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Restaurante con ambiente muy agradable y acogedor, los camareros son muy atentos a pesar de tener el comedor lleno. Relación calidad precio muy buena. Repetiremos seguro!
Cocina de gran calidad. Los platos de cuina volcànica son deliciosos y es un lugar super acogedor. He ido después de 20 años y sigue igual de bien. Hay que dejar sitio para el postre
Visita obligada si vas o vienes a Olot. Siempre con reserva. Siempre está hasta la bandera.
Buena materia prima y mejor trabajo en cocina es el secreto. Da igual que se trate de una ensalada que de unas carrilleras guisadas. Seguro que es una buena elección. No hay que temer a equivocarse.
Te puedes permitir el lujo de arriesgarte (la lata de ternera a baja temperatura por ejemplo.) El resultado será más sorprendente.
El servicio es ágil, amable y muy educado a pesar de la gran cantidad de gente a la que atienden. Los platos se suceden sin haber apenas esperas, incluidos los postres. Igual de rápido sucede con los cafés y la cuenta.
El entorno es un pequeño pueblo con encanto que permite dar un corto paseo hasta que llega la hora de comer.
Un verdadero hallazgo gastronómico en un entorno de ensueño. En principio, lo de este establecimiento va de pluscuamperfecta cocina de producto de proximidad entendido y trabajado a fondo. Caracoles exquisitos, una sorprendente ensalada de fèsols de Santa Pau con arenque y un aliño delicadísimo, otra de tomate km 0 con jengibre, rull de cordero con crema de guisantes. Todo, ya digo, de impecable factura.
La sorpresa llegó cuando un comensal pidió un plato de ñoquis y los probé. Como nieto de piamonteses no puedo sino quitarme el sombrero ante la textura perfectamente lograda de esta singular pasta de patata, tan difícil de realizarse como mandan los cánones. Una muestra definitiva de la solvencia del chef de l'Hostalet.
Unos postres trabajadísimos, una bodega bien pensada y un servicio amabilísimo redondearon un alboroque de doce sobre diez, como mínimo.
Simplement espectacular. Servei eficient i molt amable. Ambient acollidor i plats autèntics i de primeríssima qualitat. Un restaurant dels de "sempre" però de veritat.
Estuve comiendo el viernes día 27 de Mayo de este año, simplemente un menú y debo decir que he viajado muchisimo y me he encontrado de todo pero a cal l’Hostalet me pareció fantástico unas galtas de porc buenísimos y el trato del personal de 10 la semana próxima volveré y acompañado
Es un lugar encantador por su decoración. La comida estupenda con un menú muy bueno a un precio muy asequible. Siempre aprovechamos para hacer una ruta para ir a comer allí.
Comida tradicional muy buena en un sitio especial. El servicio muy amable, platos tradicionales con una presentación excepcional. Precio razonable. Sin duda muy recomendable.
Es la segunda vez que vamos y volveremos, se come muy bien y el ambiente muy agradable. Además después de comer, un paseo por los alrededores sienta genial.
Restaurant en un poble idíl·lic, menja de bona qualitat i de proximitat. Qualitat-preu, bé, Preus que ronden els 25-30 euros amb vi. Personal molt amable i atent. A 10-15 Min d Olot amb cotxe.
Local es correcte, el menja bonissim, en especial la bomba de xocolata es espectacular, si t'agarada el xocolata ni t'ho perdis preu del postre 6'5€. Servei una molt sec, salta una mica de comunicacio. Preu una mica car
Local ben arreglat i còmode, servei ràpid i eficient, menjar molt bo, de qualitat i varietat. Preu correcte per la qualitat del menjar. Bons postres, parking
El servicio muy lento y desorganizado. El primer plato antes que las bebidas, el vino en el segundo plato. Los platos uno a uno y mucha espera. Mesas apretujadas y mucho barullo. Se nota que llenan todo lo que pueden mas alla de lo que el espacio y el servicio permiten. Evitar en fines de semana y fechas señaladas. La comida bien, calidad precio medio.
Muy aceptable, buena comida y caliente, precio calidad bien, salón muy acogedor y servicio acorde con todo. Otra cosa MUY IMPORTANTE los servicios insuperables y limpios.
Restaurant de molt bons plats de cuina de la Garrotxa, una carta molt variada, amb brasa i guisats de molta qualitat. Un tracte amable i correcte. Per debilitat personal destacaré les postres, elaborades, casolanes, originals i totes les que hem pogut tastar, molt bones.
Buscando en la zona estábamos entre este restaurante y otro en la zona y decidimos por este. Trato muy bueno, menú 12 euros y acorde a la calidad ofertada. El pueblo es pequeño y tiene encanto. Tiene un parking detrás muy grande.
Restaurant del poble d'Hostalets molt acollidor. La carta on destaquen les carns de la zona és força variada. A més inclou plats de la regió amb el segell de cuina volcànica de la garrotxa. Destacaria el plat de fesols de santa pau amb butifarra del perol, que era exquisit així com els postres. Vam demanar mató amb mel, i un parell de postres recomanats x la casa i cap d'ells va decepcionar!
Restaurant molt acollidor, servei molt amable i atent. Menú entre setmana de molt bona qualitat. Cap de setmana carta amb uns plats extraordinaris. Molt bo.
Cocina tradicional catalana con alguna creacion. Muy bien. 30€ pp y comimos de fabula con vino de la casa, postre y café. Lo mejor la simpatia de las chicas del servicio, estando a tope y con mucho trabajo y en todi momento con la sonrisa en los labios y además rápidas, un 10 para ellas. Hay que reservar mesa porqué esta muy solicitado pero quedareis bien.
Calidad precio excelente. Los camareros muy amables y atentos. La limpieza igual, perfecto. Había bastante jaleo en el comedor, pero nada para no volver.
No está mal. Supongo que entre semana de menú será una pasada. Al no tener menú de fin de semana la carta resulta un tanto cara para la escasez de los platos. De los 28€-30€ por comensal no te escapas. Lo mejor son los postres.
Molt bona cuina, a un preu just, servei agradable amb un magnífic entorn, plats elaborats que han guanyat premis, i un cuiner d'estrelles, una sorpresa agradable.
Hemos estado el Sabado a comer y realmente la comida exquisita, lastima que el servicio no estaba a la altura. La comida recomendable, quizas en otra mesa mejor atendidos.
Comedor acogedor en la planta baja. Si te ponen en la planta alta es más frío y ruidoso. Buena atención por parte del personal. Las patatas de Olot estaban muy aceitosa y las habían hecho con aceite muy reutilizado, los pies de cerdo rellenos de pescado y acompañados con caracoles no acabaron de entusiasmarme. El helado de maracuya correcto. Relación calidad/precio cara
Platos justos, el bistec poco hecho parecía madera de recocido, la guarnición (4 patatas fritas y un calabacín en tempura Ácido.), el estofado de cordero, de despunte, solo me quedo cin los postres y la sopa. El vino malo jo, lo siguiente, el agua me la han traído con los postres, completamente sobrevalorado, No lo recomiendo