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En un país normal, el supervisor de este establecimiento estaría entre rejas. Verduras mohosas, etiquetas de precio que no se actualizan desde antes de la guerra (no la de Ucrania, sino la Guerra Civil Española) y una chica que no da abasto haciendo turnos dobles y el trabajo de 3 personas sin días de descanso. Aún si le pagan una millonada (bien se la ha ganado) no merece la pena entregar tu alma a una compañía así. Cierto es que Bonárea se las da de respetar el bienestar animal, pero trata a sus empleados como ganado.
La mateixa qualitat de BonÀrea de sempre, amb un espai una mica més reduït. Ben ubicada al centre de Bagà, te aparcament públic proper. El personal és professional i eficient.
Buenos productos, aunque a veces una de las dependientas tiene el móvil puesto con música, bueno si se le puede llamar así, con ruido de reguetón! Por lo demás correcto