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Trato excelente por parte del personal y rapidos en el servicio. Pedi hamburguesa con extra de carne y todo un acierto, la carne de la hamburguesa es deliciosa.
El mejor bar para comer la mejor hamburguesa del mundo, el servicio es súper atento y muy agradable, con el espíritu de los 80 y su tradicional estilo. Sin duda alguna ni te arrepentirás de ir y volverás siempre que puedas.
Probablemente una de las mejores hamburguesas de Mérida con el peor servicio de Mérida casi sin ninguna duda. La dueña del local (creo que es la dueña, pelirroja) es antipática y desagradable con los clientes a más no poder. Borde y maleducada, contestaciones que no tienen cabida y se nota que esta cansada del trabajo por la cara de amargada que trae siempre.
Eso si, las hamburguesas están buenísimas (las cosas como son) aunque esperaba que las patatas fritas fueran caseras y no de bolsa congelada.
Si puedo comer en otro lado, lo hago sin dudarlo; hay mejores sitios con la misma o calidad superior y un trato excepcional.
Hora y cuarto esperando y nos vamos sin comer, eso sí, pagamos la espera por dos bebidas a medias. No voy a detallar la falta de respeto a mi mujer cuando le ha dicho que nos íbamos, pero más de 30 años como clientes y punto final. Decepción y cabreo.
Una lastima, hacía tiempo q no iba, desde antes de la pandemia. Y me he encontrado una hamburguesa de la casa SALADA, no, SALADISIMA, una pena, no creo q vuelva, error no probar lo que les ofreces a tus clientes
Menuda maravilla de hamburguesas. La de la casa es TOP, la carne es fabulosa, súper jugosa. El personal súper amable y atent@s. Uno de los sitios más míticos de Merida desde hace años, y espero que siga así durante muchos más.
Lo mejor el precio. Se hace raro no poder pagar con tarjeta, pero admiten bizzum. Las hamburguesas buenas (la primera vez que veo una hamburguesa CON ALCANCHOFA). Te sirven SUPER-RAPIDO. No sé puede pedir más por ese precio.
Lugar de parada obligatoria para un devoto/a de las hamburguesas o sándwiches. Local limpio, trato diez del personal y producto inmejorable de acuerdo a su precio.
A mi nunca me defrauda. Bocadillo, montados, perritos, yo me quedo con la hamburguesa de la casa, buen precio y calidad: pan, pan y carne carne. Me sigue encantando volver al Equs.
El lugar, aunque a primera vista no invita a entrar, te lleva a engaño pues aunque la carta es pequeña si hay que decir que los bocadillos y hamburguesas además de grandes están muy buenas y a buen precio. Durante el tiempo que estuvimos sentados comiendo el teléfono no paraba de sonar para pedidos a domicilio.