Restaurante El Caballero de Olmedo

Pedimos lechazo, pulpo, morcilla, sopa castellana, torreznos, cochinillo, sardinas ahumadas, tarta de queso, coulant y arroz con leche.
Todo muy bueno.
La atención de los camareros inmejorable y un ambiente tranquilo.
Con muchos detalles de calidad. Y sin esperas.
Repetiremos sin duda.

Pongo dos estrellas por lo siguiente: veo en comentarios que el plato de lechazo va con patatas y una pequeña ensalada. Hoy he ido a comer y mi única queja era esa pero no me parecía tan grave como para poner dos estrellas. Visto lo visto parece que tienen clientes de primera y de segundas. 50€ por cuatro trozos de lechazo sin guarnición es una clavada lo veas por dónde lo veas. De sabor estaba muy rico y la ensalada de queso de cabra igual, el coulant todo un acierto con lascas de chocolate negro y blanco.

El trato es espectacular, desde que entras te hacen sentir muy a gusto, son muy familiares y se preocupan por el cliente. La comida es muy sabrosa, perfecta en calidad y cantidad. El sitio es agradable tanto dentro como fuera en el patio de la terraza, lo tienen limpio, ordenado y cuidado. Recomiendo el lechazo, riquísimo.

Lo mejor es el asado lechal hecho por el dueño. Insuperable. La atención es familiar, el anfitrión muy agradable y hospitalario. El local muy acogedor y bonito. Muy recomendable.

Llegamos a última hora y sin reserva.
Pudieron hacernos un hueco.
El personal súper atento y amable en todo momento.
Comimos lechazo con patatas fritas.
La comida exquisita
Un 10 en todos los aspectos.
Recomendable 100%, volveremos a repetir.

Que lugar!
Nos atendieron de ensueño.
Todo el equipo fue maravilloso, en especial Lucia que fue un encanto.
La comida estuvo increíble…
Lechazo, bacalao, cecina con virutas, el vino, la ensalada y no digo nada de los postres… dulces momentos.
Lugar siempre a recomendar y siempre a recordar.

Servicio nefasto, nos pusieron la comida y se olvidaron de la mesa, sin bebida, sin atención solo por coger más mesas y su excusa que no hay personal para trabajar, eso no creo que lo deba de pagar el cliente, si no pueden atender a más comensales que no se cojan porque al final todos descontentos.

Asador bonito y con buenos platos, ricos y bien presentados. Es fácil aparcar y de buen trato. La cantidad es buena y los postres están muy elaborados. Tienes carnes y pescados para elegir lo que más te guste. El precio está bastante bien, menú y a la carta. Para ir entre semana o días de fiesta.

En nuestro paso por Olmedo degustamos una comida exquisita. De entrante un queso de pata de mulo riquísimo (eso sí, mejor ser de los que te gustan el queso) y a continuacion un cuarto de lechazo en su perfecto punto de asado acompañado de ensalada y un vinito de la tierra. De postre una original tarta de naranja casera y dos cafés, y posteriormente unos chupitazos a costa de la casa. El precio final aceptable para la calidad de los productos junto con un trato agradable de los camareros. En definitiva una buena experiencia gastronómica en un sitio que repetiremos sin dudarlo si volvemos por Olmedo.

Comimos mi mujer y yo espectacular simplemente un lechazo riquísimo pedí que me recomendará un vino y estaba buenísimo de primero un jamón ibérico volveremos sin duda

El restaurante precioso, muy cuidado, con buena atención, bien recomendado por el maître y la comida espectacular. Sin duda un diez sobre diez, hasta los niños comieron bien

Mesón típico Castellano. Muy buen servicio y magnífica cocina. Su especialidad es el lechazo, pero la morcilla que comimos era estupenda. Y los postres también.

Fuimos más de 5 personas, el trato fue muy bueno, poca atención en cuanto a la mesa. Tardaron 15 min en tomarnos la comanda.
En cuanto a la calidad de los platos es superior a la media.
El ambiente tranquilo y acogedor para familias, la arquitectura inmejorable, con detalles muy cuidados

El sitio es muy bonito. La comida exquisita y el trato del personal inmejorable, muy amables y educados. Muy recomendable.
Estuvimos en el balneario alojados y comíamos allí.

Restaurante caro para la calidad que da, si la carne es buena pero te la sirven fría pierde todo su sabor.lo mejor el postre la tarta de queso.una pareja de la mesa de al lado piden cambiar la carne debido a su mal sabor.no voy a volver

Lugar de acierto seguro. Carta bien estructurada, especificación de Alérgenos, trato muy cuidado, típico por sus asados tanto cochinillo como lechazo, sin desmerecer su morcilla o pulpo con puré. Recomendable sus vinos, Su suelo es pintoresco al poder observar las ruinas de un antiguo convento mudejar y de colofón y detalle entrañable, te ofrecen “ las llaves” de su casa, invitando a volver, (cosa que haremos sin duda alguna.

Restaurante agradable, con buenas carnes y raciones generosas. Tienen una zona de juego infantil, para que los padres coman tranquilos.
El único pero es que son un poco lentos, precios normales