Centro Residencial Primitiva Barba

Nunca antes había tenido contactos ni experiencias con Residencias. Es desde hace un par de años que mi hermano está ingresado en la Residencia Primitiva Barba de Sant Vicenç dels Horts, lo que me ha permitido conocer un entorno novedoso para mi y quisiera expresar el buen hacer que a mi modo de ver, se lleva a cabo con los residentes de este lugar.

Desde entonces, la relación que mantengo con los diferentes responsables de cada departamento, así como también, con las demás personas que completan la asistencia y están en contacto directo en su día a día con los ingresados en este centro; es cordial, familiar, sencilla y cercana.

Del mismo modo he de resaltar por un lado, el buen trato observado con los personas y en concreto hacia mi hermano durante las múltiples visitas que he realizado a lo largo de este tiempo. Pues el personal no escatima en paciencia y esfuerzos para captar las necesidades de cada residente y poder ofrecer la atención mas cómoda y adecuada de forma personalizada, lo que favorece las relaciones y además mejora la convivencia entre ellos. Y por otro lado, destacar que en todo momento he recibido con puntualidad la información necesaria sobre cualquier tema que haya surgido relativo al bienestar de mi hermano para encontrar conjuntamente y a la mayor brevedad, la mejor solución posible por tratarse de una persona que padece un elevado grado de discapacidad y dependencia que requiere de una atención singular.
Todo esto lo considero de vital importancia, pues el interés principal tanto de la Residencia como el de los propios familiares ha de ser sobre todo proporcionar la mejor atención y cuidados a todos nuestros seres queridos que allí se encuentran.

Tampoco quisiera dejar de hacer mención a la ubicación, pues aunque el servicio de transporte público para tener acceso es deficiente, ello contrasta enormemente con un estupendo y agradable entorno de naturaleza, libre de los inconvenientes que presentan las ciudades, disponiendo de zonas exteriores ajardinadas, con una magnífica terraza bien acondicionada de amplias vistas, lo que contribuye a reforzar el ánimo de los residentes y donde también los familiares pasamos muy buenos ratos con ellos, durante nuestras visitas.
En ocasiones se celebran actos de carácter festivo al aire libre dedicados a los residentes de los que también participan tanto el personal del centro, como familiares. Ello propicia que se produzcan intercambios de opiniones, comentarios y amistades que favorecen conjuntamente en bien de todos.

También, quienes observamos desde fuera y con la mejor intención de aportar, muchas veces podemos suponer que algunas cuestiones deberían o deban mejorar según nuestro criterio. Sobre esto puedo decir que cuando he planteado algún tipo de observación o sugerencia, siempre han estudiado la posible viabilidad de las mismas llegando a entendimientos y respetando claro está, todos los razonamientos que han sido expuestos por tal motivo.

Así pues, dada mi experiencia sobre un tema que desconocía totalmente, he descubierto la calidad humana y el apoyo que se ofrece a quienes necesitan de estos servicios por lo que sin ningún tipo de duda, recomiendo esta Residencia.

Jo només puc estar agraïda del bon tracte, amabilitat i professionalitat del personal de la Residència Primitiva Barba. La meva mare se le veu molt tranquila i feliç. Gràcies a tots i totes.

Es una vergüenza de Centro, trabajadoras descontentas, con problemas entre ellas, esto hace que haya mucho movimiento de personal, y nunca acabas de conocer a nadie, mi madre ha estado un año, en JULIO la he tenido que sacar corriendo, puesto que una de las gerocultoras tuvo un altercado muy desagradable, puesto que le puso la mano encima a mi madre.y que hace la dirección del Centro? , darle la razón a la trabajadora, porque ponen en duda que esa señora (si se le puede llamar así). Haya hecho nada, puesto que mi madre tiene carácter y es posible que este exagerando, desde ese momento trataron a mi madre como una "apestosa", fue su cumpleaños el día 02 de AGOSTO y ni siquiera la felicitaron, en uno de los desayunos, se le cae a mi madre un trozo de pan tostado en el café, pide mi madre una cuchara, y la gerocultora en cuestión, le quita el vaso y le dice, Ale! Ya no desayunas.y cosas así con este personaje, las que quieras. Mi madre no era la única claro está, pero el CENTRO no hace nada. (vergonzoso.) así que si tenéis familiares alli dentro.vigilad! Y si buscáis residencia.esta no es, debo dar las gracias a Sonia y a Josefina.

Quisiera agradecer a la residencia Primitiva Barba el trato humano y afectivo de todos sus empleados hacia mi madre, especialmente a la fisio Joana, que me ayudó psicologicamente en todo momento y fue muy cariñosa y tierna con mi madre. Tambien dar las gracias a Sonia que es la alegría personificada y la cubria de mimos. Gracias a Isabel, la doctora y la enfermera por estar pendientes de su salud, y en general a todos los cuidadores y cuidadoras. He leido algún mal comentario de esta residencia y nada más lejos de la realidad. Siempre recomendaré esta residencia por su situación, sus vistas y la calidad humana de su personal.

Es una vergüenza, tengo a mi abuelo en el centro y lo he tenido que sacar corriendo en la delicada situación en la que está, después de hacer una visita "sorpresa". La dirección encima es desastrosa, la fisio Joana una sinvergüenza, le escuché como insultaba a las señoras mayores y hablaba mal de un tal "sobrino de la jefa" y los pacientes a sus espaldas, un miembro de la dirección con olor a alcohol, etc.por favor, tener mucho cuidado.

Buen sitio para vivir, tranquilo, amplio, mucha luz, grandes jardines. Todo muy limpio, comida casera y personal muy agradable.

No recomiendo esta Residencia, pésima en el trato a las personas mayores y a los trabajadores. La dirección de la empresa no le importa ni los trabajadores y sobre todo las personas mayores las cuales solo les interesa cobrar al final de mes a las familias.

Particularmente yo no recomiendo esta residencia, nos dejamos llevar por la fachada, por estar en la montaña y sus vistas y fuimos ciegos con otros aspectos, bien es cierto que hasta que no va pasando los días no los puedes ver.con la mano en el corazón

Conozco esta residencia desde hace más de veinte años y he visto su desarrollo y evolución. Para mí merece la confianza que le llevan depositando residentes y familiares en todo este tiempo

En cuanto instalaciones está ubicada en un sitio de naturaleza, un patio muy agradable para estar con nuestros seres queridos, el centro está muy bien, la atención creo que es buena en general, el tema de las visitas deja que desear, debemos exigir más días y de hecho no lo pueden denegar

Yo como ex trabajadora de la residencia, no la recomiendo para nada.
He estado trabajando 1 año y medio y suerte que me he ido.
Tengo que decir, las trabajadoras (auxiliares) son un amor y trabajan duro para que los residentes se sientan como en casa. Pero es lamentable, porque todo el material básico para el bienestar de los usuarios lo comprábamos de nuestros bolsillos (colonia, peine, cortaúñas, gel, crema…) ya que pedias algo y todo eran malas caras. Además de auxiliares, teníamos que hacer tareas que no nos pertocaban como por ejemplo, lavandería, fregar platos, limpiar y ordenar salones, dar medicación … hasta que nos cansamos y dejamos de hacerlo. Hasta ese momento, todo empeoró, ya que nos trataban aún peor e incluso, llegaron a echar a alguna trabajadora por negarse a hacerlo.
Por otro lado, des de dirección y cordinacion, no valíamos nada, simplemente éramos y eran un número, cuando ya no servías, te ibas a la calle. Por no hablar de lo que nos explotaban ya que siempre faltaba alguien y te pedían que te quedaras otro turno o que vinieses cuando tenías fiesta. Porque claro, no es cansado ya el trabajo como para que encima te explotarán.
Es muy pero muy lamentable. Sobre todo durante la pandemia y después ya que los familiares no podían entrar a la residencia. Los armarios desordenados, ropa ‘perdida’, por lo tanto teníamos que ponerles cualquier cosa fuese o no suya. Las comidas, sobretodo en la cena, alimentación penosa. Los usuarios, aburridos ya que no tenían educadora social para realizar actividades….
Sinceramente, le doy una estrella porque menos no puedo.
Como profesional que soy, me han tratado de forma nefasta, han aprovechado el mínimo error para fastidiarme. Y, sinceramente, si fuese una empresa que trabaja con máquinas mira, no le daría tanta importancia. Pero es una empresa en la cual se trabaja para “el bienestar de los residentes”, es decir con personas y, es muy triste que traten tan pero tan mal a sus trabajadores. Cuando, sin nosotros (auxiliares) ésta, no existiría.
Por no hablar de que siempre habían “reuniones” en dirección en las que se pasaban un buen rato criticando a las trabajadoras por cualquier cosa. Te cogías la baja porque te encontrabas mal y cuando volvías más malas caras y faltas de respeto. Por otro lado, en todas las nóminas te faltaba dinero, siempre, todo muy muy mal. De verdad, si estás pensando en trabajar ahí, busca otro sitio porque te vas a arrepentir.
En definitiva un ambiente laboral muy sucio. Repito, suerte de las trabajadoras auxiliares y de su empeño por echar adelante en los días más duros, si no fuese por ellas, la residencia no valdría ni media Estrella.
Y porque no puedo hablar de más, sino, seguiría y esto sería eterno.

Desastre, lavanderia desastre, desaparecen ropas, pantalones nuevos desaparecidos extravían o se lo llevan como también sueter, chaquetas, ropas interiores desaparecen extravían o se lo llevan. Ponen ropas de otra gente a residente (un familiar mio), calcetines diferentes puestos en los pies ¿para qué queréis cobrar el chip por 1€ y luego no encontráis o ponéis a los residentes como os apetezcan? Cuando hace frío me trae la residente sin abrigo para pasear y luego tardan 20 minutos para buscar el abrigo que según el gerente que la norma de la Generalitat dice que tienen que ir más lento para buscar pertenencias (una burrada). Decidimos llevar a otro sitio mejor y nos traen pertenencias en una maleta mediana, en una bolsa de basura, y unas cajas, dentro un pantalón roto de punta a punta como si hubiera cortado con tijeras, un par de ropas sucias, 1 zapatilla falta la otra zapatilla ¿donde están? 4 calcetines pero sin pares y 4 colores diferentes, pijamas sin juego, camisa de pijama 2 y pantalón de pijama 2 diferentes. Llamé a la reponsable y me dijo que ya buscarán ha pasado más de un mes y le dije "que pena" porque no han encontrado nada, pienso que se lo habrá tragado la lavadora. Sobre la silla de ruedas mejor no os explico porque me iban a volver loco de verdad. DESASTRE. Ahora la persona está en otro sitio 1000 veces mejor y mucho mejor aspecto y que la cuidan y la miman. Mucho tiempo he tenido que aguantar este comentario.

Lamentable y penoso, que las propias gerocultoras, tengan que comprar “De su propio bolsillo” material para cuidar a los residentes. Las gerocultoras van con una mochila, cargando lo que ellas compran para dar mejor calidad, y la empresa con suerte entrega 3 sobres manoplas de higiene, para 10 o mas residentes, lo normal y sanitario es un sobre por residente.
Las gerocultoras compran de su bolsillo:
1- Colonias.
2- Peines.
3- Cremas Hidratantes.
4- Desodorantes.
5- Shampoo.
El material básico de higiene es escaso falta, la empresa no lo proporciona.
Pregunte por la calidad de los guantes de mala calidad (Una respuesta fue, son chinos y mas baratos.) Gruas del siglo pasado. Ropa de lavandería con agujeros “Toallas, sabanas, etc”. El shampoo no existe.
Explotan en cocina, solo una persona para cocinar para mas de 80 personas, la misma persona es ayudante y lavaplatos.
Realicé una prueba y no volví, ya que, las condiciones hacia el personal no eran de mi agrado y mucho menos sabiendo que al personal lo tratan como un billete de cambio, fue la peor experiencia laboral, fue lamentable escuchar decir “No te cambies de guantes” que la dirección lo ve todo. Crean un foco de infección con el “protocolo de austeridad”
Simplemente penoso!

Fabulosa residencia, muy atentos y humanos es lo que merecemos la gente mayor.
Gracias por todo.

Después de mi experiencia, opino que es un lugar fantástico y con un ambiente familiar, donde las personas mayores que residen están muy bien atendidas. Todo el equipo de trabajadores demuestran en su día a día la gran profesionalidad en la atención a la persona. Sin duda es un lugar que siempre recomiendo.

La residencia Primitiva Barba, es un lugar acogedor, con un equipo profesional que ofrece un trato de calidad a todos sus residentes

Magnífica residencia, por trato humano, por instalaciones y por el emplazamiento en un entorno natural. Mi experiencia por mi madre ha sido muy buena, acerté de pleno al elegir este centro.

Ofertan un puesto para educador social. Me han llamado para citarme y hacerme una entrevista. No les ha gustado mucho que preguntara por las condiciones laborales (básicamente el horario laboral). La respuesta ha sido "te interesa o no? " (Todo ello con un tono bastante chulesco). A lo que he preguntado, nuevamente, si podian facilitarme alguna información sobre la plaza ofertada. Está vez la respuesta ha sido "mejor no vengas" y despues me han colgado.
Sinceramente, un servicio dirigido a personas no solo ha de cuidar a las personas que pagan, también han de cuidar a los profesionales. Espero que en su día a día traten mejor a todas las personas que trabajan alli y que les faciliten conocer sus condiciones laborales.

Una ubicación maravillosa, trato muy cálido y humano, ambiente familiar y muy cercano, profesionales muy atentos y cualificados. Servicios muy variados y menús muy completos. Un hogar, una familia.

Es un lugar estupendo, con instalaciones magníficas. Los abuelos se lo pasan genial y el traro es inmejorable. 5 estrellas.