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Un entorno maravilloso, la casa muy acogedora, el sitio muy tranquilo. Antiguo caserón familiar, dividido en casas individuales para estar tranquilo. Tiene una piscina comunitaria para los huéspedes, al no ir niños, puedes estar tomando el sol, leyendo o sólo con tus pensamientos. Una casa muy completa, aunque con falta de algún detalle, como un sofa algo más cómodo, quitar bien las telarañas y algunos retoques estéticos que deberían mejorar. Por lo demás la recomiendo al completo, sobre todo la atención de Ramón, que es un encanto.
Entorno rural 100%, le falta un lugar donde estar todos que no sea la habitación y que haya más vasos, platos y cubiertos. Muchos insectos, moscas, mosquitos, saltamontes.
Lugar perfecto para desconectar. La Masia cuenta con 6 habitaciones, piscina, zona de BBQ. Habitación con terraza privada, vistas espectaculares. Tranquilidad y amabilidad por parte de los dueños.
La casa es muy bonita, la parcela con barbacoa y mesas, piscina, está genial. Por dentro acogedora y el entorno nos gustó muchísimo, pudimos ver los tres monasterios cistercienses y nos gustaron mucho. El dueño muy amable. Para repetir.