Restaurante El Molino de la Losa

Tuvimos una comida de empresa en el Molino, y el sitio nos gustó bastante. El menú: Patatas Revolconas con Torreznillos,
Degustación de Quesos Artesanos,
Verduras en Tempura con Salsa de Soja y
De Principal, Cochinillo Asado con Ensalada.
Destacaría las patas y los quesos. La verdura en tempura no incluía alcachofas, y casi todo eran pumientos, y del cochinillo me esperaba algo más.

Dice la Santa que es necesario comer en El Molino de la Losa cuando visitas Ávila. Un homenaje cada vez que voy, con comida típica de una calidad inmejorable. Las patatas revolconas, las judías, el chuletón y el tocino de cielo. Todo recomendable y espectacular.

Reserve con dos semanas de antelación o más. La mesa que nos dieron, estaba al lado del baño. El ambiente en el salón fue un horror, con dos mesas enormes, que parecía que competían a ver quién hablaba más alto, terminé con un fantástico dolor de cabeza. En relación a la comida, una lotería, me pusieron un solomillo, que el grosor era de un filete de ternera algo grueso y pasado de punto. El otro solomillo de la mesa perfecto. Vamos que no ofrecen la misma calidad a todos los comensales. Con los chuletones pasó algo parecido, uno muy seco y el otro mejor. El cuarto de cordero para los otros dos comensales, bien. Las croquetas insípidas y frías.
300€ de cuenta que obviamente no lo merecen. No recomiendo este restaurante para una celebración agradable y que quieras quedar bien.

Tomamos menú típico x 36e con maridaje d vino, muy buen producto. Pero sobre todo a destacar la atención q nos prestaron, desde que me diagnosticaron celiaquía hace unos meses valoro mucho q sean atentos y profesionales. Local de decoración rústica muy cuidado, entorno bucólico al lado del río. Muy recomendable

Impresionante lugar, impresionante menú y lo mejor, la atención de los trabajadores sin duda. Hostelería de 5 estrellas

Sitio espectacular para comer si vienes a visitar Ávila, trato excelente, comida espectacular, los platos abundantes, el chuletón de Ávila riquísimo, sin duda repetiremos

Terraza agradable al lado del río, personal atento y comida muy buena, a destacar las judías y por supuesto el chuletón.

Si quieres tomar un verdadero chuletón de Ávila este es un buen sitio, el restaurante es un antiguo molino y está sobre el río. Decoración tradicional, pero moderna, salones amplios y acogedores. El servicio excepcional, camareros profesionales, agradables y muy corteses.
La comida espectacular, no es barato ya que en la carta hay estupendos planteos de gran calidad y cocinados con muy espero.

Un sitio de los que no se olvidan, pero no por algo en especial, es el conjunto lo que enamora. Sitio especial, camareros atentos y con experiencia, comida de mucha calidad. Ojo que lo pagas, pero con mucho gusto

Restaurante de 10; excelente comida, excelente atención del personal; lugar con mucho encanto, es un antiguo molino restaurado, precioso, de cuento. Si vienes a Ávila no dejes de visitarlo, no te dejará indiferente.

Un 10, sitio muy bonito y acogedor, buena comida y los camareros, muy profesionales, todo perfecto.

Un sitio muy agradable. Comida exquisita. Servicio muy agradable y atento. Probamos el menú degustación y nos encantó todo lo que comimos. Repetiremos

La atención del personal es inmejorable, las carnes en su punto y las legumbres de la zona untuosas y exquisitas, una experiencia inolvidable

100% recomendable.
Me ha encantado el trato del personal, la comida exquisita. El entorno idílico gracias por la atención recibida.
Os deseo lo mejor en estas fechas tan complicadas.

Esa sonrisa plena lo dice todo. Y solo con los entrantes.el cochinillo está por llegar. Maravilloso.

Cena inmejorable, en un lugar con muchísimo encanto, la comida abundante y de buena calidad y el servicio muy atento y servicial. Todo un descubrimiento!

Trato muy bueno, yo he pedido presa ibérica y super rica, en general todas las carnes buenas, postres ricos y enormes, es mejor compartir.

Excelente restaurante. Vistas y ubicación inmejorables. Servicio agradable, amable y muy simpáticos. La comida espectacular. Recomendable los pimientos del piquillo (sorprendente) y, por supuesto, la carne.

El trato no ha podido ser mejor. Muy cercano y educado, muy atentos a todo y con mucho respeto en cuanto a distancias de seguridad e higiene. Nos pusieron un aperitivo de patatas revolconas con el vino que nos pedimos antes de pensar que íbamos a comer buenísimo. Pedimos pimientos asados con un queso de cabra en medio que estaban de muerte. La sopa castellana de primera, resucita a un muerto, y el chuletón bueno. Muy recomendable.

El mejor sitio de patatas revolconas en Ávila. Además está al lado del río que mola cuando lleva agua claro, que en el adaja no es siempre. Hay ocas y patos y zona verde para el verano. A mi me encanta y además de grifo tiene Amstel Oro.recomendación chula en Ávila.

Buena comida y buen servicio. Por ponerles un pero, los postres no estaban a la misma altura. Es un sitio muy recomendable.

Fuimos este sábado y ecantado con el trato del personal, comimos en la terraza al lado de las ocas y los gatos en un entorno muy bueno con un rio al lado.
La comida excepcional, la ensalada de bonito y pimientos de 10 y la carne tanto el chuleton de ternera como el de vaca vieja excepcional.
Por poner un pero, el menú del día poca variedad de elección de primeros y entrantes por eso elegimos de platos.
Pero vamos un 10 básicamente.muy contentos y muy recomendados.

El lugar tiene encanto. El antiguo molino harinero destaca por su decoración y utensilios que cuenta su pasado. Pulcro, acogedor y cálido por su detallado ambiente y por su personal entregado. El encargado amable, siempre dispuesto al buen consejo y al agrado del cliente, en que que se percibe la pasión por su trabajo y la buena voluntad por hacer las delicias y disfrute del paladar del cliente.
Respecto a la comida las papilas gustativas no pararán de viajar a los mejores lugares. Estos órganos sensoriales experimentarán los placeres más álgidos con el perfecto chuletón de Ávila: tierno, sabroso, al punto de la perfección. Y si es difícil superar esta carne la presa ibérica lo hace, se deshace en la boca, su sabor exquisito. Incluso los que no sean muy carnívoros como yo, caerán rendidos a sus pies. Porque ante lo excelente todos sucumbimos.
El cava espumoso que abre el menú degustación con su suave sabor afrutado: ligero, elegante, de acidez equilibrada y muy fragante. Seduce su olor y produce en la boca una sensación de sedosidad y amplitud.
Simpáticas las patatas revolconas que no podían faltar en el menú típico.
Se recomienda pedir cualquiera de los dos menús (típico y degustación) por su excelente relación calidad-precio.

¡Espectacular lugar, comida y servicio! El camarero MIGUEL está en todos los detalles. Recomendado 100%

Buscábamos el chuletón avilés y encontramos el mejor sitio posible. Ensalada sabrosa, sopas y guisos riquísimos, carne a su punto, platos de alta cocina, servicio exquisito y precios razonables. Un lugar ideal para comer bien y tener un contacto directo con el medio ambiente en su terraza rodeado del estanque son sus gansos y patos.

Fantástico restaurante, emplazado en un antiguo molino con el río Alaja corriendo al lado. La atención muy buena y la cocina excelente, con mucha variedad, de calidad y con una presentación impecable. No es especialmente caro para lo que se paga, lugar, atención y cocina. Quizás las ocas, gansos y gatos que hay alrededor de las mesas, puedan llegar a molestar. Lo que no hay que hacer es darles de comer. Ya que sino son insistentes y puede que intimidantes. Pero sin duda es algo que da al lugar un toque diferente.

Restaurante con encanto, una bonita terraza y un molino en el interior. Muy buen trato y la comida genial. Lo que más me han gustado han sido los postres, leche frita, tocino de cielo y tarta de queso. Recomendable.

La ternera a la pimienta solo era pimienta, picaba fuera de lo normal y no pudimos disfrutar de la ternera que si tenía buena pinta. La ración de cordero cortisima, un costillar de sólo hueso, ni 100 gramos de carne, aunque estaba sabrosisimo. El resto de 10, entorno, lugar, atención, vino, etc.

Buena comida, precios medio-alto, la terraza junto al río maravillosa lo único es que hay una manada de ocas y gansos que molestan constantemente y hasta te quitan el pan de la mesa al mínimo descuido, es bastante molesto y estresante estar vigilandoles constantemente, la atención muy buena.

Ocas, patos, pasean junto a ti. Los camareros muy amables, te piden educadamente no fumar en la terraza, pero luego hay otras personas que hacen caso omiso de su solicitud comprometiéndoles. No es culpa de ellos, pero si de las personas que van allí.

Nos encanta este restaurante, su comida, su entorno y los postres.
No es barato pero la calidad y el sitio lo vale y siempre que tenemos una comida familiar somos muchos los que votamos por este maravilloso lugar.

Lugar incomparable, atención exquisita, terraza única y la comida un deleite de calidad y sabores de siempre.
Si vas a Ávila y quieres disfrutar comiendo, no puedes dejar de visitarlo.
Para mi, el mejor restaurante de Ávila.

He de decir que un lugar bonito no hace que sea bueno, creo q puedo decir que a sido de los peores bares para tomar una caña en la cual e estado. Primero, pedimos una ronda (somos 6) tarda en traernos la bebida como 15 min. (No había mucho jaleo) pero bueno. Era un rato para pasar unas risas con amigas. Después de terminar esa ronda, llamamos al camarero para pedir otra, q lo que me responde con un aspaviento al aire, como
ya iré. Después de otro rato, le volvemos a llamar con educación, el hombre se acerca y nos
dice. Ya lleváis aquí un rato y acaban de llegar 3 mesas, osea que les voy a atender a ellos, y
cuando pueda ya os atendere a vosotros. Como. Mi cara de sorpresa. Cuando consigo reaccionar le digo. Mira trae la cuenta, y dice pues vale. Si estás cansado De tu trabajo no es problema de los clientes. Se que esto no va a valer para nada, pero ojalá muchas gente deje de ir solo por no tener que ver a este señor tan poco agradable

Más que una terraza, es un jardín muy agradable. La comida muy buena (todo lo que probamos).
Los precios, algo altos, pero justificados por la calidad y el emplazamiento.
En resumen, Altamente recomendable.

Restaurante en un antiguo molino rehabilitado, con unos bonitos jardines con río, ocas etc.muy relajante cerca de la ciudad, los comedores de interior muy acogedores, comida de muy buena calidad servidas por personal muy agradable, estuvimos muy agusto ha sido una agradable experiencia.

De los mejores restaurantes de Ávila, el entorno espectacular, con su río, puente de piedra y gansos. El servicio inmejorable, excelente trato y recomendaciones. Las judías Matrícula de Honor, la carne de Ávila insuperable y todo regado por un vinazo de las bodegas Fariña. EXCELENTE.