Landa

Me enamoré de cada centímetro de este hotel. Sólo pasé una noche pero fue fabuloso. Una estancia obligada para los amantes de los hoteles. De todos los hoteles en los que me he alojado, este es hermoso. Simplemente te abraza.

Fuimos a comer. Buena comida, entorno impresionante y el restaurante muy bonito, con buen servicio. Con cargadores para eléctricos.

Camino a casa de regreso de Madrid como siempre nos hemos quedado a las 17: 30 a comer y nos han servido rápido y la verdad que la comida muy rica y los postres y la bollería que hemos comido estaban exquisitos

Hotel muy bonito y el restaurnte, ideal para descansar, dispone de suoercargadores tesla, para ir con coche eléctrico

Solo tengo palabras de agradecimiento para el personal del Landa, sobre todo los de recepción. Un 10 para María, Isabel, Begoña.súper comprensivas y empaticas. Espero veros algún día. Gracias gracias gracias

Hermosas habitaciones. Amplio y espacioso, un verdadero toque de lujo. Todo el personal, desde la recepción hasta los botones, está bien capacitado y es agradable de tratar. Muchos pequeños detalles en las habitaciones le permiten saber que se cuida y se piensa en los huéspedes.

Que vergüenza el trato al cliente en la cafetería. Esta lleno y me dicen solo tenemos sitio en barra. Vamos 5 adultos y 4 niños que estábamos de pie. En cuanto se queda libre el sitio y sin nadie esperando pedimos permiso para sentarnos y nos dicen que si. De repente la encargada empieza a cabrearse con todo el personal porque nos han dejado sentarnos. Verguenza he sentido de la mala educación de la encargada

Mi reseña es del restaurante. Me habían hablado bien de él, y no me defraudó. Exquisito todo lo que tomamos. Los huevos con morcilla, el cordero, los postres. Muy buen servicio. Muy limpio, con detalles en el aperitivo y en los cafes. Repetiré.

El restaurante no tiene ninguna pega, el precio un poco elevado pero es lo que tiene ir al Landa.

Lugar mágico. Sus vistas, su decoración y sobretodo su comida. Exquisito y con una atención al cliente muy buena. La morcilla sublime

Un sitio precioso, bien atendido. Con cuidado para que no se aglomeren los clientes, apuntan por orden de llegada, pero hay que esperar fuera y eso en Burgos en invierno puede ser un problema. Todo muy rico, morcilla excelente y croquetas buenísimas, por poner una pega las patatas fritas (pre congeladas), mejor las panaderas que son de verdad. El Brioche espectacular!

Pequeñas raciones a grandes precios, los platos en general bien cocinados pero unas raciones exageradamente pequeñas, la bola de helado ni se veía y 6 euros de precio, la ración de tomate 14,50 euros y escasísima en general mal, lo único que merece la pena las instalaciones

El mítico Landa sigue manteniendo un servicio absolutamente impecable, unas instalaciones fantásticas, y una piscina que es una preciosidad, sobre todo en invierno con su chimenea. Parada obligada para comer o para picar una morcilla con huevos fritos, y además, tiene supercargadores de Tesla…

El sitio chulo los precios altos y lo que comes medio sin ser estupendo no está mal solo puedo decir esto es un sitio del que no sales ni enteramente satisfecho ni decepcionado pero yo no repetiré

El lugar es precioso, muy cuidado, muy bien decorado. El servicio nefasto. Hemos ido 8 personas ha tomar un vino, no nos han puesto nada para picar porque va aparte. Hemos tenido que pedir que nos cambiaran las copas, estaban sucias y olian fatal. Se han aquivocado constantemente en todo lo que pediamos. En fin creo que aseria importante cuidar de esos detalles que el cliente valora en cualquir sitio pero más en uno que tiene tanto renombre.

Un sitio espectacular.la comida exquisita.y la camarera que nos ha atendido majísima.nos ha encantado.volveremos seguro

Muy bien como siempre pero no sé puede permitir un Hotel 5 Estrellas no tener cerveza sin Gluten.

Un clásico que nunca falla. Platos perfectamente ejecutados, calidad en sus productos y un servicio excepcional.

Me encanta, excelente atención y buena co.uda en un lugar muy bien ambientado, hablo del restaurante y el bar

Tardaron en atenderemos y se les olvidó sacar parte de la comanda. Tras esperar 20 minutos decidimos marchar.
Tras pagar, tuvimos que pedir el cambio, ya que a la mujer que estaba atendiendo se le olvidó dárnoslo y eso que la máquina te da el cambio automáticamente.
El sitio muy bonito.
No repetiremos.

Está bien, pero para una boda con poca gente. El sitio no está muy adaptado para bodas grandes en interior. Los exteriores son grandes espaciosos para poner una gran carpa y hacer de él un sitio mágico en el día de tu boda.
La parte exterior de la piscina para un lunch muy bien, pero en el interior se está un poco apretado por la piscina, es como si quisieran aprovechar el sitio de la piscina y para mí es un poco incómodo.
La comida pues bueno, me dejó un poco algo que desear, en algunos platos que comimos; en el lunch el jamón cortado a cuchillo, estaba un poco seco y el chorizo a la brasa no parecía un chorizo de calidad.
La mesa de quesos que había era impresionante muy buenos.
El solomillo al hojaldre por ejemplo estaba espectacular. Después las copas de la noche me parecía como si fuera de poca calidad. Sigo diciendo que es mi visión del día que pase allí.
Y el trato de algún camarero jefe o encargado que ese día iba de rojo un poco mal educado y antipático, como si quisiera echarte desde el principio.
Por el resto de personal muy bien.

Sitio venido a menos, camareros sin saber lo que venden, postres duros, se salva un poco por la profesionalidad del encargado o dueño, no se. Pero hay detalles que deberían de cuidarse, si te cobran 5 euros por un bizcocho de hace 7 días, es que algo falla. Aunque el bizcocho, estaba muy bueno. Lo resumo en "falta el detalle de calidad para justificar el precio"

Muy agradable pero muy caro. 2 consomé, 1/2 de morcilla (4 rodajitas para ser exactos) y 1 botellita pequeña de agua, 22€.

Hemos acudido a desayunar en hora punta, destacar que el lugar es bonito pero el desayuno es muy simple con un precio elevado para lo que es. Me había tomado el café cuando me llegó la tosta, después es estar esperando 20 minutos una tosta con tomate muy sencilla. Uno de los camareros muy amable se disculpó y al irme me preguntó si había estado todo bien. Mi respuesta fue que sí, pero nos íbamos de viaje y nuestra salida se retrasó 1hora.
Volveré, pero espero que sea más rápido todo.

Es un sitio con muchísimo encanto, de hecho para nosotros se ha convertido en parada obligatoria.
Os lo recomiendo

La verdad que es un sitio estupendo para hacer una parada en un viaje. Suele haber tanta gente que a veces tardan un poco en atenderte pero para mi gusto merece la pena. Plato estrella los huevos con morcilla. Tiene un restaurante informal, una terraza cubierta y otra descubierta. Todas son recomendables según las necesidades. Sólo me queda alojarme alguna vez ahí.

Mi experiencia de ayer cenando en la cafetería fue un desastre, pedimos unos huevos con morcilla y una ensalada (los pocos ingredientes parecían de plástico además de estar congelada,) productos tan básicos con una calidad muy mediocre para un hotel de esta categoría. Que lástima!

This place is stunning. It is one hour walking next to a busy road off of the Camino but as two tired pilgrims when they were not able to give us the standard room with a double bed they gave us the suite. We had the stunning pool to our selves at around 9 pm. We had the restaurant to ourselves. The milk lamb was a stand out as well as the salmon salad. The rioja was a great recommendation. The landa cocktail also really tasty. I didn’t like the garlic soup as much as I have other places.

Ante todo decir que vinimos con unas expectativas muy altas. El sitio es imponente, se respira tranquilidad por todas partes hasta que te sientan y ahí ya pues no tanto, yo me esperaba un sitio más amplio y tranquilo pero es sábado y hay mucha afluencia. Yo personalmente vine a probar los famosos huevos con morcilla y estaban muy bien hechos, la morcilla tremenda, los he disfrutado, el único pero que les tengo que poner es que llegaron a la mesa casi fríos. El café con leche también fue de mi gusto, fuerte, la pega que la leche me lo dejó casi frio y me gusta quemando, no lo especifiqué y no me preguntaron al añadir la leche. La tostada con jamón y tomate de diez. El croisant a la plancha exquisito. Seguro que volvemos.

Zona de cafetería suele estar abarrotada y falta de personal que la atienda adecuadamente. Por ello no le pongo 5 estrellas.
El restaurante en cambio tiene una correcta atención y una calidad de producto muy destacable. Aparte del cordero recomendar el jamón, los pimientos rellenos de rabo de toro y la ensalada verde.

Ha bajado muchísimo
Era un lugar d referencia y ya eso ha pasado a la historia
Ha mejorado mucho la decoración y demás
Ha mejorado en decoración tanto como bajado en la calidad del resto
Una verdadera lastima
Deberían hacer un esfuerzo por recobrar el lugar q durante tantos años tuvieron

Un sitio para no volver.el servicio, que parece sacado del cuento de la criada, da más imagen que buen trato. Los vasos de los refrescos parecen sacados de un todo incluido barato y la comida no es nada del otro mundo para los precios que te cobran.

Entre Madrid y Bilbao, o más bien al revés, se esconde este mítico e imprescindible hotel/restaurante, en donde dar por terminadas las vacaciones de verano, con unos buenos huevos fritos con morcilla.
Sin duda el sitio, la calidad del producto, la excelencia en el trato, se merecen tanto la parada como el pagarse un capricho no siempre barato.
Hasta el año que viene!

Más de 1h esperando a que nos acomoden para tomar un café. El camarero nos dice que nos libera un sector y lejos de hacerlo va a metiendo gente para comer. Se ve que prefieren gente para comer que gente que ha comido en el restaurante y se quiere tomar un café. No volveremos a venir.

El hotel está situado al lado de la autopista. Es decir, no está para nada en un entorno bonito. La única gracia del lugar es la torre que tienen. El restaurante carísimo para lo que tienen. El trato de los camareros correcto. Pedimos: un reinosa, un suizo y un bizcocho. Todo con exceso de azúcar. El suizo lo puedes tomar igual en cualquier confitería, al igual que el bizcocho. El reinosa estaba bueno. También tomamos dos cafés, estaban bien, normales. Todo ello 14 euros y en la carta figuran sin IVA. Muy caro para lo que fue. Está muy masificado o al menos ayer lo estaba. No me parece que merezca la pena. No volveremos.

Llevo más de 40 años yendo a este restaurante y nunca a bajado en calidad y sigue manteniendo su esencia. Sitio altamente recomendable y sus huevos con morcilla un must que no se deben dejar de probar!

Si, ayer desayunamos en éste magnífico lugar.
Hacía mucho tiempo que no lo visitaba.
No ha perdido ni un poco de su pasado encanto ni de la calidad de sus productos, ni del trato exquisito de su personal.
Solamente una cosa que no puedo dejar de mencionar: los arbustos del jardín están tan crecidos y frondosos que no dejan apreciar en su justa medida todo el encanto del lugar.

Servicio de cafetería muy malo. Caro y malo. Camareros sobrepasados de trabajo, que no atienden como deberían. Viven del éxito d años anteriores …. Hace un año paramos y mal, este año les hemos dado una oportunidad y hemos parado a desayunar y también mal…. Una pena, porque el sitio es súper bonito y bien ubicado en el camino …

Impresionante restaurante, bar de lujo y hotel estratégicamente situado en el Km. 234 de la A1 donde se dividen los destinos desde Burgos.
Además del cuidado que su creador puso en el siglo pasado con colección de relojes, planchas antiguas y otros objetos (antes había también carros), es un sitio referente en la zona para comer muy bien y si tienes prisa, tanto el bar como su terraza es ideal. Su hotel es espectacular, construido como si fuese un castillo y tiene una piscina monumental única (parcialmente cubierta).

Sitio tranquilo y muy bonito por fuera y por dentro.
Paramos a desayunar. Si vas con prisa, mejor elige otro sitio porque van con calma.
No es barato, pero tiene muchas opciones dulces o saladas para desayunar

Verano. Y para ser más precisos: Julio 2021 en Burgos.
Para tomarse un café no te dejan en la terraza (más de 10 mesas y sus correspondientes sillas libres y preparadas). Y por si realmente falta nombrarlo: en plena pandemia.
Los dos dedos de frente de esta organización, con ya rozando los 40000 casos diarios en España, faltan.

Lamentable que un año y medio más tarde sigamos con gente corta de mente.

La seguridad es lo primordial y algunos todavía no tienen el concepto metido en la cabeza.

Repito por si todavía hace falta: lamentable.

El camarero encargado un poco desagradable con el servicio, no disponen de bebidas expirituosas, como puerto de indias, brugal extra, bacardi mojito,
Considero que un lugar con tanta trayectoria y reconocimirnto en la restauración debería ofrecer mejor atención al cliente

Edificio espectacular, castillo antiguo, hotel-restaurante. El restaurante está siempre lleno, la organización de las reservas muy bien, pero tienen una mesa corrida con unos asientos MUY INCÓMODOS! Comida muy rica, pero sencilla, básica y cara (relación calidad-precio muy mejorable)

Es verdad que tiene mucha fama y la comida está rica pero es caro para lo que realmente es. Unos huevos fritos sosos con tres trozos de morcilla no pueden costar 11€. Eso sí, el sitio es muy bonito.

Restaurante muy bueno. El salón interior, precioso. Comida estupenda y muy buen servicio. Para repetir, sin duda.
Para hospedarse, el torreón del hotel es increíble

Porque no se han adecuado a los tiempos. No puedes pedir una copa de vino. Tiene q ser botella. No te ponen ni unas patatitas para acompañar.una sola marca de vermut. Hay q poner de moda el vermut tambien en el landa

Un buen lugar para comer

Por su situación y su cocina, Landa es un buen lugar para hacer un alto en el camino si viajas hacia el Norte de España desde Madrid.

Para hacer una comida rápida, los huevos fritos con morcilla son una buena opción y un clásico de la casa: ingredientes de calidad muy bien cocinados y emplatados. Las albóndigas de ternera son otra buena opción. El pan está a la altura, al igual que ocurre con los postres (tartas, rosquillas de anís y muchos otros postres típicos) y el café.

El landa sigue siendo un sitio muy especial con tradición pero ha perdido un poco en el servicio y atencion al detalle en mesa.

Celebramos el cumpleaños de mi madre y salió todo perfecto, los huevos con morcilla y la tarta me parecieron espectaculares. Lugar precioso a la entrada de Burgos.

Lugar acogedor, donde tomar algo en el camino, riquisima la morcilla. Tambien se pueden comprar sus productos en un puesto fuera. Recomendable. Suele tener mucha gente.

Fantástico sitio, tanto para pasar la noche como para comer o tomar algo en la barra. La decoración, el servicio, el cuidado por los detalles. Todo merece la pena aunque el precio de la noche o la comida sea bastante alto. Está al lado de la carretera lo que también hace muy fácil encontrarlo.

Siempre encantados de disfrutar de este bonito lugar, de sus salones, su comida y el trato recibido.

Siempre disfrutamos de un buen aperitivo con morcilla de burgos en esta agradable cafetería cuando vamos al norte. El ambiente es rústico y agradable. Siempre top

Muy buena atención, comida de calidad combinando productos típicos de la tierra con platos más elaborados. Entorno cuidado, aprovechando las edificaciones antiguas para ofrecer estancias con fuerte personalidad rodeadas de jardines. Parada obligada al pasar por Burgos.

Lugar muy entrañable y con una comida riquísima. Camareros vestidos de época. Parada obligatoria y muy agradable

Muy agradable, limpio y clasico. Comida muy buena, que pagas con creces. Y la camarera jovencita muy requeteseria. Recomendable parar y probar sus huevos fritos con morcilla y patata, a 11 eurazos! Y la cerveza a 3€. Una pasada.

Hacia muchos años que no venīa a este lugar. Muy entrañable. Hemos parado a comer unos bocadillos en la cafetería y estaban muy buenos.de chistorra con idiazabal, pepito y de jamón. Y como hacia bueno el café y la copa en la terraza. Bien es cierto que las bebidas son más caras de lo habitual, pero es un lugar de lujo con un entorno muy agradable y se respira paz.

Una parada imprescindible en mis viajes al norte. Acabo de descubrir las croquetas! Excepcionales como las de mi abuela!

9511s: Hotel Parador con Piscinas, Jardines y Carros d Siega Decorando el Patio.

De los años 60; era punto d Parada en el viaje desde el Norte a Madrid, cuando aún no había Autopistas.
A 3 km dl Centro, en la N-1, Madrid - Irún.
37 Habitaciones, Cafetería y muy buen Restaurante en varias Salas.
Colección d Relojes d Pared.
Lugar Relajante para los Viajeros, y los Niños q pueden jugar en el Exterior.
Sitio entrañable.
Personal Profesional. @

Hoy hemos estado en la cafeteria. Ibamos a cenar algo en la terraza pero despues de pedir la bebida se equivocaron y tras estar esperando 20 minutos para que nos tomaran nota de la comida decidimos marcharnos sin cenar.

Sitio impresionante, acogedor. El unico pero son los precios, un poco altos, pero para un alto en el camino es el sitio ideal.

La calidad de todo lo que comes es muy buena. Pero el servicio es tremendamente lento y termina cansando

Hermoso para hospedarse y para desayunar, almorzar, merendar o cenar. Muy bien atendido. Platos excelentes. No es barato, pero tampoco inaccesible. Muy recomendable!

Excelente, si no lo conoces merece la pena una parada en este clásico, imprescindible probar los canutillos de crema.

Cada día la amabilidad de los camareros brilla más por su ausencia. El sitio es muy bonito y cómodo para una parada entre Madrid y Santander pero el precio que tiene requiere un servicio claramente más atento y amable

Local espectacular por sus comedores, cafetería, etc pero también espectacular por su servicio y los productos que sirven

Que decir del Landa, que se come igual de bien que siempre, que la morcilla con los pimientos de piquio está deliciosa, que los espárragos blancos calientes no necesitan salsas de los buenos que son, que las chuletillas y el cochinillo son de 10.
Y si riegas la comida con un Mauro ya es de matrícula de honor
Pues eso, si pasas por Burgos para en el Landa y disfruta.

Un clásico de Burgos, la morcilla espectacular como no podía ser de otra forma y el entorno te hace relajarte mientras comes, cenas o con un simple café.

Sigue siendo muy bueno apresar de haber perdido el encanto y el lujo que su creador iniciara, también es verdad que se ha vuelto multitudinario.

Esta muy bien, acogedor, hasta familiar diría yo, buen servicio y comida bien elaborada, buena relación calidad precio.