Bar-Bodega Bartolí

Menú y servicio buenisimo y muy variado. Cuando venga por estos barrios ya se a donde ir a comer. Suerte que llegue temprano, pues luego se puso a tope.

Ya no puedo recomendarlo. Recomiendo el cerdo y el revuelto de gambas. El camarero fue muy servicial y nos atendieron muy rápido. Comidas caseras y muy ricas.

Menjar casolà. Menú de 16,5€ amb una dotzena d’opcions tant de primer com de segon. No obren de forma habitual ni a la nit ni el cap de setmana.

Excelente comida, con platos de temporada, de toda la vida, si quieres comer bien el bartoli nunca defrauda.

He ido unas cuantas veces y el servicio para mí siempre fue muy atento, la comida está bastante bien aunque un poco elevada de precio.

Menjar casolà molt bo en un bar-bodega on sembla que el temps s’hagi aturat, amb productes de temporada i de qualitat.
L’ambient és sorollós, però encara li dona més caliu.
És com anar a dinar a casa de la Iaia!

Fuimos por lo bonito y el encanto del lugar, bodega rústica muy bonita y acogedora. El trato rápido y atento.
El problema vino con que no nos dieron carta y todo lo cantaron de viva voz, cogimos los platos recomendados: revueltillo de setas, sepia con alcachofa y caracoles en salsa picante. La comida no estuvo mal, típica comida casera.
Al pedir la cuenta, el precio de una ración de caracoles servida en un bol un poco más grande que el de las olivas 14,50, y el plato de Sepia con alcachofa 16,95, nos pareció excesivo, teniendo en cuenta que por el menú cobran 15,95 incluyendo dos platos bebida y postre, y que la cantidad de los platos no es gran cosa. Comimos dos adultos y un niño.
No comimos mal pero por ese precio esperaría mucho más.

No vale para nada la comida la tienen conjelada te la calientan en el microondas lo he visto con mis ojos. Haaa súper caro, no ses ocurra ir a comer hay por favor.

¿Buscas un sitio donde comer a buen precio y comida de calidad? ¡Este es tu sitio!

Personal muy agradable y te atienden rápido.

Los platos a elegir del menú son platos de toda la vida, y todos exquisitos.

Muy recomandable, nosotros vamos a menudo para hacer menú mediodia y siempre salimos muy contentos:)

En el barri de Sants de sempre. Fa ja tants i tants anys. Encerteu segur per qualitat. Només obren fins la tarda. Esmorzar de forquilla i ganivet, assegura't que encerteu segur. Per molts Anys, Albert i Vicenç

De las mejores bodegas de Barcelona y una historia viva de la ciudad desde 1939. Muy recomendable.

Una bodega de toda la vida
Producto de primera calidad
Platos clásicos muy bien elaborados, platos de temporada y de cosecha propia
Yo hace años que voy y nunca decepciona

Fuimos 5 colegas que empezamos a probar bares antiguos de tapas. El sitio es acogedor, sencillo, muy Perico para mi gusto, pero nos daba igual. La calidad del producto buena, nos tuvieron que volver a calentar algún plato pero pase. La sorpresa fue cuando al ir a pagar, los precios en pizarra al entrar, son de tapas y como nos sirvieron plato (sin decir nada), el precio era prácticamente el doble. El vino de la cada no se puede beber y el agua, que te la sirvan en botellas con su nombre y te cobren 2€ por botella me parece excesivo; al cliente habria que cuidarloy mas cuando es generoso y no exige agua del grifo que es obligatorio servirla. Del café prefiero no hablar. Probarlo y me decís. Salimos a 18€ por persona sin postres. Abusivo

És la típica bodegueta de barri, menjar molt cassola, molt bon servei, excel·lent relació qualitat-preu, millor reservar, sembla que sempre tenen ple.
Excel·lent

Llevo varios años viviendo en el barri y siempre voy a comer aquí. Muy rico, camareros amables y de la terra!
Molt bosempre!

He desayunado muy bien. Es impagable tener, a tu espalda mientras comes, la foto de la plantilla del RCD Espanyol recibiendo la Copa del Rey en el año 2000. Además, saber que aquí ha estado mi admirado Serrat.

Segueix com sempre: delicadament popular, cuina veritable amb tocs de temporada. Un lloc entranyable.

Mucho ruido para pocas nueces! Viernes 3de la tarde. Muchos platos del menú se han acabado. El arroz de bolets, salado.la ensalada sin bacalao.el lomo en salsa de almendras duro.los postres bien elaborados.
Una desilusión.

Bodega clásica en el barrio de Sants, muy cerca de la estación. Buen ambiente a la hora de desayunar que es cuando fuí, la tortilla al punto perfecto.

Decepcionados!
Íbamos con muchas ganas después de haber leído unas cuantas reseñas y de ver algunas fotos del local. (A mí particularmente me gusta el estilo retro.)

Al llegar descubrimos que no hay aire acondicionado. (o está escondido en vista de los precios de la energía)
En su lugar, hay un ventilador en el suelo, puesto en medio del pasillo para que de aire a los 2 comedores! Y las ventanas abiertas por si pasa un poquito de aire que refuerce un poco al ventilador!

El menú te lo cantan (no está impreso) y has de memorizar todos los platos o pedir al camarer@ que te los cante un par de veces más!
En nuestro caso y antes de que nos sirviesen los primeros, pedimos una de caracoles para los 4 que éramos para ir picando.
Nos trajeron una ración, pero era tan pequeña que pedimos otra, ya que siendo 4 personas nos pareció escasa. Por cierto, una era cocinada y la otra al horno. La cocinada tenía un resabor picante, pero no de guindilla sino de estar agriado el tomate de la salsa! Los del horno hay que ser honestos y decir que buenísimos.
Los platos del menú, bien, normalitos diría yo.
También hay que destacar que el servicio bastante rápido.
Pedimos agua mineral y nos trajeron las botellas Abiertas! Aparte de no ser correcto, te hace dudar de si realmente era agua mineral embotellada!

Hora de la cuenta. Menú 15.45 € Me parece caro para los platos y la calidad que ofrecen. ¡Caracoles 15.00 euracos una ración! En una tarrina un poquito más grande que las de la crema catalana! Carísimos. Los primeros, los que estaban agrios, el camarero comento que no los cobrarían pero estaban en la cuenta! Menos mal que no se opusieron a descontarlos. (No de muy buen grado)
En fin, una experiencia no muy gratificante.

Ayer compartí comida en este local por reseñas leídas previamente. En general, tanto el servicio como el producto se pueden considerar aceptables. Excepto los caracoles a la cazuela ya que la salsa estaba agria por causa del tomate, supongo. Aparte de esto, el precio bastante elevado para el tamaño de la ración. Otra observación es la carencia de la carta impresa así como servir el botellín de agua ya abierto, tanto el primer botellín como el segundo. En fin, no creo que volvamos.

És un lloc històric del barri de Sants amb cuina casolana. Ara però han pujat força el menú i les racions son més petites. Una llàstima

Sitio de toda la vida. Con un menú muy completo con gran diversidad de platos "cassolans "

Sitio de los que vale la pena ir. Producto local y de gran calidad. De las cocinas más auténticas de Barcelona.

Bar para comer de menú (14.5€/p en terraza) con sitio en la terraza ofrecen 5-7 primeros y otros 5-7 segundos, todos muy ricos (pedimos guisantes y verduras de primero, y carrillada y atún de segundo). La atención del personal es EXQUISITA.

Buen sitio para tapear y comer, servicio y atención, bueno.
El precio no es barato, pero dan calidad, vale la pena y buena combinación para llegar, muy cerquita de Sants-estació.

Ben situat a 5 minuts de l'Estació de Sans, va valer la pena baixar des de Begues. Variat assortit, amb sabors dels que sempre t'agrada trobar. Tracte familiar, vam estar com al menjador de casa i amb els teus amics. Súper recomanable.

Muy bien TODO: la comida, el precio y el trato. Un lugar muy agradable, con platos variados y una cocina tirando a tradicional/casera. Probamos varios platos y postres caseros, todo buenísimo. Tienen mesas en la calle, en el interior y en un patio.

Para repetir hasta cansarse.

Matèria prima y calidad excelentes. Buenos desayunos de tenedor. Es caro y en hora punta suele estar muy lleno.

Se come muy bien gran variedad en el menú diario y atendido por profesionales y eso se nota y se agradece mucho.

Bar con ambientación tipo tasca.menú con infinidad de platos para elegir.
Muy cerca de Sants en Barcelona.
Cómida muy buena pero la pega es que la veo escasa para una persona de comer.
Por lo demás servicio muy correcto y rapido

La comida buenísima pero hay un camarero que suele estar en la barra que parece que le sobren los clientes.

Le he hablado con educación y parece que molestes, hace que al final se te quiten las ganas ir y es una pena porque lo demás son agradables y la comida está buenísima.

Un saludo.

Desayunos de cuchillo y tenedor casero.
Ya no quedan sitios así en Barcelona para el público. Volveremos

Bodega clásica del barrio, con unos aperitivos y unos menús excelentes, trato familiar, si quieres comer algo clásico, este es el sitio ideal.

Suelo ir un par de veces al mes; puedo decir que lo que se come merece el precio que se paga; las tapas son MUY buenas: callos, revueltos de setas, rovellons. El menú es 13,90 aprx. En referencia a los comentarios de la persona que atiende en la barra no los comparto; sencillamente "va a por faena"; puede ser algo seco; pero educado SIEMPRE.
Seguiré yendo sin duda. Adicionalmente diré que la gente que me ha acompañado que no han sido pocos les gustó el lugar.

Servicio extraordinario relación calidad precio de lo mejor que hay en Barcelona gente encantadora comida tradicional

Pedimos comida hoy en Bartolí, sepia con alcachofas, niscalos a la plancha, callos y una butifarra buenísima, Me rio de Glovo, David de Diverxo, Jordi Cruz y de Burger King.

En aquest establiment hi treballen, entre estovalles de quadres i botes de vi, persones conegudes pels veins de Sants. La senyora Marina, amb més de 50 anys a la cuina, i els seus fills Albert i Vicens, darrera la barra. El menu diari, espectacular: dues dotzenes de primers i segons plats a escollir per un preu raonable de 13: 50 €. A destacar, la sipia amb carxofes, el trinxat, els ous remanats amb trompetes de la mort, els cargols picants i la tripa. Una opció a tenir en compte pels amats dels esmorçars de forquilla

Típico bar barcelonés. Cocina rica y bien concinada, en un ambiente del bar tradicional de Barcelona. Es donde la gente local come. Puedes ver el cliente de toda la vida, mezclado con el currante o oficinistas (y algún turista). El menú está rico y es asequible. EL trato es OK aunque siempre van muy atareados. Suelen tener lleno y son estrictos con las mesas, ¡no te andes con chiquitas que te quedas sin mesa! La comida muy tradicional y muy correcta. El local es curioso y recomendable. Si estás poor la zona, es un buen sitio para ir.

Un buen descubrimiento. Hemos hecho el menú y alguna tapa y genial. Sin duda hay que repetir para probar algo mas!

Super good service! The staff are very attentive and the service is quick. Home-made style food, delicious. Will definitely come back!

No puntuo la comida, pues solo entramos a tomar un café. Lo que puntuo es el pésimo trato del señor de la barra. No recuerdo otro lugar donde me hayan atendido tan. Por lo que veo en las reviews parece que no soy la única a la que le ha pasado lo mismo.
Al parecer ya tienen su clientela fija y no les interesan nuevos clientes

Excelente servicio y calidad en los platos que sirven. Restaurante con tradición y típico en el barrio

Una bodega de toda la vida
Producto de primera calidad
Platos clásicos muy bien elaborados
Yo hace años que voy y nunca decepciona

We were staying locally and popped in on the recommendation of our host. Delicious tapas and friendly service in a comfortable environment. It was a treat to see the staff’s’ children come running in from school. Perfect spot for our last meal in Barcelona!

Història viva de Sants, et pot semblar car, però un bar així no te preu. Clientela del barri i de la regió metropolitana de tota la vida. La Marina, la mestressa, és una institució i els fills uns professionals de cap a peus.

Worst welcoming ever! We made the effort speaking Spanish. No smile no nothing just sit there! So we left!

Todo un clásico en el barrio de Sants. Cocina casera, producto de calidad, servicio ágil y cordial. Muy recomendable para almuerzos de tenedor, precios razonables.

Un dels millors llocs de Barcelona per esmorzars de forquilla.
Tot boníssim i casolà.
Molt bon servei.

Molt bo i bé de preu. Molt atent tot el personal. Menjar de veritat. M'ho passo molt bé quan hi vaig.

Nada pretencioso y todo calidad. Cocina casera de toda la vida. Menú del mediodía buenísimo. Personal súper amable.

Menú excelente, variado y abundante, por un precio muy razonable. ¡Y los caracoles, para chuparse los dedos!

Las mejores puñeteras patatas bravas de Barcelona. Quiero dos quilos! Y menudo trato y menuda variedad.

Fuimos tres amigos con la ilusión de disfrutar de un esmorzar de forquilla, la desilusión fue de órdago una vez delante del local nos encontramos la persiana abajo del todo. Bueno a decir verdad solo eran las diez de la mañana. Igual los "esmorzas", son a partir de mas tarde. Como santo Tomás, una vez y.

Good authentic catalan cooking, decent prices and swift friendly service in a classic, old school bodega interior.

Per fi he pogut anar al mitic Bartolí! Quines patates braves més bones, quin local més xulo, quina qualitat i quin bon servei. El menú dels migdies es sempre molt bó, cuinat com abans i amb producte fresc i de mercat. No es barat, però s'ho val. Lloc imprescindible a visitar al barri de Les Corts al menys un cop a la vida. Servei atent i simpàtic. Tornarem segur!

Habia oido hablar de esta bodega, pues genial. Menu con muchos primwros y segundos de comida casera y buenas raciones.
Muy recomendable.