Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Llegamos a las 6 de la tarde lo que lamentablemente no nos permitía cenar. Conseguimos las tapas, lo cual fue confirmado por el camarero. Los pimientos verdes estaban buenos, por lo demás nada que elogiar. Es difícil pedir vino en inglés. Buena empresa, pero lamentablemente el nivel sigue siendo bajo.
Mi mala experiencia con el Bar Restaurante Bocois de Rambla Nova, el viernes estuvimos cenando 6 comensales y los platos tardaron en servir los y no lo traían a la vez.pues traían uno y al cabo de mucho trajeron el del compañero que además estaba congelado por lo mandamos retirarlo sin consumir y pedimos los postres, hartos de esperar decidimos anular los postres y marcharnos. Pagamos la cuenta y la sorpresa fue cuando la repasamos al día siguiente y nos damos cuenta que nos han cobrando los postres no consumidos, nos presentamos el lunes para informar del error y el camarero Sr. Denis me amenazó con pegarme ya que yo reclamaba el dinero cobrado de más, solo pido que antes de pagar comprueben la nota no sea que les pase lo mismo.
La comida era muy buena pero extremadamente lenta; lamentablemente, ya no teníamos hambre cuando llegó. ¡Tuvimos que esperar 2 horas para recibir platos de un menú estandarizado! Lo hubiera recomendado por la calidad de la comida y los precios razonables, pero definitivamente no volveremos.
Han tardado más de hora en traer la bebida y media hora más la comida. El Risotto era arroz hervido sin hacer, sin gusto a nada. Y los mejillones al ápio salados no, lo siguiente. El servicio aparte de lento apático, l@s camarer@s apenas pasan por el comedor y ya ni hablar de qué te miren para ver si te falta algo o preocuparse por nada. Nos hemos ido sin comer nada. Es mejor no comer que perder el tiempo ahí. Chicote necesitamos un rescate, si se puede.
La comida no está mal, pero el servicio muy lento, estuvimos esperando más de una hora para que nos sirvieran y casi otro tanto para las bebidas. Diigno para que lo visite Alberto Chicote
Cena di gruppo, bel locale in ottima posizione, abbiamo mangiato bene unica pecca il servizio un po' poco preciso perché ci hanno portato i piatti in tempi diversi dimenticando il pane. Il personale è molto cortese
Servicio correcto. Pero peor que NEFASTO el tiempo de servicio de un plato a otro. Desde que pedimos, al primer plato 40 minutos y al segundo plato ya han pasado 50 minutos y seguimos esperando. Nunca me había pasado
Una estrella pero no se la merece. Muy lenta la atención. Tampoco avisan a los clientes. Pides la carne bien hecha y te la sacan cruda igualmente que la verdura. La hamburguesa económica y buena de sabor, lo único que se salva del día de hoy. Lástima la lentitud del servicio. La atención de algún camarero es la que se salva.
Buen sitio, los pinchos tienen una pinta de 10 y dónde cojea es la plantilla de sala, hay un par de camareros que son buenos pero el resto penaliza el buen trabajo de ellos, se debería formar y apretar un poco más ese aspecto.
Atención pésima, personal amargado. Atienden mal a desgana, preguntas algo y te responden mal, hay que repetir mil veces las cosas para que te las traigan.
Hola, el lugar está bien y la comida también, pero lo que es el servicio pésimo, menos dos camareros el resto no saben ni coger nota y hay muchísimo descontrol
Muy buena la comida y también el precio. Elegimos del menú la parrillada de verduras con queso de cabra que estaba exquisita y el secreto de cerdo muy rico también. Los postres tarta de Santiago en su punto y brownie de chocolate era com o una tarta semifria de crema y chocolate. Muy bueno todo y también los camareros simpáticos.
El lloc està molt bé i és molt gran. El menjar és molt bo amb un preu adequat, però van tardar una mica a portar els primers. És ideal per parar a dinar un dia de platja, el preu està super bé!
La comida buena pero el servicio y sobre todo la organización dejan mucho de desear; hace 1 hora de reloj que comimos y aún nos falta "la tarta de santiago" que a lo mejor han tenido que ir a compostela a por ella.
Très bonne expérience dans ce restaurant au cœur de Tarragone. Le cadre est magnifique et les prix abordables. Petit mauvais point pour le tartare de thon qui était beaucoup trop salé, sinon très bon repas au sein de cette établissement.
Fuimos a tomar algo con unos amigos. Tardaron mucho en servirnos cuando no había casi nadie en el bar. Desde el principio la atención era malisima pero pedí un mojito que era imposible beberlo. Malisimo. Cuando le pido al camarero si me lo puede cambiar nos empezó a hablar fatal y se negó a cambiarlo y encima nos trató muy mal. Incluso se enfrentó a uno de nosotros diciendo que ya sabían donde volver. Desde luego que no volveremos porque ha sido indignante.
Tuvimos muy mala experiencia, al principio todo iba normal hasta que vimos debajo de nuestra mesa una cucaracha muerta, luego en la pared junto a nuestra mesa otra cucaracha pero esta vez viva, y luego otra salió de detrás de un cuadro q estaba junto a la mesa, verdaderamente una muy mala experiencia pasamos con nauceas el resto del día por el asco q nos causó. Y por las molestias el restaurante solo nos descontó 2 bebidas q habíamos pedido.
Bastante justo y la atención no es muy buena. No son agradables. He pedido un risotto y estaba soso le e pedido sal y han tardado unos 5 minutos, la han traído cuando ya había terminado el plato.
Relación calidad-precio muy bueno. Trato educado y correcto. La única pega que entre plato y plato te da tiempo a operarte de las dos rodillas y hacer la rehabilitación.
VOLVEREMOS MUYYY BIEN POR PONER UN PERO, UN PELIN LENTOS AL PRINCIPIO PERO LUEGO SE ESMERARON acabo mi nota que el servicio de camareros han sido muy amables
Hay que venir antes de tener hambre, porque con lo que tardan en servir puedes sufrir una bajada de glucosa. El pescado (bacalao) congelado ha habido que devolverlo crudo, dos veces. Al final era bacalao desmigao. Me he pasado ganas de pegarme con ellos, pero con no volver será suficiente
Boquerones en vinagre que no están hechos, 2 copas de vino y pan que no hemos probado porque los boquerones no eran comestibles y el pan chicle, y nos han cobrado el pan!
Tienen gran variedad de tapas, bravas, tablas de quesos, embutidos, croquetas, pinchitos, caracoles, gambas. Todo estaba bueno, con un servicio rápido y correcto. El local es rústico y acogedor. Ideal grupos, familia.
El Dueño es de estirpe culinaria, sabe atenderal personal. El ambiente es estupendo, el espacio amplio y la carta de pinchos es variada y amplia. Además tienes la oportunidad de ver un mini museo. ¿De que? Tendrás que ir a verlo y a tomarte algo, solo, con familia o con amigos.
No me ha gustado nada que durante la cena hayan sacado los cubos de la BASURA a la calle, paseándolo por el bar mientras la gente toma algo o está cenando, me ha parecido de muy mal gusto.
Local acollidor, reformat i engrandit fa uns anys. Menjar bo i prou variat amb una relació qualitat-preu notable. Fan molt bona la carn gràcies a la brasa que hi tenen.
Cero en el servicio.vaya camarero más malo. 2 mesas se levantaron y se fueron porque no les atendían.otra mesa de extranjeros 1h y 15 min sentados esperando a que les atendieran.
Bar y restaurante regentado por una pareja encantadora, Xavi y Li. CHUAN, la hija de Li y el resto de la tripulación son gente muy amable. Puedes consumir desde pinchos y raciones hasta espléndidos platos más elaborados. Con el vino hay "pinchito" gratis a escoger y la carta de estos no está nada mal. Si vienes por Tarragona no debes perdértelo. Los que vivimos aquí ya lk sabemos. La ubicación es perfecta, en la Rambla Nova muy cerca del Balcón del Mediterráneo.
Muy amables y rápidos, muy ricas las navajas, pero insólito me cobraron un pincho (bastante básico y soso) que dejaron en mi mesa por error y pensé que era de cortesía pues lo dejaron en nuestra mesa al dejarnos el vino. Por esa razón no pedí más cosas y me fui.
Un bon lloc per anar a pendre algo a la rambla Nova de Tarragona. Els gintonics molt bons i qualitat preu espectacular. No hem menjat bé res però a la barra hi havien pinxos amb molt bona pinta i fsn tapes. Tenen terrassa a la rambla i un local momt gran amb moltes taules. Sense dubte repetirem quan tornem de visita a Tarragona.
Tiempo de espera demasiado alto, raciones pequeñas para el precio que tienen. Para una tabla de pates, traen muy pocos panecillos y al pedir unos pocos más, los conran en la cuenta. Además los camareros siguen hablando en catalán a pesar de pedirles hablar en castellano.