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La carta és curteta. El menjar correcte, però les racions són petites. Els preus són excessius per la quantitat i qualitat. Pagues pel fet d'estar a la platja. A tenir en compte que ara no es pot aparcar davant.
Calidad precio Regular. Cuba del vino algo cutre pero eso es lo de menos. Muy Sorprendido con un camarero o no se si encardado, bajito y con gafas (el Cual era muy déspota y prepotente con todos los clientes, llegando a preguntarme cosas en plan colega e irse sin ni decir gracias a nada). Hablaba a algunos de sus compañeros en una forma muy mal educada en frente de todo el mundo, lo cual hacía que los clientes se sintieran incómodos. Esto no lo digo yo sino que después de algunas contestaciones que daba nos mirábamos entre los clientes y nos decíamos que no volveríamos más.
Lo único bueno el chico alto que preparaba el evento que nos recibió al llegar y el camarero nuevo.
Cerveza templada, vino semi caliente, bol de poke escaso, hamburguesa muy buena.
Una cosa más, tuvimos que pedir el cenicero 2 veces los cubiertos 2 veces se me llamo la atención por mover un poco mi silla sin motivo.
Nunca pongo malas reseñas, de hecho es la primera de mi vida pero ha sido bastante pésimo.
Y al chico de las gafas bajito (que no lo digo en forma de ofender ni insulto, pero no se si nombre, hay que ser un poco más humilde, aunq trabajes en la Nasa).
No puedo opinar de la carta porque solo he consumido un Spritz de Aperol y unas aceitunas. El Spritz, para mi gusto, con poco Aperol y demasiado cava, pero solo para mi gusto. Buena música. Buen servicio y buena sombra. Chiringuito muy agradable con precios un poco elevados como es lógico en un chiringuito de playa.
Una castaña de atención, pedimos reservar, no nos contestaron y fuimos, nos tomamos unas cañas y unas tapas y nos echaron xke no teníamos reserva! Encima dicen que no pueden contestar a todos los mensajes como si fuera el Hilton, nunca más!
Tomamos una caña exquisita en este chiringuito. Lástima que se acercaron a decirnos que estaba prohibido JUGAR A LAS CARTAS! No lo sé lo veo bastante ilógico ya que no molestábamos a nadie y encima estábamos consumiendo. Cabe destacar que el chiringuito ni siquiera estaba lleno había Máximo 4 mesas ocupadas. No volveré.
Servicio muy lento, más de 30 minutos para dos cortados y la cuenta. Al quejarme me dijeron que esto era un chiringuito y no un banco y que no volviera más. Nos apuraba la cuenta porque mi mujer se sintió mal y luego yo también. No estamos seguros pero creemos que fue algo que comimos.
Servicio deja mucho que desear. Despues de que los 3 camareros que habia en terraza no nos atendieran, aun pasando por al lado (estando la terraza medio vacia). Tuve que pedirlo en la barra y volverme a levantar para pagar.desastre.
Habíamos reservado para 10 px el 15 de agosto. Comida regular sin nada que las haga destacar. Servicio lento y no muy profesional. Al acabar la comida pedimos cafés y nos contestaron que este día no hacían cafés porque tenían demasiado trabajo.nos pareció bastante fatal y tuvimos también un problema con la cuenta. No creo que nadie de nosotros volverá allí.
Huye de este chiringuito! Definitivamente un servicio pésimo, carta mediocre, ausencia de servilletas. No he visto en mi vida una dejadez tal como en este lugar! No entiendo como aún funciona. Eso sí, les da vida y deja por los aires a los otros chiringuitos que hay en la playa del Prat. Una vergüenza en toda regla. Además muy caro, más caro que los otros chiringuitos, vale la pena ir 100 o 200 metros más allá. Se merecen esta reseña demoledora. Lo que faltaba, equivocación en la cuenta. És carísimo a parte.
Este chiringuito explota a los trabajadores. Hay el mismo personal a las 11 de la mañana hasta la 1 de la madrugada sin días de fiesta y solo cotizan 2 horas diarias. Deben dinero a trabajadores. Por favor, no acudan a este local
La atención de los camareros es muy rápida. Pero la comida, y la preparación bastante deficiente. Por eso son tan rápidos. El precio no se corresponde con la calidad ni la comodidad del lugar. Lo único bueno que tiene es el sitio. "Estas en la playa" por lo demás no vale nada
Hemos ido al Maravillas por las buenas críticas que este chiringuito tuvo del Comidista (programa de tv) y el servicio de la camarera ha dejado mucho que desear por su falta de simpatía y servicio. Hemos esperado mucho rato a ser atendidas y eso que no había clientes. La carta es escasa y pésima, menos mal que las cervezas no las hacen ellos porque ha sido lo mas agradable y fresco que hemos consumido. Decepcionante.
Está bien pero los viernes si no te gusta mucho el baile latino tipo Kizomba, bachata, merengue. Mejor evitarlo. Se llena de bailarines. Le falta variedad, no hay carta de cocktails.
La verdad es que es uno de mis lugares favoritos para cada verano. Cada vez que me apetece ir a la playa y tomar una caña fresquita cerca del mar, el Maravillas es mi lugar.
Los camareros son super simpáticos y aunque a veces cueste conseguir mesa, siempre vale la pena.
Para picar: las tiras de pollo con mayonesa al curry no pueden faltar; tampoco los nachos con queso. Y este año hemos descubierto la ensaladilla rusa: riquísima!
Lugar con encanto restaurante de playa con buen servicio de cocina ideal para ir con los niños o amigos o solo a tomar unas cervezas vistas al mar muy tranquilo
Platos sabrosos y buenas propuestas para un entorno de playa. El trato es genial y la ubicación muy buena frente al mar. En esta ocasión probamos una hamburguesa vegetariana (tofu + setas) y un cuscus con pico de gallo y pollo con curry. Volveremos para probar el resto de la carta.
Mi experiencia fue regular, reservamos y a la hora de la reserva no tenían mesa, nos quedamos tomando algo en la barra a petición del camarero te hacían pagar en la barra y daban mesas a otra gente.la comida estaba buena, pero tardaban un poco en atenderte cuando querías pedir algo, después pedimos cambio para el parquímetro y no nos quisieron dar
Bon servei i bon menjar. El preu és més car del que estaríem acostumats a pagar en un xiringuito, però és que el menjar està bastant més currat que en un xiringuito normal! Nosaltres, que érem 2 comensals, vam menjar: amanida de burrata, un entrepà de porc, una paella, un babà amb rom i un polo de mojito casolà + 1 aigua gran i 2 canyes. Vam pagar 54 euros.