Posada Real la Vieja Chimenea SPA

Cuando vas a cualquier alojamiento, las personas que gestionan dicho alojamiento te tratan como simples clientes, pero en este caso no es así, Javier y Toñi te tratan como si fueras de invitado a casa de tu familia o amigos mas cercanos. La cercanía que ellos muestran y que pretenden que los que estemos alojados también tengamos es algo totalmente fuera de lo común.
Por partes, Javier se desvive para que los que estamos alojados estemos lo mas tranquilos posible, también se desvive para que podamos conocer la zona donde el ha crecido. Y que decir de Toñi, su cocina es maravillosa y quiere que conozcamos los productos que nos vamos a comer o cenar. Si se quiere un desayuno continental o productos cuya calidad deja mucho que desear es mejor no ir a la Posada, porque en la Posada probarás productos de alta calidad y de proximidad y, cocinados por una gran cocinera como es Toñi,
Nosotros fuimos una pareja que vino de Tarragona buscando tranquilidad y salimos con una sonrisa de oreja a oreja y, si no fuera porque estamos lejos para venir un fin de semana, desde luego que iríamos en varias ocasiones, lo que es seguro es que repetiremos.
Posdata: Javier, me dijo mi pareja que se quedó con ganas de comer más requesón, a lo que le dije, no dejes para comentar al final lo que hubieses podido pedir en su momento.

De modo que finalizo dando mi mas sincero ¡agradecimiento a Javier y Toñi!

¡GRACIAS!

Hemos pasado un fin de semana estupendo. Javier y Toñi hacen que te encuentres como en casa, nos cuidan y están pendientes te todo.
Las habitaciones son amplias y muy limpias.
La vieja chimenea de la casa es espectacular.
Es un lugar diferente que invita al descanso y a la sobremesa después de esas cenitas que con tanto cariño prepara Toñi.
Gracias Javier por sorprendernos con esa cenita íntima al amor de la lumbre. GRACIAS, SOIS GENIALES, VOLVEREMOS.