Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Si quieres tomarte algo tranquilamente después de esquiar, este no es tu sitio. A mitad de consumición nos dijeron literalmente, "ya es hora de irse para casa que yo también me quiero ir". Para a continuación decirnos otro miembro del staff, "no mováis las sillas que me va a dar lumbago al colocarlas". Antes de ello ya nos habían quitado la sombrilla sin importarles que nos molestaran al hacerlo. Estamos hablando de las 6 de la tarde. Lo mejor que pueden hacer para que no les retrasemos la hora de cierre es no servir las consumiciones.
Esta bien para despues de esquiar. Ambiente joven y dificil pedir algo. Grandes colas para pedir. El DJ magnifico. Muy buena musica. Es para ir en grupo, incluso bailar, hasta con las botas puestas.
Pedí un bocadillo de carne mechada, muy rico por cierto, al final… porque en un principio según me dieron el bocadillo, estaba medio vacío de carne, pero lo abrí en el momento que me lo sirvieron ante la camarera y viendo las dos, que estaba medio vacío de carne, le dije que me pusiera más carne, a lo que amablemente no se opuso, y finalmente me comí un bocadillo que estaba a la altura de su precio (9€).
Al lado de las taquillas principales de la estación y en la parada anterior a la salida del telecabina.
La oferta es bastante limitada, bastante parecida a la de otros restaurantes / bares de la estación.
A media mañana ya empieza a haber bastante gente y al finalizar la jornada ya es bastante difícil poder encontrar sitio. La terraza en días soleados esta evidentemente muy solicitada.
En definitiva, es más un lugar donde dejarse ver después de la jornada de esquí que una opción recoMendable para tomar algo.
Ni la calidad ni el precio destacan y el servicio depende del aforo que haya por lo que puede resentirse notablemente en días de mucha afluencia.
Buen apres-ski a pie de pista. La música variada (soy más de música contemporánea y casi todo era clásicos pero entiendo que la audiencia es multigeneracional). Copas €8. Servicio lento pero personal agradable.