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Estuve esperando una hora a pedir la comida y la camarera decia que estaban haciendo la comida de los que hicieron reserva y los que reservaron no habian ni pedido su comida.
Buen lugar, para comer algo rápido. Hamburguesas, platos combinados etc.y tomarte un refrigerio, en terraza. Muy buena atención, por parte de la camarera, amable y rápida
Antes estaba muy bien, te ponían cantidad.pero ahora es la mitad de cantidad y el doble de precio.y las pizzas las hacen tan finas k son imposibles de comer con la mano, ya se pasan de fina.una pena, me quedará el recuerdo de lo k fue.
Vergonzoso, íbamos a pedir 4 bocadillos para llevar y nos dicen que ese día no había pedidos para llevar porque tenían mucho lío, cuando en hacer un bocata se tardan 5 minutos.
8,30. IHemos pedido una pizza casera, espectacular. Pero hemos pedido también un bocadillo de pollo, bacon, pimientos y mahonesa. Han traído uno solo de pollo, más seco que la mojama, se lo hemos hecho saber. Nos dicen que ha sido un error suyo, que nos lo traen. Una hora después seguimos esperando. Afortunadamente al final, no lo han traído, pero tampoco lo han cobrado. Todo sea dicho, tenían una mesa de nueve niños infernales sin padres a la vista que no dejaban de gritar, dar golpes, les habrán puesto de los nervios. Como a todos. Dicho esto, Cáceres, las Hurdes, lugares maravillosos.
He comido de escándalo, la comida de autentica calidad y el personal es lo mejor. Uno de los mejores lugares para comer en pinofranqueado. Gracias por la amabilidad y por esa pizza carbonara que estaba de muerte. Calidad y cantidad contundente y los precios son lo mejor de lo mejor.
Bar terraza en pino franqueado cáceres cuando hay poco trabajo funcionan relativamente normal pero en cuanto hay un poco de movimiento mucha falta de previsión servicio muy bajito y mucha falta de planificación En momentos como semanas santa y fiestas el servicio es bastante básico
Agosto 2022. Fuimos a comer un menú del día. 5 personas, dos de ellas niños.
Nos tomaron nota de las bebidas y éstas fueron servidas (y terminadas de consumir) antes de que salieran a cogernos el pedido siquiera.
Pido una segunda cerveza y me la sirven antes de tomarnos nota de la comida (¿!?)
Finalmente, tras más de media hora en la mesa; pedimos. 20 minutos más tarde aparece el plato de mi hija, unos espaguettis. Se los empieza a comer y "termina" antes (y no come rápido, indico) de que nos sirvan a los demás.
Con cara de bobos, sin nada sobre la mesa, vemos cómo van saliendo platos de otros comensales. No es hasta que llamo a la chica para ver qué pasa, que ésta se sorprende y nos dice que "pensaba que ya habian salido".
Al rato, aparecen nuestras ensaladas césar.
Una comida sencilla y que han tardado en servir casi una hora y media.
Para colmo, los Calamares a la Andaluza huelen mal y los he dejado de comer por si acaso.
Habremos tenido mala suerte, pero NO RECOMIENDO NADA este lugar. Para lo que hemos comido, CARISIMO Y MAL.
Hemos ido con reserva, al principio bien, después les hemos pedido la carta 3 veces, en menos de 5 minutos ya decidimos lo que queríamos de cenar, su respuesta ha sido "No os puedo tomar nota porque hay muchos pedidos", no dábamos crédito.
Nos han preguntado por la comanda 2 veces, se la hemos confirmado, se presenta con una pizza errónea, nos lo discute, nos ofrece un panini para quien no podía comer la media pizza errónea, el cual nos lo ha querido hacer pagar al final, las patatas estaban duras y el bacon crudo, y, para terminar, no tenían para hacer factura, ya que la necesitamos por trabajo.
Conclusión: 0 profesionalidad y un trato inadecuado.
Fatal y menos estrella porque no se puede poner, llegamos un grupo de 11 personas y 3 niños, y desde el primer momento se nos niega el poder comer allí. Decidimos que al menos puedan comer los niños y también se les niega el servicio, teniendo mesas libres tanto dentro como fuera. Lamentablemente el trato, y lo peor que se nos olvidó poner una hoja de reclamación.
Unos bocadillos espectaculares, pedimos uno de chapata para compartir y luego una ración muy buenas de patatas con queso y pollo.con el bocadillo para dos hubiera sido suficiente, no sabíamos que era tan grande.
Muy lentos, atención al cliente muy mejorable. Entramos con tres niñas pequeñas a cenar a las 9, pedimos de beber mientras miramos la carta. Empieza a llenarse el local y van atendiendo a todos. Intentamos avisar para pedir y se sorprenden de que queremos cenar, teníamos que haber avisado. Ahora nos dicen de mala manera que como no se lo hemos dicho antes tenemos que esperar a que atiendan todas las mesas que se han ido llenando. Para ser la primera vez que venimos, la verdad que se nos han quitado las ganas de volver
Fuimos a cenar 4 personas y quedamos encantados. Pedimos hamburguesas, bocadillos y patatas. La carne de las hamburguesas estaba riquísima y todo lo demás también. Por poner una pega, el pan de las hamburguesas demasiado tostado, tirando ya a casi negro. El trato del personal, correcto.
Pésima atención, después de haber reservado para cenar y traer las bebidas nos dicen que no nos pueden dar la cena por que el cocinero dice que es tarde y somos muchos. Un sitio al que no volver.
Muy mal servicio.muy lentos y se les olvidan las cosas despues d haber cenado todos nos trajeron al ultimo k faltaba x cenar y encima la pizza quemada.se lo avisamos.y encima que no ns hacian mal xk la cocina estaba cerrada.que pena de cafe- bar.con lo buen situado esta y lo mal trabajado que esta.pesimo
Súper desagradable la camarera, nos ignoró por completo durante un buen rato y cuando por fin creíamos que se acercaba para limpiarnos la mesa y tomarnos nota, nos espantó diciendo que como no teníamos reserva íbamos a tener que esperar mucho rato para cenar. No nos dió pie ni siquiera a tomarnos un mísero botellín.
Un lugar perfecto para comer con niños por su amplia terraza, carta muy variada y todo muy bueno! Trato del personal amable.y el precio inmejorable. Repetiremos seguro!
Después de estar tomando tres rondas es curioso que solo las personas que han reservado en el local puedan cenar. La respuesta del camarero para expresarnos que no nos tomaba nota porque no habíamos reservado después de varias cervezas fue mágica.
Las salchichas no estaban en buen estado. Fuimos porque el dia anterior hicimos un pedido de hamburguesas para llevar y nos gustó. Pero al día siguiente cenamos allí platos combinados y estaban fritos con aceite bastante usada y las salchichas no estaban en buen estado.
Mal trato. Rechazan servir cenas a menos que tengas reserva a pesar de estar ya consumiendo y sentado en el local durante 2h. Totalmente desaconsejable
Me habían hablado bien de sus tapas. Fui un fin de semana por la tarde y aparte de no darnos ni una triste tapa (la verdad es que era porque no tenían), no tenían nada para picar con el café, ni siquiera pagando digo. Ni magdalenas, ni bizcocho ni raciones. Supongo que mi caso fue una excepción y simplemente tuve mala suerte porque le he oído a muchísima gente hablar bien de este bar, lo cual no debe ser casualidad. La camarera era muy maja, eso si. Así que a pesar de la experiencia seguramente vuelva a probar.
Tardan muchisimo! La terraza con apenas tres mesas y hemos tenido que avisar a que vengan a tomarnos nota. Una vez la nota tomada (bebida solo) han tardado otra barbaridad.encima las cervezas no estaban muy frías. Experiencia negativa para mi. Como tapa un revuelto de quicos.
Que Bocadillos! Tiene bocadillos, pizzas, Burger, pasta y demás platos así. Enormes y riquísimos, y si te lo tomas en la terraza a la sombra de los árboles. Mucho mejor. Si hubiera más variedad en la carta mejor, pero lo que hay esta riquísimo.
Es mejor atender a 30 personas bien, que a 50 medio mal. Es mejor poner buena cara y decir no, a tener esperando a la gente media hora para dos cafés. El sitio invita a entrar, la atención a salir. La hostelería es dura, más en verano, pero las maneras, las formas y las ganas no hay que perderlas. Una sonrisa sirve de mucho, tanto para servir una mesa como para decir que no hay más sitio. Hay quien viene a veranear, relajarse, llenar pilas para volver a currar de setiembre a julio, y no es de buen gusto ser mal atendidos una y otra vez. No son los únicos que trabajan duro.