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Primera vez en el celler y con total seguridad no sera la ultima. No se por donde empezar despues de lo vivido el domingo, Local pequeñito pero muy limpio y acogedor. Lo regenta una pareja, la mujer se encarga de sala con muy buen hacer y siempre con una sonrisa y el marido cocinero. Destaca la cocina asturiana, y que cocina, espectacular se mire por donde se mire, diria que las raciones son generosas pero es quedarse corto. Probamos 4 ostras como entrante que nos aconsejo emilio y no nos equivocamos. Para empezar un pote asturiano ya que no habia fabada pero no defraudo, cantidad descomunal y buenisimo se queda corto, pudimos repetir varias veces, y para rematar un buen cachopo de cecina con 4 quesos, contundente, grande y bien echo. Sin duda alguna volveremos mas pronto que tarde.
Hemos ido a celebrar el cumpleaños de mi padre. Hemos comido muy rico!
Toda la comida y lo que hemos probado esta súper rico, la presentación de los platos correcta, y los propietarios son muy majos y Dan un buen servicio. Nos ha gustado mucho.
Respecto al precio, los productos van de acorde al precio. Esta bien. Hemos sido 6 personas y ha llegado unos 180€.
Nos recomendaron el lugar y acertamos. El personal super amable y acertamos al coger el menú de fin de semana. Platos muy bien preparados y sabrosos. Recomiendo el lugar y volveremos, pues un buen servicio y lugar, bien vale una repetición.
Esta bien, pero no repetiría, bastante caro para la cantidad de comida que sirven.eramos 4 personas y pedimos 3 tapas para compartir, y las respectivas bebidas.casi 100 €. La comida no estaba mal, pero no hay nada que te saque los ojos, excepto la factura. Hemos ido muchas veces al celler, pero con los antiguos dueños y el precio jamás me ha sorprendido, y siempre he salido súper contenta, pero esta vez no.y no repetiría.
Nos atendieron muy amablemente y lo pasamos genial tomando sidra escanciada por el mismisimo propietario! Auténtica comida asturiana para chuparse los dedos. Fabada, Pote asturiano y unos cuantos entrantes y acabas como dios! Lo que me faltó es la brasa, la parrillada no tiene el mismo sabor si no ha pasado por humo y fuego! Recomendable en general, volveremos!
Un sitio con mucho "caliu" una musica tranquila, un lugar limpisimo, salio el cocinero a explicarnos los platos del menu sin pedirlo, mesa de diez y un ambiente superacogedor en un comedor con ambiente a casa catalana rural, buen vino y comida espectacular, todo esta bueno!