Masia Can Rovira

Primera vez que hemos estado y salimos muy satisfechos.
El lugar es bonito, con vistas a la hípica, la masia por dentro es acogedora.
Hay varios animales al rededor para que los pequeños puedan verlos y es un plus.
Buen aparcamiento.
La comida estuvo muy buena, tienen unos entrantes geniales (buenísimas las bravas) y los segundos a la brasa con cantidades generosas y otros de calidad en el sabor como el canelon de ceps.
El precio correcto acorde a la calidad (entre 20-30€ por comensal).
Lo mejor ha sido el personal, tanto las chicas como el chico que nos han atendido han sido de 10, además atentos y detallistas con nuestro hijo de 2 años. Servicio rápidisimo!
Si hace buen tiempo aprovechad la terraza, hemos comido allí al solecito y se está a genial.

Mas miserables no se puede ser.
Hemos estado comiendo y después de comer y haber pagado mi hijo ha pedido un poco de agua y se la han negado diciendole que hay que comprarla. Lamentable no volveremos. (Actualizo reseña después de vuestra respuesta)
Le dijeron al niño que el agua no es potable. Anda ya! Ahora resulta que los animales de alli beben agua embotellada jajaja. Que suponen que iba a jugar con el agua dice jajajaja.

Estaba buscando sitio para poder celebrar el cumpleaños de mi hija con la familia y encuentro fatal que no den agua a un crío que encima ha comido en el restaurante con la familia saben de sobras que están obligados a ofrece agua a quien se lo pide y ustedes respondieron negando el agua y haciendo juicio que quería el agua para jugar cuando podría entrar al lavabo y cogerla y no pedirla a ustedes.son esos errores con falta de humanidad los que diferencian los lugares con encanto y pasión por la hostelería! Ahí lo dejo

Ayer domingo pasamos un día más o menos agradable con mis hijos y mis nietos comimos en la terraza hasta que acabamos la comida y los niños se fueron a ver a los animales y los caballos y acabaron jugando a fútbol y se llevaron la botella de agua que les sobró de la comida y al niño se le acabó y fue a la barra a pedir una poquita de agua y no sé quién fue.que clase de persona será que me da vergüenza ajena, le dijo al niño que el agua del grifo no era potable que tenía que comprar una botella y el inocente del niño se lo creyó. Es de vergüenza el agua no se le niega a nadie y después de haber consumido 240€ seguro volveremos (miserables)

Muy buen sitio para comer o cenar, la comida exquisita especialidad a la brasa y de paso desconectar ya que alrededor estás rodeado de caballos, es un sitio muy tranquilo y diferente.
El servicio increíble, los camareros muy atentos y serviciales en todo momento, así da gusto ir a comer.
En cuanto al precio y calidad perfecto

45 minutos esperando a que nos tomen nota, otros 45 minutos para que nos sirvieran las ensaladas y el pan y 1hora para que llegará el primer plato de comida que fueron llegando a cuentagotas y éramos 12.
Muchas de las cosas de la carta no las tenían y eso que no tenía mucho dónde elegir,
Dónde están las patatas caliu?

Primera y última vez a sido una experiencia desastrosa, mal servicio, llegábamos a las 13: 30h y eran las 14: 30 y aún no nos habías cogido la demanda, hemos comido por turnos y nos hemos ido sin postre ni café artos de esperarlos un desatre, aparte calidad precio deja que desear.

Servicio pésimo y comida escasa. Hicimos reserva a las 13: 30, a las 16h no habían pedido ni por café ni postre.

Sin duda no volveremos.

Un sitio genial en plena naturaleza, comimos en terraza y tiene los cerdos suertos por la terraza e interactuaron con nosotros, fue una experiencia unica

Comida muy buena, servicio genial. Los higos con jamón y el cabrito al horno muy bueno. Pides cafés y te traen bizcocho sin azúcar para los niños. Estás comiendo y se pasea por las mesas Conchita (una cerdita embarazada). Muy recomendable para ir con niños especialmente ya que puedes visitar los ponis, caballos, cerditos etc. Volveremos:)

Sin duda mi lugar favorito.
Muy buena atención, comida buenísima e ideal para almorzar o comer tranquilos

Estuvimos comiendo en la terraza, la comida bien pero había mucho descontrol con lo que pedíamos y nos traían a la mesa. Los camareros un poco perdidos y discutiendo entre ellos. Lo mejor, la experiencia del paseito de los peques con los caballos y la amabilidad de los monitores. No creo que volvamos.

Servicio bueno, comida bien. Lo de comer con los cerdos entre los pies no lo acabo de entender. Me resulta muy desagradable comer entre cerdos

Fuimos a comer un grupo de 9 adultos, 1 niño y dos perros para celebrar mi cumpleaños y no pude elegir mejor sitio.
Un lugar fantástico, ideal para pasar el día con los peques y nuestros perritos, en plena naturaleza y rodeados de animalitos. El servicio fue excelente, camareros siempre atentos y muy amables. La comida riquísimo, desde los calçots, algo de tapeo para compartir, las carnes a la brasa y los postres buenísimos también.
Sin duda repetiremos!

Todo casero, en un ambiente único, en medio de la naturaleza y rodeado de caballos, los platos excelentes, no puedo añadir nada malo, productos de calidad, raciones grandes y de comida real, que no sientan mal, las salsas en su punto perfecto y los postres de verdad.

El sitio es precioso, buen trato y la comida excelente, lo único que no nos gustó es que tuvimos que comer rodeados de jabalís. Creo que sería preferible que los tuvieran apartados de las mesas y pudieses decidir si ir a verlos o no. Era algo incómodo que se metieran por debajo de la mesa y tener que ir con mil ojos si se te caía algo al suelo.

El sitio muy guay para ir con peques, hay caballos, cabras, y cerditos que campan a sus anchas. La comida genial y la atención de los camareros muy buena, en especial la de Gerard. Volveremos y recomendaremos SEGURO.

Súper borde el tío que hay en la barra, le hemos preguntado si había mesa para picar algo y nos ha echado directamente, es un sin vergüenza. Iré en breve al consumidor.

Fui a comer un martes al mediodía y se estaba demasiado bien en la terraza. Es una masía con una hípica, por lo que esta lleno de animalitos sueltos que te acompañan en la comida, fue increíble! El menú de calçotada eran 25€ y estaba muy rico, un sitio al que volver sin duda!

Senzillament Genial! Hem anat un grup de 45 persones i hem sortit encantats. El Gerard ha sigut el nostre. TOT! Bon servei, bon menjar, predisposició, amabilitat, entorn perfecte pels peques.i tot a molt bon preu. Completamenr recomanable. Primer però no últim cop. Gràcies equip de Can Rovira. Gerard, Débora, Oscar.fins la propera

HICIMOS UN MENU CALÇOTADA,
LOS CALÇOTS BUENÍSIMOS Y UN BUEN CALIBRE,
EL ROMESCU BUENÍSIMO.
SERVICIO IMPECABLE.
PRECIOSO LUGAR CON MUCHÍSIMOS CABALLOS, CABRAS, OVEJAS Y CONCHITA CON SUS 9 JABATOS PRECIOSOS Y MUY SOCIABLES,
OS LO ACONSEJO PARA PASAR UN DÍA PRECIOSO PARA COMER EN FAMILIA.

Los camareros un 10, los calsots buenisimooos, pero el chuleton una mesa d 11 esperando dos personas 15 min esperando después que todos hayan comido y era congelado sin sabor a nada.vamos un plástico y encima un suplemento d 9 pavos cada uno, dentro del menú. No volveré a comer chuleton aquí. Que pena, lo demas genial

En pocas palabras. ¡nos ha encantado! Desde que hemos visto la terraza con los cerditos, los perros y los caballos ya sabía que iba a ser un lugar diferente el cual voy a volver a ir! Trato muy familiar y cercano, la comida estaba buenísima y la masía y el entorno espectacular, el poder comer rodeada de animales lo hace único y especial volveremos sin duda!

Se encuentra a 30 min de Barcelona… el sitio en si está muy bien con los caballos y demás… pero fuimos un grupo de 11 personas y pedimos 9 menú de calçots y eran 30 eur que hay opción de calçots de primero o alcachofas… y de segundo hay varios platos, la gran mayoría de los segundos tienen un suplemento… entre 4 y 7eur.
Los calçots muy buenos.van 15
Los segundos a mejorar el pollo estaba muy tostado.casi no se podía ni comer pedimos 2 entrecots.al punto y llegaron más tarde, y mal hechos Carne cruda y fría… pedimos también varias butifarras del perol… una butifarra seca y con 2 patatas de acompañamiento que eran pequeñas.
Los postres normalitos…
Caro por todo lo que es.
La atención buena

Espectacular! Gran descubriemiento. La comida muy buena y el personal super amable. Hemos pedido el menu de Calçots por 30 euros y las raciones muy abundantes. El pastel de queso una pasada. Lo mejor es que son Petfriendly y el restaurante está rodeado de caballos, cabras, gatos. Genial! Repetiremos sin duda!

Una masia senzilla, però acollidora. Hem menjat producte de temporada, i els calçots estaven al punt. Bona relació qualitat-preu. El servei correcte, atent i amable. Sense problemes per aparcar. Val més reservar.
A la mateixa ubicació, la masia es troba al mig del bosc, hi ha unes cavallerisses i una granja. Pels nens, genial.

Todo súper bien y el servicio es excepcional hemos tenido unos camareros afables y muy profesionales, volveré sin dudarlo

Os contaré mi experiencia, llegamos a la masia can rovira y era precioso, enorme, con caballos, perros, cerdos, gatos, todos adorables, nos sentamos nos atienden rápido y muy eficientemente, la comida espectacular, comí calçots, la salsa buenísima el pollo a la brasa más de lo mismo con un alioli que te mueres, pan y tomates de primera calidad entraba las que querías dentro del precio cerrado de 30€, un menú buenísimo relacion precio comparado con otras masias y la crema catalana buenísima, pedimos los cafés y un camarero se olvidó de traernoslo, fui a hablar con un chico que estaba en la barra (jefe supongo) y nos lo soluciono rápida y eficazmente, nos regalo casi una botella en chupitos, los cafés buenísimos también y la atención qye recibimos fue fenomal, repetiré mucho a esta masia por lo que veo.

Fuimos a comer en grupo, el sitio masia rústica tradicional muy bonito, el servicio excepcional, los camareros super agradables y cercanos, los platos la verdad que el acompañamiento de la brasa un poco pobre los he visto de más elaborados. El pastel de queso no vale nada, tampoco lleva frutos rojos ni sirope, nada curioso por 5'5€. Los canalones buenos, caro pero lo normal para un domingo.
Sitio excepcional con los animales cerca que puedes visitar, limpios no desprenden mala olor las cuadras, a pesar de haber muchas. Caballos, ponis, cerditos, gallinas, y conejos, una maravilla.

Me ha encantado este sitio, sin duda volveré.
Cuidan a los animales y aquí estás rodeados de ellos. Conocimos a Belinda una cerdita vietnamina que está merodeando por el entorno.
Lo único malo que puede decir es que habían bastante moscas, pero el chico que nos atendió nos dio solución.

Mi sitio preferido de todo el mundo! Se come increíble y el personal una pasada de atentos con el cliente!

Fuimos a comer un sábado, en el acceso de la entrada se podía ver caballos y una vez pasado el parking nada más llegar al restaurante vimos a Belinda (una cerda vietnamita) junto a varios gatos. Aspecto positivos es que se puede llevar mascotas mientras se esté en la terraza.

La comida estuvo excelente y la atención igual de buena, especialmente el chico que nos atendió. Recomiendo como postre la tarta de queso, cuya proporción va acorde con su precio. En general los platos no son caros, teniendo en cuenta su calidad y que pedimos dos churrascos, mongetes, agua, postre y café.

Como punto negativo decir que en la terraza (donde comimos) había muchas moscas atraídas por la comida pero que el camarero nos supo dar una solución con un pequeño aparato. También había que estar atento a que los gatos no se pusiesen demasiado curiosos con la comida Hehe

Finalmente decir que ha sido un sitio estupendo y que repetiremos muchas más veces.

Sitio genial, para desayunar, hablar y pasar un buen rato. El trato de su personal es excepcional, amabilidad y dedicación a su trabajo. Gran sitio para aparcar y rodeados de caballos y algún otro animal. Buena relación calidad precio.

Can Rovira és un espai meravellós per als adults i per a la canalla. Sempre que hem anat hem dinat de meravella, de fet, les meves cosines van escollir aquest espai per a fer el meu comiat de solters conjuntament amb la meva parella. Vam estar a gust tots, grans i petits.

L'entorn és immillorable, al mig de la serralada de Marina té espai suficient.

Respecte els animals estan en llibertat i és un bon espai per a treballar amb els infants el respecte a la natura.

Tenen menú vegetarià i segurament vegà també.

No marxeu sense tastar el coulant de xocolata blanca!

Un desastre! Bravas quemadas de refritas, 90 minutos para que traigan la comida, pedimos 6 solomillos y nos traen 3 suelas de zapato! Y no habían más. No recomendable en festivos!

Gran sitio para almorzar, comer o hacer el vermut mientras observas los caballos, los gatos están alrededor o te encuentras con un gorrino. Plena naturaleza a 15 min de Barcelona.

Solo te dan vermut hasta la 13: 00h directamente te lo dicen al entrar, para que ni te sientes, llegamos un grupo de 8 y nos cruzamos con 3 parejas mas que tuvieron que irse también, sólo en 5 minutos que estuvimos.sitio y mesas hay de sobras

No me gustó que ponga en la carta pies de cerdo en plural, te imaginas 2 medios trozos que es lo normal, y que te pongan solo 1/2 pie con patatas, el precio de ESTE plato me parece exagerado por la cantidad, lo demás es un sitio muy grande con animales sueltos, muchos caballos sitio casero ideal para ir con niños, y la comida estaba muy bien. Volveremos

Comida muy buena, servicio genial. Los hijos con jamón y el cabrito al horno muy bueno. Pides cafés y te traen bizcocho sin azúcar para los niños. Estás comiendo y se pasea por las mesas Conchita (una cerdita embarazada). Muy recomendable para ir con niños especialmente ya que puedes visitar los ponis, caballos, cerditos etc. Volveremos:)

Comimos muy bien era el cumple del yayo y nos hicieron un pastel.
El citio ideal para ir con los niños porque hay animales y caballos os animo a ir.