Bar Roure

Uno de los mejores sitios para desayunar en Barcelona. Menú de mediodía excelente.
¡El servicio es estupendo, siempre nos tratan de 10!

Millor lloc per anar a dinar i esmorzar. Servei i menjar impecable. Un dels millors restaurants per repetir.

Pasamos en familia a servirnos un aperitivo y cerveza, ambiente cálido y acogedor pero nos atendieron muy lento y rápido, prácticamente nos sirvieron las copas en la mesa y luego el vermut sin un buen servicio, los vasos mojados sin posa vasos sin hielo etc me llamo mucho la atención la presentación de las copas, lo recomiendo si es por su atmósfera pero ese día no tuvimos suerte con el servicio.

Sitio muy agradable donde sentirte en casa siendo turista. Fakltan sitios como este en cada esquina para reencontrarnos con los sitios como eran antes de masificarlos.

Un lugar increible, recomendable para probar la mejor comida de catalunia. La atmósfera y el vino invitan a una noche que no vamos a olvidar. Alejo y Maria los mejores camareros que hemos tenido en este viaje. A must!

Pena, penita, pena. Para un café y poco más. Por tercera vez cometo el error de ir. Producto mal preparado (tortilla de patata sin sal, a la camarera le parece mormal, pincho moruno nadando en una sopa fría, etc.) Servicio sin el más mínimo interés. En fin han conseguido echarme. Enhorabona companys.

El menjar està bé però sembla que van curts de personal i això fa que t'hagis d'esperar molt per tot.

Baja relación calidad-precio y servicio muy lento. Eramos dos personas para comer el menú de mediodía, hemos tenido que esperar entre el primer y segundo plato y se han olvidado de nosotros para el postre. Después de una hora y veinte minutos, hemos pedido el postre para llevar y pagado en la barra porque ya llegábamos tarde a la oficina. Además el menú costaba 13 euros y tenía un suplemento de 3 por un entrecot que no lo valía.

Vivo en el barrio y fui a cenar con mi compañera de piso y coincidimos ambas en lo bueno que es el "caliu" del lugar y en el buen trabajo de los camareros/as. La comida es de calidad aunque echamos de menos un poco más de cantidad (será que íbamos con hambre?) y más sabor en las croquetas (menos la de jamón, que estaba excelente!).

Bueno, bueno, bueno. Lloc molt seriós, seriosíssim, d'aquests que només somriuen quan ja ho han fet tot per tu. Des de fora l'interior sembla un somni, i a l'inrevés també. Penso que de Gràcia hauria de ser això moltes vegades, perquè del Roure neix la idea de Paris. Els cambrers són humans, fets de carn, et pregunten què vols, cometen errors, com a tot arreu, i això s'agraeix, perquè et connecta amb l'anècdota. El menjar té intencions molt entremaliades, i els preus estan a l'alçada. No em van portar forquilla ni tovallons per menjar unes braves i ho vaig interpretar com un retorn als orígens medievals, una temàtica del dissabte, un error magnífic. Amb els dits oliosos d'encabat vaig donar-los les monedes per pagar. Ambient distès, de prèvia de República. Llàstima que l'edat imperant fos la dels meus pares. Trenta per cent de gent bonica i setanta de carn arrebossada.

Esta vez la experiencia no fue tan buena como la anterior. La paella deja que desear y a las lentejas les hubiere venido bien un poquito de pimentón.
Por cierto, muy bien cocidas.

Pongo 3 estrellas porque se lo importante que son estas valoraciones para los hosteleros.
El pasado martes día 8 entre en este bar junto con mi hermana y mi hija de 2 meses.
Tuvimos que entrar bastante de prisa porque la niña tenía que comer y veníamos de Tarragona, mi termo de agua calentita ya se había acabado.
Eran las 3.30 de la tarde, entramos y ni el señor, ni la chica que habían nos hacen caso, con mi hermana nos sentamos e intentamos escoger una mesa para que el carro molestara lo menos posible.
Mientras esperamos ser atendidas para hacer el gasto en el bar, pedimos que nos calientaran el biberón, a lo que la chica amablemente accedió.
Entra un chico y pregunta si puede tomar un café y el señor le dice que no, que es la hora de las comidas, miro a mi alrededor y habían más de la mitad de las mesas vacías, me acerco a la barra y pido 2 cafés, un poco preocupada por lo que había oído.
Tardan unos 10 minutos en traer la consumición.
Tomamos mitad café, pagamos y nos fuimos.
Todo el mundo tiene derecho a un mal día, pero nos sentimos mal atendidas, ignoradas y a disgusto.
Valoro la atención, no la comida que no la hemos probado.

Hamburguesas y bocadillos espectaculares con el pan crujiente y recién hecho. Atención al cliente excelente. Recomendable al 100% si vas de tapas por Gràcia.
Repetiremos seguro!

Agradable pero faltaban muchas cosas de la carta, no había tampoco cava, la cocina no abría hasta las 8. Todo eran palos en las ruedas. Personal agradable.
Grupos te sugieren hacer bizum, no cobran individual

El bar estava pleníssim i hi havia pocs cambrers. Tot i que vam menjar unes braves força bones, no crec que hi torni. Pel meu gust és un local massa sorollós.

He parado a tomar un trifásico de ballentines por el modico precio de 2,60.cuando le he preguntado a la camarera me ha dicho que si, que era normal porque lo decía la máquina.al loro al loro

Taberna clasica
Tienen varios tipos de cerveza y bebidas.
La comida ed aceptable pero o destacable.
Las patatas brafas y alcachofas fritas estan bien.

Un restaurant molt acullidor, uns entrepans bonissims per esmorzar i el servei amb una simpatia que et fa sentir com a casa, recomenable.

Tracte immillorable!
Els millors bunyols de bacallà que he provat,. I tinc edat eh? ! Que he tastat bastants!

Un lloc on el menjar es cassolà, les seves tapes són super bones, les braves, croquetes, alberginia arrebossada, etc. I el Balbino sempre amb una atenció i simpatia de 10. Lloc per repetir!

Bar muy acogedor, la comida muy buena y, Cesar el camarero un crack, fue muy agradable y atento con nuestra mesa. Sin duda, volveremos!

Bar tradicional en una zona emblemática de Barcelona. Decoración de café de toda la vida. Personal profesional y atento. Menú bien elaborado y a buen precio. Un sitio estupendo tambien para tomar algo a cualquier hora.

Cheese plate and wine was very good.and also i ate cheesecake, one of the best. Stuff were super friendly.actually i am here and enjoying my time haha:)

Después de 15 minutos con un camarero que da vueltas por el local nos tenemos que ir porque además es selectivo y atiende según le viene en gana.

Ya no es lo que era, muchas tapas han desaparecido, entre ellas el mítico combinado… supongo que han adaptado la carta a la clientela, y predominan los bocatas y los gintonics… ya no hay abueletes de tapita y dominó… sign of the times.
Pero la camarera es muy amable, y los precios muy correctos.

Muy muy buena comida. El precio del menú del día es perfecto para la calidad, las cantidades son justas y de buen sabor.

Si vas después de las 3, puede que no encuentres algunos ítems del menú.

Local con mucha soltera e historia, Camarera súper simpática y agradable, expositor de tapas muy pobre y muchos platos de la carta después no los tienen, espero que a medida que hayan menos restricciones recuperen cierta normalidad, merecen por mi parte otra oportunidad.

Cadre agréable mais accueil pathétique. Serveurs en colères, presques agressif.ils prennent notre commande, l'oublient et s'énerve car ils ne l'avait pas notée. Sans parler de la nourriture, congelée, sans goût. Bref, un cas "cauchemar en cuisine".

La comida excelente, el servicio todavia mas! Mathieu y Leandro són unos cracks! Super recomendable!

Menú correcto en calidad y precio. Escaso personal pero eficiente y amable. El local, esquinado, es emblemático en el barrio y con encanto.

Mathew es elegante, atento y sagaz. Un sitio con personalidad y estilo propio. Muy recomendable.

Bar típic del barri de Gràcia, el dijous es el dia que fan una paella insuperable, pots picar toca clase de tapes, atenció molt correcta

Lugar con solera y con mucho espacio, menú bastante bueno así como el trato por parte del camarero, volvería sin dudarlo.

Tot boníssim i el servei molt agradable. Ens han atès molt bé. L’albergínia amb formatge de cabra i mel és exquisita! Recomano molt venir

Bar familiar. Personal amable. Servicio rápido. Variedad de platos, buena calidad y cantidad. Precio asequible.

I request for half beer and half lime. And. I like the sour taste of its. So fresh! Their patatas brava is good. Thr calamary. The cod. Oh God my belly is so full when I eat in here. My boyfriend eat lots of kind of dishes. While I cannot eat a lot. So it's his job to eat everything. This bar is nice. Just it's so crowded in weekend. And sometimes too noisy when too many peoples inside. But overall everything is good.

Dels pocs llocs autèntics de la zona. Tapes correctes i ambient local, un bar amb espai i sense pretensions. Els champis estan boníssims

Un clásico de la zona. Bar de toda la vida con camareros que tiran de oficio. Tapas de siempre bien elaboradas. Tiquismiquis y modernillos abstenerse.

Tiene mucha fama y està siempre lleno, decepcionado pedi unos callos y estaban poco recalentados, frios

Restaurant amb un cert aire artdeco. Menú de migdia sencill i caçola. El producte és bo. Els cambrers molt amables. Bona situació a Gràcia a top de tot. Aneu-hi avanç de les 14h sempre està ple.

El que cabria esperar d'un bar de barri. Vam menjar uns entrepans fets amb carinyo. Ens van atendre tot i estar a punt de tancar.

Un històric de Gràcia però que no esta en el seu millor moment. Menja fluix i car. Molts extrangers, però poca qualitat. Probablement viuen del nom fet en el passat.

Esta igual que el recordava quan anava en el meu pare. Inclus crec qua ha millorat, per mantenir la seva estetlca vintage. Tambe ha millorat ka oferta gastronomica adaptanse als temps. Per mi es excelent

La tortilla de butifarra negra esraba riquisima, pero en general lad raciones son muy pequeñas, las bravas nada recomendables: (

Es uno de mis lugares favoritos para tapear por gracia. Cantidades correctas, comida buena y postres caseros, adoro los flanes de este lugar. Servicio tipico de bar, buen ambiente y espacio comodo.

Malisimo servicio y peores precios y sin hoja de reclamaciones. Nefasto. Solo por poner un ejemplo. Copita de anís del mono 3.50 €. Precio habitual en un bar de barrio 1.50€ a 2 € máximo. Y en este bar 3.50€.

Un desastre de servei, la truita estava superseca, el cambrer enfadat, un soroll horrorós i a sobre ens volien cobrar una altre taula que excedia en 30 € el que nosaltres haviem consumit. No tornooo!

Tapas y bocadillos comestibles, si tienes hambre, nada mas.
Ambiente clásico algo casposo.
Poco amables, casi antipáticos.