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Fui en otoño el teleférico deja de funcionar en septiembre, de todas formas subí arriba a pie, es un poco exigente y mejor estar en buena forma física, son preciosas las rutas que puedes hacer.
Estuvimos en el refugio de piedra. El trato excelente, limpieza un 10. Está todo equipado. Lo único que en la escalera pondría una barandilla. Volveremos seguro.
Este valle al pie mismo del Pirineo posee una belleza que te impresiona. El río Flamisell que discurre por el fondo del mismo, tiene rincones muy bonitos que en verano invitan al baño. Al final del mismo si utilizamos el teleférico para subir a la zona de los lagos podremos disfrutar de excursiones que nos llevarán por paisajes que no dejarán de sorprendernos.
Espacio por descubrir, un valle grande y con rincones espectaculares, rios con agua cristalina. Tienes que ir a conocer este lugar, hacer senderismo y disfrutar del ambiente