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He comprado un abrigo y el encargado, J Carlos, me ha atendido estupendamente, muy amablemente me ha buscado talla y asesorado. Un placer que te traten así.
La ropa es la de todas las tiendas de Stradivarius España ya que es una franquicia. Lo que si difiere a esta tienda del resto en las que he estado, es la nula amabilidad de sus trabajadoras. Con sus gestos y su 0 amabilidad, aparte de estar hablando unas de las otras, denotan que o no están preparadas para atención al público o que odian ese trabajo. Si fueran más amables y el trato fuera mejor, compraría más allí, pero esque se te quitan las ganas de entrar.
Las dependientas están todo el rato hablando alto entre ellas -puedes enterarte de todo lo que pasa en la tienda, desde quien mete la pata a si falta un pedido-, pero no muy disponibles cuando vas a preguntar algo (ya que además tienes que esperar, si tienes educación, a que decidan dar un respiro a la conversación).
Cierran un poco temprano. Se supone que a las 8 y 30 y a y 15 ya no te dejan entrar, es algo que me llama la atención porque en otras ciudades hasta las 9 no cierran.