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Las vistas son relindas pero el dueño es de lo más desagradable que vi, todo le viene mal y en lugar de facilitarte te complica las cosas. Quisimos comer unas patatas y no nos dejaban comerlas en la parte de fuera, otros días te dicen que dentro si es solo para unas patatas no te deja un quilombo La jarra de cerveza está bien
Algo que no te esperas en un lugar como el pantano de Aguilar, diferente, original, como una hamburguesa picante única en su género, con pan rojo, no fue lo mejor pero fui yo quien se equivocó, todo lo demás estupendo y a rápido.
La comida es normalita, el entorno es maravilloso pero el dueño es un maleducado. Cada vez que llegas tienes que estar sentado hasta q tu familiar pide la comida, no podíamos ni dejar que los niños se levantaran para jugar en el entorno (un bosque), grosería y maleducado. Nos trató fatal, entiendo que los niños no son bien recibidos. Los aseos muy sucios
Tenia buenas espectativas en este sitio que me indicaron unos amigos bikers, por el ambiente, música, decoración, quizá un sitio mas indicado para hechar una copas que para degustar unos productos ultra-congelados y pre-cocinados, incluso cuando me sirvieron la hamburguesa el pan por dentro estaba helado. Una cosa curiosa, es que había muchos camareros pero no te servían en la mesa, tenias que levantarte tu a la barra a por los platos, una decepción.les doy 2 estrellas por aquello del rollo biker.
Un sitio genial para cenar y pasar un buen rato en un sitio muy bonito. Estuvimos con unos amigos y pedimos cada uno una hamburguesa y aparte patatas ali oli, muy rico todo y muy bien de precio, las burguers desde 4€ a 10€ (mas o menos) de precio asi que muy bien. Pongo 4 estrellas porque el baño si que estaba hecho un desastre pero por lo demás muy buen ambiente, decoración muy chula, buenos precios, y todo bueno PARA REPETIR SEGURO
El lugar donde esta ubicado el restaurante está fenomenal. La decoración es muy bonita y generalmente se llena, sobre todo en fines de semana. La comida está bien y el servicio es rápido.
Algo decepcionante. La presentación no nos ha gustado, entendemos el concepto "eco" pero la presentación de los platos deja que desear: producto frío, platos con poco sabor, raciones escasas por el precio. Las hamburguesas ecológicas sin embargo bien conseguidas, ricas. Un apunte importante: es inconcebible que un restaurante, en los baños no haya jabón ni método de secado. Muy mal en este sentido, la higiene es fundamental.
Me a encantado, todo estaba recién hecho y súper bueno, de precio normal. El baño limpio y con papel, a pesar de que había bastante gente. Muy bien la verdad.
Sitio impresionante con muy buena ubicación para pasar el día sobre todo para niños el inconveniente de este sitio es las malas formas y el trato del dueño hacia los clientes con con una gran falta de educación parece que trata con animales en una granja, es una pena ya que como digo el sitio es excepcional. No recomiendo
El sitio es ideal, pena que al menos lo que nosotros comimos no esté acorde. 6,5eur por un plato enano con un puñadin de nachos un poco de salsa de queso y un pelin de carne sin salsa.salimos todos muy decepcionados con la cena, una lastima ya que es una zona que frecuentamos bastante pero es un sitio al que no volver.
Buscábamos un sitio informal para comer en un entorno natural y empezamos a leer reseñas de este sitio en las que destacaban los malos modos del dueño. Así que allá nos fuimos a conocerle. Nada que ver, estamos profundamente desontentos con las reseñas. Todo el personal ha sido correcto y amable, nos han servido rápido, la relación calidad-precio insuperable y el entorno espectacular. Por no hablar de la música. Un sitio genial
Nos ha sorprendido positivamente. Volveremos. Las hamburguesas exoticas son su gran atractivo. Precio bien. No hay servicio en mesa. El dia que fuimos hubo musica en directo.
Un lugar acogedor situado donde parece q no debería estar. Trato estupendo, familiar y servicial. Comida rica y con platos algunos diferentes. Un lugar para visitar, con buen tiempo mejor
Pedimos dos hamburguesas y unos nachos. Buenísimo todo. No pudimos acabarnos todo de lo grandes que son las hamburguesas. Además fue muy barato 22€ dos personas. Vistas al pantano y el sitio decorado súper guay!
Un lugar acogedor, con comida muy rica, buena y a un precio muy asequible e interesante. El emplazamiento es genial. Veo como inconveniente en la prisa que mostró la responsable del establecimiento en que acabásemos de cenar, no es agradable que mientras dos comensales terminan el postre, la trabajadora esté recogiendo la mesa y pasando el trapo.
La comida está rica y el servicio es rápido, en una bonita terraza con buena música que no molesta. No admiten reservas y las raciones son algo escasas.
Los niños no son bienvenidos. Antualizacion, se están poniendo las pilas, les subo dos estrella porque he vuelto {la liga esta bien buena} y ya parece que no te miran mal si vas con niños
Hace 2 años me tomé en el lugar la cerveza más fría y rica que yo recuerde. Creo que el chico que nos atendió en aquella oportunidad sigue siendo el mismo de ahora. Hace 3 semanas fui para repetir mi experiencia cervecera y en la barra pasé unos minutos con la duda de que si me había vuelto transparente, porque tres personas que estaban de ese lado y creo que uno era él chico que una vez me atendió genial, no se percataron de mi presencia y mira que soy alta, hasta que por fin la chica más joven me atendió. No hay nada más desagradable para los clientes que estar esperando a que alguien se digne a atenderte, con el sencillo gesto de que nos informen que ya seremos atendidos, creo que muchos podemos esperar tranquilamente. Y lo digo por todos los camareros del mundo mundial. Entendemos que están ocupados y no pueden tomar el pedido inmediatamente, pero con un solo gesto, ganan mucho más
Sitio agradable y se come razonablemente bien (para un plan de hamburguesas y nachos). El personal deja que desear, hay algunos encantadores, y otros bordes de cuidado.
Un lugar muy recomendable para comer con los niños, amigos, en pareja. Ambiente informal. Variedad de hamburguesas, algunas muy originales que sorprenderán a mas de uno. Imprescindibles sus postres: tartas y helados. El personal es muy simpático y atento. Servicio rápido. El entorno es para aprovechar los días de calor y darte un baño en el pantano. Esta acondicionado para ello. Una balsa con tobogán incluido os hará pasar ratos muy divertidos.
Bonito sitio para comer. Trato agradable. Playa para bañarte al lado. No se reservan mesas. Comida rápida. Hamburguesas variadas, con toques mexicanos algunas. Raciones grandes de patatas. Helados artesanos, Enormes! Helados con sabores distintos. Carnes exóticas de varios países.
Es un sitio muy chulo, con muchos detalles distintos en cada rincón, y con unas vistas geniales. Las hamburguesas buenisimas todas, hasta las que mas pican! Y los nachos muy ricos tambien. Si no has ido, no dudes en ir, que seguro que no te arrepientes!
Prepotentes, maleducados y soberbios. No tienen ni idea de tratar a la clientela. Lugar NADA RECOMENDABLE, si no fuera por las vistas del pantano de Aguilar. Si queréis gastaros vuestro dinero hacerlo en cualquier otro sitio menos aquí. Por cierto, la higiene de la que tanto hablas en otros comentarios empieza por uno mismo, señor Sergio (lo de señor es pura cortesía, ya que ha demostrado que para nada lo es) : Usted está sirviendo comida con pendientes, barba y pulseras en ambas manos. ¿No ha oido hablar de los cursos de manipulación e higiene de alimentos?
Ayer descubrimos el entorno del pantano de aguilar y encontramos este bar restaurante y volvimos para cenar. Habia mucha gente pero aun asi nos atendieron rapido. Nos gusto mucho la amplia variedad de hamburguesas que habia, incluso exoticas, que por cierto estaban muy ricas.pero lo que no nos agrado tanto fueron las voces y el trato a los empleados, ya que da sensacion de desorden y mal ambiente. Pero por lo demás, el sitio fue un buen descubrimiento creo que de verano.
Un chiringuito que va de pijo. El camarero no tiene ninguna educación ni empatía por los clientes. En cualquier chiringuito de playa (esto se encuentra al lado de la playa, en el pantano de Aguilar) es obvio que la gente se acerque con ropa de baño o sin camiseta. Pero en este lugar eso no lo entienden (ya que van de pijos). Pues bien, os podéis meter por donde os quepa vuestra soberbia; sobre todo al que va de listocon los pendientes de aro en cada oreja. Aquí se hacen méritos a ver quien trata peor a los clientes. Viendo las demás opiniones veo que no estoy equivocada.
El sitio es original para hacerte una foto pero no para comer ni consumir nada. De todos modos como existen mesas para comer que no pertenecen al bar recomiendo llevarte tu propia comida y bebida.
Por que es el pueblo minero para disfrutar del ambiente y las mujeres bonitas lo disfrutan y los hombres respiran al haire libre disfrutando del campo se lo recomiendo a todos y a todas.besos de mi parte a quién me quiera.
Muy buen y bonito sitio se come way y económico.voy cada vez que puedo además a mi niño le encanta el royo del cocinero (y creo que también dueño) saludos y gran trabajo el que hacéis.
El lugar es increíble en un entorno privilegiado. Está cuidado y bien atendido, sirven comida variada a buen precio con un servicio rápido y un gran sabor delicioso. A pocos metros están tanto el lago como un camping que hay en la zona. Tienen mesas tanto de interior como de terraza y una decoración muy original.
Me encantan las hamburguesas! Siempre que podemos volvemos! Recomendable 100%. También tienes hamburguesas exóticas os ánimo a probarlas! Yo tengo ganas de comer la de caimán!
Para tomar algo mientras das un paseo, no esperes muchas expectativas en este local, la atención deja mucho que desear, dentro de poco hasta recogerás tú la mesa.
Impresionante lugar. Lo de chiringuito no le hace justicia. Una carta de hamburguesas que ya quisieran muchos, y buenos precios. El personal en general correcto, salvo alguna excepcion, supongo que motivada por el estrés del lleno total
100% recomendable, fuimos de noche y queremos repetir de dia ya que está ubicado en una zona muy bonita. No dejéis de probar su tarta de cerveza negra!