Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Buen sitio para una cena con amigos. La pizza de carbonara está muy muy buena. Luego probamos los cheesecakes y pese a que no parecían un cheesecake como tal tanto el de pistacho como nutela estaban ricos.
El local tiene una decoración canalla y divertida. Todos los camareros que nos atendieron fueron extra atentos (con su acento italiano bien potente). Han sabido traer la identidad napolitana a Barcelona. Probamos la parmigiana de berenjena (con una salsa de tomate que tenia un saborazo, tenéis que probarla), la pizza margarina perfecta (con su cornicione bien aireado) y unos spaghetti alla carbonara de escándalo: la receta auténtica servida en rueda de queso pecorino. Las bebidas son caras (3,3€ por medio litro de agua).
Lo demás perfecto. Incluso nos invitaron a chupitos de limoncelo. Sumamente recomendable para pasar un buen rato en pareja, en familia o con amigos
Un muy buen restaurante napolitano en el corazón de Barcelona. El personal es muy amable y cálido. La pasta estaba deliciosa, ¡especialmente la carbonara con queso pecorino! Sería preferible reservar.
La comida muy buena. El servicio y la atmósfera correctos. Sí que hubiéramos agradecido poder consultar la carta de postres y sus precios, ya que cada pedazo de tarta de queso costaba 9,5eur.
Un servicio excelente, tenían la mesa preparada a la hora exacta y fueron muy atentos. Nos dejamos aconsejar, d los entrantes destacó la berenjena, sabor casero y original. Me recomendaron la pizza 5 quesos con trufa, os la recomiendo también. De postre recomiendo la cheesecake de pistacho y el mouse de Nutella. Sitio ideal para ir con amigos. Muchas gracias por la noche de ayer!
Food delicious, spectacular. Service excellent. Very nice place. I recommended this restaurant: 5 stars I am going to visit it again before leaving Barcelona.
DESASTROSO. Hice 40 km de coche para probar una pasta de ahí y no pude cenar lo que quise. Hice una reserva para 2 por Google para las 23: 15. Llamé antes de llegar porque iba con un poco de retraso y me dijeron que no había problema. Al llegar un camarero nos sentó en la mesa y una camarera nos puso mantel y platos. Después nos dijo el primer camarero que la cocina estaba cerrada. Después llegó otra camarera y nos tomó la nota diciendo que nos la tomaba si la pedíamos "YA". Pedimos pasta y pizza. Al cabo de 3 minutos vuelve a llegar un camarero y nos dice de nuevo que la cocina está cerrada, que sólo podemos pedir pizza. Al instante llegó el jefe, un IMPRESENTABLE bien FALTO de EDUCACIÓN y que a la vista está que no sabe gestionar a su equipo, y entre gritos e interrupciones vino a decir que la culpa era nuestra por reservar tan tarde, que la cocina cerraba a las 23: 30. Le expliqué que habiendo cogido una reserva a las 23: 15, era absolutamente imposible estar servidos a las 23: 30, y que por tanto lo habían gestionado mal. Le expliqué que veníamos a comer una pasta y que, si no se podía, no pasaba nada pero nos íbamos a ir sin problema. No obstante, de repente dijo que el pedido estaba pasado y nos servían en breves. Nuestra sorpresa fue que nos sirvieron la pizza pero en ese momento nos dijeron que la pasta no iba a salir, viéndonos forzados a comer la pizza a pesar de haber dicho que si no nos podían servir la pasta nos iríamos. Nos comimos la pizza y UNA copa de vino, porque nadie vino a ofrecer más. Tuvimos que reclamar atención para pedir postres, porque tampoco nadie nos ofreció. El jefe pasó varias veces por delante y ni se molestó en disculparse ni preguntar si estábamos a gusto. Repito, un IMPRESENTABLE de CUIDADO. Fue una camarera quien tuvo el buen gesto de invitarnos a un tercer postre que no habíamos pedido (habría sido más elegante invitar a uno de los dos que pedimos. Nadie en su sano juicio se toma 3 postres. Pero lo agradecemos). Y el primer camarero se disculpó al final. Esto hizo que no nos fuéramos con tan mal sabor de boca. Pero desde luego la falta de empatía y la mala gestión dejan ver que NO ESTÁN A LA ALTURA DE SU REPUTACIÓN. Pongo una reseña de 5 estrellas para dar ejemplo de la elegancia que les faltó.
Bastant decepcionant.potser anava amb les expectetives altes. Em vaig sentir molt pressionada al llarg del sopar per un dels cambrers. Només seure ja estava preguntant-nos pel menjar i exigint rapidesa per demanar quan ni tan sols ens havien portat la carta. Hi ha dos torns, entenc que en algun moment puguin tenir pressa però tenint en compte que vam arribar a les 21h i el següent torn és a les 22: 30h entenc que si van acceptar la reserva hi havia prou temps. El problema va ser potser que els plats van trigar molt en arribar. Vam demanar 5 plats de pasta i 1 de pizza. Van arribar tots freds i, molt poca quantitat (excepte la pizza). Pensaven que eren 4 plats de pasta i al veure un plat de més van omplir-lo (com van poder) amb les restes dels dos bols de la foto (no cal dir que la quantitat encara era més ínfima que els altres).
No em fa res esperar, però almenys sí que esperaria que els plats arribessin calents a taula i no sentir-me pressionada durant tot el sopar.
Es la tercera vez que repito y siguen sorprendiéndome, cada plato tiene una presentación y una pinta deliciosa. Todo con buena calidad y variados para distintos gustos.
Regular. Se puede comer pero no repetiremos. Pedimos una carbonara y el guancciale estaba cortado en lonchetones enormes que no se podía ni masticar. La cheescake de pistacho tenía una base de galleta que parecía un bloque de cemento, base de 5 cm que no se podía ni cortar con la cuchara. Y una botella de agua 3'2eur ¿Perdon? Caro para la calidad. Poca cantidad. No lo recomiendo
Fuimos unos 12 para celebrar el cumpleaños de mi prima y fue un completo desastre. Platos que no llegaban, o llegaban incompletos. La pasta a la carbonara con la salsa cortada, nos la cambiaron y a una persona jamás le volvieron a traer nada. Bastante caótico todo. Quisieron compensar con una pizza de regalo la cual nadie quería. No nos dejaron traer pastel, nos obligaban a comprarlo ahí y no nos gustó nada. En fin, un sitio para no volver. Y bastante caro para lo que es.
Muy lindo lugar y la atención, me encanto que la cocina sea abierta, es decir, que podes ver como preparan los platos. Tuve un pequeño inconveniente con la pizza e Ivan muy amablemente me escuchó. Definitivamente volveré a comer. La tabla de quesos y la pizza picante estaban buenísimas.
El clima del lugar es muy bueno! Pedimos la carbonara que se sirve dentro del queso picorino, estaba rica pero no fue de lo mejor. El tiramisu estaba muy bueno! El chico que nos atendió fue muy amable!
He de decir que la pasta carbonara estaba muy buena pero creo que no recomendaría añadirle el suplemento de trufa (5€) ya que no añade tanto sabor y por 22€ es poca cantidad, no puedes compartir apenas. La pizza ragú (19€) estaba muy buena y los bordes con rucula son exquisitos aunque era imposible de coger y se rompía de lo fina que era por el centro. El postre estaba muy rico, bombón a la nutella que es una bola de masa de pizza frita rellena con nutella. Vienen 3 bolas y cuesta 8,90€ (me parece excesivo por ser masa de pan con nutella, no un pastel). Total 3 platos y bebida 58€. El servicio fué muy agradable, la camarera italiana era muy atenta y simpática. El local es pequeño y las mesas grandes y más cómodas están reservadas para grupos, si vas en pareja es posible que te toque sentarte enfrente de la cocina.
Muy caro para lo que es en cuanto a cantidad y calidad. Hemos pagado 19€ por una pizza pequeña con albóndigas y supuestamente con el borde relleno de ricotta (para lo que cuesta ya podría llevar cantidad suficiente para que se note) y una parmigiana muy pequeño por 14€, a la cual le faltaba sal, pero no estaba mala en comparación con otras. Hemos pedido tres postres ya que las cantidades eran pequeñas: cheesecake que a mí pareja le ha gustado mucho aunque demasiada Nutella, el tiramisú que era todo crema y a mi me gusta más equilibrado, y la tarta de chocolate dura como un ladrillo y sabor muy plano. Entre bebidas y todo hemos pagado 88€. No lo recomendamos.
Lo mejor de la pizza es el sabor, los ingredientes merecen la pena. Los camareros son muy simpáticos y explican con gran orgullo lo que están ofreciendo. Para terminar pedimos un postre que nos dejó con un sabor en la boca genial para finalizar. Volveremos.
Sin duda nuestra experiencia en Punta fue muy buena. Fuimos un grupo y nos pusieron en una mesa redonda que es estupendo para poder hablar:) El personal muy amable. En cuanto a la comida, súper recomendable la pizza de albóndigas con borde de ricota. También muy buena la de berenjenas. De postres, la tarta de queso con crema de pistacho es deliciosa
Pizzeria napolitana. La carta no tiene mas de lo necesario, nada de elegir entre mil platos. Todos de buena calidad y variados para cada gusto. La pasta al dente y la masa de pizza perfecta. Flojean un poco los postres, pero no estan mal. Buen servicio, atentos y amables. El local es algo pequeño y sin reserva puedes quedarte sin cenar. Se previsor. Un lugar recomendable que no puede faltar en la lista de locales visitados. Un saludo!
Un pequeño trozo de Italia en Barcelona con una decoración bien canalla. Estupendo servicio, buen rollo entre los trabajadores y una comida deliciosa. A destacar la parmegiana di melanzane, diría de las mejores que he comido, voy a soñar con ella. 100% recomendable desde los antipasti hasta los postres.