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Bar de raciones, normalito pero económico. Las raciones no son muy abundantes pero salen bien de precio. Nosotros pedimos calamares, gambas al ajillo y pimientos rellenos. Estos ultimos, venían con pisto y nos gustaron mucho. Eso si, el pan podria ser algo mejor, porque te ponen pan de baguette congelado. El trato fue muy bueno. Salimos a 35€, tres raciones y 4 cervezas.
Increíble pero cierto pedimos una cerveza mientras decidimos que pedir para comer y cual es nuestra sorpresa que a todo el mundo le pone pincho menos a nosotros, entendemos que es un regalo pero a todos o a ninguno, lógicamente nos vamos y comemos en otro lugar puesto que igual los platos también nos los pone mas cortitos. No los recomiendo.
Bar de pinchos y raciones. Acojedor. Relación calidad precio, bien. Raciones un poco pequeñas pero baratas. Tomamos ensalada de la casa, correcta, calamares muy ricos y gambas al ajillo, que eran langostinos pero estaban ricos y bien cocinados. El servicio rápido y correcto, había poca gente. Por poner algo negativo, es que no tienen postres y tampoco puedes pagar con tarjeta.
Buena experiencia. Llamamos para pedir cena para llevar después de llamar a varios sitios que nos dijeron que no daban cena a pesar de no ser ni las 10. Pedimos un bocadillo de lomo y queso y una hamburguesa completa. No tardaron ni 15 min en tenerlo preparado. La hamburguesa estaba muy buena, aunque el pan se deshizo. Las patatas eran congeladas. Y nos dijeron que no tenían salsas para darnos. El bocadillo bien. A pesar de de algunos fallos, es recomendable.
A pesar de llegar muy tarde, casi a las 16: 00, la camarera tubo una atención brillante, sirvieron la comida muy rápido, la chica estuvo siempre atenta y nos recomendó unos calamares que estaban para quitarse el sombrero. Todo lo demás muy bueno y el ambiente super agradable. Precio correcto. Muy recomendable.
El servicio.súper lento, nos sentamos en una mesa en la terraza súper incómoda y todo el rato pasando gente, además justamente estaba al lado de otro bar, y nos llegaba todo el humo de tabaco
Muy buen servicio. La camarera muy agradable y la cocina muy ágil. El magro de cerdo muy bueno y la hamburguesa completa genial. Calidad/precio/ubicación muy buena.
Hace un mes hice una parada en Hervás pues ya hacía dos años que me aconsejaban conocerlo. Tuve la suerte de caer para comer en este restaurante. "La Bodeguita". Que a gusto y qué rato más agradable nos hicieron pasar. Francamente amables, generosos, acogedores y algo muy importante, discretos a la hora de cobrar. Sin duda cuando vuelva a pasar de camino hacia el sur, volveré a parar en el mismo sitio.
Estaba Hervás a tope de turistas, entramos a tomar un aperitivo en la barra, nos dió buena impresión y pedimos mesa, nos dijeron que tendríamos que esperar un rato, en diez minutos, nos buscaron mesa y ya estábamos sentados en la terraza, nos dijeron que teníamos que esperar para tomar la nota porque era evidente que estaban a tope de trabajo, tardaron menos de diez minutos en atendernos y nos gustaron mucho los platos que pedimos, una jarra de vino de pitarra de la casa muy apropiado para acompañar la comida. Las camareras increíbles, muy amables y pacientes. Cuando volvamos a pasar por la ruta de la Plata ya tenemos acordado que tenemos que programar el viaje para parar aquí.
Bar de pinchos y raciones bueno. Pedimos las carrilleras con salsa de arándanos y las patatas fritas con ali oli y quedamos llenos. Buena atención y relación calidad/precio
Pasamos por allí, sin saber nada del local, entramos. Comimos en el comedor, pequeñito y acogedor. Nos sirvieron rápido, rico y abundante y además, barato para la época que nos ha tocado. La chica agradable y muy eficiente. Fue todo un descubrimiento.
Fuimos el sábado pasado, (FATAL) especialmente la persona que nos atendió. Antes habíamos estado tomando algo y la camarera que nos atendió (muy amable) nos dijo que podíamos cenar hasta las once, llegamos a las diez y cuarto, la camarera nos obliga a sentarnos ya si queríamos cenar, nos atendió medio correctamente, pero tras el segundo plato nos dejó desatendidos en el comedor hasta el punto de tener que salir a pedir más vino y luego a pedir un poco de queso, pues un plato no nos gustó, lo dejamos casi entero (nos lo cobraron igualmente). Finalmente salgo a por más vino ya que ella no volvió a aparecer por el comedor, y desistí pues la chica en cuestión estaba fuera fumando. Estaría bien más profesionalidad y cariño por la que supongo es su modo de vida, o, elegir otra profesión.