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Un restaurante de 10. Un servicio extraordinario con una atención muy amable y cercana. Y como esperábamos un comida riquísima y abundante. Del todo recomendable. Repetiremos.
Lo mejor de Fermoselle y las propietarias son estupendas. Te ayudan en todo lo que puedas necesitar, son serviciales y están atentas a todo con mucha amabilidad y simpatía. El restaurante te sirve unos platos muy bien elaborados y con precio razonable. La Posada totalmente recomendable y muy buena relación precio/calidad.
Me gustó mucho la calidad del restaurante, probé las croquetas y el cordero con salsa de almendras, realmente bueno. También quería resaltar la amabilidad de la camarera. Fue una cena de lo más agradable. Enhorabuena por todo.
Estupendo lugar para visitar la zona. Muy buen alojamiento, servicio y atención impresionante. Las cenas magníficas con los productos locales y la atención inmejorable Una familia espectacular.
Fuimos a cenar y lamentablemente la experiencia fue mala. Pedimos unas ensaladas y unas raciones y parece ser que o pides algo más contundente o no lo consideran cena.así nos lo hizo saber la persona que nos atendió, recordándonos que eso era un restaurante. En el momento de la reserva nadie nos avisó de lo que se tenía que cenar, o de si había un pedido mínimo de comida. El trato fue malisimo, mala educación. En fin, una pena.
Hemos pasado la semana santa encantados con la limpieza, el trato, la comida, la ubicación, las vistas, la comodidad de todos los espacios de la posada, un sitio muy recomendable en un pueblo muy bonito y una zona con mucho encanto
Un sitio maravilloso, nosotros sólo fuimos a comer pero increíble la comida y la atención de las camareras. La ubicación es perfecta en nada estás en el centro y hay sitio para aparcar.
El personal muy atento y amable, en todo momento nos ayudaron con todo. Las habitaciones muy buenas y bastante bien de precio. La comida 100 por 100 recomendable!
No puedo entender que siendo un establecimiento de 4 estrellas los lunes el restaurante y la cafetería estén cerradas por descanso, como no tiene frigorífico en la habitación si tienes sed no puedes tomar nada frío pues tampoco hay una máquina de bebidas y el centro del pueblo está a 10 minutos andando aprox.lo suyo es suplir el servicio o turnarse no comprendo que cierren el bar y el restaurante a la vez, te quedas sin servicios. La habitación muy oscura dando a una tapia, el personal amable, el desayuno muy básico, no está a la altura de un hotel de cuatro estrellas. Limpieza buena.
Lugar entrañable, con gusto, limpito y muy bien regentado. Ubicado en Fermoselle que es ideal para conocer la zona de Los Arribes del Duero. Te encontrarás muy a gusto!
Comida espectacular y trato excepcional. Tienen muchos platos aptos para celíacos y las instalaciones son una pasada. Pasar por Fermoselle y parar aquí es obligatorio.
Excursión de un día, comimos muy bien. Buen atención, carta muy variada, muy rico todo. A la salida tiene unos jardines en varios niveles de altura con estupendas vistas. Bonita experiencia
Comimos fenomenal, las camareras fantásticas y muy amables. El arroz.con leche, está de muerte y la ubicación al lado de las o los Arribes. Recomendado 100%
En Fermoselle, magnífico sitio para comer. Estupenda relación calidad-precio. Comida de tipo tradicional con buenos productos de la zona. El bacalao en dos formatos muy logrado. La carne de buena calidad, la familia tiene la mejor carnicería del pueblo.
Restaurante muy recomendable. Local bonito, atención inmejorable y calidad en la comida. Cada plato que comimos mejor que el anterior. Precios muy razonables. Lo dicho, no dudéis de pasar por allí, no os vais a decepcionar. Desde luego que si vuelvo por la zona, allí estaremos.
Un lugar precioso. Muy buen gusto en la decoración, con habitaciones amplias y muy cómodas. El desayuno estupendo y el restaurante magnífico. Muy simpáticos y amables. Para repetir sin duda.
Es un hotelazo! Precioso, acogedor, superlimpio y muy bien situado a un corto paseo del centro del pueblo. Se come superbien en el restaurante, los desayunos genial y las chicas que lo llevan son encantadoras y te atienden fenomenal. Y las chicas que hacen la limpieza también muy bien, dejaban la habitación muy limpia y superordenada. Para repetir sin duda
Carta muy variada, dando importancia a productos locales. Se nota el cuidado puesto en cada plato, la presentación y los sabores. Nos gustó mucho la ensalada con queso de cabra y torreznos y el rabo de toro. De la carta de vinos, a reseñar la importancia que le dan a vinos locales D. O. Arribes del Duero. Se agradecen detalles tontos que marcan la diferencia como la carne estofada que nos pusieron de entrante y los periquillos que vinieron de postre con el café. De los postres que probamos.lo mejor la tarta de queso! Espectacular textura, muy suave y sabrosa! Un buen sitio, sino el mejor, donde comer en Fermoselle.
Un alojamiento fabuloso, ideal para descansar y para disfrutar de sus buena cocina a precios muy razonables. El trato muy agradable y te ayudan en las zonas a visitar en los arribes.
Comida muy bien elaborada, buena presentación y opciones vegetarianas. Recomiendo las pochas al pil pil, postres caseros, vinos de la zona. Servicio muy eficiente, algo rápido en el servicio de los platos, se juntan con toda la comanda a la vez en la mesa. Recomiendo la experiencia.
Todo excelente. Buena comida, buen servicio jovial, profesional y cercano, y un ambiente en consonancia. No se como será el hostal pero conociendo el restaurante seguro que promete
Estupenda cena y un recibimiento increíble. Muy simpáticas. Todo buenísimo, los entrantes sugeridos estupendos, buen vino y carne estupenda. No quiero ni decir los postres, no dio tiempo a hacer la foto para la reseña.
Hace unos meses nos quedamos a pasar una noche, buena habitación y buena comida, este fin de semana, al estar lleno, solamente hemos podido ir a comer, muy buena comida y el trato de las trabajadoras, intentaré volver
Varis y Pili somos mochileros, nos encantó la atención de la dueña y de la camarera Trato excelente Muy buena atención, calidad y precio La zona es estupenda Comuda cla comida es muy variada, el vino de la zona muy bueno Un 10 en todo Recomiendo visitarlo V9lveremos
No pudo estar más bueno. Revuelto doña Urraca para picar. Una sopa de ajo increíblemente buena. Rabo de segundo, impresionante. Y de postre una tarta de queso brutal.
Absolutamente recomendable. Perfecto.
Además de limpieza, encanto.
Lo elegiremos como alojamiento en una próxima visita a Fermoselle, es lo que nos faltó.
La Posada, unica, una estancia fantastica, sus habitaciones decoradas muy elegantes, te hace sentir muy comodo su cama te permite descansar bien cosa importante, su restaurante.sin palabras excelente, platos de la zona su carne sayaguesa, sus embutidos ibericos.una delicia, los.vinos de los Arribes, Hato y Garabato, Pirita, etc etc etc Isabel.la joya que bien sabe tratar a los clientes, no decepciona la estancia, te asesoran bien de que visitar en la zona de Sayago, esa desconocida, pero que tiene gran belleza, el Duero, sus acantilados, sus miradores, sus Bodegas legendarias.epoca del paso de los Judios, Romanos etc etc.que hay que visitar hay mucho a descubrir ya lo veran ustedes no se lo pierdan Fermoselle, Sayago, Embalse de Almendra con su pueblo bajo las aguas ÀRGUSINO. Viajen y alojense en LA POSADA DE DONA URRACA. Gracias gracias gracias a todos
La atención de Isabel y el resto del personal, estupenda! Te facilita las visitas y rutas en un momento. La comida fabulosa. Muy limpio y la decoración del local preciosa. Muy recomendable Por poner un pero, el aire acondicionado no se puede regular, o lo tienes a 23° o lo quitas. Además nos pareció un poco oscura la habitación, con luces de poca intensidad y como sólo entra luz por el Velux.
No pudimos alojarnos por estar lleno, pero sí cenar dos veces. Estupenda cocina y buen género, con buena bodega representativa de la zona y otros caldos no menos merecedores de elogios. Y todo a un precio más que ajustado. Y lo que no tiene precio, la atención de Carmina: Un encanto. Si pasáis por Fermoselle no os perdáis esta Posada de Doña Urraca
Lugar con mucho encanto y un trato excelente y muy familiar. Además te asesoran en los distintos recorridos que puedes hacer por la zona. Se come genial, lo único el desayuno poca variedad pero todo de muy buena calidad.
Todo empezó fenomenal con Cristina, nos recibió increíble, nos informó perfecto, la habitación fantástica, salvo por estar la ventana a nivel de una zona de paso de gente hacia una de las terrazas lo que restaba vistas y privacidad, pero el tamaño de la cama, el espacio, la limpieza, muy bien. Reservamos para cenar y aquí empezó la decepción. No fue la comida, que estuvo bien, no fue el vino, que me encantó, no fue el postre, ni siquiera lo caro que resultó, fue la dueña. Sin ningún tipo de oficio, educación ni respeto se dirigió a nosotros como si fuéramos niños pequeños, queríamos una simple parrillada de verduras, una carne, un pescado, simple, nos dijo que no había parrillada que si no le gritaban en la cocina, que habían preparado muchas en la comida y que era un engorro. Observamos, como cuando iban terminando, como achuchaba a otras mesas para liberar el salón y que se terminaran el café o la Copa fuera en una terraza, que estaba a cien pasos y te tenías que llevar tus cosas. Vamos que nos metió prisa, le pedimos la cuenta treinta veces y nada al final nos lo metió en la cuenta de la habitación. Aún no hemos podido comprobar si nos duplicó el IVA. Pero eso es otro tema. El desayuno bien, pobre de variedad, el café frío, pero rico. La atención de la persona fue buena, una mujer algo mayor con mucho nervio. Día siguiente llegamos reventados de las caminatas para dormir, ya de noche. Segundo desayuno, misma historia y otra vez la dueña ahora, en recepción. Le pregunté sobre la hora de salida y me dice que 11: 30 que tiene que preparar la habitación para otro, para otro incautó, pensé, cuando en la reserva son las doce y la entrada no puede ser antes de las 14: 00, pero bueno. No importa una persona así de cutre es lógico que la pueda el ansia. Ya estaba con tal grado de decepción que no quise ni discutir la factura. El IVA duplicado, sin confirmar. Sigo buscando en la web esta información. Al final esperas un espacio, un trato y un lugar que cuando menos este a la altura del esfuerzo que hacemos algunos para poder dejar atrás la pena y el dolor de esta pandemia. No se puede jugar con la ilusión de la gente, no somos billetes con patas, un negocio se lucha desde la integridad y el respeto a un oficio sagrado, como es la hostelería. Una pena, una decepción muy grande. Ojalá esto sirva para hacerles reflexionar sobre el objeto final de un lugar tan privilegiado. Falta personal, está claro que son tiempos difíciles, se entiende. Pero eso no justifica la actitud. Falta producto, son tiempos complicados, se entiende, pero eso no justifica la falta de información y atención. Si no hay algo porque se terminó, se informa con normalidad y se ofrece una alternativa, sencillo. Los tiempos difíciles son para todos y deberían ver el servicio que dan como una inyección tremenda a la moral de la gente para seguir adelante. Todos tenemos malos días, se entiende, pero no justifica fastidiar los pocos días de disfrute de los demás. Especialmente cuando apoyamos ese negocio familiar con nuestra presencia por humilde que sea. Hay que reflexionar.
Su estilo medieval hace de él un lugar con encanto. El desayuno está incluido en el precio y es de tipo buffet. Se guardan a la perfección las medidas de seguridad covid 19. Trato cercano y muy agradable. Sin duda repetiría.
Antiguo cuartel de la guardia civil convertido en posada. Es original, bonita, acogedora y está muy limpia. Las personas que lo regentan son amables, simpáticas, atentas y hacen que una se sienta cómoda y a gusto. La comida está hecha con cariño y se nota por lo rica que está y la calidad de los productos que ofrecen en la carta.
Por mencionar algo a mejorar, sería el desayuno que me parece un poco escaso en cuanto a la variedad y por otro lado, el color de la habitación que no hace justicia a lo bonita que es.
Hemos pasado un fin de semana allí y solo puedo decir cosas buenas. Las habitaciones muy bonitas y acogedoras. La limpieza en todo el establecimiento perfecta. La atención de Cristina e Isabel de 10. Disfrutan de su trabajo y lo reflejan con el cliente, que nos trataron genial. Y de las cenas. Un lujo
Hotel con muy buena relación calidad precio, desayuno con pan, cereales, chacinas y dulces, muy correcto, no se mecesita más. Personal muy atento y servicial y todo muy limpio. El aparcamiento en la puerta, algo que es de agradecer. Muy recomendable, repetiría.
Extraordinario hotel para visitar la zona. El desayuno y la comida, de lujo, con productos de calidad. El dulce típico de la zona, los periquillos, los mejores que he probado. Las dueñas, muy agradables y pendientes de tus necesidades. Volveremos, seguro.
Hemos estado cuatro personas alojados y muy muy bien, el restaurante es lo mejor comida echa con cariño, buena cantidad y mucha calidad, el solomillo y las judías al pil pil espectacular. Volveremos cuando se pueda.
La zona de habitaciones está bastante bien, con un aparente confort. El restaurante está bastante bien. Gran variedad de carta y postres. Muy amables. Muy bien sitio para ir a relajarse.
Ahora mismo estoy sentada en su restaurante y creo que nunca hemos tenido una experiencia de sentirnos como en casa de esta manera, es como si nos conociera de toda la vida y mi hija dice que le encanta.lo siento, pero es lo mejor del pueblo!
Estuvimos pasando 4 días por la zona con unos amigos y decidimos alojarnos aquí. Es de las mejores experiencias que hemos tenido. Las habitaciones perfectas, el restaurante genial y el personal espectacular, súper atentos, simpáticos y detallistas. Volveremos sin dudarlo y recomendamos plenamente alojarse en Posada de Doña Urraca. Un abrazo Isabel, mil gracias por todo.
El restaurante, ya que por no disponer de habitaciones libres no pude alojarme, de muchísima calidad tanto en materia prima como en la elaboración, condimentación y presentación. Precio acordé a la alta calidad. Trato muy afable.