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Hace años yo estuve en esta residencia, como era más pequeña me trataban diferente. Uno de los mayores problemas fue la calefacción, en León el invierno fue exageradamente frío, así que te las tenías que apañar para no resfriarte ni nada cuando perfectamente podría estar nevando con temperaturas bajo cero.
La comida a veces se presentaba con pelos, incluso una vez llegaron a ser bichos, etc. De aquella casi todos los días te ponían patatas fritas con todo y era muy cansino. Eso sin dejar aparte que los sábados a la noche y los domingos no había servicio de comida por lo tanto tenías que comprártela tu misma.
Hacías el mínimo ruido y te llamaban la atención
Sobre el gimnasio, hace años cuando yo estaba era una habitación horrible, pequeña con sus máquinas rotas y viejas, todo lleno de polvo y eso no lo limpiaban, allí no se podía entrenar y ni siquiera estar, aunque lo hayan reformado siguen estando las mismas máquinas.
Hay alguna monja en particular, no voy a dar nombres que lo que hacía era dedicarse a decir mentiras a los padres diciendo hechos que se supone que hacíamos y estaba mal.
Además si quieres lavar tu ropa, tienes que pagar 2€ por una lavadora que no da abasto y hay 5 cuerdas para colgar tu ropa, me parece fatal pagar a mayores cuando te dejas un dineral tan sólo en la habitación.
A veces cuando queríamos estudiar nos decían que fuésemos a la sala de estudio, dependiendo de la planta era mejor o peor, pero en la que me tocó principalmente era una sala pequeña que seguramente antes se usaba de habitación ya que tenía baño propio en la que no tenían cuidado ni se preocupaban en la limpieza de eso.
Las bajas reseñas no estan feas ni castigos Ni nada parecido Son críticas constructivas que sirven para mejorar lo que se hace mal Si uno quiere cambiarlo Conflictos personales 0 Suerte y gracias
Debido a la innumerable lista de razones por las que no venir a esta residencia procedo a realizar una síntesis de las mismas.
Las personas con alergias y/o intolerancias alimenticias están sentenciadas, puesto que a pesar de entregar informes médicos actualizados, el director del comedor y el personal se lo toman como si se tratase de un capricho personal, a pesar de estar obligados a su conocimiento legal como cualquier manipulador de alimentos. Además, en varias ocasiones la comida ha venido en pésimas condiciones, al borde de la putrefacción y acompañada de bichos.
La gravedad del asunto radica en visitas de manera continuada a urgencias por intoxicación alimenticia, que conllevaron a la compra de comida para poder subsistir. Para aquellos alimentos adquiridos en el exterior que necesitesen frío existen neveras, pero nadie puede garantizar que tus pertenencias sigan ahí cuando vuelvas a por ellas.
En ámbitos generales, la limpieza también es un factor negativo. Por un lado, la lavadora cuesta 2€ y hay 5 cuerdas techadas para secar la ropa, que en varias ocasiones sale con matojos de pelo a causa de la falta de mantenimiento y limpieza. Este año comenzaron en la residencia más de cincuenta personas, podéis imaginar la odisea para poner una lavadora y que se secase en una ciudad donde raro es el día que no llueve.
Por otro lado, la limpieza de la de las habitaciones a simple vista parece correcta, pero tan solo con mirar debajo de la cama podemos observar toda la suciedad ahí almacenada.
El gimnasio está compuesto por máquinas rotas o estropeadas que llevan arreglándose desde antes de entrar en septiembre, igual que las continuas llamadas al técnico para sacar a las personas encerradas en el ascensor y los fallos del internet a “alta velocidad”.
Lo único bueno es la habitación con baño propio, aunque no funcione la calefacción pese a estar nevando en el exterior.
Queda claramente demostrado que las personas encargadas de esta residencia velan más por el ingreso económico mensual que por el bienestar, la salud y el respeto de las residentes.
Por todo ello, y más detalles que preferiré no mencionar, nueve meses después puedo ponerle fin a esta pésima experiencia.
Curso 2022-2023 EXPERIENCIA: Ni el wifi es de alta velocidad como dicen, ni la comida de las fotos de la web la cocinan, mucha gente ha estado enferma por la comida, el gimnasio te dicen que es nuevo cuando las máquinas son viejas y están rotas; si tienes ALERGIAS O INTOLERANCIAS ALIMENTARIAS se las toman como un capricho (una residente ha tenido que tomar hasta medicación por el descuido de su condición alimentaria), la gente da guerra por las diferentes plantas y no se hace nada, la limpieza muy mejorable. Si tocas un instrumento te mandan ensayar en una sala sin calefacción en el exterior de la residencia, por lo que en invierno el frío es insoportable
Lo que más rabia me da es que dicen en los comentarios de las reseñas que han cambiado de empresa y ya no tienen esos problemas cuando siguen estando
Lo único bueno de esta residencia es la ubicación en la que se encuentra.
Ojalá de verdad cambien para los próximos cursos, siento lástima de las futuras residentes
En especial la superiora de la planta, Sor Rosa ha sido un castigo, nos hizo la convivencia imposible, la comida no había quien la comiera, no limpian, la lavadora estaba sucia y valía dinero, me intento estafar dinero, llamaba inventado cosas a mis padres, en general la peor experiencia de mi vida, no se lo recomiendo a nadie, me ha quedado un trauma
Mi hija ha estado este curso en esta residencia. Situación inmejorable, en el centro de la ciudad y a sólo 15 minutos de la Universidad. Habitaciones amplias y luminosas, buen servicio de limpieza, cocina casera. Lo más importante ha sido sin duda, el trato tan agradable y familiar que tanto mi hija como nosotros hemos recibido desde que contactamos con ellos. Mi hija se ha sentido en todo momento como "en casa". Quería destacar sobre todo, la amabilidad y el cariño que hemos recibido por parte de Blanca y Patricia desde el día que llegamos. Han hecho que su estancia allí sea muy cómoda para ella y a nosotros nos han dado mucha tranquilidad. Sin duda ha sido la mejor eleccion
Este año la gestión de la residencia ha sido pésima. La calefacción no la ponen, por lo que mi hija llevo un calefactor y la comida a parte de mala calidad muy poca cantidad. La ubicación inmejorable y limpieza de 10. Mi hija se va, no repite en esta residencia.
Creo que es la Residencia con mas espacios verdes propios que hay en León, desprende luz y tranquilidad por los cuatro costados. La situación es inmejorable (a 300 metros de la Catedral + -) a 15-20 minutos de la Universidad, supermercados y cafeterias a tiro de piedra, ¡¡ una pasada.las Hermanas son educadisimas, limpias y muy muy generosas, así como dispuestas y agradables, siempre atentas para cualquier necesidad.por que no hay mas estrellas, si no les pondría 10.muy, muy RECOMENDABLE.
Un sitio con encanto. Una atención perfecta. Quedamos realmente agradecidos y encantados con la atención de las Hermanas hacia nuestra hija durante su estancia en los dos cursos que allí pasó. Mil gracias!
We woke in the middle of the Night full of itching bites, there was no one to help us and EVERY door, even the emergency exit was locked. After 2 hours trying to find a was out we had to climb out the window! The next day we came back to get back our money and i had to discuss for more than 30 minutes while they were laughing at us!
Marzo 2017 Residenza che accolgono studenti. Ecceaaionalmente accolgono i pellegrini in cammino per Santiago de campostella. Eccellente come tranquillità e pulizia.