

El servicio muy amable y el ambiente con la decoración navideña estupendo y acogedor.

Volveremos porque es un lugar que te atrapa por la historia que guarda entre sus paredes.

Perfecto, sin más. Fuimos entre semana a comer (miércoles 22NOV) y fue como estar en casa. Éramos la única mesa y quizás por ello nos hicieron un tour guiado por las diversas plantas donde se encuentran las instalaciones de la antigua fábrica, que han respetado de manera genial.
En cuanto al momento de la comida, resaltar el impecable servicio, la climatización perfecta y el ambiente incluida la agradable música de fondo que contribuyeron a que la experiencia fuese inmejorable.
El aperitivo de mantequilla sublime.
Los platos perfectos, buenas raciones, emplatados a la altura y elaboraciones de gran nivel.
El detalle final de obsequiarnos con un postre helado con aspecto de limón con una vela fue el colofón perfecto para el cumpleaños de mi esposa, GRACIAS.
Es nuestro sitio de referencia en la zona a partir de ahora, nos vemos pronto.
Nos hubiese gustado mucho saludar a la chef, dado que repito éramos la única mesa, pero lo entendemos.

El hotel está genial, estuvimos en la habitación 206 y nada malo que decir, una maravilla todo, espacio, limpieza, decoración, comodidad, mobiliario etc, el hotel en general un 10, buen ambiente, temperatura fantástica, y del restaurante que decir… tomamos el menú y puede ser superable, la carta de vinos muy buena el servicio perfecto así que volveremos a probar la carta que tenía muy buena pinta.

De los mejores sitios de la zona. Un ambiente acogedor como en tu casa, una chef de primer nivel y atención en sala impresionante. Las habitaciones de ensueño, con todos los detalles. Repetiremos pronto, lo mejor para combatir el estrés. Recomendable.

Gran Hotel Boutique en el Corazón de Castilla & León
LA FABRICA DEL CANAL es un hotel boutique ambientado con muy buen gusto y con acceso a una cocina de gran nivel. Comimos un menú de degustación exquisito y el día siguiente una comida igual de buena en su restaurante Entre Maquinas. El staff se esmera por dar una atención personalizada y el ambiente te hace sentir como estar entre amigos. La Suite es muy espaciosa, con gran iluminación natural y las camas extremadamente cómodas. Volveremos tan pronto como nos sea posible para desconectar de la gran ciudad.

Aparte de la comida, el entorno del canal, y poder ver como eran las harineras, maravillas de ingenieria

Hemos ido 7 personas a comer, la comida muy rica y los camareros encantadores. Repetiremos sin duda!

Experiencia única. Un lugar maravilloso en el corazón de Tierra de Campos. Esta antigua fábrica cuyos dueños nos han acogido con absoluta profesionalidad y trato familiar, nos ha permitido descansar y disfrutar de unas bellísimas instalaciones históricas cuidadas al detalle. Destacamos la oferta gastronómica. En su magnífico restaurante degustamos exquisitos platos que ponen en valor el producto local. Altamente recomendable. Gracias a la chef Roxana Sevinger y su equipo por tanta pasión y saber hacer. VOLVEREMOS

Somos una familia de Madrid. Estuvimos pasando la Noche Vieja 2022 en esta fantástica fábrica. Nos encantó. Lo pasamos fenomenal. Muy recordable. Nos atendieron de una manera muy especial. Volveremos. Todo estuvo fantástico y con todo detalle. La cena exquisita. Muchas gracias. Volveremos.

"Visita obligatoria si pasas por Palencia"
Vamos siempre que podemos, para probar los platos de cada estacion, Nunca decepcionan!
El lugar no puede ser más agradable y acogedor. Aunque se trata de una antigua Fabrica, han sabido conservar lo historico y a la vez, dotarlo con calidez y confort.
El precio es totalmente adecuado para la calidad que ofrecen.
Sus instalaciones y entorno
Espectaculares.
Volverémos

Ayer visitamos el canal de Castilla en Abarca de campos y hemos encontrado un lugar encantador, una antigua fábrica de harina convertida en hotel y restaurante, comida y servicio espectacular, probamos habitas, foie, trucha Palestina y el pichón de tierra de campo por ser de la zona.
Todo delicioso, atención estupenda, además el camarero nos comentó que la chef es selección española de cocina y ganaron la medalla de plata en el mundial de cocina, en general todo excelente, encantador el lugar.
Sin duda alguna una gran elección para compartir en familia y conectar con la historia, naturaleza y gastronomía castellana.

Un sitio precioso, tanto el entorno natural de alrededor del canal de Castilla como el propio establecimiento, muy buen trato nos atendieron incluso sin haber reservado y la comida muy variada y buenos productos

Totalmente recomendable! El restaurante es precioso, acogedor y con mucho encanto. Todos fueron súper amables y la comida increíble. Una gran experiencia, comimos mientras se paraba el tiempo.

Para recordar y volver

Fuimos unos días de escapada y nos alojamos en La Fabrica del Canal. La calma y la exclusividad son inmejorables. La habitación preciosa y comodísima. Reservamos uno de sus Duplex con bañera y fue una de nuestras mejores escapadas. Nos trataron con mucha amabilidad y nos sentimos muy a gusto. En su restaurante desayunamos y comimos el menú gastronómico - un acierto total. Los platos una combinación de producto de calidad y preparaciones innovadoras de recetas clásicas. Texturas sublimes. El comedor es muy especial, se come entre maquinas de moler harina de 1857. Es un lugar muy acogedor y con vistas preciosas al lago. El postre final “LA PERA” una obra de arte.

Comida con luces y sombras. Fui a comer a este restaurante un domingo (puente de Todos los Santos). Buena comida, pero sensación agridulce. Precio muy elevado para lo que ofrecen.
RESERVA: Llamé para reservar, porque cierran cocina a las 2: 45 y yo no podía ir antes de las 3. Fueron muy amables y me dijeron que no habría problema. Me pidieron que reservara desde la página web y que especificase la hora en un comentario. Al efectuar la reserva es obligatorio poner el número de tarjeta. Una vez efectuada, aparecen las condiciones de cancelación: se cobrarán 25 euros por comensal si se anula la reserva 48 horas antes de la misma.
COMIDA Y ATENCIÓN: cuando llegamos, el restaurante estaba vacío. Carta muy limitada (cuatro entrantes, cuatro carnes, tres pescados y cuatro postres). Atención en sala agradable, pero explicación demasiado escueta de una carta en pizarra en la que no se detalla nada acerca de los platos.
Platos en general elaborados y de buena calidad, pero excesivamente caros. Compartimos guisantes y habas. Probamos, como principales, lubina, rape, sándwich de lechazo, canelón de costilla y solomillo. Postres, tarta de queso, isla flotante y coulant. Los guisantes, exquisitos. Las habitas con crema de patata y huevo tenían un sabor muy fuerte. La yema del huevo estaba completamente cuajada. Todos los principales de 10: muy buen producto, presentación y elaboración; acompañamiento acertado. Los postres estaban ricos. Muy elevado también el precio de las bebidas y el pan. Nos pusieron un entrante y nos invitaron a los cafés.
LOCAL: espacio bonito, agradable y bien decorado. Es interesante como han conservado las máquinas de la fábrica de harinas.

Gran menú, difícil decidirse, porque todo sonaba estupendo. Lo que pedimos nos gustó mucho y algunas de las propuestas nos dejaron muy sorprendidos. Magnífica comida, un comedor espectacular y único, ubicado en un lugar idílico. Genial propuesta. Muy recomendable.

Comida original y muy bien elaborada, el café en la terraza fue inolvidable. Está en un entorno único

Cocina muy exclusiva, bien elaborada y con muy buen servicio.
El entorno es espectacular y el interior sorprende gratamente.

Me lo habían comentado y fui a verlo un sábado tarde. Es un sitio fenomenal, precioso. Me ha sorprendido grátamente

Es una antigua fábrica harina, actualmente es un restaurante con muy buena atención al público, platos elaborados y exquisitos. El restaurante es precioso con una terraza q mira al canal.
Lo recomiendo.

Gran descubrimiento! Una antigua fábrica de harinas, reconvertida en restaurante.
Nos pareció una idea buenísima. Además Manu, que fue el que nos atendió, no dudó en enseñarnos y explicarnos con detalle los cambios que se habían realizado en la fábrica, como funcionaba antes.
Nos explicó los platos uno a uno y sin duda la elección que hicimos nos encanto. Todo buenísimo! 100% recomendable

Las instalaciones espectaculares, el lugar inmejorable, el entorno magnífico, la comida buena y el servicio pésimo, de lo peorcito que yo he visto últimamente.
Botella de Mauro abierta no sé dónde porque yo no lo vi y abierta de qué manera, nos sirvieron los entrantes y no teníamos platos. Y así podría seguir.y seguir espero que lo puedan solucionar porque el sitio lo merece. Un saludo

El servicio no es acorde con la categoría que se le quiere dar al lugar.
Por otro lado unos precios excesivos; a
modo de ejemplo: una copa de vino tinto normal que tomamos en la barra antes de comer, 5 € y otra de vino blanco en la comida, también 5€.
La mesa que teniamos al lado -y única mesa del restaurante un sábado junto con la muestra-, se quejó al camarero de los precios.
En fin, un sitio muy bonito para visitar, pero la relación calidad-precio desproporcionada.

Comida exquisita, en un entorno ideal. El trato estupendo, con mimo y detalle. Totalmente recomendable, una parada para recargar pilas.

Entorno precioso, tranqiuilo. Hemos celebrado un cumpleaños comiendo estupendamente, el menú exquisito resaltar el bacalao, el trampantojo de lechazo y sobresaltar los postres.la tarta de queso y el limon os lo recomiendo a todos. El trato del personal excelente y han tenido el detalle de enseñarnos el museo de la fábrica de harina y de invitarnos a una copa de champán. Volveremos seguro

Realicé una reserva sin cancelación para un familiar en este hotel para un fin de semana. El mismo viernes antes de la reserva, me entero de que mi familiar ha sido contacto estrecho con un positivo por COVID y por prudencia decido llamar el mismo viernes a primera hora al hotel para comunicar esta situación sobrevenida. El hotel no me pone ningún inconveniente para modificar la reserva y por mi parte comunico al hotel que postpongan la reserva 7 días hasta el fin de semana siguiente, a la espera de las pruebas pertinentes a mi familiar, pero solicito que se mantenga la reserva sin cancelar, ya que en caso de que mi familiar diese finalmente positivo, yo mismo podría hacer uso de la habitación. El hotel me indica que durante la semana próxima se pondrían en contacto conmigo para confirmar la reserva - he de decir que esto me extrañó, ya que la reserva de la habitación ya estaba abonada en su totalidad, pero pensé que era un procedimiento similar al que realizan los restaurantes poniéndose en contacto con el comensal unas horas antes de su llegada para confirmar la reserva. El jueves siguiente, a 24 horas de que se iniciara mi reserva, y sin haber recibido ninguna llamada ni e-mail por parte del hotel, me comunican que como no ha tenido noticias por mi parte, ha decidido unilateralmente liberar la habitación que tenía reservada y pagada con lo que me encuentro a un día del fin de semana, sin reserva y sin el dinero de la misma. El hotel no me ha vuelto a dejar reservar.

Un hotel magnífico en un entorno de película. Todo el personal muy atento con el fin de hacernos pasar unos días realmente buenos.

Imprescindible ver la fábrica museo de harina dentro del edificio, un espectáculo para los ojos.

El hotel dispone de bicicletas que nos dejaron para hacer una ruta estupenda por la vera del río. Los pueblos de al rededor son preciosos con iglesias donde merece la pena entrar.

Un plan que repetiremos seguro y que recomendamos

Todo ha sido del diez desde que entramos por la puerta. El personal atento y amable, la rehabilitación de la antigua Fabrica una maravilla y las habitaciones cómodas, espaciosas y decoradas con un gusto exquisito. Uno de los mejores hoteles en los que hemos estado por su tranquilidad, decoración, limpieza y gastronomía. Las cenas fueron espectaculares: técnica, vanguardia y gran calidad de producto. Es la segunda vez que estuvimos y pasamos un fin de semana de ensueño.

Teníamos muchas ganas de ir y la experiencia ha superado nuestras expectativas con creces, no sólo por la comida exquisita elaborada con producto de calidad, sino por el estado en el que los dueños conservan las máquinas de la antigua fábrica de harina. 100% recomendable.

El sitio es espectacular, la comida estaba genial y el servicio es muy bueno. Muy recomendable.

Restaurante muy agradable, comida muy rica y muy bien preparada y presentada. Nos atendió Manuel, muy atento que además muy amablemente nos enseñó la fábrica. Totalmente recomendable. Muchas gracias Manuel.

Lugar idílico situado en una vieja fábrica de harinas. Entorno espectacular. El trato exquisito, la comida impresionante hecha con mucho mimo por su Chef, los productos con los que trabajan son de mucha calidad. Que más se puede pedir? Lugar recomendable 100%

El sitio es preciso pero te recorres kilómetros para tomar algo y recibes un trato vejatorio, humillante y tienes un bar pero no te atienden, solo a los qie duermen y comen en la posada

Ha sido un descubrimiento casual: una antigua fábrica de harinas, reconvertida en restaurante: una idea magnifica para darle otra vida a todas estas edificaciones que estan en el canal abandonadas a su suerte. La restauración del edificio es magnífica y la visita ya merece la pena.
Tienen un menú sencillo y muy cuidado, con productos de la tierra. Pedimos las habitas, trucha y el lechazo. Platos sencillos y muy cuidados, todo estaba muy bueno. Atencion exquisita, ideal para ir con la familia.

Excelente todo. Buen producto, buena elaboración, trato impecable y el sitio precioso. Cuidado cada detalle. Muy profesionales, a la vez que cercanos consiguiendo que sea una experiencia inolvidable. Totalmente recomendable y para repetir!

Nosotros pedimos micuit de pato, solomillo, carrilleras, sándwich de lechazo y, de postre, la tarta de queso. Todo estaba buenísimo. La terraza es espectacular y, en general, merece mucho la pena visitar el sitio, que antiguamente era una fábrica de harina.

Mega freundliches Personal, das Essen ist ein traum Preis Leistung super.
Die Zimmer sind sauber hell und hochwertig ausgestattet. Nur zu empfehlen. Todo perfecto.

Lugar con encanto y buen gusto, cena muy rica y un servicio extraordinario de la mano de Gerardo. Volveremos!

Una cena inolvidable con amigos, no sólo por la calidad de que cenamos, si no también por la atención tan personalizada y cercana que tuvimos.
Un lugar con encanto y una restauración hecha con mucho gusto de una antigua fábrica de harina.
Sin duda volveremos

Un verdadero placer comer en el restaurante de la Fábrica del Canal. Una atención personalizada y cercana. La comida de calidad, como muestra el sándwich de lechazo y el Atún que es una delicia. Volveremos

Hemos estado alojados en éste hotel este fin de semana y hay que destacar la amabilidad y la cantidad de detalles que han tenido con nosotros, el desayuno es exquisito, la cena espectacular. En general han hecho una apuesta excepcional para mantener una joya de nuestro patrimonio industrial.

Buscaba un lugar especial para celebrar nuestro aniversario de boda y no he podido elegir mejor. Con su amabilidad, cuidados y cercanía nos hemos sentido como en una luna de miel. El hotel es precioso, las habitaciones muy acogedoras y el restaurante exquisito. Gracias por todos los detalles que habéis tenido con nosotros! Un abrazo.

Un sitio especial, cargado de historia y en un entorno único, desde comer viendo pasar por debajo de tus pies el canal de Castilla, tomar una copa disfrutando el paisaje y el sonido del agua o dormir en una de sus preciosas habitaciones todas con vístas al canal y con un estilo único y sereno.
La carta de temporada y la calidad del producto y la elaboración impecables, si visitas la zona no puedes dejar de visitar este lugar maravilloso y especial, una experiencia única y un deleite para los sentidos ️

Tercera vez que intentamos cenar allí y está cerrado, no hay forma de encontrar este sitio abierto, pongan el horario de apertura correcto

Pésimo, precios excesivos, las instalaciones no son nada de otro mundo. Un día de lluvia ni si quiera te permiten tomar las cosas debajo del techo. Nos tuvimos que llevar las cervezas y tomarlo en el coche pésimo. Y ni si quiera tienen café o cervezas pequeñas. FATAL.

Un viejo molino restaurado con mucho gusto, respetando la maquinaria original entre la que puedes degustar cocina de muy alto nivel, a un precio más que justo.

Lugar encontrado de suerte fuimos a la aventura, nos sorprendió, decoración perfecta rehabilitación del lugar asombrosa, falla un poco el desayuno, sin alternativas, habitación y cocina un 10, personal muy profesional. Recomendable.

Un lugar maravilloso en pleno corazón de Palencia. Creo que me quedaré corto con esta reseña, la fábrica del canal es una antigua Fábrica Harinera reacondicionada en Hotel de Lujo y Restaurante. Os puedo hablar del Restaurante ya que he celebrado con mi familia la comida de Navidad. El local es precioso, con una decoración estilo nórdica, elegante, con muy buen gusto pero sin olvidar su pasado arquitectónico de fábrica Harinera. Hay poquitas mesas y espaciadas lo suficiente para que tengas una intimidad más que adecuada y difícil de conseguir en estos tiempos. La cocina es moderna y de proximidad, platos elaborados con un Guiño al producto de la zona y con una calidad excelente. El servicio y la atención al comensal es lo más destacable de todo, haciéndote sentir especial desde que entras hasta que sales. Un lugar exclusivo, refinado pero con un trato cercano y personal. Un 10 estrellas en toda regla.

Un lugar mágico que merece mucho la pena. Las habitaciones son increíbles y el edificio es una antigua fábrica de harina restaurada encima del canal de Castilla. Si buscas tranquilidad este sitio cumple a las mil maravillas. Muy recomendable también para hacer trekking, canoas o bici. Por último el restaurante es de primera tanto en calidad como en servicio

He pedido a la dirección información para un evento, acotando el servicio por evitar riesgo. Me han mandado a tomar por saco, Así de claro y me han colgado el teléfono, la acción comercial es para mejorar,

Precios desorbitados en "TODO" y sin ninguna calidad, solo un ejemplo, cerveza con limon (2,90) y una mahou tostada 0,0 (3,20) y sin servicio de terraza. En los exteriores es imposible estar por los continuos picotazos de los mosquitos que hacen imposible disfrutar del atardecer y mucho menos de la noche. Un lugar NADA recomendable.

Excelente lugar donde poder desconectar de todo. Un autentico oasis con una cocina 5 estrellas.volvere!

Esta muy bien, para tomar un aperitivo en la terraza.
Oyendo la corriente que baja por la esclusa.

La verdad que el sitio es precioso, está todo super bien cuidado, y no puede ser más acogedor; pero nos pasó que fuimos el otro día y llevé a mi perro (de 3 kilos) pensando que como tenían jardín se podría meter.cuando llegamos después de 40 minutos de viaje, vimos que no estaba permitida la entrada de perros, así que nos fuimos turnando entre las 4 personas que estábamos para tomar algo, mientras otra se quedaba fuera con el perrin. Me parece perfecto, las normas son así pues se cumplen, pero cual fue mi sorpresa que el otro día han ido unos amigos y me dicen que habían visto en los jardines a un perro, claro serían amigos no? Si hay normas hay normas para todos, esto de favoritismos en sitios públicos que te van a ver tarde o temprano queda feo.

Very special historical place with newly- established innovative facilities at the Canal in a beautiful natural setting (restaurant and boutique hotel). Fantastic chill-out area along the water canal, as well as great restaurant that features the old machines of the former mill. Huge efforts in maintaining the old set-up of the building and its originality and authenticity, which makes it so special.
Very good food and wine offer that we enjoyed during the weekend! Highly recommended place that enriches the touristic offer of this region enormously. We will come again. Congratulations to the owners and managers of the Fabrica and good luck for the future endeavors.

Un oasis en mitad del desierto. Un local con historia (antigua fábrica de harinas) entorno increíble. Paz y zona de paseo. Destacar la terraza en plan chill-out. En zona ajardina junto a una de la exclusas.
El único pero serían los mosquitos al anochecer y sin viento.
Totalmente recomendable si estás por la zona pásate.

Una de las mejores reformas/restauraciones que he visto. El restaurante brinda un servicio y una atención impecables, acompañados de unos platos deliciosos de gran calidad. Muy recomendable!

Una antigua Fabrica de Harinas del Siglo XIX transformada en un acogedor hotel de lujo. El sitio es exquisito y la atención del staff atenta y amable en cada momento. Lo mejor de todo son las habitaciones. Son grandes y con mucha altura y decoradas con un gusto extraordinario. Las camas enormes y comodísimas, mucha luz y tranquilidad. El restaurante no es para menos. Todo exquisito y platos sorprendentes. Las Habitas una delicia, el Arroz con Bogavante también fantástico y la espuma de vainilla insuperable. Hemos pasado 2 días felices, tranquilos y relajados. Desde luego es un autentico descubrimiento en Castilla y volveremos seguro el año que viene durante las vacaciones en España.

Exquisita comida de autor. Muy recomendable ' las habitas la catedral' y ' parpatana de atún'. El trato por el camarero que nos atendió, Jose, excelente, te sabía orientar muy bien en cuanto a la elección de la comida como el vino. Después para tomar el café y copa, el jardín que tienen es precioso con asientos y hamacas con vistas al canal de castilla.
Volveremos pronto.

Un restaurante que te sorprenderá. Es diferente.
Ubicado en el canal y como antigua fábrica pues estructura exterior no es muy bonita, pero su interior si lo es. Está todo conservado y mejorado con mucho atractivo.
Es una idea de negocio diferente donde se respira paz.
Para mí el servicio es bueno, los platos diferentes y la relación calidad precio está bien.
Bien atendido.
Sin lugar a dudas para ir. Ya luego tú decides.

Espectacular hotel y restaurante en Tierra de Campos. Enhorabuena por esta reforma tan acertada de un edificio del siglo XIX. Pasamos por casualidad en nuestra vuelta desde Santander y nos hemos quedado sorprendidos y encantadísimos. Comimos en la terraza - un auténtico Oásis en esta tierra tan seca - y pasamos en continuación una tarde relajada, tumbados en las tumbonas de su Chill Out, tomando copas. Una experiencia muy agradable encima del agua del Canal de Castilla, con una fontana de agua y barcas a la vista. El tiempo so nos pasó volando y decidimos quedarnos a cenar. Fue todo un acierto. El restaurante estaba fresquito y lo tienen montado entre las antiguas maquinas de la Fabrica, todos intactos. La comida deliciosa, platos sorprendentes como Habitas, Ceviche, Carpacchio de Atún Rojo y Postres como Canelón de Mango o Espuma de Vainilla. Todo fue perfecto: Servicio, comida de alto nivel, ambiente elegante y a ala vez relajado y la decoración de muy buen gusto. Para repetir con seguridad y quedarse unos días en el Hotel.

Un lugar tranquilo donde dormir y comer un buen plato de sopas castellana y un buen lechazo al horno.

Hemos venido a comer con amigos, el sitio es espectacular y el servicio ha sido excelente. El ratito de terraza fuera, después de la comida también ha sido de lujo.

Muy mal! Es un paraje increíble al que le falta mucha profesionalidad, el personal pésimo, las copas a 8€
aguadas y muy mal servidas. La
Comida ni fu ni fa, el arroz con bogavante malo, sin sabor. Lo que he
notado es una falta de saber hacer total.del o

El lugar es precioso pero no tenian cerveza sin alcohol, la que nos dieron con alcohol estaba caliente, pedimos una tonica y no la tenían fría y nos cobraron por ella 2.70 y te tienes que servir tu. En fin queremos cobrar bien con un desorden tremendo.

Un lugar en el que disfrutar de una comida elaborada y sorprendente. Espectacular el parpatán de atún y las habitas. Todo lo que hemos probado estaba delicioso. Y para terminar una espuma de natillas con helado. El servicio perfecto, gracias José por tus recomendaciones y tu trato. Después puedes disfrutar de la zona chill out y tomarte una copa en un entorno magnífico. Genial para venir con amigos.

Excelente lugar, la atención muy buena, los entrantes deliciosos, los platos con un equilibrio perfecto y los postres fenomenales. Lo recomiendo 100%.

Gran lugar para una parada a modo de aperitivo o comida en el centro de Tierra de Campos.
Acérquense.

Solo el sitio es precioso. Hemos estado tambien en invierno, pero ahora en verano la zona exterior es preciosa. El personal atento y profesional. Cenamos fuera: foia, vieiras, y habitas.madre mía que rico estaba todo. Y la presentación de los platos impecable! No pudo faltar el postre, nos lanzamos a probar un plato que aún no estaba incluido en carta, una espuma de natillas con helado y base de almendras.buenísimo. Súper recomendable!