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El restaurante está situado en el centro de Valladolid. La ubicación es bonita, personalmente me gustó más la entrada donde se encuentra el mostrador con mesas representadas por barriles de madera, pero en cualquier caso el lugar es bonito incluso en el sótano, donde encontrarás mesas de madera. El menú es bastante extenso, pero lamentablemente sólo en español y el personal tampoco habla inglés, lo que ciertamente no ayuda. Personalmente probé el pulpo a la parrilla, y pensé que sería natural pero en cambio recibí un plato muy condimentado (demasiado), mezclado con especias, varias verduras y lamentablemente muy salado. Entiendo que la cantidad de sal es un tema subjetivo, pero lo que lamentablemente creo que no es aceptable es que en el menú no figuren todos los ingredientes que van a parar al plato, porque si una persona es alérgica puede que no lo note, porque el ingrediente está escondido. Y aquí volvemos a lo que dije al principio: nadie habla inglés y esto es lo que dificulta la comunicación.
Estar comiendo y que te griten desde la barra (con el restaurante aun lleno) vais a pedir mas? Porque yo me piro pa casa. Inconcebible. Con un: “chicos la cuenta”, valía.
La ubicación del lugar es estupenda, la calidad de los productos es buena, en concreto la chuleta, nos gustó mucho. La mesa asignada no estuvo muy acertada, pero tampoco había más opción El local estuvo lleno todo el rato Profesionales
Si quieres carnes.este es tu restaurante en Valladolid. Muy buenas carnes a la brasa, muy recomendable el chorizo y el lagarto ibérico con patatas fritas, además de cualquier otra carne de vacuno y cordero principalmente. Gran variedad en vinos, como es normal.estamos en tierra de buenos vinos! Como postres recomendable son el ponche segoviano y la tarta de queso. El servicio es bueno, con una atención rápida y cercana. Si pasas por Valladolid.debes pasar por este restaurante. 100% recomendable!
Nos a atendido Luis Miguel, un camarero espectacular, simpático y atento. La comida estaba buena, es la segunda vez que vengo y genial la experiencia. Hemos comido media ración de jamón de de recebo, el mi-cuit con cebolla caramelizada y solomillo con virutas de queso curado.estaba buenísimo. Pero sin duda, las 5 estrellas lo hace posible la atención del camarero. Volveremos sin duda!
A la fois bar à tapas et restaurant en sous-sol, une excellente adresse pour s'y restaurer entre collègues et en famille. Merci au patron pour son acceuil et sa production viticole de Toro.
Llegamos justitos de tiempo para comer una carne a la parrilla …. Y aunque nos costó por la hora en la que llegamos …. Y finalmente nos la prepararon estaba espectacular un acierto
Muy buena calidad, el servicio fue muy rapido y muy amable. El local estaba limpio aunque hubiera mucha gente. Todo estaba buenísimo a destacar el pulpo a la brasa y los huevos rotos (que no estaban ahogados en aceite) enhorabuena! Si volvemos a Valladolid volveremos y os recomendamos!
Cena en comedor de abajo, mucho ruido, casi no te entiendes ni con las camareras (súper amables). Tortilla de bacalao hecha muy rápida, chuleta de buey, muy cara y sin nada de sabor. Muy dura, le faltaba unos días de maduración.
Calidad precio uno de los mejores sitios para comer y cenar. Cuando tengo visita les llevo y siempre todo el mundo termina contento. Algo a mejorar puede ser la simpatía de los camareros.no siempre es la adecuada pero entiendo que tienen que aguantar mucho y hay días complicados.
Muy agradable comedor de madera, dos zonas de comedor una en planta y otra baja, me atendieron muy bien y bastante rápido, la comida con buenos productos y una sencilla elaboración sacando buen partido de ellos, quizás raciones justas, claro que me gusta comer, ni caro ni barato
La experiencia es bastante mala cuando la atención es mala. Lentos, malas caras, malas contestaciones.lo que pedimos tampoco estaba bien. La hamburguesa ríotinto bastante pasada y seca y la tortilla de bacalao muy salada. Hacía años que no iba. Con la gran oferta de cosas que hay en Valladolid este no es local para repetir. No lo aconsejo.
Primera vez que vengo a Valladolid, nos pareció un buen sitio para comer. En primer lugar tengo que reconocer que la comida estaba espectacular (lagarto a la brasa un 10). Sin embargo, la atención de los camareros deja mucho que desear, en ningun momento los camareros se dirigieron a nosotros, preguntábamos y asentian con la cabeza, por la web vimos que cerraban a las 16.30, estábamos terminando de comer a las 15: 50 y sin pedirlo nos pusieron la cuenta encima de la mesa, cosa que nos sorprendió, " nos estaban echando 40min antes"? Una pena.pero la comida buenísima
Excelente. Hemos comido muy bien. El calabacín relleno de estofado vacuno muy rico. El chuletón de vacuno al carbón de Encina espectacular. Y la tarta de queso de rechupete.
Pues, para mi, la mejor taberna de Valladolid, precios adecuados para una carta basada en carnes a la parrilla, es muy bonita tanto arriba como abajo en la cueva, y una atención amable, cordial y sin prisas.
Comida buenísima, el pulpo espectacular! Los camareros sin embargo, hacia tiempo que no recibía un trato tan despectivo…ni te miran a la cara, ni te hablan…súper desagradable todo, no entiendo como en un sitio así, tienen camareros tan maleducados. Solo están para dejarte los platos en la mesa como si fuese el burguer (son muchísimos más agradables ahí y te prestan más atención y eso que es comida rápida) o para traerte la cuenta, más de 200 e gastamos y ni un gracias…parece de cámara oculta la verdad.
Por lo tanto toda la comida o lo rico que está, queda desmerecida por el trato recibido. Para ir una vez y no más.
Siempre que vengo a Valladolid vengo a este restaurante. Hay que reservar pq aunque es grande siempre está lleno. La comida espectacular. El Arroz Zamorano, los calabacines rellenos y cualquier plato hecho a la parilla están muy ricos. De postre la tarta de queso. Como vino el Eñe increible. Los camareros son encantadores y rápidos.
Calidad/precio normal. Lo mejor las cañas y la bodega que tienen. La tortilla de bacalao muy floja, con mucha cebolla que desvirtúa el sabor. El costillar muy bueno. Los pinchos de lechazo parecen más de cordero.
Restaurante en Valladolid. Una decoración original, con la brasas a la vista viendo cómo hacen los asados. Terraza estupenda. La atención buenísima y los platos super ricos. El calabacín relleno de vacuno, el tomate de la huerta, la hamburguesa Río tinto, buenisimooo. Lo recomiendo
A mi parecer las cantidades son algo escuetas pero el precio es coherente. No digo que sea barato, es razonable. El producto es bueno pero alguno de los platos no estaba bien estructurado (el queso del solomillo disfraza demasiado el sabor del genero) En general la sensación es satisfatoria, pero no pongo las 5 estrellas porque la persona que nos atendió en todo momento ha sido poco agradable. Apenas salió alguna palabra de su boca y las pocas que dijo fueron en un tono arisco.
Parece un sitio agradable, así que miramos la carta que hay en papel bajo los platos, moviendo uno de ellos 2 centímetros. Le preguntamos al camarero donde nos sentamos, y nos dijo que "en la mesa donde habíamos estado tocando los platos". Naturalmente nos fuimos a otro sitio, porque para aguantar a un camarero borde, me voy a otro lado. Si tanto le molesta tener que limpiar un plato porque lo hemos tocado, en lugar de estar cruzado de brazos, porque estaba casi vacío el lugar, que pongan dónde mirar la carta más fácilmente. Un saludo amigo.
He ido varias veces por la calidad de la comida, pero he decidido no volver.
El trato que dan algunos camareros es muy desagradable, las malas formas que tienen y las respuestas a preguntas de lo más normales han conseguido que prefiera ir a otros sitios.
Una pena que un restaurante con buena comida se estropee por el lamentable trato humano.
Muy mala atención, muy mal trato de los camareros, tienen mucha suerte de estar ubicados en este sitio. Que pena que un negocio así tenga personal tan poco profesional.
Sin reserva, pero nos dieron mesa. Algo lento el servicio al inicio. Resto de la noche todo perfecto. Hongos de entrantes, carne y pescado para cenar. Todo en su punto. Y muy rico. Postres tarta de queso, exquisita, suave pero con sabor y tiramisu.
Lo de vino tinto se queda corto por su estupenda cocina con grandes cocineros que te hacen la carne en su punto deseado. El equipo de camareros está pendiente tanto si estás dentro como en la terraza. Merece la pena ir a comer o a tomar: Un vino tinto? Muy recomendable
Siempre que venimos los camareros están discutiendo entre ellos, hoy además pedimos un pincho de lechazo. Era de oveja. Cocinero en parrilla con la mascarilla a la altura de la barbilla. En fin. Tardaremos en dar una nueva oportunidad.
Entramos al local y los camareros estaban a la guasa, aunque en seguida nos atendieron. De primero pedimos arroz a la zamorana y estaba poco hecho, duro y recalentado, más seco que la mojama. De segundo, carne a la brasa. La carne tenía buena pinta, pero se estropeó con los 5 kg de sal que tenía cada pieza. La primera vez que me bebo una botella grande de agua antes de irme de un restaurante por lo salado que estaba todo. El postre…. Digamos que más seco que el arroz, casi tengo que digerirlo con una hormigonera. Una lástima, años antes he comido muy bien aquí, pero ahora sé que no voy a repetir.
La verdad mucha gente la camarera se portó fenomenal con nosotras porque no había sitio y nos acomodo enseguida tomar algo rápido porque estaba reservada pero la verdad muy bien y nos aconsejo la mini hamburguesa pequeña espectacular
Valor seguro para tomar un buen vino con tapas o comer de forma más formal. Dominan la parrilla y cuentan con una materia prima magnífica tanto en carne como en el resto de platos, que elaboran al estilo tradicional con un toque muy casero.
Un imprescindible en Valladolid. Muy buena calidad en cada uno de sus platos y un precio que va en buena relación. Sin duda de los sitios de obligada visita
El camarero nos echó el puro por pedir de manera desordenada. No nos dice si la cantidad es la adecuada. Dice: -Yo no voy a cenar. Ha sido antipático e irrespetuoso. Vaya un camarero. Si veis al calvito de barba gris muy corta ya sabeis a quien no pedirle. La comida no estaba mal.
El sábado estuve comiendo. Hemos ido muchas veces pero está vez nos sirvieron el chuletón demasiado hecho, cuando le dijimos que al camarero que al punto. Esta valoración es un tirón de orejas para que no os relajeis y deis la atención como se merece el cliente que parece que últimamente descuidais los detalles.
Ya es un clasico en Valladolid. Carne a la parrilla de primera y excelentes tapas. En cuanto a vinos amplia carta. Tienen bodegas con buenos vinos de producción propia.
Un local con mucho encanto dividido en 2 plantas con un aire de bistrot. Camareros amables y con retranca. Lo fundamental la parilla para comer un chuletón al punto pero con otras muchas más opciones más económicas. Embutidos de calidad como la cecina. Buenos vinos. Café de puchero también disponible.
Siempre es un lujo para mí comer en el vinotinto, llevaba 12 años sin pasar por Valladolid y no decepciona. Tanto por los productos, cantidades y precio acordé. Gracias
Al final me fui sin tomar nada ni beber nada. Muy poca gente en el local y unos de los camareros se pone a hablar con los cocineros mientras mucho clientes sin atender. Esperando más de 5 minutos y en primera fila. La comida es buena, la antencion pésima
Muy buena materia prima, en un espacio cómodo y muy apropiado. El precio muy razonable para este tipo de sitios. Un buen sitio donde disfrutar de platos calóricos que ayudan a combatir el frío pucelano.
Intenta ser el restaurante de calidad de siempre, pero le falta alguien que ponga las cosas en su sitio. Pedí carne a la brasa poco hecha, y tuve que pedir un plato nada más llegar para que no fuera una suela de zapato. Una pena porque la carne no era mala.pero me la jodieron!
Buen restaurante, carne excelente y bien hecha, el trato fue bueno aún que el camarero en medio de la sala estaba canturreando y hacia muecas raras, pero nos atendió bien es un sitio aconsejable la carne está muy buena